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January 25, 2018 | Author: SteauaÎnflăcărată | Category: Freemasonry, France, Rituals, Science, Philosophical Science
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Descripción: rito franceses...

Description

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Rito Francés Moderno

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Rito Francés Moderno

1783/1786

Régulateur du Maçon 1801 PRIMER GRADO SIMBÓLICO

APRENDIZ Edición 6010 (V# L#)

masonica.es [5]

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Víctor GUERRA Joaquim VILLALTA Rodrigo ÁLVAREZ Lila LORENZO Círculo de Estudios del Rito Francés «Roëttiers de Montaleau»

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Rito Francés Moderno Primer Grado Simbólico (Aprendiz) masonica.es SERIE BLANCA (Rituales) www.masonica.es © 2010 EntreAcacias, S. C. (de le edición). © 2010 Círculo de Estudios del RF «Roëttiers de Montaleau» (de la traducción y revisión). © 2010 Rodrigo Álvarez (de las ilustraciones) EntreAcacias, S.C. Apto. de Correos, 32 33010 Oviedo Asturias (España/Spain) Teléfono/fax: (+34) 985 79 28 92 Correo electrónico: [email protected] Pedidos: [email protected] 1ª edición: enero, 2010 ISBN: 978-84-937565-7-4 Depósito Legal: Impreso por Publidisa Impreso en España Esta obra se acoge a la normativa nacional e internacional en materia de Copyright vigente en cada momento.

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Rito Francés Moderno

1783/1786

Régulateur du Maçon 1801 PRIMER GRADO SIMBÓLICO

APRENDIZ

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El Círculo de Estudios del Rito Francés «Roëttiers de Montaleau»

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A modo de presentación y explicación

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por Víctor GUERRA

El Rito Francés: entre Tradición y Modernidad

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por Ludovic MARCOS

Introducción, Generalidades sobre el Rito Francés Moderno Decoración de la Logia en Primer Grado

51 57 63

APERTURA DE LOS TRABAJOS

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Lectura de la Correspondencia

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Llamamiento a los Hermanos por el Hermano Secretario Entrada a los Hermanos atrasados Entrada de los Hermanos Visitantes o Cualidades Lectura de la Instrucción del Grado Orden del Día de la Asamblea

RECEPCIÓN EN EL GRADO DE APRENDIZ Preliminares a la Recepción Propuesta de la Candidatura de un Profano De la Recepción al Grado de Aprendiz Inscripciones Recepción de un Profano Obligación CIERRE DE LOS TRABAJOS

90 91 93 97 104

105 105 105 107 109 110 127 147

Proposiciones y Circulación del Tronco NOTAS

147 157

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Rito Francés Moderno Primer Grado Simbólico APRENDIZ

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n el territorio masónico español ha imperado ritualmente, salvo algunas excepciones, el Rito Escocés Antiguo y Aceptado (REAA) y desde la refundación de la masonería en 1978, se han venido asentando muy tímidamente otros sistemas rituales, entre los que va tomando cuerpo el Rito Francés, cuyo trabajo y desarrollo tiene lugar en algunas Logias de muy distintas Obediencias, desde el Gran Oriente de Francia (GOdF) que se singulariza por la práctica del Rito Francés en sus logias y trabajos obedienciales, como así sucede con el Grande Oriente Ibérico (GOI). Luego, en el seno de otras Obediencias de clara vocación escocista, se encuentras logias que trabajan en el RF, como la Gran Logia de España o la Gran Logia Simbólica Española. Los practicantes de este bello e histórico Rito de Fundación vemos y sentimos que existe una total carencia informativa y formativa en torno al mismo, [15]

que se ve en muchas ocasiones condicionado por otros usos y modos, hasta el punto, que vamos comprobando día a día las grandes contaminaciones que sufre el Rito de «Los Modernos» debido a la enorme influencia de otras formas rituales. Esta laguna formativa e informativa, así como la falta de material bibliográfico específico de calidad en nuestra lengua la fuimos llenando varios Hermanos desde diversos ángulos: desde el puramente logial, ayudando a los Hermanos a descubrir las esencias del Rito Francés, a la vez que animábamos a propios y ajenos a trabajar un Rito Francés cada día más «puro» si cabe, redescubriendo sus características propias, esencias y especificidades. Este afán nos llevó a algunos a exteriorizar nuestras experiencias, nuestros encuentros y hallazgos acerca de un Rito «muy novedoso» para algunos por medio de sitios web, blogs, etc… en los cuales vamos exponiendo nuestras inquietudes, nuestros descubrimientos e incluso nuestras dudas. Esta demanda e inquietud por el conocimiento relativo al Rito Francés o Moderno nos ha llevado a una serie de masones, de diferentes credos y estilos masónicos, a juntarnos para reflexionar, para orientarnos y esclarecernos en cuanto al Rito Francés, ahondando en cuanto a sus orígenes, su desarrollo, sus prácticas y deformaciones, haciendo del apoyo mutuo nuestro lema para de este modo formarnos como masones. [16]

Estimulados además por la creciente demanda de información y contacto de Hermanos y Hermanas hispanoamericanos, se fundó en el mes de marzo de 2009 (e# v#), desde una óptica extraobediencial, el «Círculo de Estudios del Rito Francés Roëttiers de Montaleau», un proyecto que deseamos aúne diversidades y singularidades, por lo que cual este gran gran iceberg, queremos mantenerlo fuera del calor de las polémicas y las rencillas. Deseamos abordar un estudio crítico de la masonería y del Rito Francés, en una reflexión permanente, profunda y esclarecedora de cuyo trabajo lo que aflore será resultado de la «expresión y comunicación» a todos los niveles, con el deseo de emprender en nuestras tierras, que son desierto yermo de referencias del Rito Francés, un proyecto de recuperación y difusión de uno de los Ritos que más interés empieza a tener entre los masones de habla hispana. Ese es nuestro empeño, el de un pequeño núcleo de masones del Rito Francés de distintas logias, Obediencias y ópticas, pero resueltamente dispuestos a poner al servicio de aquellos que deseen profundizar sobre el Rito Francés todo nuestro modesto conocimiento y saber hacer. A día de hoy, desde distintos grupos de trabajo creados en el seno del «Círculo de Estudios del Rito Francés Roëttiers de Montaleau», se ha llevado a cabo el análisis y publicación de distintos trabajos masonológicos y ensayos diversos, la edición comentada y [17]

por primera vez traducida en lengua española de la integral del Régulateur du Maçon 1783/1786/1801, teniendo abiertas distintas líneas de trabajo en lengua española como la compilación de los rituales históricos y divulgaciones continentales del siglo XVIII, así como la traducción de importante bibliografía referente al Rito Francés una vez cedidos los derechos de autor, debiendo también agradecer muy especialmente el apoyo y asesoría de importantes historiadores, estudiosos y masonónolgos entre los que cabe destacar a los Ilustres Hermanos Ludovic Marcos, Patrick Négrier, Charles Porset o Jean van Win, entre otros. Esperamos que ello colme todas vuestras expectativas con la misma intensidad que el amor que nosotros depositamos en este proyecto. Equipo directivo del «Círculo de Estudios del Rito Francés Roëttiers de Montaleau». Víctor GUERRA (España) Joaquim VILLALTA (España) Rodrigo ÁLVAREZ (México) Lila LORENZO (México) www.ritofrances.es

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ecía Ludovic Marcos en un artículo publicado en la revista CULTURA MASONICA que «aquellos que profesamos querencia por el RF tenemos toda una tarea por desarrollar», contra tirios y troyanos, y en pro de la Humanidad, cuyos objetivos podemos condensar en la labor de desarrollar una herramienta capaz de integrar tradición y modernidad haciendo de ello un punto de Unión Masónica, desde la singularidad y la pluralidad. Es verdad que cuanto más se investiga y se profundiza en el RF, su nacimiento y desarrollo, sus aposturas y ausencias; que muy bien describen muchos autores desde una perspectiva crítica; más nos damos cuenta de la ingente tarea que nos hemos propuesto una serie de Hermanos, que hemos hecho de tal Rito y Ritual, nuestra hecho diferencial, desmarcándonos de ostros sistemas ya conocido y publicitados. Nosotros los que animamos el Círculo de Estudios de Rito Francés Roëttiers de Montaleau, nos hemos echado al hombro esa tarea que ya han emprendido

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otros autores en otras latitudes, serios estudiosos y masonólogos como Pierre Mollier, Ludovic Marcos, Charles Porset, Jean Van Win, los cuales han ido abriendo los surcos historiográficos, clarificadores y desmitificadores acerca del Rito Francés, con una serie de trabajos, de los cuales algunos ya han sido vertidos al castellano y publicados en nuestros blog y páginas webs. Otros trabajos en cambio serán traducidos con la intención de ampliar el espectro de las publicaciones dedicadas al Rito Francés, entre ellos está el proyecto de traducir los dos tomos dedicados al Rito Francés en los siglos XVIII y XIX de Ludovic Marcos, que serán un buen complemento histórico para entender este ritual. Amén de que tenemos en cartera en conjunto con la Editorial Masónica. Es, otras aportaciones que irán sumándose poco a poco al bagaje del Rito Francés y que colocamos al servicio de la comunidad masónica. ¿POR QUÉ EL RÉGULATEUR?

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ara la mayoría el Rito Francés ha sido todo un descubrimiento en esa búsqueda del Maestro Masón de intentar desbrozar el mundo simbólico que le rodea para poder ver con claridad. Esa es la tarea que nos hemos autoimpuesto y que ha sido la que nos ha llevado a emprender el querido y añorado trabajo de verter al castellano una obra insigne para [22]

todo masón practicante y amante del Rito Francés como es el Régulateur de 1801. Desde hace años tal facsímil, trabajado por la experta y sapiente sabiduría de Pierre Mollier, unido a la indicación del hermano Joaquim Villalta de consultar otro autor que ha trabajado el Régulateur, como es Joseph Castelli, y sin olvidar los trabajos al respecto de Daniel Ligou, son la base permanente de consulta y búsqueda constante de referencias y contrastaciones. Textos que encendieron la mecha para que desde el modesto quehacer del Circulo de Estudios RF Roëttiers de Montaleau, emprendiéramos el vertido del viejo facsímil del Régulateur al castellano, a cuya tarea se sumaron uno tras otro desde el infatigable Hermano Joaquim Villalta, luego los Hermanos Rodrigo Álvarez y más tarde la Hermana Lila Lorenzo, haciendo viva una de las carencias de las que habla Marcos, de la Universalidad y la Mixtidad y el RF, ya que nos hemos reunido desde la diversidad de ópticas obedienciales y logiales, pero sin formar escuelas, o divisiones frentistas, o banderas de vanidad y reconocimiento, sino con la idea franca y pura de trabajar en pro del Rito Francés. Nosotros, Hermanos de distintas latitudes y visiones hemos intentando que el proyecto no fuera una traducción sin más, conscientes de que no somos ni traductores ni escritores, sino Hermanos preocupados por la Masonería que afrontamos los retos como nos vienen, y que sacamos tiempo donde lo haya pa[23]

ra que otros Hermanos puedan no solo disfrutar de este ritual vertido de la lengua de Voltaire a la de Cervantes, con la sola intención de que haya un texto en castellano asequible, en todos los sentidos, y cuyo objetivo en este caso concreto, es que esté lo más completo posible, uniendo a las traducción realizada desde el Régulateur, varias conformaciones e indicaciones y recogidas de otros trabajos anteriores. En esa tarea nos fueron imprescindible los trabajos de Mollier1 y Casteli2 y Ligou3, para poder al final de todo el proceso de traducción poder contar con un texto no académicamente perfecto, y pegado literalmente al Régulateur, sino que pudiera ser un texto que cumpliera una de las máximas que nos habíamos propuesto a la hora de afrontar esta tarea, poder trabajar con tal texto ritual base en nuestros talleres y logias sin más impedimento que querer hacerlo, una obra culminante y heredera de la tradición de los Modernos que esparce el entendimiento simbólico y filosófico de lo que representó la masonería continental del XVIII de la que el Rito Francés es el único heredero viviente de su primigenia estructura creada por Pierre Mollier. Le Régulateur du Maçon 1785/1801 (Edition critique) Ed. A L´Orient. 2004. 1

Joseph Casteli. Rite Français 1801. Le Nouveau Regulateur du Maçon. Edt. Maçonniques 2006. 2

Daniel Ligou. Rituels du Français Moderne 1786. Edt. Champion. Slatkine. 1991. 3

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la Gran Logia de Londres, allá por el 1717. No en vano, el Rito Francés es denominado también Rito Moderno o Rito de Fundación. Queríamos con esta apuesta además sacarnos de forma egoísta un trabajo de encima, tener que afrontar la petición continuada de Hermanos de allende de los mares que una vez y otra nos requieren rituales y catecismos, o cuadernos de formación para poder utilizar en sus trabajos o poder contrastar con los que ellos manejan, sabedores en algunos casos de que están trabajando con herramientas perladas de todo tipo de intromisiones y colonizaciones rituales. No deseamos hurtar el espacio de las Obediencia, ni tenemos manera ni capacidad ni deseo para ello, ni queremos pisar ese espacio como leales pero críticos masones que somos cada uno de su propia Obediencia, y logia. Pero es claro que el trabajo de expandir los trabajos de RF deben llevar también parejo algo más que entregar grados del Vº Orden, Diplomas y Patentes; deben también conllevar la facilidad necesaria para que esos hermanos puedan contar con herramientas vertidas a su lengua, desde la posibilidad y el poderío, y no dejarles en la pedigüeña situación de tener que solicitar, o comprometer o pedir favores a los Hermanos de este lado del océano par que se les envíe rituales y otras herramientas de trabajo referentes al RF. Como no nos hemos querido implicar en ese contrabandeo, de este sí, aquel no, ahora le pido como [25]

favor a un Consejero el poder entregar rituales y como tal otorgarlos, y otras cuestiones de estilo parecido, y siendo de la idea de que tales rituales deberían serles otorgados por derecho nada más recibir patentes y diplomas de Reconocimiento del Rito Francés, por parte de quien le compete en esa labor de difusión. Pero no queriendo vernos implicados entregando algo que no podemos hacer ya que nos hemos comprometido a ello, pero que pensamos que a su vez es patrimonio de toda la universalidad masónica, es el motivo por el cual hemos emprendido esta traducción del Régulateur, que es una obra abierta y propiedad de la Comunidad Masónica, aunque fruto particular del trabajo del Gran Oriente de Francia, al que desde aquí damos las gracias por colocar tal trabajo a disposición de la comunidad masónica, así como a los autores que hemos tomado como referencia. Un ritual abierto, como decimos propiedad de la universalidad masónica que además es el punto de partida, o de encuentro, para todos aquellos que nos encontramos dentro del sistema ritual de los «Modernos». Esta homogeneidad nos permite poner en manos de todos aquellos que lo necesitan o lo precisan algo que les es necesario y vital, a la vez que nosotros podemos soslayar tanto impedimento, a la vez que saciamos tanto vacío y precariedad como esta-

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mos constatando, de ahí que estemos trabajando para que ello sea posible. EL RÉGULATEUR DE 1783-1801

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rente a una multiplicidad ritualista que se venía dando en la línea de los llamados «Modernos» radicada en Francia y con todo un desarrollo singular, la cual no altera en demasía la esencia del Rito, pero en su conjunto tales rituales presentaban un panorama textualmente diverso dada la independencia que mediaba en esos momentos en las logias azules simples o en las Logias Provinciales y Logias Madres, cuya diversidad de formas y maneras era introducida en función de los usos y costumbres logiales, como vemos por las protestas, por ejemplo de la Logia Madre ―escocesa‖ de Aviñón que lo hace en contra de cambiar determinados usos o costumbres que ella presenta como genuinamente identitarios, eso sí de su peculiaridad administrativa y logial. Esta diversa situación ritual va a traer consigo la idea de que dentro de esa autonomía de las logias, o por encima de ellas, debía de haber una configuración ritual que comprendiese a todos, pero tal propósito no podía deslindarse de otras situaciones que se estaban dando en la masonería de aquellos momentos. Por un lado la polémica entre «masones racionalistas contra la vieja mística masónica anclada en la Re[27]

volución» o los contornos de independencia logial y paralización por luchas intestinas que se daban en el seno de la Gran Logia de Francia, la cual aún permanecía sumida en las ideas y conceptos del viejo régimen, con cargos vitalicios y heredables, formas feudales y arcaicas y místicas que no casaban bien con la idea de una «Republica Universal» de los masones y la mutación moderna que estos pretendían, etc. Toda esa situación se verá afectada por un cambio radical como es la reforma que lanza el Duque de Montmorency-Luxembourg, entre cuyas directrices destaca la idea de implantar un modelo obediencial cada vez más novedoso y centralizado, tal vez en contra del cosmopolitismo masónico que planteaba una Europa masónica, ya que lo que se quería articular era, en cierto modo, lo mismo pero desde una base nacional, o sea fijar un modelo centralizador sin perder la idea del cosmopolitismo universal de la Orden Masónica. En esas tesituras se va a plantear la reformar de la llamada Primera Gran Logia de Francia, que terminará transformándose en el Gran Oriente de Francia. En ese contexto nace también la idea de articular un herramienta ritualista que fuera común para todas las logias; más que nada se pensó para los Altos Grados, pero finalmente alcanzará también a los grados azules; que se engarzaran en ese fuerte tren de reformas, entre las cuales estaba la fijación o normalización de los rituales. [28]

