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Guerra y violencia en la Edad Media Ed. a cargo de Iñaki BAZÁN

(Guerre et violence viol ence dans le Moyen Âge  War and violence in the Middle Ages Gerra eta indarkeria Erdi Aroan)

lio & C rimen rimen C lio

nº 5 (2008) (2008),, pp. pp. 14/277 14/277

ISSN: ISSN: 1698-4374 1698-4374 D.L.: BI-1741-04

La Guerra de los Cien Años:  primer conflicto global en el espacio europeo eu ropeo (La Guerre de Cent Ans: premier conflit global dans l’espace européen The Hundred Years’War: the first global conflict in Europe   Ehun Urteko Gerra: Gerra: lehenengo gatazka gatazka globala Europako Europako eremuan)

Emilio MITRE FERNÁNDEZ Universidad Complutense de Madrid

nº 6 (2009 (2009), ), pp. pp. 15-35 15-35 Artículo recibido: 11-XII-2008 Artículo aceptado: 27-I-2009 1337 y c.c. 1453 se vive vive una situación conflictiva bélica que que los historiadores historiadores occidentales conocemos como como Resumen:  Entre c. 1337 Guerra de los Cien Años. El protagonismo será esencialmente anglo-francés aunque sus dimensiones, con frecuencia, sean auténticamente europeas y afecten, en mayor o menor grado, a todas las categorías sociales. Palabras clave: Guerra. Occidente bajomedieval.

Résumé: Les historiens occidentaux appelons Guerre de Cent Ans la situation conflictuel entre c. 1337 et c. 1453. Les par-

ticipants principaux de ce phénomène bellique sont les royaumes de France France et d`Angleterre mais ses dimensions sont, souvent, vraiment  européennes et affectent aux diverses degrés de l´ échelle sociale. Mots clés: Guerre. Occident au Bas Moyen Age.

Abstract: Between c. 1337 and c. 1453 a series of conflicts took place that the historians know k now as The Hundred Year’s Year’s war. war.

The main participants of this war were essentially England and France France although its dimensions were were many times European and affected all the social categories in smaller or greater degree. Key words: War. Occident in Latte Middle Ages.

gerra-egoera gatazkatsua bizi zen, mendebaldeko historialariek Ehun Urteko Gerra izeLaburpena: 1337tik 1453ra bitarte gerra-egoera narekin ezagutzen duguna. Protagonismoa batez ere anglo-frantsesa izan zen, baina sarritan, Europa osoa hartu zuen, eta eragina izan zuen, maila handiago edo txikiagoan, gizarte-maila guztietan. Giltza-hitzak: Gerra. Mendebaldeko Behe Erdi Aroa.

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La Guerra de los Cien Años:  primer conflicto global en e l espacio europeo

Emilio Mitre Fernández

A

lgunos profesores nos hemos declarado amortizados para la docencia oficial activa activa anticipándonos anticipándonos a la guadaña de la Administraci Administración. ón. No debemos, sin embargo, considerar que lo estamos para esas reflexiones reflexiones a las que nos obliga nuestra irrenunciable irrenunciable condición de historiadores. historiadores. La mayor mayor disposición de tiempo permite,además, mite, además, un ejercicio ejercicio más calmado de esa actividad. actividad. Hoy me encuentro encuentro aquí por  anteponer esa circunstancia y la amistad que me une a los organizadores de este coloquio a cualquier otro tipo de consideraciones. Meditar sobre un fenómeno tan común y universal universal como la guerra, arrastra inevitablemente a comparaciones en las que es fácil incurrir en cierta deformación profesional. profesional. Después de elaborar y reelaborar el texto de esta intervención me he preguntado preguntado si, aparte del rótulo que oficialmente oficialmente figura (y del que me hago plenamente responsable) podía darse también otro. otro. Por ejemplo: Guerras de ayer y de hoy: trate de una cuestión menor, menor, no está de más la de los Cien Años y nosotros. Aunque se trate advertirlo de entrada.