Desarrollo y diferencias rituales que no vamos a tocar ni de refilón, ya que ello supuso el trabajo de nada menos que doce años de intensos debates en el seno de la organización masónica francesa, y en los cuales participaron en las primeras hornadas masones de la talla de Bacon de la Chevalerie, Bres de la Chaussée, Lalande, Guillotín o Savalette de Lange, primeras espadas de una revolución que planteaban esa creación de nuevos rituales «como agentes, que eran, de una culturización y que ponían en marcha con la idea de favorecer la difusión de las reformas masónicas concurrentes»1 queriendo, como no, contrarrestar en nombre del «conocimiento y Luces de las logias» otras corrientes ritualistas como el Rito Rectificado, y otros grupos de presión de carácter masónico enlazados con los proyectos más cristianizantes del siglo XVIII. Tensiones que siempre van a estar presentes en la masonería que se pueden magnificar en el Convento de 1849 cuando se oficializará la invocación del GADU integrado en el trilema de Libertad, Igualdad y Fraternidad, hasta llegar a 1877 donde primará la Libertad absoluta de Conciencia. Todo un trayecto de tensiones y debates intensos e interesantes. Fruto de todo ese conglomerado temporal y de situaciones directas y trasversales nace el Régulateur du Maçon, que como nos explica Pierre Mollier, es en la decimosexta asamblea (1781) de las tres Cámaras reunidas (Cámara de Administración, Cámara de [29]

París, y Cámara de Provincias) donde se ataca el problema de la redacción de los grados simbólicos, donde el Hermano Lalande, presenta un proyecto preparado para el Grado de Aprendiz y de cuyos trabajos y consensos en los que intervienen entre otros Salivet, y Roëttiers de Montaleau (garante del proyecto emprendido) que tras no pocos debates, en la Asamblea del 24 de junio de 1784 presentan un texto con los tres primero grados realizados por las tres Cámaras, no se debe perder de vista la tensión y presión que existía entra la Cámara de Paris y la Cámara de logias Provinciales; aunque no por ello deja de haber logias que se oponen a la fijación de los rituales en función de sus propias consideraciones. Finalmente es votado el cuaderno del grado de Aprendiz el 15 de julio de 1785 El GODF oficializará tal texto en 1786, que es lo que hoy conocemos como la codificación del Régulateur du Maçon, que fue difundido mediante un buen número de copias que las logias adquirían en forma de cuatro transcripciones manuscritas por unas 45 L (tres ejemplares para el Venerable y los dos Vigilantes, y uno para el Hermano Arquitecto-Preparador). Finalmente el texto fue impreso en 1801, por supuesto guardando fidelidad al documento de 1786. La primera parte de este Régulateur de 1801 contiene la Ceremonia de Iniciación y sus desarrollos, en un segundo plano están las Instrucciones, ocupando la Obertura y Cierre de los trabajos rituales siendo [30]

una parte más modesta e intercalada entre los otras partes, cerrando el trabajo el Ritual de Trabajos de Banquete. EL SIMBOLISMO FRANCÉS SE UNIVERSALIZA

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inalmente todo el simbolismo que se manejaba en el seno de la Gran Logia de Francia y luego en su sucesora el Gran Oriente de Francia se condensa en unos textos de referencia que tuvieron un largo y complejo parto en medio de una transversalidad de objetivos y reformas, como ya hemos visto, en las cuales, como es natural, unas logias sentían como les eran arrebatados sus predios, y otros talleres en cambio optaban por esa combinación de adoptar un modelo masónico universalista de corte centralizado, que conforma el hexágono francés, y por tanto el modelo masónico del Gran Oriente de Francia. El Régulateur del Maçon, o Regulador del Masón, es fiel para sorpresa de muchos no solo a los rituales de 1740-1760 sino al espíritu de la primera Gran logia de 1717, integrando usos masónicos ingleses desconocidos, de los cuales algunos estaban en las divulgaciones francesas de 1740; de hecho puede compararse los textos rituales de dicha época como la Maçonnerie disséquée de Prichard. Se logra tras ese largo proceso ya descrito, concertar una serie de reglas para poder universalizar la entrada en logia y evitar posibles errores de entrada de [31]

profanos; a la vez que se aborda todo un complejo estudio y codificación de los elementos periféricos al trabajo masónico como los tableros de logia, las meditaciones de los recipiendarios, etc... e incluso reglas administrativas para las logias. Esa adopción conlleva además la desaparición de otros elementos más propios del universo escocista que fueron presentados y defendidos para su inclusión en el texto del Régulateur, por poner un ejemplo por la Logia Madre «escocesa» de Aviñón, cuestiones como la copa de amargura, la purificación por el fuego y el agua. Fruto de toda esta renovación es la que nos anota de forma cuasi anecdótica Daniel Ligou de la desaparición de los rituales la palabra «real» que es reemplazada por la palabra «masónico». Por tanto lo que ahora hemos traducido, analizado y contrastado, es el primer ritual de Rito Francés conforme a lo que nos ha llegado procedente del Archivo del Gran Oriente de Francia, y que posteriormente han puesto a nuestra disposición tanto Ligou, como Mollier o Castelli. LOS VIEJOS CIMIENTOS DE LA RENOVACIÓN

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ería interesante poder en este trabajo analizar cómo la recuperación de las viejas bases rituales de 1717 lanzaron toda una renovación masónica, planteada a lo largo décadas por los «modernos» observando los cambios, las mutaciones y los modis[32]

mos, así como sus consecuencias, sus diferencias y singularidad, para de este modo poder contrastar en una labor cuasi arqueológica lo que es genuino y lo que se ha ido añadiendo, y pasando por ser rito francés, o simplemente por masonería. Eso es lo que venimos abordando desde el Circulo de Estudios del Rito Francés Roëttiers de Montaleau, y que algunos precursores del pensamiento único, califican de «guerra ritual», lo cual creemos que sería interesante ponerlo de manifiesto pero cuya labor y desarrollo desbordaría este Ritual, pero no por ello dejarán de estar presentes en otros trabajos que pretende llevara adelante el Círculo. Nuestra idea y proyecto es ayudar a que los viejos cimientos rituales, que pese a que hay quien manifiesta que no hay grandes diferencias simbólicas con el escocismo, parece querer olvidarse de que hay otras diferencias no tanto de organización como de concepto y de filosofía que en definitiva también marcan la diferencia; tal vez tamizada en el caso de una organización como el Gran Oriente de Francia, que para dar cabida a todos los trabajos, iguala o rebaja determinadas cargas en sus sistemas ritualísticos con la intención de que todos sus ritos tengan cabida en la organización y que todos los Hermanos tengan el mismo marco general de consenso. En general las diferencias están presentes a veces de forma abrupta y de forma sutil, y se trasponen en cuestiones a veces tan simples como las posturales, [33]

tal y como se puede ver en la puesta al Orden de Aprendiz en francés y escocés, que desde luego evocan filosofías, predisposiciones y conceptualizaciones distintas del trabajo en logia. Por ese motivo los viejos cimientos que marcaron toda una singularidad que se fue agudizando a lo largo del siglo XVIII, y que terminó en toda una deriva en el siglo XIX con marca desarrollo propio como tal Rito Francés «moderno», eso sí perdiendo importantes batallas y citas de no menos talla, como nos expone Ludovic Marcos en su trabajo introductorio a este ritual, pero permaneciendo fiel al origen a la vez que permeable a aquello que le permita expresarse en la sociedad de hoy, ajustándose a los tiempos, y más que se debe ajustar para estar también presente en el futuro de las logias del siglo XXI, con la misma frescura y sensibilidad, y sin prestarse a mutaciones extrañas para complacer querencias o modas, sino queriendo ser un ritual moderno sin olvidar la sencillez ritual que nos ha sido legada.

Víctor GUERRA Presidente del «Círculo de Estudios del Rito Francés Roëttiers de Montaleau»

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a rápida presentación del Rito Francés en su construcción trisecular pretende mostrar en qué medida ha sido modelado nuestro rito de rasgos procedentes del mundo operativo así como substanciar en cuánto se había mantenido fiel a sus condiciones de nacimiento y al proyecto innovador del siglo XVIII, que asumimos siempre como herederos de las Luces. Eso nos ha permitido también seguir, como desde entonces, evolucionando, tendiendo a un equilibrio entre tradición y modernidad. Este modo de perdurar, de arraigo y en un continuo paso de hombre constructor, en la historia y en la utopía, explica la buena y justa manera del Rito Francés de resonar y de razonar con las épocas, al enunciado de su tiempo. Ahí está su gran fuerza: viene del pasado y tiende hacia el porvenir. Este encuentro de un fondo operativo y de un proyecto filosófico, el cual se ha enriquecido sobre nuestro suelo que se ha tomado, en un tiempo como caba[37]

lleresco, y que los combates ciudadanos no han cesado de enriquecer y de precisar en un proyecto humanista de mejora del hombre y de la sociedad. Queda sin embargo por saber e imaginar, cómo nuestro rito puede hoy estructurar el futuro conservando el justo punto medio de estas aportaciones, venidas del pasado, y de nuestros anhelos, con apetito de fututo. UN RITO HOY DEMASIADO DESCENTRADO Y ACANTONADO

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icho de otro modo, ¿qué Rito Francés? Tres observaciones previas son necesarias si se quiere rememorar cómo y por qué nuestro rito se ha encontrado, en parte, falseado y reducido desde la corriente del siglo XIX hasta nuestros días. En un principio fue suplantado por el Rito Escocés Antiguo Aceptado a partir del Magisterio (Maestro Masón 3º), por lo cual habrá de preguntarse si el Rito Francés ha sabido decir en logia si este tercer grado se basta a sí mismo o, por ello, hay que suministrarle una consistencia que de ello haga, todo un lindero, una finalización. Esta cuestión cuasi fundamental merecerá la pena que nos detengamos en ella de forma pausada y profunda. Pues no hay ninguna duda que la falta de conclusión de las respuestas aportadas condicionarán, un [38]

día próximo, la no finalización de nuestra reconquista identitaria. Esta incertidumbre y el consentimiento del Rito Francés, durante la primera mitad del siglo XIX, en prolongarse en el escocismo para tratar sobre las finalizaciones hirámicas, son cuestiones que deberán ser un día entendidas y comprendidas, si queremos remediar aquello que ha hecho posible su disminución. El Rito Francés se convierte desde entonces durante casi un siglo y medio, en el simple peldaño de un recorrido cuyo término está fuera de él, todo un yermo ritual al no poder satisfacer ninguna profundización. La misma sencillez del Rito Francés marca de origen, y se la consigna en esa época como un supuesto signo de pobreza ritual. Sin memoria, sin fundamento, el rito nacional, que había tenido tanta influencia continental en el siglo XVIII, bajo el imperio, empieza a ser percibido a partir de entonces como una panoplia de usos degradados, para disfrute de una institución —el Gran Oriente de Francia— a la cual, darán a entender implícitamente que ha dejado de ser masónica. Percibido como rito que no se asume totalmente como tal, simple perpetuación de prácticas habituales para sus usuarios, el Rito Francés tiene, desde esta época, sobre su propio territorio, perdido la centralidad. Sin historia, el Rito Francés también ha fallado en sus citas con la historia. Ha pasado al lado de varios tipos de demandas desde el siglo XIX. Entre ellas, [39]

habría que prestar una particular atención a las concernientes al lugar de la mujer en la Masonería, que el Rito Escocés Antiguo y Aceptado se encontró por diversas circunstancias en situación de satisfacer mejor las demandas del momento. La saga de la Gran Logia Simbólica Escocesa, dinámica componente fundadora de la Gran Logia de Francia, que estuvo igualmente más o menos implicada directamente en el origen de las Masonerías mixtas y femeninas, es en este caso edificante. Mientras el Gran Oriente apadrinaba en el siglo XVIII sin demasiados complejos a las logias femeninas de adopción (¡cerca de un centenar en vísperas de la Revolución!), no sabrá en esta ocasión ayudar al nacimiento de una Masonería mixta, que se creará en 1893 (el Derecho Humano) también bajo la égida del Rito Escocés. No se implicará tampoco en el (re)nacimiento de una Masonería femenina a partir de 1901 (con la logia de adopción El Libre Examen) que se creará entonces en la estela de la GLDF, antes de tomar su vuelo a la liberación como Gran Logia Femenina de Francia, siempre bajo la égida del rito escocés. Sabiendo cómo fueron llevadas a su independencia y viendo, aún hoy, en qué lugares les es rechazada la entrada de los templos, se puede decir del resto, que todo ello es paradójico. ¡Pero es así! ¡Es nuestra ausencia sobre un terreno también fundamental, lo que explica que suframos tal herencia! [40]

Anotemos finalmente, para terminar el cuadro que deseo mostrar, que la proyección fuera de las fronteras del Gran Oriente de Francia, y del Rito Francés también se han encontrado reducidas a lo largo de todo este período. Se pueden ver y analizar ciertamente las consecuencias de la decisión del Convento de 1877 (a propósito de la supresión de la obligación de invocar al Gran Arquitecto del Universo) o bien aquellas otras derivadas de las represiones comunistas y fascistas en los países, en particular en la Europa meridional y central, donde las Masonerías salieron de nuestra zona de influencia. Sin embargo, no podemos dejar sin remarcar igualmente las torpezas cometidas en base a una constante falta de activismo y continuidad en el campo internacional. Viendo cómo de ese modo se iba reduciendo su área de proyección en los niveles nacionales e internacionales, el Rito Francés perdió de este modo su vocación para encarnar el universalismo. Estas consideraciones se reúnen y se prolongan, finalmente, en la imposibilidad que supuso para el Rito Francés satisfacer a la vez una demanda social más ofensiva y, casi simultáneamente, con una expectativa ritual y simbolista más construida, más rica. El rito escocés acertará, durante un tiempo, en poder satisfacer mejor ambas aspiraciones. Desde el segundo tercio del siglo XIX hasta el periodo de entre guerras, el ala más anticlerical de la Masonería, así como las co[41]

rrientes libertarias, o los sectores más innovadores de la sociedad se encontrarán a menudo en el ámbito del rito escocés. Paralelamente, la emergencia de las corrientes simbolistas, la expresión de una cultura iniciática que se buscaba, y que encarna bien un personaje como Oswald Wirth (iniciado en su comienzo en Rito Francés), se harán frecuentemente por este canal. Salvo algunas excepciones, como las de Arthur Groussier o Edmond Gloton, el comportamiento de aquéllos que, en el Gran Oriente de Francia, debieran haber encarnado los intereses del Rito Francés está marcado por una cierta suficiencia, incluso una franca hostilidad hacia todas estas evoluciones, cuando no de indiferencia. Estos dirigentes son también en general —hay que decirlo por otro lado— dignatarios del Gran Colegio de Ritos. El examen, por ejemplo, de los hechos que conducen al Régimen Escocés Rectificado en renacimiento a separarse del GODF (lo que será el origen de la actual GLNF) es en este caso altamente esclarecedor. De forma general, situar en oposición el empeño humanista y social de la Masonería con el desarrollo de una cultura ritual que habría podido concernir al Rito Francés tendrá funestas consecuencias. Ello contribuye a mantener una separación, que no tiene lugar de ser, que solo hará la función de acentuar el estallido del Centro de la Unión, hecho crucial del siglo XX.

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Esto abre la vía a un estúpido complejo de «regularidad» del que sufrimos todavía todos sus efectos devastadores, lo cual dejará el campo libre, al fin y al cabo, al desarrollo de derivas ritualistas y de inclinaciones «simbólatras», que tomarán una influencia creciente a lo largo de toda la segunda mitad del último siglo. Hasta que el Rito Francés no sepa conciliar y desarrollar sus potencialidades iniciáticas y comprometidas con el mundo, estará mutilado en su carácter filosófico esencial. EL RITO FRANCÉS

DEL MAÑANA: FEDERATIVO, INICIÁTI-

CO Y UNIVERSALISTA

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eflexionar sobre la identidad del Rito Francés y trabajar para su porvenir, requiere contestar a esta triple pérdida de centralidad, de universalismo y de potencial iniciático. Nadie puede definir e imponer un «programa» al Rito Francés, pero sí que podemos esbozar líneas de fuerza para una reconquista. El Rito Francés reencuentra una memoria y un asiento, lo que hace incontestable su legitimidad y perenne su arraigo. Queda por hacer de él un rito equilibrado en sus formas y coherente en su recorrido. ¿Quién puede pretender hoy que el carácter tradicional de un rito se mide según su formalismo y por número de sobrecargas añadidas? En ello habrá que trabajar pacientemente por el refuerzo y la amplitud de su asiento identitario. Responder por su futu[43]

ro haciendo de éste una realidad y una fuerza federativa, universalista e iniciática. Además es federativo porque enlaza en un destino común, que hace que lo que une sea más importante que lo que separa. Desde este punto de vista, el papel de la construcción identitaria alrededor de la memoria ha sido evocado. Se trata en efecto de volver a anudar a los hilos, observar con perspectiva una historia falseada, volver a apropiarse de un patrimonio y una imaginería. Sin embargo, no se trata de permanecer con la mirada puesta en el retrovisor; ni olvidar que este retorno a la memoria tiene también como fin sobrepasar un «hiato histórico», durante el cual no se ha hecho una evolución natural en los grados puestos en sueños. ¡Si es bueno conocer el pasado y sentirse orgulloso, es también bueno y del todo indispensable, en lo que nos concierne, aprender de sus lecciones! La expresión de una coherencia y de una vitalidad ritual resulta el fin y el medio más seguro de engarzar una dinámica federativa. No se decreta, pero puede inspirarse en este gran principio del Rito Francés, que es «unidad en la diversidad». ¿Qué rasgos, vertebrales, son sus famosos «fundamentos»?, ¿qué aspectos revelan las variantes históricas o interpretaciones posibles? Sus bases esenciales parecen sencillas de definir, aunque su aplicación en el Magisterio (MM# 3º) y a [44]

sus continuaciones necesita, como hemos visto, una mayor elección de definición y, cómo no, de aplicación. Algunas Logias y Capítulos se inspiran en la versión denominada Régulateur de 1801. La mayoría de los Talleres utiliza formas contemporáneas, más o menos fieles al «ritual Groussier», existiendo desde mediados del siglo XX. En lo que concierne a los Órdenes, los Capítulos recurren a los rituales de referencia del Gran Capítulo General del Rito Francés, también con matices y variantes. Los unos y los otros, vuelven a las fuentes o innovando, buscan un punto de equilibrio para un ritual Francés que sería aquel «de siempre» y, al mismo tiempo, «el de hoy». Expresarse en la diversidad si se está unido sobre lo esencial supone para nosotros una doble fuerza, pues habrá siempre un modo de hacer masonería en la fidelidad y otro en la búsqueda. Estamos hechos de transmisiones robustas, enriquecidas de constantes floraciones de hallazgos. La libertad creativa y la sabiduría de los Talleres hacen que las vueltas a las fuentes y los ajustes se equilibren y fecunden. Sin embargo, esta visión necesita ser sostenida por referencias revivificadas, por nociones fuertes, hoy insuficientemente explicadas. Recordemos así la importancia que tiene en nuestro rito lo gestual, la implicación del cuerpo, el lugar que ocupa la emoción, el cuidado de las recepciones, la concisión y el choque de las fórmulas, el principio de repetición. No olvidemos que el Rito Francés pone [45]

siempre delante la Hermandad. Que otorga un lugar particular a las prácticas juradas, especialmente bajo esta forma de juramentos. Muchos de estos aspectos, abandonados, deberían ser rehabilitados, y puestos al gusto de hoy día. Detrás de estas apuestas se perfila el esfuerzo que conduce a abrir las ventanas al sueño y al universalismo. Es así como nos engrandeceremos, o de lo contrario la Masonería perderá su combate. El Rito Francés debe federar sobre la base de su unidad y de su pluralidad, alrededor de su filosofía de construcción del hombre interior y del hombre social. Debe actuar para la refundación del Centro de la Unión, para hacer del siglo XXI la obra de una ciudadanía regenerada, de una República Universal. El Rito Francés debería agarrarse a todas las oportunidades históricas para encontrar su carácter universal. Su desarrollo en el seno de las Masonerías mixtas y femeninas es desde este punto de vista esencial. Anotemos al respecto (¡refiriéndonos otra vez al grado de Maestro!) que nada debería frenar la reflexión sobre el sentido de un mito que, aunque eterno, se expresa por una dramaturgia antigua, en una distribución exclusivamente masculina. El universalismo pasa también por la expansión internacional, por el establecimiento de relaciones mutuamente provechosas con ciertos «pequeños» ritos que son a menudo ramas nacidas de un tronco común, reunidas en torno a una reflexión sobre la adaptación o la [46]

compatibilidad de la Masonería con las culturas no occidentales. Las reconquistas identitarias del Rito Francés pasan por la promoción de métodos de trabajo de los que algunos han dejado ver ya su interés: transversalidad de las estructuras, tenidas comunes, temas esenciales de la Masonería adogmática. Es posible ir más lejos, en la cooperación, la ampliación de la democracia asociativa en los capítulos, la participación en los combates del mundo. La exploración y la puesta al día del Magisterio están lejos de ser acabada. ¿Se trata del 3er grado de una serie de siete, como se escucha decir a veces? ¿Del 3er grado de una serie de 33, siendo el primero de otra «especie» de grados, como lo induce el escocismo? ¿Se trataría más bien, si fuéramos lógicos, de un grado terminal, suficiente, pero abandonado y necesitado de un arreglo? Grado que durante el siglo XIX por otra parte era conferido a menudo el mismo día que el de Compañero. Por lo cual sacamos provecho de los colaterales, que son los 1er y 2º Órdenes, y de los cuales tenemos la impresión de que un día próximo, habrá que retocar la arquitectura. ¡El hombre es siempre el mismo y nunca lo mismo! ¿Cuántos mitos forjados en un contexto de exaltación del sacrificio, de odio/amor del Padre y de conocimiento bíblico infuso? El Rito Francés es a la vez un rito de despertar y de razonamiento, de emoción y de inteligencia. Las po-

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tencialidades de un rito son particularmente apreciables en su aptitud para enlazar su paso, en transmitir un método y una continuidad, en permitir una lectura del mundo, en exaltar la Vida, en imaginar una utopía. El Rito Francés no hará excepción. Será iniciático y progresista o no será. Para eso, deberá desarrollar una cultura comunitaria que, teniendo la cuerda por las dos puntas, y haciendo esto, propondrá una verdadera alternativa a la religiosidad masónica que amenaza, posará en exigencias revolucionarias la necesidad para el hombre y para nuestra época proseguir, incansablemente, el combate, planetario ahora, para la libertad y la justicia.

Ludovic MARCOS Director Conservador del Museo del Gran Oriente de Francia

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a Orden de los Francmasones es una asociación de hombres sabios y virtuosos, cuyo objeto es vivir en una perfecta igualdad, estar unidos íntimamente por los vínculos del aprecio, la confianza y la amistad, bajo la denominación de Hermanos, y estimulárselos unos a los otros en la práctica de las virtudes. Según esta definición, es sabiduría e interés de todas las Logias, el solo admitir en la participación de nuestros Misterios a sujetos dignos para compartir sus beneficios, en atención a este propósito, no debe existir ninguna cuestión que pueda avergonzarnos ante los Masones de todo el Universo. Así pues, cuando se trata de la admisión de un Profano2, la Logia a la cual es presentado debe considerar que dará un miembro a la asociación general y un Hermano a cada miembro; que una vez admitido, los Masones de todo el Universo de cualquier estado, calidad y condición que sea, deberán reconocerlo como tal; que es por consiguiente tanto por el honor de la Logia como por el interés en el que debe estar anima[51]

da para la gloria y prosperidad de la Orden, que el aspirante sea digno de ser presentado ante todos los Masones; es necesario, finalmente, que sobre el testimonio de su Logia, merezca ser acogido por todos los Hermanos como un hombre virtuoso, como su Hermano, quien, en esta calidad, tiene derecho a su amistad más íntima: por la admisión del profano, la Logia se hace moralmente garante, con respecto a todos los Masones, de las cualidades que esta admisión debe hacer presumir en él3. Ha sido necesario una puesta al día del antiguo texto del Régulateur du Maçon de 1801 con los actuales usos más establecidos y enraizados, así como completar vacíos u omisiones —e incluso incoherencias— contrastando distintas fuentes del mismo ritual y de otros en práctica durante este periodo histórico así como en la actualidad4. Pierre Yves Beaurepaire. L´Europe des Francs-maçons. XVII- XIX Siècles. Edt. Belin2002. 1

Nota a pie de página del texto del Régulateur: esta palabra se remonta a la más remota antigüedad y no ha significado nunca otra cosa que la no admisión al Templo, y sus misterios Profanum extra templum. Profano significa ―el que no se encuentra admitido‖ en oposición ―al que esta iniciado‖. 2

El Régulateur de 1801 prosigue este apartado como a continuación detallamos, que debe ser interpretado con un espíritu aperturista sobre las condiciones requeridas a sus futuros miembros, ya que de no hacerlo puede parecer con3

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tradictorio, a pesar de mantener condiciones hoy día, no aplicables ni por su naturaleza social ni conceptual. Así mismo muestra el objetivo regulador en sí de la obra: Las Logias no pueden pues aportar demasiado escrúpulo, exactitud y severidad en las informaciones sobre los sujetos que le son presentados. Otro punto no menos importante es la uniformidad, deseada desde hace mucho tiempo, en la manera de proceder en la iniciación. Animado de estos principios, el Gran Oriente de Francia se ha ocupado finalmente de la redacción de un protocolo de iniciación a los tres primeros grados, o grados simbólicos. Ha creído tener que hacer volver la Masonería a estos usos antiguos que algunos innovadores han tratado de alterar, y restablecer estas primeras e importantes iniciaciones en su antigua y respetable pureza. Las Logias de su correspondencia deben por tanto conformarse a ellas punto por punto, a fin de no seguir ofreciendo a los Masones viajeros, una diversidad tan revuelta que contraríe los verdaderos principios de la Masonería. 4

Le Régulateur du Maçon 1785/1801, édition critique de Pierre Mollier. Ed. À L’Orient 2004.

Le Nouveau Régulateur du Maçon, Joseph Castelli, Ed. Maçonniques 2006.

Le Manuel Pratique du Franc-Maçon, Lib. Berlandier, 1845. Nécessaire Maçonnique, Ed. Cauet, 1812. Manuel du Fran-Maçon, E. F. Bazot, Ed. Moronval, 1817. Manuel Maçonnique, Ed. Hubert, 1820. Rituales y divulgaciones:

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RF 1783 del GOTM RFT de la GLNF 1998

Prichard 1730 Berne 1740 Luquetcirca 1745 Le Sceau Rompu 1745 Le Maçon Démasqué 1751 Marquis de Gages 1763 Le Corps complet de Maçonnerie adopté par la R. G. L. de France, 1765 Duc de Chartres 1784 Berté 1788 Rituales de Referencia del Gran Oriente de Francia Rituels dy Rite Français Moderne 1786. Daniel Ligou

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a iluminación y el trazado del Cuadro de Logia se efectúan antes de la apertura de los trabajos por el Hermano Arquitecto-Preparador. Los Hermanos se reúnen y se decoran en el templo1 antes de la apertura de los trabajos. En principio, no hay entrada solemne para los miembros de la Logia, los Oficiales y el Venerable. No obstante, se puede decidir efectuar tal entrada teniendo en cuenta los Grados. El Venerable, en todos los casos, entra al final. Los Hermanos Visitantes son recibidos con pompa y solemnidad después de la lectura de la plancha trazada. Asisten al cierre de los trabajos.2 No se hace referencia al G# A# D# U# ni en la apertura ni en la clausura de los trabajos. Esta referencia solo aparece como evocación o invocación, en el momento de la recepción a los tres grados. Los anuncios son repetidos tres veces.

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La batería de apertura del Primer Grado y las baterías de Segundo y Tercer Grados son simples (―ordinarias‖). En el transcurso de una asamblea en Primer Grado, los aplausos masónicos (o Batería de Júbilo) se repite tres veces la batería de Aprendiz, seguida de la aclamación:¡Vivat – Vivat – Semper Vivat! Si estos aplausos se dirigen a un Hermano es tradición que pida permiso para cubrir estos aplausos aplaudiendo a su vez. La Logia cubre finalmente estos aplausos. No hay batería de duelo. En la clausura de los Trabajos en Primer Grado, los Hermanos hacen el signo, la triple batería de grado y la triple aclamación: Vivat.3 Cuando alguien con retraso quiere entrar en Logia, llama a la puerta según la batería del grado en que la Logia trabaja, el Hermano Experto (o Terrible) responde del mismo modo, el Hermano retrasado, finalmente responde de la misma forma. La entrada se realiza por los pasos del grado. El Hermano queda al Orden entre los dos Vigilantes y espera que el Venerable le de autorización de tomar asiento. Para la entrada en 2º o 3º grado, no se hacen los pasos de los grados precedentes. Para pedir la palabra, el Hermano se levanta, extiende el brazo hacia su Vigilante y se pone al orden4.

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El Vigilante da un golpe de mallete, que es repetido por el otro Vigilante, y luego por el Venerable. El Vigilante efectúa el anuncio y el permiso es concedido por el Venerable. Los Compañeros no tienen que estar sentados obligatoriamente al Mediodía. Pueden sentarse en otra parte de la Logia para instruir a los Aprendices y ocupar Oficios menores. La Cadena de Unión y el Ósculo de la Paz no se hacen hasta los trabajos de banquete que siguen a todas las asambleas. Si, por alguna razón importante, el banquete no es celebrado, se hará la Cadena de Unión antes de cerrar los trabajos.5 Para trabajar en Segundo y Tercer Grado, se abren de manera sucesiva los trabajos a Primero, después a Segundo y finalmente a Tercero si ha lugar. Se cierran inversamente del mismo modo. El Saco de Proposiciones solo circula si hay informes de encuesta, en el caso que la Logia adopte este sistema de selección de candidatos a la Iniciación, en el cual los Comisarios (Aplomadores) asignados secretamente por el Venerable los aportarán discreta y anónimamente.6 Las proposiciones se realizan de viva voz al final de los trabajos. Después de su circulación, la Caja de las Limosnas (Tronco de la Viuda) se entrega sin ceremonia al Venerable.

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Cuando se habla del Venerable, se dice: ―el Venerable‖ o el ―Respetable‖. Cuando alguien se dirige a él, se dice: ―Muy Venerable‖ o ―Muy Respetable‖. La Función del Arquitecto-Preparador es decorar la Logia, iluminarla, y preparar a los Candidatos para las iniciaciones en los tres grados. Una pequeña mesa está dispuesta cerca del 1er Vigilante. El Hermano Experto depositara la llave de la Logia y las herramientas de Segundo Grado, cuando se precisen. Un Hermano, llamado Hermano Tuileur7, se mantenía antiguamente de forma permanente fuera de la Logia durante la duración de los trabajos8.

Hablando con propiedad, resultaría más preciso decir que los Hermanos se revisten de sus respectivos ornamentos a la puerta del Taller, ya que en el RF los Aprendices y Compañeros trabajan en el Porche del Templo, o sea que la Logia configurada en estos grados trabaja fuera del mismo. Véase el Ritual de Tercer Grado. 1

Aunque por regla general en muchas logias del RFM no se hace y están presentes desde el principio de los trabajos. 2

En el Ritual de Referencia del RF del GODF, esta aclamación se ha cambiado por ¡ Libertad, Igualdad y Fraternidad! que se expresa tras la batería. 3

Actualmente el uso más común es dar un golpe sobre el muslo con la mano y extender ésta para llamar la atención 4

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del Vigilante permaneciendo sentado; y levantarse colocándose al Orden cuando es concedida la palabra por el correspondiente Vigilante. En el Ritual de Referencia del GODF la Cadena de Unión está presente en los trabajos, y en ella además se trasmiten las palabras de paso del semestre. 5

Aunque en el Régulateur aparece esta fórmula es tradicional la circulación de ambos sacos a la vez y la recogida de las proposiciones que se deposita en el citado Saco de Proposiciones. En muchas logias, sobre manera en el GOdF, las planchas ya que hablamos de RF , las planchas de arquitectura llegan al Oriente, mediante su introducción en el Saco de Proposiciones y convenientemente firmadas. 6

La traducción más aproximada sería Retejador. Hoy en día está en desuso el hecho de que un Hermano se quede fuera de los trabajos. 7

Este uso es muy poco respetado en la actualidad. Lo esencial era que ningún Profano pudiera entrar en los locales y escuchar tras la puerta del lugar donde se reúne la Logia. 8

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a Logia debe estar decorada en azul y blanco, a menos que represente algún orden de arquitectura y que no esté decorada con pinturas análogas a la Masonería, pero, siempre que sea posible, el techo debe representar un cielo sembrado de estrellas. El trono donde se sienta el Venerable debe estar elevado por tres peldaños y en su parte superior con un Dosel de tela azul. A cada asamblea, se trazará sobre el suelo de la Logia el Cuadro Misterioso (Tapiz de Logia) con tiza, el cual se borrará después de los trabajos de forma fácil con una esponja ligeramente empapada en agua. Con esta acción se evitaba que pudiera caer en manos profanas Hoy ya es muy común utiliza un cuadro pintado sobre tela con los temas simbólicos de grado, representando el Tapiz de Logia que es lo más extendido)2.

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El Cuadro debe representar: I.

Los siete escalones misteriosos y el pavimento mosaico del pórtico del Templo.

II.

Las dos columnas misteriosas con su monograma J# y B#; entre estas dos columnas a la altura de su capitel, una Escuadra, con el ángulo hacia abajo.

III.

A la izquierda de la columna J#, la piedra bruta; a la derecha de la B#, la piedra cubica de punta, y, entre las dos, el pórtico del Templo.

IV.