1. Unas precisiones para la delimitación del campo de estudio Una conocida invocación al Altísimo en el alto Medievo y con la que se deseaba exorcizar exorcizar las incursiones vikingas decía: «¡Líbranos, «¡Líbranos, Señor, Señor, de la ira de los hombres del Norte!». Norte!». Otra inv invocación muy común a toda la Edad Media rezaba rezaba:: «¡Líbranos, «¡Líbranos, Señor, Señor, del hambre hambre,, la peste peste y la guerra!». guerra!». Según épocas, épocas, una u otra de estas tres calamidades ha sido causante causante en mayor  mayor  grado de desencadenar desencadenar el cuarto cuarto jinete del Apocalipsis: Apocalipsis: la muerte. muerte. En términos de sociedad europea se admite con escasas reservas que las mayores responsables de la mortalidad en siglos pasados fueron las enfermedades y el hambre.A alejar estos dos fantasmas contribuyer contr ibuyeron on en el siglo XIX las mejoras en los campos de la higiene, la medicina o la productividad de la tierra. También ayudaron esos países “nuevos” “nuevos” que fueron fueron un buen aliviader aliviaderoo para el exceso de población del viejo viejo continente. continente. Sin embargo, embargo, quedaba en pie el el otro otro fantasma: fantasma: la guerra guerra1. El perfeccionamie perfeccionamiento nto de las técnicas bélicas y una potente industrialización al servicio de una colosal política armamentista, armamentista, han hecho de la guerra en el último siglo siglo y pico la principal causa causa directa o indirecta de mortalidad en Occidente. Lo que fue ese cambio que hizo de los conflictos bélicos algo tan encarnizado y prolongado prolongado lo reflejó el difícilmente clasificable Louis Ferdinand Ferdinand Céline, con un tono entre lo macabro y lo surrealista, en su Trilogía de las Crónicas . Dos médicos médicos higienistas reflexionaban al hilo de los postreros acontecimientos de una Segunda Guerra Mundial que parecía parecía no tener fin: fin: una guerra como esta, dicen, en tiempos de Durer Dureroo se habría acabado en pocos meses meses ya que los virus habrían disuelto los ejércitos. ejércitos. Lo vacunado demasiado, demasiado, esta guerra no acabará nunca»2. que sucede, sucede, proseguía proseguían, n, es que «hemos vacunado Algunas observaciones sobre sobre estos temas las recogimos recogimos en MITRE, Emilio: Fantasmas de la sociedad  Universidadd de Vallad Valladolid, olid, 2004. Especialme Especialmente nte pp. pp. 166-171. 166-171. medieva medieval. l. Enfermedad, Enfermedad, peste, peste, muerte  muerte , Universida 2 ,Aguilar, Cf. Cf. la biografía de este peculiar autor escrita por BARDECHE. M: Louis Ferdinand Céline ,Aguilar, Madrid, Madrid, 1990, 1990, pp. pp. 396-39 396-397. 7. 1

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nº 6 (2009) (2009),, pp. pp. 16/35 16/35