Encima del capitel de la columna J#, la Perpendicular, y encima de la columna B#, el Nivel.

V.

En medio de la parte superior del Cuadro, se dibujará un compás con el ángulo hacia lo alto. A la derecha, el Sol y a la izquierda, la Luna.

VI.

Al fondo en la parte superior se representará un cielo sembrado de estrellas, y todo se encontrará delimitado por la Cuerda de Nudos3 con borlas en sus extremos.

VII. Se representará la plancha de trazar en el lado izquierdo. VIII. Se dibujarán tres ventanas, una al Occidente, otra al Oriente y la otra al Mediodía. Se colocará sobre el altar de Oriente: una espada, un compás, un mallete. [65]

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La joya del Venerable es una Escuadra ligada a su collar de tono azul. En la base del altar se dispondrá un cojín de tela azul, sobre el cual se colocará una escuadra (frecuentemente bordada a modo de galón). En la mesa de los Vigilantes habrá para el 1º un Nivel, y la Perpendicular para el 2º, cuyos símbolos, colgaran también de su collar color azul; en dicha mesa se colocará también un mallete para cada uno de ellos. Se pondrán así mismo sobre la mesa del Secretario los collares para todos los Oficiales de la Logia, los cuales tendrán grabados en ellos una serie de símbolos y una joya que representan los oficios que se ejercen dentro de la logia, iguales o similares a los que exponen a continuación:

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El ORADOR: un Libro Abierto.

El SECRETARIO: una Joya con dos plumas cruzadas. El MAESTRO DE CEREMONIAS: una espada.

El HERMANO EXPERTO: dos espadas cruzadas. El TESORERO: dos llaves cruzadas.

El LIMOSNERO: un corazón en llamas. El ARQUITECTO-PREPARADOR: un rollo de pergamino.4

Cada Oficial debe decorarse antes de la apertura de los Trabajos con el collar y la joya de su oficio.

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El ARQUITECTO velará porque todo este colocado adecuadamente y que la Logia este suficientemente iluminada. El VENERABLE se sitúa al Oriente, de cara al Occidente y en el eje del Templo. El PRIMER VIGILANTE a Occidente, a la derecha entrando al Templo, de cara al Oriente. El SEGUNDO VIGILANTE a Occidente, a la izquierda entrando al Templo, de cara al Oriente. El ORADOR al Oriente, a la izquierda del Venerable. El SECRETARIO 5, al Oriente, a la derecha del Venerable. El TESORERO, al Mediodía, al pie del Oriente. El LIMOSNERO, en el Norte, al pie del Oriente. El HERMANO EXPERTO6, cerca del 1er Vigilante. El MAESTRO DE CEREMONIAS, cerca del Segundo Vigilante. El ARQUITECTO-PREPARADOR, se sitúa en medio de la columna del Mediodía, de cara al Cuadro misterioso o Tapiz de Logia. Tres candelabros con una vela cada uno a modo de pilares serán colocados alrededor del Cuadro Misterioso. Se posicionarán uno al Oriente (al Noreste), uno al Mediodía (Sureste) y otro al Occidente (Suroeste).

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(noreste)

(sureste)

(suroeste) Se dispondrán tres velas sobre la mesa del Venerable; una vela sobre la mesa del l Primer Vigilante y otra sobre la mesa del Segundo Vigilante.

Para la decoración y disposición de la Logia se ha seguido principalmente lo expuesto en el Cuaderno del Arquitecto del Manuscrito de 1783 así como en el Manuel Pratique du Franc-maçon de 1845. 1

Este uso propio de los comienzos de la Masonería especulativa obedecía sin duda al hecho de que los miembros de las Logias normalmente no contaban con lugares establecidos para este exclusivo uso y decorados a tal efecto. Autores como Robert Ambelain u OswaldWirth expresan en su obra la posterior introducción a tal efecto de una tela gruesa estirada tras ser desenrollada y en la que aparecía pintado dicho Cuadro de Logia. 2

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De este modo se traduciría en el RF la Houppe Dentelée. El número de los denominados «lazos de amor» que contiene no aparece definido —ni creemos que fuera ésta su intención— siendo hoy día tal número muy variable en función de la evolución seguida por distintas tradiciones masónicas. 3

Antiguamente había 7 oficios mayores y 7 oficios menores y un Hermano Tuileur-cubridor, actualmente se han incorporado nuevos oficios y oficiales Maestro de Banquetes y la Columna de Armonía. 4

Se encuentran algunos escritos de la época donde aparece el término Chancelier y que es utilizado aún hoy día en algunas logias. Este término viene siendo utilizado en ciertas obediencias para el correspondiente Gran Oficial denominado Grand Chancelier. 5

Hermano Terrible, incluso Couvreur, son términos éstos que realizaban en la época el mismo Oficio. Hemos retenido Experto como el más extendido y que aparece en el texto de 1801. En algunas logias sigue usándose el término Terrible. En el texto del Régulateur aparecen atisbos de duplicidad con el Couvreur que muestran la génesis del futuro desdoblamiento de ambos oficiales en algunas prácticas rituales y la génesis de lo que será denominado posteriormente el Hermano Guardatemplo, si bien todo apunta a que originalmente se trataba de una concreta función que desarrollaba el mismo oficial. Al respecto debe remarcarse que en los Tuileurs de principios del XIX esta multiplicidad de funciones relativas a este oficio e imprecisa en el propio Régulateur —tal vez por las muy variadas prácticas coexistentes en el momento y fuertemente arraigadas en las lo6

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gias— conlleva a que se nos muestre un Primer Experto apoyado por un numero variado de Expertos (algunos hablan de otros seis) que se reparten las distintas tareas. Así hoy encontramos prácticas rituales que varían en las logias y obediencias, con un Primer y Segundo Experto y también la muy extendida denominación de Gran Experto al principal Oficial que atesora dicho rango.

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Estando los HH# reunidos en el local, ―vestidos‖ 1 y decorados 2, el Venerable da un golpe de mall ete para llamar a los trabajos; cada uno se sitúa en su lugar y se queda de pie 3. El Venerable, de pie, con la cabeza cubierta 4, comprueba si todos los Oficios están provistos por los correspondientes oficiales, en caso contrario los hace eventualmente proveer por He rmanos presentes para el transcurso de la cerem onia 5.

Cumplido esto y estando cada uno en su lugar, el Venerable se sienta y dice: M# V#:Tomad asiento, ¡Hermanos! M# V#: P# V#: S# V#: M# V#: Hermano Primer Vigilante, ¿sois Masón?

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P# V#: Mis Hermanos me reconocen como tal, Muy Venerable. M# V#: Hermano Primer Vigilante, ¿cuál es el primer deber de los Vigilantes en Logia? P# V#: Muy Venerable, es asegurarse que la Logia está cubierta exteriormente e interiormente. Es necesario que la puerta del Templo6 esté cerrada y que no haya ningún profano en la sala de Pasos Perdidos que pueda escuchar detrás de la puerta.

M# V#: Aseguraos, Hermano. P# V#: Hermano Segundo Vigilante, aseguraos si la Logia está a cubierto. S# V#: Hermano Experto, cumplid con vuestro oficio. El Hermano Experto, con la espada en la mano derecha, abre la puerta del Taller, toma la llave7, hace su inspección. Luego al volver, cierra la puerta, y coloca la llave sobre la mesa que está situada entre los dos Vigilantes y se coloca en la entrada al interior del porche, con la espada en mano. Hecho esto.

H# Exp#: Hermano Segundo Vigilante, los trabajos están a cubierto exterior e interiormente.

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S# V#: Hermano Primer Vigilante, los trabajos están a cubierto exterior e interiormente. P# V#: Muy Venerable, los trabajos están a cubierto exterior e interiormente. M# V#: ¡De pie y al Orden8, Hermanos, espada en mano!9. Los Hermanos tendrán su espada con la mano izquierda, punta hacia abajo. El Venerable tiene la suya con la punta hacia arriba, la empuñadura apoyada en el altar.

M# V#: Hermano Primer Vigilante, ¿cuál es el segundo deber de un Vigilante en Logia? P# V#:

Muy Venerable, es asegurarse si todos los Hermanos están al Orden.

M# V#: ¿Lo están, Hermanos Vigilantes? En ese momento, los Vigilantes abandonan su l ugar por el exterior y remontan su columna hasta Oriente examinando a los Hermanos. Los Herm anos Vigilantes tendrán la espada en la mano i zquierda punta abajo y el mallete en la derecha. No se cruzan. Regresan a su lugar bajando por su Columna 10. Hecho esto:

S# V#: Hermano Primer Vigilante, todos los Hermanos están al Orden en la columna del Norte. [77]

P# V#: Muy Venerable, todos los Hermanos están al orden11 en las columnas12. M# V#: Hermano Primer Vigilante, ¿qué edad tenéis? P# V#: Tres años, Muy Venerable. M# V#: ¿A qué hora los Masones abren sus trabajos? P# V#: A mediodía, Muy Venerable. M# V#: ¿Qué hora es, Hermano Segundo Vigilante? S# V#: Es mediodía, Muy Venerable. M# V#: Puesto que es la hora en que debemos abrir nuestros trabajos, Hermanos Primer y Segundo Vigilantes, invitad a los Hermanos de una y otra columna a que se unan a mí para abrir los trabajos de la Respetable Logia (Nombre de la Logia) , al Oriente de (P# G# de la Logia) en el grado de Aprendiz Mason. P# V#: Hermano Segundo Vigilante, Hermanos que decoráis la columna del Mediodía, el Venerable nos invita a unirnos a él para abrir los trabajos de la Respetable Logia (Nombre de la Logia), al Oriente de (P# G# de la Logia) en el grado de Aprendiz Mason. S# V#: Hermanos que decoráis la columna del Norte, el Venerable nos invita a unirnos a él para abrir los trabajos de la Respetable Logia (Nombre de la Logia), al Oriente de (P# G# de la Logia) en el grado de Aprendiz Mason.

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El Venerable se descubre 13, efectúa los tres Go lpes misteriosos que los dos Vigilantes repiten.

M# V#: P# V#: S# V#: El Venerable se cubre y coloca su espada sobre el altar. Los Vigilantes hacen lo mismo. Los Herm anos ponen su espada al lado. El Venerable dice a continuación.

M# V#: ¡A mí, Hermanos míos, por el signo y la batería!14 Todos los Hermanos, con los ojos hacia el Ven erable, hacen el signo de Aprendiz y aplauden por la batería (Dos golpes precipitados y Uno lento.)

M# V#: Hermanos, los trabajos están abiertos. P# V#: Hermanos, los trabajos están abiertos.

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S# V#: Hermanos, los trabajos están abiertos. M# V#: Tomad asiento, Hermanos. M# V#: Hermano Orador, durante la duración de los trabajos, sois el guardián de las Reglas de la Orden Masónica (y de los Prolegómenos de

esta Respetable Logia).

Tened a bien hacernos lectura de ellos15. H:. Ord# (LECTURA a elección, o determinada en función de la pertenencia obediencial particular de cada Logia), en general se realiza la lectura del 1º A rticulo de la Constitución. Lectura de la Plancha Trazada

M# V#: P# V#: S# V#: M# V#: Hermano Secretario, tened a bien dar lectura de la plancha trazada de nuestros últimos trabajos. Hermanos, os invito a prestar la mayor atención a esta lectura. [80]

El Hermano Secretario da lectura de la plancha 16. Mientras que el Hermano Secretario da lectura a la redacción de la Plancha , el Hermano Orador coteja sobre el esbozo que tiene bajo los ojos17, con el fin de garantizar si en la redacción, el Hermano Secretario no ha cambiado u omitido deliberaciones de la asamblea anterior. Cuando la lectura termina, el Hermano Orador debe dar parte de los cambios u omisiones que haya observado. Si no hay ninguna, dice lo siguiente:

H# Ord#: La Plancha es conforme al esbozo, Muy Venerable. Como es posible que otros Hermanos hubieran observado algo esencial que debiera ser correg ido, el Venerable dice:

M# V#: Hermanos, os invito a formular vuestras observaciones18 sobre la redacción de la plancha trazada de la que acabáis de escuchar su lectura.

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Si algunos Hermanos tienen observaciones que hacer, piden la palabra levantando la mano. El Vigilante, de su columna, efectúa un golpe de mallete que responde el otro Vigilante, y luego el Venerable:

El Vigilante: Muy Venerable, un Hermano de mi columna solicita la palabra. M# V#: Hermano [nombre del H#], tenéis la palabra. Después de haber obtenido la palabra, presenta sus observaciones, y si nadie más se levanta, se procede de la siguiente manera:

S# V#: Hermano Primer Vigilante, no hay ninguna observación en mi columna. P# V#: Muy Venerable, no hay ninguna observación en las dos columnas. M# V#: Hermano Orador19, os ruego nos deis vuestras conclusiones. El Hermano Orador da sus conclusiones. Hecho esto:

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M# V#: Hermanos, de acuerdo con estas conclusiones, os invito a uniros a mí para dar la sanción de la Logia a la plancha de los últimos trabajos. ¡A mí, Hermanos! Siguiendo al Venerable, los Hermanos manifie stan su aprobación extendiendo la mano derecha y dejándola caer sobre su mandil 20. Si hay alguna oposición, el Hermano lo manifie sta poniéndose al pie y al Orden, una vez resuelta el Hermano Secretario se levanta y hace firmar el registro por el Venerable y el Orador, antes de poner su propia firma 21.

El significado de este término simbólico viene como nota a pie de página del texto del Régulateur de 1801: «Esta palabra significa aquel que tiene su mandil». 1

Con el cordón o banda, collar en el caso de los oficiales de las cuales colgaría la joya del Oficio, medalla, etc. 2

Si se quiere solemnizar ciertas asambleas, se hará entrar en la logia mediante la llamada del Maestro de Ceremonias, por este orden, primero los Aprendices, luego los Compañeros, los Maestros, los Oficiales de la Logia, y finalmente, al Venerable). 3

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Según la iconografía de la época.

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Se han introducido los elementos descriptivos no explicitados u omitidos en el Régulateur de 1801 pero de uso frecuente —aunque a veces de manera no generalizada— en distintas prácticas logiales y obedenciales, comparando asimismo diversas fuentes rituales del siglo XVIII. 5

Así, como Templo, viene indicado en una nota aclaratoria del texto del Régulateur. No obstante, ver nota 1 de la pagina (46) de la presente obra. 6

Pocos Rituales Masónicos en nuestros días hacen todavía alusión a la Llave de la Logia. Ciertamente la alusión es discreta, pero no es menos cierto que la Llave se pone en evidencia de forma muy clara desde el Primer Grado, puesto que ésta predetermina, de hecho, la apertura misma de los Trabajos. Dicho elemento simbólico, que merecería un exhaustivo estudio paralelo, aparece en diversos textos históricos rituales como el Edinburgh Register House de 1696, el Sloane Nº 3328 de 1700, el Dumfries nº 4 de 1710, el Trinity College de 1717, el Mason’s Examination de 1723 o el Masonry Dissected de Prichard de 1730. 7

En el caso del Ritual de Referencia del GODF, se ordena ponerse cara al Oriente, y al paso de los Vigilantes no se realiza ninguna maniobra, se suele permanecer al Orden, o colocarse al Orden al paso del Vigilante 8

La utilización de la espada en Logia se sigue practicando en muchas Logias de distintas Obediencias que utilizan el Régulateur, inclusive del GODF, aunque en otras se reserva en las Tenidas de 3º Grado. El texto ritual histórico del que tratamos lo propone en todo momento ya en Grado de Aprendiz. 9

[84]

El texto de 1783 y 1801 tan sólo se limita a pedir a los Vigilante se aseguren que los HH# están al Orden sin indicar el recorrido de las columnas, o sea que no se mueven — comprobación que en el Ritual Escocés Rectificado (RER) efectúa el Segundo Vigilante, e incorporada en la de cobertura de la logia: si los profanos ya han sido separados, la Logia está bien cubierta, los accesos guardados y todo se halla en buen Orden; sin tampoco recorrer las columnas—. Sin embargo este recorrido se incorpora al Primer Grado por coherencia al claramente explicitado en el Régulateur para los grados Segundo y Tercero, donde se pretende comprobar la calidad del grado en cuestión que los miembros deben atesorar, así como además evitar el olvido por falta de práctica de responder correctamente a las peticiones de palabras, signo y toque. 10

En el caso de los rituales de RF de Referencia que practica el GODF, los Vigilantes suben por sus respectivas columnas con el mallete sobre la parte izquierda del pecho, se cruzan al Oriente y marcan la escuadra y bajan por la columna contraria hacia el Occidente, cruzándose de nuevo, rindiendo cuentas de la calidad de los HH.:.entre ambos en la base de Occidente, siendo el Primer Vigilante, quien lo trasmite al Muy Venerable una vez colocados ambos oficiales antes sus respectivas mesas. Tanto el Maestro de Ceremonias como el Experto se ponen al Orden de igual modo que el resto de Hermanos como describe el ritual sin especificar. En algunos usos, el Experto mantiene su espada con la mano derecha punta en alto. 11

[85]

La alocución en Rito Francés de Referencia del GODF es la siguiente: «Venerable Maestro todos los Hermanos que decoran las columnas son miembros «regulares» de la logia o visitantes reconocidos». Nota. Esta acotación de los «visitantes» se realiza en tanto que la práctica mayoritaria en las logias (GODF) es dar entrada a los visitantes desde el primer momento en los trabajos. Añadiendo el MV# «lo mismo sucede al Oriente» (ya que los Vigilantes no suben al Oriente a comprobar al resto de los Hermanos 12

El descubrirse o quitarse los guantes en momentos específicos del ritual no aparece en el Régulateur de 1801. No obstante, dicha acción está muy extendida en muchas prácticas de esta forma ritual, aunque es fuente de controversias por presuponer reminiscencias formales religiosas o teúrgicas para algunos. Lo hemos incorporado al ritual con la finalidad de conocer sus diversas formas de la manera más amplia posible, dejando la elección final al uso logial en particular. Notemos también el hecho de que algunas logias y obediencias hacen la invocación al GADU en la apertura y clausura de los trabajos, si bien esto parece más una imposición a posteriori de algunas obediencias que una práctica en uso generalizada en el XVIIIvisto el material analizado y contrastado. 13

En algunos usos logiales, en esta apertura también se hace la aclamación Vivat. Vivat Siempre Vivat Libertad, Igualdad Fraternidad, como renuncia a la posible referencia religiosa del Vivat. 14

Este apartado muy extendido actualmente, no aparece en el Régulateur de 1801. A modo de ejemplo, tras la lectura del H# Orador, el Venerable puede añadir: Estos extractos 15

[86]

de nuestro Reglamento no son hechos para encuadrar la vida del masón, si no muy al contrario, para acompañarlo y permitirle desarrollarse con total libertad de conciencia adquiriendo un mejor conocimiento en el respeto de la Regla Iniciática para que un día él trasmita la tradición. (Fuente: Rituales utilizados actualmente en algunas logias basados en los manuscritos de 1783, aunque todo apunta a que haya sido una reciente aportación de una concreta estructura Federativa creada en 2003). La plancha debe necesariamente contener todas las deliberaciones que han sido tomadas, las proposiciones que han sido formuladas durante el curso de los trabajos. 16

Por muy ejercitado que sea el Hermano Secretario, por mucha que sea la atención que aporte, es difícil que esta plancha sea redactada durante la tenida de trabajos, de manera que aporte una lectura reflexionada. Por otra parte, es posible que un hecho haya ocurrido, se haga mención de él y que luego la Logia pare, pero ya no se hable de ninguna manera en la plancha, lo que requiere tachaduras, o restituciones, etc. Esta es la razón, por la que el Hermano Secretario solo traza, durante los trabajos, como un esbozo que se puede corregir, borrar según las circunstancias, con tal que lo pase luego a limpio en un registro destinado a este uso. Se servirá pues para el esbozo de hojas selladas con los sellos de la Logia. Al final de los trabajos (habitualmente mientras circula la Caja de las Limosnas o Tronco de la Viuda), el H# Secretario hará lectura de este esbozo, para que cada uno pueda hacer las correcciones que crea que deben indicarse: estas correcciones tendrán por objetivo aportar más exactamente lo que habrá acontecido durante los trabajos, con el fin de constatar lo que habrá sido indi[87]

cado en el esbozo. El H# Secretario lo hará firmar por el Venerable y el H# Orador. Este esbozo se ha consensuado antes del cierre de los trabajos últimos. 17

Las observaciones solo podrán referir a la forma en que la plancha está redactada. No se puede cambiar nada en el fondo de ésta, que ha sido irrevocablemente adoptado en la última asamblea. 18

En el caso del Ritual de Referencia del GODF se explicita lo siguiente «Hermano Orador, durante los trabajos vos sois el fiel guardián de las Constituciones y del Reglamento General». 19

20

Signo de consentimiento o aprobación.

Mantenemos esta forma de aprobación muy extendida y propuesta también en la obra Le Nouveau Régulateur du Maçon de Joseph Castelli según los manuscritos de 1783 de la edición impresa de 1801. En el Régulateur se menciona un ambiguo: todos aplauden de la manera acostumbrada. El propio Régulateur expresa este uso de aprobación en otro apartado de este mismo ritual, concretamente en el de la definitiva admisión del profano para su Recepción. 21

[88]

La lectura de la correspondencia es hecha por el Venerable. Si eventualmente hay correspondencia oficial de la Obediencia, ésta será leída por el H# Orador.

[89]

A medida que el Secretario cita sus nombres, los Hermanos se levantan y se ponen al Orden d iciendo habitualmente ― Presente‖ o ―En Logia‖. Las excusas deben presentarse en este momento y con el óbolo correspondiente que será recogido al final de este llamamiento por el H# Limosnero 1.

1

Hospitalario.

[90]

El Hermano golpea en la puerta por la batería de su Grado. El Hermano Experto responde de la misma manera. El Hermano atrasado efectúa de nuevo la llamada.

S# V#: P# V#: M# V#: S# V#: Muy Venerable, llaman a la puerta. M# V#: Hermano Segundo Vigilante ¿Ved quién llama? Si se trata de un miembro de la Logia o un Vis itante conocido, que se le conceda la entrada de spués de que haya dado las palabras de paso y de Orden.

S# V#: Hermano Experto, ¿ved quien llama?.

[91]

Si se trata de un miembro de la Logia o un Vis itante conocido, se le conced e la entrada después de que haya dado las palabras de Paso y de Orden. El Hermano Experto una vez asegurado de la c alidad de quien llama dice :

H# Exp#: Hermano Segundo Vigilante, es el Hermano […] que solicita la entrada. S# V#: Muy Venerable, es el Hermano […] que solicita la entrada. M# V#: Hermano Experto, conceda la entrada según la forma acostumbrada. El Hermano Experto abre la puerta. El Hermano que entra efectúa los tres pasos del Grado, se p one al orden entre los dos Vigilantes y espera a que el Venerable le indique que tome asiento.

[92]

S# V#: P# V#: M# V#: S# V#: Muy Venerable, en la sala de Pasos Perdidos, los Hermanos solicitan ser admitidos en nuestros trabajos. M# V#: Hermano Segundo Vigilante, invitad al Hermano Experto a informarse quiénes son estos Hermanos, a pedir sus nombres, el de sus Logias, sus certificados, y retejadlos en los trabajos del grado. S# V#: Hermano Experto, informaos de quienes son estos Hermanos, pedid sus nombres, el de sus Logias, sus certificados, y retejadlos en los trabajos del grado.

[93]

El Hermano Experto interrog a a todos los Hermanos uno tras otro y en particular escribiendo los nombres, el de sus Logias y se encarga de sus certificados. Luego, llama a la puerta por la batería del grado. El Maestro de Ceremonias 1 responde del mismo modo, y él replica del mismo modo. El Maestro de Ceremonias abre la puerta por o rden del Venerable. El Hermano Experto se coloca entre los dos Vig ilantes, da cuenta de su misión y da los papeles al Maestro de Ceremonias que los lleva al Vener able Maestro. Es por esto que se hace firma r en un papel a parte a los visitantes con el fin de que se pueda confrontar estas firmas con las que deben aparecer en sus certificados. Si no hay dificultades, el Venerable ordena que se les dé entrada. En el momento que entran el Hermano Experto les pide la Palabra de Paso o la palabra de Orden 2 que se da en voz baja; para r ecibirlos, todos los Hermanos se ponen de pie y al Orden. Para un Venerable Maestro o una diputación de Logia, o para un dignatario en ejercicio de la obediencia, se enviar á a la puerta del Taller tres hermanos precedidos del Maestro de Ceremonias. Se les recibirá Espada en mano. Para el Gran Maestro (o Gran Venerable), la d iputación será de nueve precedido del Maestro de Ceremonias.

[94]

Para un G# M# de un Oriente extranjero u otra Obediencia, en su entrada irá acompañado de siete HH# y precedidos del Maestro de Ceremonias. Cuando estos Hermanos se encuentren entre los dos Vigilantes, y en el instante de su introdu cción, el Venerable efec túa nueve golpes repetidos por los dos Vigilantes, después de lo cual el V enerable dará uno más fuerte para obtener el s ilencio; el Venerable les dirigirá un cumplimiento de felicitaciones en nombre de la Logia sobre la dicha que recibe por su presencia y les invitará a tomar asiento al Oriente donde el Maestro de C eremonias les conducirá. Los Hermanos que los acompañan forman la bóveda de acero, los demás HH# están de pie, al Orden y espada en mano. El Venerable sólo ofrecerá su mallete a los tres Grandes Oficiales de la Obediencia.

M# V#: Hermanos Primer y Segundo Vigilante, invitad a los Hermanos de una y la otra columna a unirse a mí para aplaudir la presencia de los Hermanos (nombre de los HH#) en nuestros trabajos. P# V#: Hermanos de la columna del Mediodía, el Venerable nos invita a unirnos a él para aplaudir la presencia de los Hermanos (nombre de los HH#) en nuestros trabajos.

[95]

S# V#: Hermanos de la columna del Norte, el Venerable nos invita a unirnos a él para aplaudir la presencia de los Hermanos (nombre de los HH#) en nuestros trabajos. M# V#: A mí, Hermanos. Se aplaude por la batería y la aclamación de uso. Si agradecen, se cubrirá su aplauso por orden del Venerable. Se introduce para el final a los HH# distinguidos por sus cualidades o por su s dignidades en la Orden de manera que el de más cualidad sea i ntroducido el último.

M# V#: Tomad asiento, Hermanos.

Hemos optado por este Oficial para dar coherencia y evitar la imposibilidad de duplicidad de funciones al utilizar en ocasiones indistintamente al Expert y al Couvreur en el Régulateur de 1801. Esta forma que tomamos es la adoptada por Castelli, en su obra arriba citada y la aplicada en muchas logias actualmente. 1

Palabra Semestral o Anual, utilizada por algunas obediencias. 2

[96]

M# V#: Hermanos, vamos a proceder a la Instrucción del grado. Os invito a que prestéis la mayor atención. Estas instrucciones se leerán de forma preeminente a cualquier otro trabajo. La única excepción es una tenida de Logia de Recepción, donde se efectuará al final de la ceremonia. Se harán por preguntas y respuestas entre el Venerable y los dos Vigilantes. A discreción del Venerable, pueden plantearse diversas preguntas a cualquier Hermano que debe responder, con el fin de eje rcitar a los Hermanos en las respuestas a dar cuando sean interrogados para avanzar de gr ado.

[97]

HERMANO PRIMER VIGILANTE, ¿SOIS MASÓN? Mis Hermanos me reconocen como tal. ¿QUÉ ES UN MASÓN?, HERMANO SEGUNDO VIGILANTE. Un hombre libre, amigo tanto del pobre como del rico si son virtuosos. ¿QUÉ VENIMOS A HACER EN LOGIA? A vencer nuestras pasiones, someter nuestras voluntades y hacer nuevos progresos en la Masonería. ¿DÓNDE HABÉIS SIDO RECIBIDO? En una Logia Justa y Perfecta. ¿QUÉ SE NECESITA PERFECTA?

PARA QUE UNA

LOGIA

SEA JUSTA Y

Tres la gobiernan, cinco la componen y siete la hacen justa y perfecta. ¿DESDE CUÁNDO SOIS, MASÓN? Desde que recibí la Luz. ¿EN QUÉ RECONOCERÉ QUE SOIS MASÓN? Por mis signos, palabras y toque. ¿CÓMO SE HACEN LOS SIGNOS DEL MASÓN? Por la escuadra, el nivel y la perpendicular. DADME EL SIGNO DE APRENDIZ.

(Se lo da)

[98]

¿QUÉ SIGNIFICA ESTE SIGNO? Que preferiría tener la garganta cortada que revelar los secretos de los Masones. HERMANO SEGUNDO VIGILANTE, HERMANO PRIMER VIGILANTE.

DAD EL TOQUE AL

El Primer Vigilante: Es justo Muy Venerable. DADME LA PALABRA, (HERMANO SEGUNDO VIGILANTE). No debo leer, ni escribir, solo puedo deletrear. DADME LA PRIMERA LETRA, Y YO OS DIRÉ LA SEGUNDA. (J, [—], [—], [—], N) ¿QUÉ SIGNIFICA ESTA PALABRA? Mi Fuerza está en Dios1. Era el nombre de una de las columnas de bronce situada al Septentrión del Templo de Salomón, cerca de la cual los Aprendices recibían su salario. DADME LA PALABRA DE PASE DEL APRENDIZ. (Se la da) T# ¿QUÉ SIGNIFICA?

Es el nombre de uno de los hijos de Lamech que inventó el arte de trabajar los metales. ¿POR QUÉ OS HICISTEIS RECIBIR MASÓN? Porque estaba en las tinieblas y deseaba ver la luz.

[99]

¿QUIÉN OS PRESENTÓ EN LOGIA? Un amigo virtuoso el cual reconocí seguidamente como un Hermano. ¿EN

QUÉ ESTADO OS ENCONTRABAIS CUANDO FUISTEIS

PRESENTADO EN LOGIA?

Ni desnudo, ni vestido, pero desprovisto de todos los metales. ¿POR QUÉ EN ESTE ESTADO? Ni desnudo, ni vestido, para representar el estado de inocencia, y para recordar que la virtud no necesita adornos; desprovisto de todos los metales, porque son el emblema y a menudo la ocasión de los vicios que el Mason debe evitar. ¿CÓMO FUISTEIS INTRODUCIDO EN LOGIA? Por tres grandes golpes. ¿QUÉ SIGNIFICAN ESTOS TRES GOLPES? Pedid y recibiréis. Buscad y encontraréis Llamad y se os abrirá. ¿QUÉ CONLLEVARON ESTOS TRES GOLPES? Un Hermano Experto me pidió mi nombre, mis apellidos, mi edad, mi País, mi profesión y si era mi voluntad ser recibido Masón.

[100]

¿QUÉ HIZO DE USTED EL HERMANO EXPERTO? Me introdujo en la Logia entre los dos Vigilantes, y me hizo viajar como un Aprendiz Masón debe hacerlo, con el fin de hacerme conocer las dificultades que se encuentra para convertirse en Masón. ¿QUÉ OS PASÓ A CONTINUACIÓN? El Maestro de la Logia, con el consentimiento unánime de todos los Hermanos, me recibió Masón. ¿CÓMO OS RECIBIÓ? Con todas las formalidades requeridas. ¿CUÁLES SON ESAS FORMALIDADES? Tenía la rodilla derecha desnuda sobre la escuadra, la mano derecha sobre la espada, con la mano izquierda tenía un compás abierto en escuadra, la punta apoyada sobre el pecho izquierdo desnudo. ¿QUÉ HICISTEIS EN ESTA POSTURA? Presté la obligación de guardar los secretos de la Orden. ¿QUÉ VISTEIS AL ENTRAR EN LOGIA? Nada, Muy Venerable. ¿QUÉ VISTEIS CUANDO SE OS DIO LA LUZ? Vi el Sol, la Luna y el Maestro de la Logia.

[101]

¿QUÉ RELACIÓN PUEDE HABER ENTRE ESTOS ASTROS Y EL MAESTRO DE LA LOGIA? Como el Sol preside el día, y la Luna a la noche, el Maestro preside la Logia para iluminarla. ¿DONDE SE SITÚA EL MAESTRO DE LA LOGIA? Al Oriente. ¿POR QUÉ? Al igual que el Sol se levanta al Oriente para abrir la carrera del día, así el Maestro se sitúa al Oriente para abrir la Logia, iluminar los trabajos, y poner a los obreros a la obra. ¿DONDE SE SITÚAN LOS VIGILANTES? A Occidente. ¿POR QUÉ? Para ayudar al Venerable en sus trabajos, pagar a los obreros y despedirles contentos. ¿DONDE SE SITÚAN LOS APRENDICES? En Septentrión. ¿POR QUÉ? Porque solo pueden soportar una luz débil. ¿CÓMO SE LLAMA VUESTRA LOGIA? La Logia de San Juan, Muy Venerable.

[102]

Recuérdese: al final de las instrucciones, la pal abra se concede a las columnas para que realice los comentarios que crea oportuno.

Si la Tenida debe continuarse en un grado sup erior, el Venerable hace cubrir las Logia a los Hermanos Aprendices e invita al Hermano A rquitecto a disponer el local en grado de Comp añero. Si los trabajos se desarrollan en primer grado, se pasa al orden del día.

En las instrucciones de otras formas practicadas del Rito Francés se expresa como Estabilidad, Firmeza. Llama la atención esta significación que solo se recoge en algunos catecismos y divulgaciones del siglo XVIII que denominan a Jakin como la palabra del Aprendiz; sus formulaciones escritas han sido muy diversas «Jakin; Jachim, Jakhin, Iakin» y su significación es «El erigirá o el establecerá» y viene del verbo hebreo «koun» y se aleja bastante de esa significación que se le da en el Rito Francés. 1

[103]

Si es distinto a la recepción de un Profano.