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En la visión de Céline la guerra se convertía, convertía, en consecuencia, consecuencia, en la auténtica reguladora malthusiana malthusiana de la demografía europea; europea; papel que durante siglos habían desdesempeñado de manera contundente hambrunas y epidemias. Ni ahora ni nunca el estudio de la guerra puede reducirse por el historiador a mera quintaesencia quintaesencia de la llamada llamada historia batalla, historia acontecime acontecimentista ntista,, historia historizante tan denostada hace poco más de una generación.Y no sólo porque la guerra sea, según el muy citado citado aforismo de Clausewitz, Clausewitz, la continuación continuación de la política por otros medios.También porque la guerra es el fenómeno social más importante que han conocido conocido los tiempos. De su trascendencia trascendencia hablaron hablaron ya, ya, en momentos en que la estima por su estudio estudio estaba a la baja, baja, dos autores autores franceses: franceses: el sociólosociólo3 4 go Gaston Bouthoul  y el historiador historiador F. F. Braudel .Afortunadamente el estudio de la(s) guerra(s) ocupa hoy en día –y con una relevante relevante presencia de autores españoles5- un lugar preferente en las inquietudes del historiador que las viene abordando (¿capital el llamado fenómeno A. Beevor? Beevor?6) desde muy variadas perspectivas. perspectivas.Algo Algo que hace de ella un proceso que afecta afecta al conjunto de toda sociedad, no sólo a esa minoría de profesionale profesionaless que han diseñado las estrategias, estrategias, han dirigido los combates combates o han participado en ellos. La Baja Edad Media –época de crisis en la versión más aceptada 7- se ha considerado como un «siglo de la Guerra» en razón de la multitud de conflictos que asolaron el espacio europeo de Occidente a Oriente. Si en éste es el peligro turco quien representa esta figura, en Occidente es la Guerra de los Cien Años Años su mejor expresión. Siempre Siempre cabría cabría preguntarse preguntarse,, sin embargo, embargo, ¿ha habido acaso acaso algún siglo que no no haya sido «de la guerra»? Guerra de los Cien Años es una expresión académica cuyo origen y desarrollo d esarrollo ha sido rastreado rastreado por distintos autores autores como P. P. Contamine, Contamine, una de las grandes autori8 dades en la materia . Un conflicto conflicto que, ciñéndonos ciñéndonos a criterios muy simplificador simplificadores, es, BOUTHOUL BOUTHOUL,, Gastón, Gastón, padre padre de una rama especial de la sociología sociología conocida como polemología polemología,, dejó un excelente resumen con algunas reflexiones en La guerra, Oikos-ta Oikos-tau, u, Barcelona, Barcelona, 1971 (publi(publicado originalmente en la col. Que sais je? ). 4 BRAUDEL, BRAUDEL, Fernand en el segundo volumen de su celebrada monografía El Mediterráneo y el mundo (F.C.E., Mexico, 1976; versión española española del texto francés de 1966 mediterráneo en la época de Felipe II (F.C.E., que corregía y aumentaba el de 1949) nos legó interesantes lucubraciones al respecto. 5 ejemplo, la panorámica panorámica de GARCIA GARCIA FITZ, Francisco: Francisco: La Edad Cf. Cf., a título de ejemplo, Edad Media Media.. Guerra Guerra e ideo ideo Sílex, Madrid, Madrid, 2003. 2003. Con refe referen rencia cia fundament fundamentalme almente nte a la logía. logía. Justificaciones Justificaciones religiosas religiosas y jurídicas jurídicas, Sílex, Península Ibérica, vid. MITRE, MITRE, Emilio y ALVIRA, ALVIRA, Martín: Martín: «Ideología «Ideología y guerra guerra en los reinos de la España medieval», Recursos militares (2001), (2001), pp. pp. 291-334 (volumen (volumen especial especial de la Revista de Historia ). Militar ). 6 Este autor británico, famoso por sus difundidos trabajos sobre sobre acontecimentos militares de la Segunda Guerra Mundial, ha prologado la última edición de la conocida obra del medievalista, medievalista, también británico, nico, RUNCIMAN, UNCIMAN, Steven: Steven: The Fall of Constantinople 1453, Cambrid Cambridge ge Univ. Univ. Press, Press, 1965 1965 (primera (primera edición edición en castellano castellano en col.Austr col. Austral, al, Madrid, 1973). 1973). 7 Entre los mas llamativos llamativos trabajos en torno al tema ha destacado en los últimos años el de BOIS, Guy: .U.F.,., Paris, 2000. La grande dépression dépression médiévale. médiévale. XIV et XV siècles. siècles. Le précédent d´une crise systemique , P.U.F 8 CONTAMINE, CONTAMINE, Philippe: La Guerre de Cent Ans, P.U.F .U.F.,., col. Que sais-je?, sais-je?, Paris, 1968, pp. pp. 5-6 (obje(objeto de distintas reedic reediciones iones). ). El conflicto ha dado pie a numerosas numerosas síntesis. síntesis. Entre Entre las de más fuerte impacto se encuentra: encuentra: PERROY PERROY, Edouard: Edouard: La Guerra de los Cien Años, Akal Akal,, Madr Madriid, 1982 1982.. Una Una 3

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nº 6 (2009) (2009),, pp. pp. 17/35 17/35