M# V#: Hermanos, el orden del día de la presente asamblea indica […]. Si un Hermano debe dirigir a la Logia algún fragmento de Arquitectura, el Venerable lo hará conducir al Oriente por el Maestro de Cerem onias. Es juicioso prever una mesa (la tradición indica que es un pupitre) para él, cerca del Orador, con el fin de evitar que éste deje su puesto. Los Hermanos que deseen hacer intervenciones del trabajo, lo harán en las formas prescritas. Es un ―Uso‖ y no una imposición, no tomar la palabra más de tres veces sobre un mismo tema. Al final, el Venerable hará conducir a l Hermano conferenciante o ponente a su lugar por el Mae stro de Ceremonias.

[104]

PRELIMINARES A LA RECEPCIÓN Todo Profano admisible 1, será anunciado en pa rticular al Venerable en ejercicio , por uno de los Miembros de la Logia. Será lo mismo para un Mason que desee ser afiliado. El Venerable propondrá, en la forma que sigue, al Profano a la Logia en asamblea y durante los trabajos, sin nombrar ni designar de ninguna manera al H# que lo presen ta.

PROPUESTA DE LA CANDIDATURA DE UN PROFANO M# V#: Hermanos, el Profano [nombre y apellidos], con la edad de […] años, de nacionalidad […] dedicado a [profesión], nacido en [ciudad] y residente en [residencia actual], está propuesto y pide iniciarse en nuestros misterios como miembro de esta Logia. [105]

Hermanos Primer y Segundo Vigilantes, invitad a los HH# a que se procuren de aquí a la próxima asamblea, información sobre el Profano propuesto, a fin de deliberar sobre esta candidatura y si habrá lugar de nombrar Comisarios a tal efecto. Los Vigilantes repiten el anuncio. En la asamblea siguiente, se ocupará de la pr opuesta presentada por el Profano o de la solic itud de afiliación, y el Venerable dirá:

M# V#: Hermanos Primer y Segundo Vigilantes, invitad a los Hermanos a que nos comuniquen la información que hayan podido obtener sobre el Profano […], propuesto en la última asamblea. Los Vigilantes repiten, cada uno sobre su colu mna, este anuncio. Como continuación de este proceso, el método seguido en la actualidad en materia de reclut amiento o afiliación depende y varía según la L ogia u Obediencia a la que ésta pertenezca, qu edando explicitado por sus Reglamentos. Trad icionalmente el mecanismo exigía que el resultado final fuera unánime, tras lo cual se aplaudía, ya [106]

que la Logia debe preferir conservar un miembro del que conoce su carácter, espíritu y cualidades, antes que adquirir un extraño, que le es descon ocido. Se efectúa el proceso que corresponda.

DE LA RECEPCIÓN AL GRADO DE APRENDIZ Todos los miembros convocados para el por el Venerable; la be llevar: Recepción

de la Logia deben haber sido día de la asamblea indicada plancha de convocatoria d eal Primer Grado.

Nadie debe faltar a la asamblea sin una razón legítima, como asuntos civiles, deb eres de profesión, etc. Si se falta, se debe pedir excusas ante la Logia mediante una plancha dirigida al Hermano Secretario, sin lo cual, debe imponerse una multa en beneficio ―de los pobres‖ (para beneficencia). El Profano aspirante, será llevado a la pu erta del local, al menos una media hora antes de la ape rtura de los trabajos por el Hermano que lo pr opuso. Esta puerta será, si es posible, diferente a la entrada ordinaria. Allí, el Hermano se desp edirá del aspirante, como si se retirara totalmente. El Hermano Preparador se hará cargo del Prof ano, si aún no es la hora de abrir los trabajos; le conducirá a algún lugar secreto, donde no pueda [107]

conversar con nadie, ni ver , ni reconocer a ninguna persona. El Hermano Preparador mantendrá una aparie ncia dura pero sin aspereza, evitará entablar conversación, y responderá breve y misteriosamente a las preguntas que pudieran serle formuladas quitando el deseo de hacerle otras. Aproximadamente media hora antes de la apert ura de los trabajos, el Hermano Preparador con ducirá al Profano a la Cámara de Reflexión. Esta cámara deberá estar cerrada a los rayos del día e iluminada por una sola vela. Los muros estarán ennegrecidos y cargados de emblemas fúnebres, a fin de inspirar el recogimiento, tri steza y pavor: será legibl e sobre las paredes o se encuadrarán (o suspenderán) algunas sentencias de una moral pura, máximas de una filosofía au stera en distintos lugares de la cámara: una cal avera, o incluso un esqueleto, si se puede obtener uno, recordarán la nimiedad de las cos as humanas. Solo debe haber en la cámara una silla, una mesa, un pan, un vaso lleno de agua clara, sal y azufre 2 en dos pequeños vasos, papel, plumas y tinta. Por encima de la mesa, estarán representados un gallo y un reloj de arena, bajo estos emblemas se pondrán estas palabras: Vigilancia y Persevera ncia .

[108]

INSCRIPCIONES Si la curiosidad te ha conducido aquí, ¡Vete! Si temes ser descubierto en tus defectos, estarás mal entre nosotros. Si eres capaz de disimular, estremécete, se te descubrirá. Si valoras las distinciones humanas, sal, no las conocemos aquí. Si tu alma ha sentido pavor, no vayas más lejos. Si perseveras, serás purificado por los elementos; saldrás del abismo de la oscuridad, y verás la luz. Se dejará algún tiempo al Profano solo en la Cámara de Reflexión; después el Hermano Prep arador le dará por escrito las siguientes pregu ntas, o parecidas a resolver también por escrito:

¿Qué se debe un hombre honesto a sí mismo? ¿Qué debe a sus semejantes? ¿Qué debe a su patria? Se escribirán estas preguntas de modo que dejen entre ellas bastante espacio para que quepan las respuestas que el Profano pueda dar.

[109]

RECEPCIÓN DE UN PROFANO El Venerable hace salir al Hermano Preparador, quien le saluda antes de salir de la Logia, para que vaya cerca del Candidato, y estar presto para traer el papel con las respuestas e informar de la disposición de éste cuando le sea requerido 3.

M# V#: Hermanos, por votación unánime (favorable4), admitisteis al Profano [nombre] a ser presentado para iniciarse en nuestros misterios; si no hay una nueva oposición, os ruego deis prueba de vuestro consentimiento en la manera acostumbrada. P# V#:

Hermanos, por votación unánime (favorable), admitisteis al Profano [nombre] a ser presentado para iniciarse en nuestros misterios; si no hay una nueva oposición, el Venerable os ruega deis prueba de vuestro consentimiento en la manera acostumbrada.

S# V#:

Hermanos, por votación unánime (favorable), admitisteis al Profano [nombre] a ser presentado para iniciarse en nuestros misterios; si no hay una nueva oposición, el Venerable os ruega deis prueba de vuestro consentimiento en la manera acostumbrada.

M# V#: ¡A mí, Hermanos¡.

[110]

Todos los Hermanos, hacen el signo de consent imiento, extendiendo la mano derecha y dejándola caer sobre su mandil. Si hubiera alguna nueva oposición, sería necesario discutirla. Si no hay ninguna el Venerable prosigue:

M# V#: Hermano Maestro de Ceremonias, advertid al Hermano Preparador que la Logia espera el informe que debe rendirnos. El Maestro de Ceremonias cumple su misión y vuelve de nuevo con el Hermano Preparador, que toca a la puerta de la manera que ha sido det allada y que se observa en todas las circunsta ncias. El Hermano Experto abre la puerta por orden del Venerable. El Hermano Preparador rinde cuenta de las di sposiciones del candidato, y entrega al Maestro de Ceremonias, que lo lleva al Venerable, el papel con las tres cuestiones que se le propusieron al candidato, y las respuestas que escribió.

M# V#: Hermano Preparador, vaya a disponer al Recipiendario en el estado requerido; hágame llegar su espada (si tiene) y sus metales.

[111]

Durante la preparación, el Venerable lee en voz alta las respuestas que el Recipiendario dio a las cuestiones que se le propusieron. Si la llegada del Recipiendario tardara demasiado, el Vener able hará leer unos reglamentos de la Logia, y esta lectura será interrumpida al primer golpe de m allete. El Hermano Preparador, de regreso hacia el ca ndidato, le hará algunas obser vaciones sobre la importancia de su decisión; cuando se haya as egurado de su resolución, dejará de hablarle, qu edando en el silencio más imponente, y no le re sponderá ya a ninguna de sus preguntas. Se le hace salir de la Cámara de Reflexión y se le pone en el estado en el que debe entrar a Logia, es decir que debe tener la cabeza descubierta, t ener los ojos vendados con el mayor cuidado; e star en camisa, el brazo y el seno izquierdo desc ubierto (si el clima fuera riguroso, se le podrá c ubrir con un abrigo), sin tirantes, la rodilla der echa descubierta, el pie derecho con pantufla; es necesario que no tenga con él ni oro, ni plata, ni reloj, ni anillos, ni ninguna joya, ni metales. El Hermano Preparador lleva a la Logia los metales, joyas, la espada, etc., del Recipiendario; llama a la puerta de ésta , y los entrega al Maestro de Ceremonias quien se los entrega al Venerable. Tras volver con el Recipiendario, el Hermano Preparador lo lleva a la puerta de la Logia, do nde llama con tres grandes golpes irregulare s.

[112]

S# V#: P# V#: M# V#: S# V#: Hermano Primer Vigilante, ¡llaman a la puerta en profano¡. P# V#: Muy Venerable, ¡llaman a la puerta en profano¡. M# V#: ¿Haga ver quien llama así? P# V#: Hermano Segundo Vigilante, ¿haga ver quien llama así? S# V#: Hermano Experto, ¿haga ver quien llama así? H# Exp#: (Entreabre la puerta de la Logia y dice en

tono un poco brusco) ¿Quién llama así?

Prep#: Es un Profano que pide ser recibido Masón. H# Exp#: (Cierra la puerta bruscamente y dice) Es un Profano que pide ser recibido Masón. S# V#: Es un Profano que pide ser recibido Masón. P# V#: Muy Venerable, es un Profano que pide ser recibido Masón. M# V#: Pedidle su nombre, apellidos, su edad, su país, su profesión y su residencia actual. Pedidle también ¿qué exige de nosotros y cuál es su voluntad?

[113]

P# V#: Pedidle su nombre, apellidos, su edad, su país, su profesión y su residencia actual. Pedidle también ¿qué exige de nosotros y cuál es su voluntad?. S# V#: Pedidle su nombre, apellidos, su edad, su país, su profesión y su residencia actual. Pedidle también ¿qué exige de nosotros y cuál es su voluntad? El Hermano Experto entreabre la puerta y dice:

H# Exp#: ¿Cuál es su nombre, apellidos, edad, país, profesión y residencia actual? ¿Qué exige de nosotros y cuál es su voluntad? Prep#: Se trata del Señor […], de […] años de edad, de nacionalidad […], de profesión […] y residente en […]. No exigen nada de nosotros pero su voluntad es ser recibido Masón. S# V#: Se trata del Señor […], de […] años de edad, de nacionalidad […], de profesión […] y residente en […]. No exige nada de nosotros, su voluntad es ser recibido Masón.

[114]

P# V#: Se trata del Señor […], de […] años de edad, de nacionalidad […], de profesión […] y residente en […]. No exigen nada de nosotros, su voluntad es ser recibido Masón. M# V#: Hermano Experto, hacedle entrar. Inmediatamente las puertas se abren con ruido; parece que se abren cerrojos: El Hermano Prep arador tiene al Recipiendario por las dos manos, lo sitúa entre los dos vigilantes, las puertas se vuelven a cerrar con ruido, se vuelven a cerrar los cerrojos, y en este momento, el Hermano Pr eparador dice:

H.:. Prep#: Os lo libro, ya no respondo más de él. Los Hermanos Vigilantes, sin soltar su mallete, dejan su lugar, y se acercan al Profano, lo toman cada uno de una mano, y tras algunos instantes de silencio:

P# V#: Muy Venerable, ¡he aquí al Profano! M# V#: Señor las cualidades que exigimos para ser admitido entre nosotros, y sin las cuales no puede ser iniciado en nuestros misterios, son la mayor sinceridad, una docilidad absoluta y [115]

una constancia a toda prueba. Sus respuestas a las preguntas que voy a hacerle, nos permitirán juzgar lo que debemos pensar de usted. A cada pregunta, el Venerable espera la respue sta, para insistir y aumentar el desconcierto, según lo que el Profano responda.

M# V#: ¿Cuál es vuestra intención al presentaros aquí?5 ¿Quién os ha inspirado ese deseo? ¿No es curiosidad, en su mayor parte? ¿Qué idea tenéis de la Masonería? Responded con franqueza, y sobre todo, sed sincero. ¿Estáis dispuesto a realizar las pruebas por las cuales debe pasar? ¿Sabéis las obligaciones que se contraen entre nosotros? ¿Quién os ha presentado aquí? ¿Lo conocéis por Francmasón? ¿No os ha prevenido sobre nada de lo que hacen los Francmasones? ¿Cómo podéis desear conocer algo de lo cual me decís no tener ninguna idea?

[116]

¿Qué reflexiones han producido en usted los objetos que se han puesto ante vuestros ojos en la cámara donde se os ha encerrado a vuestra llegada? ¿Qué pensáis del estado en el que os encontráis actualmente? ¿Qué idea os formáis de una sociedad en la cual, se exige que el Recipiendario sea presentado de una manera que debe pareceros singular? Una vez más, sed franco en vuestras respuestas. Leemos en vuestro corazón. ¿Vuestra confianza y vuestro paso no son un poco ligeros? ¿No tenéis temor de que abusemos del estado de debilidad y ceguera en el que os habéis dejado reducir? Sin armas, sin defensa y casi desnudo, os libráis al poder de gentes que no conocéis. Después de estas preguntas:

[117]

M# V#: Vamos a someteros a unas pruebas Indispensables. Os prevengo, Señor, que si en el curso de estas pruebas, el coraje y la fuerza que os serán necesarias para soportarlas, os llegaran a faltar, seréis siempre dueño de retiraros: estas pruebas son todas misteriosas y emblemáticas. Prestad toda la atención de la que seáis capaz. Después de algunos minutos del más profundo silencio, el Venerable dice:

M# V#: Hermano Experto6, hacedle efectuar el Primer Viaje. Los Vigilantes vuelven a su lugar. El Hermano Experto toma al candidato por las dos manos, le hace viajar partiendo de Occidente, donde está, pasando por la columna del Norte, del Norte a Oriente, de Oriente al Mediodía, y de allí a Occidente, entre las dos Vigilantes, donde los viajes se terminan. El Hermano Experto, durante este viaje, camina reculando. El Primer Viaje debe ser el más difícil; se deben

[118]

hacer pasos cortos, muy lentamente realizando una marcha un tanto irregular. Se aprovechara de la disposición del local para hacer este viaje penoso, con obstáculos y dificu ltades dispuestos con arte, sin embargo no se la stimara al Recipiendario. Se le hará caminar a v eces con pasos lentos, y otras veces rápido. Se le hará inclinarse de vez en cuando, como si pasara por un subterráneo; se le obligara a pasar como si franqueara una fosa; por fin se le hará caminar en zigzag, de modo que no pueda reconocer la naturaleza del terreno que recorre. Durante el viaje, se ejecutará sonidos de granizo y trueno (golpeando por ejemplo los pies contra el suelo), a fin de imprimir en su alma algún se ntimiento de temor. Cuando el Recipiendario está de regreso en Occ idente:

S# V#: Muy Venerable, el Primer Viaje está hecho. M# V#: Señor7, ¿qué habéis percibido en el primer viaje que acabáis de hacer? El Venerable espera cualquier respuesta y, sin tenerla en cuenta, dice:

[119]

Este Primer Viaje es el emblema de la vida humana; el tumulto de las pasiones, el choque de los diversos intereses, la dificultad de las empresas, los obstáculos que multiplican sobres vuestros pasos los rivales afanados en desalentarle; todo eso está figurado por el ruido y el estruendo que ha golpeado vuestros oídos, por la desigualdad del camino que habéis recorrido. Después de un momento de silencio:

M# V#: H# Experto, hacedle efectuar el Segundo Viaje. El Segundo Viaje debe hacerse con pasos no tan lentos y algo más largos; solo debe apreciarse l igeros choques de espadas, bien proporcionados, dirigidos a los oídos del candidato, y en pequeño número. De regreso al Occidente, el Hermano Preparador pondrá el brazo desnudo del Rec ipiendario en un recipiente lle no de agua, que se habrá tenido cuidado en colocar en ese lugar. Una vez secado el brazo del candidato con una toalla prevista a tal efecto, el S# V# dice:

[120]

S# V#: Muy Venerable, el Segundo Viaje está hecho. M# V#: ¿Qué Reflexiones ha hecho nacer este viaje en vuestro espíritu? El Venerable espera cualquier respuesta y, sin tenerla en cuenta, dice:

M# V#: Habéis debido encontrar en este viaje menos dificultades y desconciertos que en el primero; hemos querido hacer sensible a vuestro espíritu el efecto de la constancia cuando se sigue el camino de la virtud; cuanto más se avanza, más agradable resulta. Los choques de armas que habéis escuchado en su transcurso figuran los combates que el hombre virtuoso está obligado sin cesar a mantener para triunfar sobre los ataques del vicio. Habéis sido purificado por el agua; os quedan aún otras pruebas por sufrir, armaos de valor para soportarlas hasta el final. M# V#: H# Experto, haced efectuar el Tercer Viaje.

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Este Tercer Viaje debe hacerse a grandes pasos, con libertad, pero sin precipitación, casi como una marcha de paseo. Se seguirá 8 al Recipiendario sacudiendo a cierta distancia de él, una a ntorcha que pueda producir una gran llama. Se tendrá cuidado en que esta llama no pueda oc asionarle daño alguno. El Recipiendario regresa de nuevo hacia Occ idente. El Segundo Vigilante dice:

S# V#: Muy Venerable, el Tercer Viaje está hecho. M# V#: Señor, debéis haber notado que este viaje ha sido aún menos penoso que el anterior: las llamas por las cuales habéis pasado son el complemento de vuestra purificación. ¡Pueda el fuego material, en el cual habéis estado rodeado, encender por siempre en vuestro corazón el amor a vuestros semejantes! Que la caridad, presida vuestras palabras y vuestras acciones, y nunca olvidéis este precepto de una moralidad sublime, de una moral común a todas las naciones: no hagáis a los otros lo que no quisierais que se os hiciera a vos mismo. La constancia que acabáis de mostrar en estos tres viajes nos hace esperar que soportéis

[122]

igualmente las pruebas que tenéis aun que sufrir. ¿Persistís, Señor? Después de su respuesta

Señor, una de las virtudes cuya práctica nos es más querida, es la beneficencia. Los metales de los cuales se os ha despojado son el emblema de los vicios; ¿Podéis, sin molestaros, sacrificar en beneficio de los pobres a quienes asistimos diariamente, el dinero y el producto de las joyas que os pertenecen y que me han sido entregadas? Tened cuidado, Señor, pensad que una sociedad un poco numerosa, tiene, en este momento, los ojos fijados en vuestros pasos, y que están atentos a la respuesta que vais a darme: solicito un acto de caridad, tened cuidado de no hacer uno de ostentación. Nota: si el Recipiendario no muestra una dete rminación franca y prec isa el Venerable podría tratar de animarle con algo equivalente a lo que se añade a continuación:

[123]

Esta caridad que le recomiendo, deja de ser una virtud cuando se hace en perjuicio de deberes más sagrados y más importantes. Los compromisos civiles a cumplir, una familia para mantener, hijos que educar, padres poco favorecidos de fortuna que ayudar, he aquí los primeros deberes que la naturaleza nos impone, he aquí los acreedores de todo hombre que regula su conducta sobre los principios de la equidad. ¿Qué pensaríais de aquel que quiere parecer caritativo antes de haberlos satisfecho? He querido ilustrarle sobre las obligaciones comunes a todos los hombres. Vuelvo a la primera proposición que le hice: ¿Puede, sin lesionar alguno de estos deberes, sacrificar, en beneficio de los pobres que asistimos diariamente, todo o parte del dinero y del producto de las joyas que le pertenecen y que me han sido entregadas? Responded. Si el candidato no desea donar nada, será la Logia la que valorará si por otras consideraciones, merece ser recibido9. M# V#: Señor, vamos, en un momento, a exigir que prestéis una obligación que nos asegure vuestra discreción; esta obligación debe ser escrita por vos y firmada con vuestra sangre10. [124]

¿Lo consentís?11 … Hermano Cirujano, haced vuestro oficio. El Maestro de Ceremonias prepara todo para una sangría y cuando está puesto el torniquete y el Hermano Cirujano 12 procede a pinchar…

H# Exp#: Muy Venerable, ¡gracia para el Profano!13 M# V#: Señor, vuestra resignación nos basta en este momento; aprended con esta prueba que en todo momento y en todas las circunstancias, debéis socorrer a vuestros Hermanos y derramar, si es necesario, vuestra sangre por ellos. Hermano Maestro de Ceremonias, presentad al Profano el Cáliz de Amargura… Señor ingerid este brebaje hasta el final. Cuando lo ha bebido, el Maestro de Ceremonias advierte al Venerable, y éste dice:

M# V#: Señor, este brebaje, por su amargura, es el emblema de las penas inseparables de la vida humana: sólo la resignación a los decretos de la providencia puede suavizarlas. Hermano Experto, haced avanzar al Neófito al pie del altar, para prestar su obligación.

[125]

¡De pie, al Orden y espada en mano, todos vosotros Hermanos míos! El Hermano Maestro de Ceremonias conduce al H# Experto y al Recipiendario al altar 14, teniendo éste último al Hermano Experto a su derecha y al Hermano Maestro de Ceremonias a su izquierda y le hace poner la rodilla derecha sobre un cojín, sobre el cual está trazada una escuadra, la rodilla izquierda levantada; se le hace tomar con la mano izquierda un compás abierto. Apoya una de las puntas (que debe ser desafilado por miedo a un accidente) sobre la parte izquierda del pecho descubierto, se le hace tomar con la mano izquierda pone la mano derecha sobre la espada que está en posición horizontal y transversalme nte sobre el altar. El Venerable teniendo la mano izquierda sin guante extendida sobre el candid ato, le dice:

M# V#: Señor, el compromiso que vais a contraer no contiene nada que pueda perjudicar el respeto que todos le debemos a las leyes y las buenas costumbres, ni a nuestro compromiso y nuestra fidelidad al poder legítimo. Os prevengo que es terrible, pero es indispensable que lo prestéis de vuestra plena y libre voluntad. ¿Consentís?

[126]

El candidato debe decir sí con franqueza. Si se negara, sería necesario intentar convencerle por medio de la persuasión, y si perseverara obstin adamente sería necesario dejarlo salir. Si consie nte, el Venerable se descubre 15 y dice:

M# V#: Repita conmigo: OBLIGACIÓN Yo [nombre y apellidos]16 juro y prometo, sobre los Estatutos Generales de la Orden, y sobre esta espada símbolo del honor, ante el Gran Arquitecto del Universo, guardar inviolablemente todos los secretos que me serán confiados por esta Respetable Logia, así como todo lo que habré visto hacer o escuchado decir; nunca escribirlos, grabarlos, ni burilarlos, si no he recibido el permiso expreso, y de la manera que podrá serme indicada. Prometo amar a mis Hermanos, socorrerles según mis facultades; prometo además atenerme conforme a los Estatutos [127]

y Reglamentos de esta Respetable Logia. Consiento, si fuera perjuro, a tener la garganta cortada, el corazón y las entrañas arrancadas, el cuerpo quemado y reducido a cenizas, y mis cenizas lanzadas al viento y que mi memoria sea en maldecida a todos los Masones! ¡Que el G# A# D# U# me ayude!17 Después de unos instantes de silencio el Vener able se cubre y se pone de nuevo el guante.

M# V#: Reconducid al Neófito entre los dos Vigilantes. Hecho esto:

¿Señor, el juramento que acabáis de pronunciar no os causa ninguna inquietud? ¿Os sentís con el coraje de mantenerlo? ¿Consentís en reiterarlo cuando hayáis recibido la luz?

[128]

Después que el Neófito ha respondido sí, el V enerable dice:

M# V#: ¿Qué pedís? El Hermano Segundo Vigilante le dicta en tono bajo la respuesta que debe dar:

El Neófito: ¡La Luz! M# V#: Ella os será concedida. Todos vosotros Hermanos, cumplid con vuestro deber. M# V#

Al primer golpe de mallete, todos los Hermanos se giran hacia el Recipiendario. Al segundo, dirigen la punta de su espada, tomada por la mano derecha, hacia él. Al tercero, se hace caer la venda, que un Herm ano desata por detrás de él. En este momento se sacuden las antorchas 18 dos o tres veces a lo sumo. 19

[129]

Después de un momento de silencio para dar al Recipiendario el tiempo de apreciar los objetos que lo rodean, el Venerable dice:

M# V#: Las espadas dirigidas hacia vos os anuncian que todos los Masones volaran en vuestra ayuda, en todas las circunstancias, si respetáis la unión masónica, y si observáis escrupulosamente nuestras leyes, pero también os anuncian que sólo encontraréis entre nosotros a vengadores de la Masonería y la Virtud, y que estaremos siempre dispuestos a castigar al perjuro, si os volvéis culpable. Hermano Experto, aproximad al Neófito al Altar.20 Hermanos, bajad las espadas y permaneced al Orden.21 El Venerable se descubre y se quita ambos gua ntes. El Neófito, teniendo al Hermano Experto a su d erecha y al Hermano Maestro de Ceremonias a su izquierda es conducido por ellos al pie del altar; se arrodilla como la vez anterior, y repite su Obligación, durante la cual tiene una de las pu ntas del compás abierto sobre la parte izquierda de su pecho desnudo, la mano derecha sobre la espada. La mano izquierda del Venerable exte n-

[130]

dida sobre la del Candidato. Después de esta Obligación el Venerable da lig eramente tres golpes de mallete sobre la cabeza del compás diciendo:

M# V#: Aprended, por la justeza del compás a dirigir todos los movimientos de vuestro corazón hacia el bien. El Venerable retira la espada de debajo de la m ano del Recipiendario, y coloca la hoja sobre su cabeza, y pronuncia la fórmula de recepción en estos términos:

A la Gloria del Gran Arquitecto del Universo En el nombre de la Orden Bajo los auspicios de22 […] Con la ayuda de todos mis Hermanos ausentes y presentes. Y en Virtud de los poderes que me han sido conferidos por esta R# L# Yo os recibo y constituyo Aprendiz Francmasón

[131]

Al mismo tiempo, efectúa sobre la hoja de la e spada tres veces, tres pequeños golpes 23 con el mallete, siguiendo la batería ordinaria.

M# V#: Levantaos, Hermano mío, porque es así como os llamaremos de ahora en adelante, y recibid de mí el primer beso fraternal, por el número misterioso del tres. El Venerable se cubre y se pone de nuevo los guantes.

Volved a vuestros lugares, Hermanos. Hermano Preparador, conduzca afuera a nuestro nuevo Hermano a fin de que recupere su vestimenta.24 Cuando el Hermano ha vuelto a vestirse, el He rmano Preparador lo devuelve a la puerta del l ocal, en el cual es introducido según el rito.

M# V#: Hermano Maestro de Ceremonias, haced avanzar al Neófito hacia Oriente por los tres pasos del Aprendiz. Hermano Segundo Vigilante, muestre cual es la marcha del Aprendiz Mason.

[132]

Se le conduce al altar, a la derecha del Venerable por los tres pasos del Aprendiz. El S# V# le mostrará la marcha haciéndole subir simbólicamente los tres primeros escalones del Templo. Los pasos de Aprendiz son ejecutados a cont inuación llevando el pie derecho, como si se qu isiera dar un gran paso; a continuación se coloca el pie izquierdo por la parte media y detrás del talón derecho, de manera que su aproximación forme una doble escuadra. Esto se hace tres v eces 25. El Venerable le dice dándole el Mandil y los guantes:

M# V#: Hermano, este Mandil con el que estaréis siempre vestido en Logia, os recordara sin cesar la condena del hombre al trabajo, y que un Mason debe llevar una vida activa y laboriosa. Los guantes26, por su blancura, les advierten del candor que debe siempre reinar en el corazón de un hombre honrado y la pureza de nuestras acciones. He aquí finalmente vuestra espada. 27 M# V#: Para ser admitido en nuestras asambleas y participar en el vínculo que nos une sobre toda la tierra, es necesario que podáis hace-

[133]

ros reconocer. Voy a daros los Signos, Palabras y Toque, con los cuales nos reconocemos, y con la ayuda de los cuales seréis acogido por todos los Masones, en cualquier parte del mundo que os encontréis. El Signo del Aprendiz se hace llevando la mano derecha a la garganta, de modo que la laringe se encuentre entre el índice y el pulgar: se eleva el codo a la altura de la mano, lo que forma una línea horizontal; se retira a continuación la mano horizontalmente y se la deja caer perpendicularmente; por estos dos movimientos, uno horizontal y el otro perpendicular, da como resultado una escuadra. Este Signo nos recuerda el compromiso que todos hemos tomado de mejor tener la garganta cortada que revelar nuestros misterios. El Toque se hace tomándose mutuamente la mano, de modo que los cuatro dedos de cada uno estén en la palma de la mano del otro, se coloca el pulgar sobre la primera falange o nudillo del dedo índice de la otra, y se hace sentir por un movimiento invisible tres golpes con el pulgar, dos precipitados y uno lento. La Palabra Sagrada es J#.

[134]

Vez la primera letra sobre la columna de Septentrión. Cuando se os pida, responderéis: ―No debo leer ni escribir, solo puedo deletrear. Decidme la primera letra, y yo os diré la segunda‖. La palabra significa: ―Mi Fuerza está en Dios‖.28 La Palabra de Pase es T#. Es el nombre del primer obrero en metales. A continuación se da también la Palabra de Orden o Palabra Semestral, si es usada. El uso que haréis de ello entre nosotros, hará que veáis estas cosas familiares. Os enseñará que todo lo hacemos en escuadra, y que el número tres, es para nosotros un número misterioso29. El Venerable le da a continuación al Neófito el beso fraternal por tres. Luego, dice finalmente:

Hermano Maestro de Ceremonias, conducid al Hermano a Occidente para que aprenda a trabajar en la piedra bruta, y que se haga reconocer por los Hermanos Primer y Segundo Vigilantes dándoles las Palabras, Signo y Toque que acabo de comunicarle. [135]

El Hermano Maestro de Ceremonias conduce al Hermano hacia el Primer y Segundo Vigilantes, a los cuales les da las Palabras, Signo y Toque; posteriormente, el Segundo Vigilante le conduce ante el Cuadro Misterioso y le dar los tres golpes con el mazo, según la batería ordinaria, sobre la piedra bruta. El nuevo Hermano se mantiene entre los dos Vigilantes de pie y al Orden. Hecho esto.

S# V#: Hermano Primer Vigilante, el Neófito ha dado las palabras, signo y toque, y ha aprendido a trabajar sobre la piedra bruta. P# V#: Muy Venerable, el Neófito ha dado las palabras, signo y toque, y ha aprendido a trabajar sobre la piedra bruta. M# V#: De pie y al orden, Hermanos. Hermanos Primer y Segundo Vigilantes, invitad a los Hermanos de una y otra columna a reconocer de ahora en adelante al nuevo Hermano (nombre del nuevo Hermano), como Aprendiz Mason de esta Respetable Logia y a unirse a mí para aplaudir por su iniciación. P# V#: Hermano Segundo Vigilante, Hermanos que decoráis la Columna del Mediodía, el Venerable nos invita a reconocer de ahora en adelante al nuevo Hermano (nombre del nuevo Hermano) como Aprendiz Mason de esta [136]

Respetable Logia y a unirse a él para aplaudir por su iniciación. S# V#: Hermanos que decoráis la Columna del Norte, el Venerable nos invita a reconocer de ahora en adelante al nuevo Hermano (nombre del nuevo Hermano), como Aprendiz Mason de esta Respetable Logia y a unirse a él para aplaudir por su iniciación. M# V#: ¡Aplaudamos, Hermanos!30 Se hacen los aplausos de uso. El Maestro de Ceremonias solicita la palabra en nombre del recipienda rio. Le enseña a agradecer y para ello, se unen co njuntamente. El Venerable hace cubrir el aplauso.

M# V#: ¡Tomad asiento, Hermanos!31 Hecho esto.

M# V#: Tiene la palabra el Hermano Orador.

[137]

El Hermano Orador dirige al Hermano nuev amente iniciado algún fragmento de arquitectura cuyo sujeto debe ser algún punto relativo a la moral, sobre la unión fraternal, sobre la igua ldad, sobre los deberes del hombre, sobre el olv ido de las injurias o cualquier otro sujeto que él prefiera. Cuando la lectura ha terminado, el Venerable se procede a la instrucción del Grado durante la cual el H# Segundo Vigilante acompaña al H# r ecién iniciado cerca del Cuadro de Logia 32, y con la punta de su espada le indica las figuras que el Venerable irá explicando. Cuando la instrucción ha terminado, el H# Mae stro de Ceremonias conduce al H# recién iniciado a la cabeza de la columna del Norte, donde toma asiento sólo por esta vez 33. Los HH# deben colocarse en Logia sin otro rango que aquel que dan los grados. Finalmente si no hay ningún otro punto en los trabajos, el Venerable cierra la Logia siguiendo la fórmula indicada seguidamente para la Clausura.

Las condiciones de admisión que contempla el Régulateur de 1801 corresponden obviamente a la realidad social de su época, que sigue manteniendo ciertos tics de su pasado reciente. Es digno de remarcar, no obstante, algunas de las mismas: 1

[138]

Ningún Profano puede ser admitido antes de los veintiún años de edad; debe ser de condición libre y no servil, y maestro de su persona. Un doméstico sea el que sea, solo será admitido a título de Hermano sirviente. No debe recibirse ningún hombre de profesión vil o abyecta. Raramente se admitirá a un artesano, aunque sea maestro, sobre todo en los lugares donde las corporaciones y comunidades no estén establecidas. Nunca se admitirá a los obreros denominados «compagnons» en las artes y oficios. Actualmente se utiliza un polvo cuyo color simule al del azufre, dada su toxicidad y potencial peligro. Apuntamos al respecto la cantidad de notas del Régulateur que hacen referencia al cuidado que debe tenerse para evitar que el recipiendario sufra daño alguno. 2

Esta acción parece necesaria para poder explicar la continuidad de acontecimientos que el ritual expresa. No obstante resulta chocante que el Hermano Preparador no esté presente con el resto de miembros de la Logia en esta última muestra de aprobación para la recepción del candidato. 3

En el caso que no sea precisa la Unanimidad según los Reglamentos Generales de la Obediencia o Logia. 4

Estas preguntas son orientativas, y no parece necesario que sean realizadas en su totalidad. 5

6

Ritual de Referencia del GODF, Gran Experto (Régula-

teur: Experto) (Castelli: H# Terrible).