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tiene una constante dinástica y mucho de protagonismo francés y de antagonismo inglés. inglés. Francia es, en efecto efecto,, el principal campo campo de batalla en donde tiene tiene lugar lugar la disputa por su trono entre dos linajes lina jes reales: los Capeto y su rama ram a menor los Valois 9  y los Plantagenet y su rama menor los Lancaster  L ancaster . De acuerdo acuerdo también con con esa clásica visión, visión, el conflicto conflicto habría tenido un inicio inicio y un final: 1337 y 1453 parecen parecen ser  las fechas más ajustadas. Con ellas vamos a jugar de aquí en adelante. adelante. Ahora bien, ¿hasta dónde la cifra cien es adecuada o estamos ante una mera conconcesión a la retórica? Pensemos que la expresión Guerra de los Cien Años se aplicará a otro dilatado dilatado conflicto: conflicto: la «otra guerra de los Cien Años» entre angevinos y aragoneses en el sur de Italia entre 1282 (Vísperas Sicilianas) 10  y 1442 (entrada (entra da en Nápoles de Alfonso V de d e Aragón). Los historiadores, como los estudiosos de otras parcelas parcelas del saber,acostumbramos saber, acostumbramos a sujetarnos a ciertas conve convencione nciones. s. A fin de entendernos y para dar articulación articulación a nuestro campo de trabajo hemos ido forjando todo un utillaje conceptual y terminológico. Corremos lógicamente lógicamen te el riesgo de que los aguafiestas de turno vengan a ponernos esa nota a pie de página entre lo culto y lo pedante cuestionando la idoneidad de alguna de esas construcciones. Cien es, desde luego, luego, una cifra demasiado demasiado tentadora y convenc convencional ional como un millón para referirse a víctimas de un conflicto bélico o de una epidemia.Haciendo uso de una tosca paráfrasis podríamos decir que no hay guerra que cien años dure11. F. Braudel, Braudel, que no era un medieval medievalista ista pero pero sí un autor con reconocido reconocido sentido de la gran perspectiva perspectiva histórica, advirtió que más que ante una guerra en singular singular nos encontraríamos ante una conflictividad conflictividad bélica difusa que dura más de un siglo12.Será toda una cadena de conflictos con interrupciones harto frecuentes y prolongadas. obra que el autor redactó entre 1943-1944 «gracias a los precarios ratos de esparcimiento que dejaba al autor  cercanos a nuestros nuestros días son, por ejemplo: ejemplo: SEWARD SEWARD,, su juego del escondite con la Gestapo» , p. 5. Más cercanos Desmond: The Hundred years War: The English in France Consta tabl blee, Lond London on,, 1978 1978;; France,, 1337-145 1337-1453 3, Cons FAVIER, FAVIER, Jean: La Guerre de Cent Ans. Marabout, ut, Paris, Paris, 1980; 1980; ALLMAN ALLMAND D, Christop Christopher: her: Ans. 1337-1453 1337-1453, Marabo Cambridge ge Univ Univ. Press, Press, 1988; 1988; SUMPSUMPThe Hundred War. ar. England and France at War War.. C. 1300- c 1450 , Cambrid TION, TION, Jonatan: Jonatan: The Hundred Faber, London, London, 1990; MITRE, MITRE, Emilio: Emilio: La Guerra de  Hundr ed Years Years War  War . Faber and Faber, Bibliot liotec ecaa Histo Historia ria 16, Madri Madrid, d, 1990 1990;; NEIL NEILLA LAND NDSS, Robi Robin: n: The Hundred Years, los Cien Años , Bib Routledge and Kegan Paul, London 1991;REID 1991; REID,, Peter: Medieval Warfare:Triumph Warfare:Triumph and domination in War  War  Carrollll and Graf Publi Publish shers ers,, New New York, ork, 2007 2007;; MINO MINOIS IS,, G.: La Guerre de Cent  of the Middle Ages, Carro errin, Paris Paris,, 2008 2008..  Ans:Naissance de deux nations , Perrin, 9 FOWLER, FOWLER, Keneth: Le siècle des Plantagenets et des Valois. 1328-1498, Paris, alois. La lutte pour la suprematie. 1328-1498, 1968. 1968. De este mismo mismo autor como editor editor vid. The Hundred Years Millan an,, Lond London on,, 1971 1971.. Years War  War , Mc Mill 10 Para este trascendental hecho y sus precedentes sigue siendo de gran utilidad la lectura de un clásico de la historia política en el que la guerra tiene un destacadísimo destacadísimo papel: papel: RUNCIMAN, UNCIMAN, Steven: Steven: Revistaa de Occidente Occidente,, Vísperas Vísperas sicilianas sicilianas.. Una historia del mundo mediterráneo a finales del siglo XIII , Revist Madrid, 1961 (edición (edición original de 1958). 11 No merece la pena detenernos en esos otros lugares comunes, comunes, explotados explotados por personas ajenas al mundo de la Historia pero con importantes responsabilidades públicas, que insisten en el milenario enfrentamiento del país propio con su agresiv ag resivoo vecino a quienes se convierte en culpable de todas las desgracias reales o imaginadas. Se trata por lo general de afirmaciones para consumo interno de clientelas ya previamente convencidas. convencidas. 12 BRAUDEL, BRAUDEL, Fernand: L´identité de la France (II) Les hommes et les choses , Flamma Flammarion,Paris, rion,Paris, 1986, 1986, pp. pp. 141-145. lio & C rimen rimen C lio