Ante este tratamiento el Régulateur de 1801, hace una nota en tanto que el Señor, comenta se cambie por Ciuda7

[139]

dano, tratamiento a partir de ese momento más correcto, ya que en ese intermedio entre que empezaron los debate del Régulateur y su edición había sucedido la Revolución Francesa. El Maestro de Ceremonias es quien suele realizar esta acción. 8

9

Consideración que aparece indicada en el texto del Régu-

lateur 1801.

El simulacro de la sangría, al igual que sucede con la ―escena del perjuro‖ en otros ritos, suscitó vivos e intensos debates en el seno de algunas Obediencias (el GOdF en particular) a lo largo del XIX, así como también entorno a distintos elementos rituales que pudieran suponer un atentado a la dignidad del ciudadano. Es por ello que posteriores derivaciones rituales lo eliminaron de su contenido o, sencillamente, quedara opcional y a discreción de cada Logia. 10

Esta pregunta no aparece formulada en el Régulateur. Ha sido introducida a posteriori en algunas prácticas rituales para minimizar el estado de tensión psicológica en el Recipiendario y para seguir con el procedimiento de consulta en todo lo trascendente que le afecta como Candidato. 11

Dadas las funciones de este Oficial, suele ser el Arquitecto-Preparador. 12

En el Régulateur de 1801 el grito escueto es ¡Gracia! y lo efectúa el H# Conducteur por lo que asumimos este rol para el Experto. 13

Parece que esta descripción de acompañamiento al altar por parte del Maestro de Ceremonias en el Régulateur omita la orden expresada previamente al Experto. Es por ello 14

[140]

que suponemos se lleva a cabo la misma disposición de los Oficiales que acompañaran al Recipiendario cuando repite su Obligación después de recibir la Luz. 15

Ver lo expresado en el punto 10.

16

Nombre completo del recipiendario.

En la actualidad, esta expresión queda aún presente en algunas Logias Ad Libitum. 17

Hay logias que utilizan en vez de las antorchas tal como ya apunta el Régulateur refiriéndose a unas antorchas especiales cuyo principio de combustión es similar, utilizar una pipa de Licopodio: Lycopodium clavatum es una especie de planta perteneciente a la familia Lycopodiaceae. Está ampliamente distribuido por todo el mundo. Crece en terrenos silíceos, matorrales y bosques de coníferas. Es una planta perenne, rastrera con un tallo corredor con numerosas ramas ascendentes o divididas. De las ramas fértiles sale un pedúnculo terminal con dos o tres espigas florales cubiertas de brácteas ovales amarillentas, que en sus axilas tienen los esporangios amarillos y resinosos. Las esporas se han utilizado durante muchos años en la fabricación de cohetes y petardos, ya que al ponerlas al fuego producen deflagración. 18

19

Luz iniciática.

...a fin de que reitere su juramento. Complemento que aparece en algunos rituales. 20

Esta Orden no aparece en el Régulateur ni en las formas basadas en los manuscritos de 1783, si bien es de aplicación generalizada en diversos rituales actuales. La otra opción posible consistiría en permanecer con las espadas apuntan21

[141]

do hasta el final de la Constitución como Aprendiz. Sea como fuere debe completarse la acción de esta laguna descriptiva en el ritual. En el caso de Ritual de Referencia del Rito Francés del GODF, primero se ordena los Hermanos volverá sus puestos o plazas, y colocarse al Orden, y luego se ordena al Gran Experto, conducir al Recipiendario al Oriente para recibir la consagración masónica Esta referencia a los auspicios no está en la publicación del 1801, aunque es de común uso en todas las estructuras obedienciales por razones obvias. 22

El Nouveau Régulateur de Castelli, tan solo indica los 3 golpes de la batería de grado. Conviene remarcar que esta utilización de la espada con reminiscencias caballerescas no era de uso común en todas las prácticas del XVIIIen las que generalmente se efectuaban tan solo los 3 golpes sobre la cabeza del compás en el momento de la recepción propiamente dicha, tras prestar la obligación correspondiente a este Grado. 23

El Régulateur sugiere que durante este tiempo, el Venerable puede aprovechar para proponer algunas cuestiones del Catecismo. 24

Estos pasos representan los tres escalones que el Aprendiz Mason debe subir sobre la escalera de siete escalones que conduce a la puerta del Templo. 25

En el Régulateur de 1801, y actualmente en la Masonería que no admite la Iniciación femenina, se hace entrega acto seguido de unos guantes para la mujer estimada. El texto se expresaba así al respecto: «No admitimos a mujeres en nuestros misterios, pero rindiendo homenaje a sus virtudes, deseamos recordar su recuerdo en nuestros trabajos: he 26

[142]

aquí, querido Hermano, unos guantes que daréis a la mujer que más estiméis». La devolución de la espada, omitida en el texto de 1801, parece lógica —así como la devolución de sus joyas—, dado que le ha sido requerida al comienzo de la recepción. Las Logias que no utilizan el porte «real» de la espada hacen una entrega simbólica de la misma, o simplemente lo omiten. En ocasiones se apunta que la presencia y el porte de la espada en Logia sea una tradición heredada de las antiguas Logias Militares. Sin embargo, existe otra argumentación que a continuación exponemos y que encontramos referido en alguna divulgación, como la del Sceau Rompu de 1745: «todo Masón en Logia es gentilhombre: deponemos entrando su condición de plebe, como dejamos sus títulos en la puerta con el fin de estar todos al mismo nivel». Una explicación se hace necesaria sobre el término gentilhombre: en inglés, gentilhombre quiere decir «persona elevada, de buena compañía». Los masones ingleses se reclutaban evidentemente sólo entre los gentilhombres. Cuando la francmasonería atravesó la Mancha, tradujimos —correctamente—gentle por gentil y men por hombres, lo que dio «gentilhombres». Pero un gentilhombre, en francés, no quería decir la misma cosa que en inglés, esto significaba «de familia noble» (como el inglés nobleman): el diccionario de la Academia da para definición «noble de raza». ¿Es por esto que todos los masones se hicieron unos «burgueses gentilhombres»? 27

Esta razón parece haber empujado en todo caso a los masones franceses, a considerarse totalmente como «gentilhombres», y a practicar la «nivelación por lo alto» (desde el punto de vista de la escala social) otorgándose mutuamente [143]

una nobleza ficticia: mientras que, en la vida social del Antiguo Régimen, el porte de la espada estaba reservado para los aristócratas, los masones franceses del siglo XVIII convinieron, que para marcar mejor la igualdad que predicaban había que lograr que todos los masones, cualquiera que fuera su origen social, pudieran llevar la espada en Logia (es el origen de nuestro talabarte/cordón o banda decoración desconocida, salvo error, en la masonería inglesa). Como escribe Daniel Ligou al respecto, este cordón azul — bordeado en rojo en el REAA— en otro tiempo herencia de las personas nobles, se hizo desde entonces distintivo «de los Maestros Masones, personas nobles por el corazón y espíritu». Hay que decir que recíprocamente («nivelación por lo bajo» siempre desde el punto de vista de la escala social), todos llevan el mandil, símbolo del trabajo manual que en la época estaba prohibido entre la aristocracia. Podemos pues decir simbólicamente que todo masón, ya sea aristócrata o plebeyo, es a la vez en Logia un gentilhombre que lleva la espada y un trabajador que lleva el mandil, cosas absolutamente incompatibles en el XVIII. Vemos pues el porqué de la presencia del porte de la espada en Logia, que a pesar del reparo que a veces suscita, no está privada de un valor simbólico. Y he aquí también por qué el porte del cordón sin el mandil, que todavía se practica en algunas Logias, puede ser considerado una verdadera herejía desde el punto de vista simbólico y, visto desde el mismo ángulo, la señal de una pretensión rara: es decir, como en el Antiguo Régimen, «soy noble, pues no trabajo». Llama la atención esta significación que solo se recoge en algunos catecismos y divulgaciones del siglo XVIII que de28

[144]

nominan a Jakin como la palabra del Aprendiz, y sus formulaciones escritas han sido muy diversas «Jakin; Jachim, Jakhin, Iakin» y su significación es «Él erigirá o él establecerá» y viene del verbo hebreo «koun» y se aleja bastante de esa significación que se le da en el Rito Francés. Suele explicarse también la actual acepción general en RF como Estabilidad, Firmeza. Parece un lugar de la ceremonia apropiado para devolver los metales del profano. 29

30

Por la triple batería, y el triple Vivat: ¡Vivat! ¡Vivat!

¡Semper Vivat!

Seguidamente, Castelli nos introduce esta variante ritual distinta que aparece también en uso de algunas Obediencias, coincidente también en lo referente a la ubicación futura del nuevo iniciado. 31

Hermano Maestro de Ceremonias, conducid al Hermano (nombre del Neófito) delante del Hermano Secretario para que firme el compromiso que ha prestado. Le conduciréis a continuación a la cabeza de la columna de Septentrión, solamente por esta vez, siendo su lugar en lo sucesivo cerca del Segundo Vigilante encargado de su instrucción. Ambos se colocaran al Occidente para permitir la perfecta visión de los citados oficiales y el recién iniciado. 32

33

Al respecto, ver también lo expuesto en el punto 62.

[145]

[146]

PROPOSICIONES Y CIRCULACIÓN DEL TRONCO M# V#: P# V#: S# V#: M# V#: Hermanos Primer y Segundo Vigilantes, preguntad a los Hermanos de una y otra columna si no tienen nada que proponer para Bien General de la Orden, o de esta Respetable Logia en Particular. P# V#: Hermano Segundo Vigilante, Hermanos que decoráis la columna de Mediodía, ¿tenéis alguna proposición para en Bien General de la Orden, o de esta Respetable Logia en Particular? S# V#: Hermanos que decoráis la columna de Septentrión, ¿tenéis alguna proposición para en Bien General de la Orden, o de esta Respetable Logia en Particular?

[147]

Si hay proposiciones, se discuten o si son dem asiado importantes, se remiten a siguiente asa mblea. Cuando ya nadie pide la palabra.

S# V#: Hermano Primer Vigilante, todo ha terminado en mi columna. P# V#: Muy Venerable, todo ha terminado en ambas columnas. Si algún Hermano ubicado en el Oriente quiere hablar, pide la palabra al Venerable, quien se la concede Cuando ya nadie más pide la palabra.

M# V#: Puesto que todo ha acabado en las dos columnas y en el Oriente, voy hacer circular la Caja de Limosnas1. M# V#: Hermano Limosnero, efectuad vuestro oficio.

[148]

El Hermano Limosnero hace circular el Tronco presentándolo en primer lugar al Venerable, de spués al Hermano Primer Vigilante, después al Segundo Vigilante, y finalmente al resto de los Hermanos. La caja de limosnas ( Tronco de la Viuda) se deposita en el altar del Venerable que da cuenta del contenido de la caja de limosnas (Tronco de la Viuda).

M# V#: La caja de limosnas será contada después de la asamblea y se me dará cuenta de ello. Hermano Orador, tened a bien resumir los trabajos de este día y dadnos vuestras conclusiones sobre éstos. El Hermano Orador da sus conclusiones. Si las conclusiones fueran desfavorables en cua nto a la clausura de los trabajos , será necesario discutirlo inmediatamente y continuarlos, de modo que puedan concluir en armonía. Post eriormente y únicamente si hay la recepción de un nuevo Hermano, marca la tradición que se efe ctué la Cadena de Unión antes del ágape de la t enida.

M# V#: Hermanos, antes de cerrar los trabajos, formemos la Cadena de Unión.

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El Venerable desciende de Oriente y se sitúa e ntre el altar y el Cuadro de Logia. Al mismo tiempo, todos los Hermanos vienen a colocarse alrededor del Cuadro en el orden que ocupan en sus columnas o en Oriente, excepto el iniciado. Los Hermanos se quitan los guantes y el Vener able se descubre, formando la cadena con los br azos cruzados, el derecho sobre el izquierdo, y los pies en escuadra. El Segundo Vigilante interviene entonces para advertirle al Venerable que falta un hermano en la cadena 2. En este instante el nuevo eslabón se añade a la Cadena de Unión. Después de unos momentos de recogimiento el Venerable podrá dirigir algunas palabras y dar paso a otro momento de recogimiento 3.

M# V#: ¡Volved a vuestros lugares, Hermanos! A la señal del Venerable los HH# balancean sus brazos cruzados por tres veces y vuelven a sus asientos. Simbólicamente, la Cadena no se rompe 4. El Venerable se cubre, y los Hermanos se ponen de pie y al Orden.

[150]

M# V#: P# V#: S# V#: M# V#: Hermanos, espada en mano, vamos a proceder al cierre de los trabajos. Hermano Primer Vigilante, ¿qué edad tenéis en calidad de Aprendiz Mason? P# V#:

Tres años, Muy Venerable.

M# V#: ¿A qué hora los Masones acostumbran a cerrar sus trabajos? P# V#:

A Medianoche, Muy Venerable.

M# V#: ¿Qué hora es, Hermano Segundo Vigilante? S# V#:

Es Medianoche, Muy Venerable.

El Venerable se descubre…

M# V#: Puesto que es medianoche y que es la hora a la cual los Masones acostumbran cerrar sus trabajos, Hermanos Primer y Segundo Vigilantes, invitad a los Hermanos de una y la otra columna a que se unan a mí para cerrar los trabajos de Aprendiz de esta Respetable Logia (nombre y número de la logia) al Oriente de (P# G# de la Logia).

[151]

P# V#:

Hermano Segundo Vigilante, Hermanos que decoráis la columna del Mediodía, el Venerable nos invita a unirnos a él para cerrar los trabajos de Aprendiz de esta Respetable Logia (nombre de la logia) al Oriente de (P# G# de la Logia).

S# V#:

Hermanos que decoráis la columna del Norte, el Venerable nos invita a unirnos a él para cerrar los trabajos de Aprendiz de esta Respetable Logia (nombre de la logia) al Oriente de (P# G# de la Logia).

M# V#: P# V#: S# V#: M# V#: A mí, Hermanos míos, por el signo, la triple batería del grado y la aclamación. La aclamación es el triple Vivat 5. Hecho esto, el Venerable se cubre y los Hermanos dejan de estar al Orden.

M# V#:

Hermanos, los trabajos están cerrados.

P# V#:

Hermanos, los trabajos están cerrados.

S# V#:

Hermanos, los trabajos están cerrados.

M# V#: ¡Retirémonos en paz!

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Cada uno se quita sus adornos y se retira en s ilencio. Si la entrada en Logia se hizo con y solemnidad, el Maestro de Ceremonias va en busca del Venerable y los Hermanos se retiran en el orden i nverso de su entrada en Logia. El Hermano Arquitecto procede al apagado de las Luces y al arreglo de la Logia con los HH# AA#.

Recordemos que el Saco de Proposiciones sólo circula para recoger los informes de encuesta de los Hermanos Comisarios o Aplomadores. Esta entrega secreta, se lleva a cabo siguiendo el modo descrito en el Régulateur: «El H# Maestro de Ceremonias por orden del Venerable hará pasar al Oriente y en ambas columnas un saco denominado ―Saco de Proposiciones‖: lo presentará a todos los Hermanos sucesivamente, donde cada uno pondrá su mano como si quisiera introducir algo sin que sea visto; por este medio los Hermanos nombrados Comisarios en la asamblea precedente, tendrán la facilidad de poner su informe escrito sin que nadie pueda apercibirse de ello». (Pág. 10 del texto de 1801). 1

Hemos introducido esta interesante forma de incorporación del nuevo iniciado. Aunque no está explicitada en el Régulateur de 1801, se encuentra muy extendida su uso. 2

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Para honrar la memoria de un H# recientemente pasado al O# E#, el Venerable evocará su memoria durante la Cadena de Unión independientemente de la pompa fúnebre que pueda ser celebrada en otro lugar. Recordemos que la ―Batería de duelo‖ no figura en el texto original de 1801. 3

Es por ello que en muchas Logias no se efectúa el citado balanceo de brazos, sino que se sueltan las manos con la mayor suavidad y lentitud. 4

El GODF para restarle la referencia religiosa realiza la aclamación Libertad, Igualdad, Fraternidad. 5

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NOTAS

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Este Ritual del Rito Francés Moderno, traducido y revisado por el Círculo de Estudios del Rito Francés Roëttiers de Montaleau terminó de elaborarse en letra de composición masónica de fuente Acacia 3 el 21 de diciembre de 6009 (V# L#), día del solsticio de invierno

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