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Caso de seguir reduciendo esa conflictividad conflictividad a una dimensión anglofrancesa, ésta habría conocido dos grandes fases de marcado paralelismo paralelismo.. Ambas se inician con rotundos rotundos éxitos militare militaress ingleses en territorio territor io francés. En la primera pr imera13 serían Crecy en 1346 o Poitiers en 1356 14. En la segunda serían Azincourt Azincourt en 141515 o Verneuil en 1424.Y las dos fases derivarían en metódicas reaccionas francesas que culminan a mediados del siglo XV con la victoria final y la expulsión del enemigo secular de su territorio16. La presencia presencia inglesa en la base de Calais Calais hasta 1558 no sería ya ya más que una anécdota. Estas dos fases están separadas por un dilatado periodo de distensión no carente de perturbaciones: perturbaciones: las llamadas llamadas «grandes treguas» de circa 1388 a circa 141517. Estam Estamos os ante la mejor expresión expresión del hecho más característico característico de ese conflicto: la suma de años de suspensión de hostilidades es superior a la de enfrentamiento abierto entre contendiente contendientes. s. La Guerra de los Cien Años Años se vive vive con frecuencia frecuencia bajo el signo de la tregua. tregua. Una expresión expresión que toma, toma, secularizándole secularizándole,, un viejo viejo concepto concepto mediev medieval: al: el de treuga o tregua (de Dios) en torno al Año Mil. Se trató de un fenómeno promovido por el estamento eclesiástico y sobre cuya incidencia social se ha especulado ampliamente en los últimos tiempos 18. En cualquier cualquier caso fue un meritorio intento intento de suavizar en ciertas zonas la violencia estructural impuesta en el Occidente por  una bronca casta feudal19. Una tregua es una convención convención marcada por la bilateralidad; a veces multilateralimultilateralidad dados los sistemas de alianza alianza existentes. existentes. No suele mantenerse mantenerse sin sobresaltos y no es lo mismo que la paz, ya que supone una suspensión de hostilidades hostilidades por un tiempo concreto. concreto. Sin embargo, embargo, si tienen un carácter general que implica a todos los Desde la óptica inglesa, y dado lo dilatado de su reinado, reinado, se ha identificado esta etapa con el nombre de su monarc monarca: a: BOTHWEL BOTHWELL, L, J.S. J.S. (ed): The Age of Edward III ,York ,York Medieval Press, 2001. 14 Una curiosa referencia a este encuentro, encuentro, en paralelo con otro librado por Carlos Martel contra los musulmanes musulmanes en 732 en ese mismo mismo campo campo de batalla, en CARPENTIER, CARPENTIER, E.: Les batailles de Poitiers. Geste,, La Crèche Crèche,, 2000, 2000, pp. pp. 21-29. 21-29. Charles Martel et les Arabes, Geste 15 Batalla que ha sido objeto de diversos diversos estudios como los de CONTAMINE, CONTAMINE, Philippe:  Azincourt , Gallimard, Paris, 1964. El paralelismo entre entre las dos fases de la guerra ha permitido a este autor autor hacer otro otro entre dos dos de sus más singulares singulares batallas: «Crecy (1346) et Azincourt (1415): une comparaison», comparaison», en Divers Congrés tenu à Calais en septembre 1974), Calais ,1977, pp. aspects du Moyen Age en Occident (Actes du Congrés 29-44. 16 La segunda fase dio pie a una obra de síntesis de CALMETTE,Joseph bajo el título de Chute Chute et et relè relè Hachette,Paris, Paris, 1945. Resulta Resulta significati significativa va la fecha fecha de vement de la France sous Charles VI et Charles VII , Hachette, publicación de este libro, libro, pues permitía establecer paralelismos con la humillante situación política y moral que había padecido Francia en los años inmediatamente anteriores. 17 A estos años de relativ relativaa distensión distensión bélica dedicamos dedicamos un pequeño trabajo, trabajo, MITRE, MITRE, Emilio: Emilio: «1400: «1400: una coyuntura para la Corona de Castilla y el Occidente europeo», Poder y sociedad en la Baja Edad  (Estudios en homenaje al profesor Luis Vicente Díaz Martín.). Martín.). T. 2, Universidad Universidad de Media hispánica (Estudios Valladolid, alladolid, 2002, pp. pp. 855-868. 855-868. 18 Uno de tantos balances periódicos per iódicos sobre un tema del que existe crecida bibliografía, en PASCUA, PASCUA, Esther: «Violencia, escatología y cambio cambio social: La polémica en torno al movimiento de de Paz de Dios», (1995), pp. pp. 727-737. 727-737. Hispania LV/ 2, num. 190 (1995), 19 Entre los trabajos más recientes, BARTHELEMY BARTHELEMY Dominique: Caballeros Caballeros y milagros milagros.Violencia y sacra Universidad de Valencia-Universidad alencia-Universidad de Granada, 2006. lidad en la sociedad feudal , Universidad 13

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contendientes contendientes o si se renuevan de manera rutinaria rutinar ia pueden poner a los rivales en liza en trance de llegar a una paz en firme según destacó H. Bovet Bovet20. En la Baja Baja Edad Edad Media, la tregua se verá forzada forzada generalmente generalmente por el agotamiento agotamiento de los contendientes: ya sea económico (la quiebra de banqueros florentinos fiadores del monarca inglés en 1333), 1333), ya sea físico físico (esa epidemia epidemia de peste de 1348)…, 1348)…, ya sea por una situación de empate técnico entre los distintos rivales (treguas de Brujas de 1375 o de Tours de 1444).

2. La globalidad de un conflicto Somos siervos de expresiones con las que los medios de comunicación nos vienen martil martillea leando ndo.. Una es, es, sin duda, duda, la de globali globalizaci zación. ón. He de decir decir que que,, a la hora hora de rotular esta conferencia yo he caído también en la trampa. Hablar de Guerra de los Cien Años como conflicto global implica hacerlo de una globalidad en varios sentidos 2.1. El sentido territorial

Los autores franceses,quizás por la antedicha razón de que su territorio fue quien mas padeció, han presentado el conflicto conflicto como una suerte de guerra de liberación contra el ocupante inglés. Ello porque, desde una óptica muy muy galocéntrica de lo que ha sido la historia de las relaciones relaciones internacionales, internacionales, Francia sería la victima victima de una continuada agresión -u hostilidad al menos- procedente procedente del ancestral enemigo atrincherado al otro lado del Canal. La enemistad inglesa en la Edad Media,en Media, en efecto, efecto, no sólo se produjo en esos años entre 1337 1337 y 1453, sino también también tiempo atrás. Sería en el choque entre entre las dinastías Capeto y Normando- Plantagenet entre principios del siglo XII, grosso modo, y el acuerdo de París entre Luís IX de Francia y su primo Enrique III de Inglaterra en 1259. 1259. J. Calmette definió hace años ese enfrentami enfrentamiento ento como «las primeras guerras inglesas»21.Y más allá del 1453 esa rivalidad perviviría durante buena parte de la Edad Moderna y principios de la Contemporánea. Contemporánea. Se tratará tratará de un duelo –bélico o, al menos, menos, diplomático diplomático-- por la hegemonía hegemonía a nivel nivel colonial colonial-mu -mundi ndial. al. Esa especie de constante sólo sólo se superaría con la firma de la Entente Cordiale Cordiale de 1904, cuando el imperio alemán bismarckiano-guillermino amenazó con romper esa suerte de bipolaridad y con erigirse en el indiscutido primer poder económico y militar del Viejo Continente. La Guerra de los Cien Años, aunque choque fundamentalmente anglofrancés,fue anglofrancés, fue también también algo más, ya que conoció (especialmen (especialmente te en su primera pr imera fase) otros otros escenarios: sería Escocia, Escocia, un codiciado aliado aliado de París en la retaguardi retaguardiaa Norte de la corona inglesa.Y sería especialmente la Península Ibérica, convertida convertida en diversión diversión estraCONTAMINE, CONTAMINE, Philippe: La guerre .U.F.,., col. Nouvelle Nouvelle Clio, Clio, Paris 1980 p. p. 438. guerr e au Moyen Age , P.U.F 21 CALMETTE, CALMETTE, Joseph: Joseph: La France au Moyen Age , P.U.F .U.F.,., col Que Que sais-j sais-je?, e?, Paris, 1955, pp. pp. 86-92. 86-92.

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tégica para franceses e ingleses entre 1366 y 1388, al calor de los ásperos conflictos dinásticos que sacuden Castilla y Portugal. España será en en esos años, y por primera vez, vez, terreno en el que que franceses franceses e ingleses choquen para dilucidar a quien pertenecía esa hegemonía a la que acabamos de referirnos. referirnos. Más adelante adelante vendrán vendrán otras otras dos oportunidade oportunidades: s: a principi pr incipios os del siglo siglo XVIII con motivo motivo de la Guerra de Sucesión española; y en 1808-1814 a propósito de la Guerra Guer ra de la Independencia española, esp añola, que para el conde de d e Toreno era levantamiento tamiento guerra y revolución revolución y para la historiografía británica, más prosaicamente prosaicamente,, 22 es Guerra Peninsular  . Pero en ninguno de los tres casos –por mucho interés que se hayan tomado en el primero primero autor autores es como J.J. B. Russell Russell,, L. Suáre Suárezz o yo mismo mismo23- las grandes decisiones bélicas y diplomáticas no tienen lugar en España sino en el interior del continente. 2.2. El sentido social

Las guerras no se libran sólo en el frente de batalla sino también en la retaguardia y en el campo de la propaganda. propaganda. Pero Pero,, ¿desde cuándo? cuándo? Por razones parcialmente ya ya apuntadas, se ha dicho que sólo con el siglo XX el fenómeno guerra llega a ser algo vivido y sufrido en toda su intensidad y crudeza por el conjunto conjunto de la sociedad, no sólo por una parte de ella: llámese el el personal combatiente, llámese la población del limitado escenario geográfico en que las operaciones bélicas se desenvuelven. desenvuelven. Puede parecer una frivolidad frivolidad recurrir recurr ir a una anécdota, pero éstas éstas pueden ser en algunos casos verdade verdaderas ras categorías categorías en miniatura. miniatura. Me refiero a las escenas finales de un film,excelente melodrama bélico producido en los Estados Unidos Un idos y dirigido dirig ido por William Wyler en 1942: La Sra. ministroo Sra. Miniver  Miniver . Un ministr anglicano oficia un día de verano de 1940 un servicio religioso en una iglesia semiarruinada por una incursión de la Luftwaffe.Trata de dar respuesta en él a la angustiada pregunta de sus fieles de por qué habían perecido inocentes en aquella ocasión: una muchacha que acababa de regresar regresar de su luna de miel, un anciano ferroviario ferroviario aficionado aficionado a la jardinería… jardinería… El oficiante oficiante les explica que no están, como en el pasado, ante una guerra tradicional que incumba incumba sólo a los soldados. Están ante una guegueEstos temas fueron tratados en el Seminario celebrado por los Departamentos de Historia Medieval  y de Histor ia Moderna de la Universidad Universidad Complutense entre el 27 y el 29 de marzo de 2006 bajo el título Las quiebras dinásticas en el ámbito hispánico (1250-1808).Gobernar en tiempos de crisis. Las colaboraciones han sido a fecha de hoy hoy objeto de una primera corrección de pruebas. La de E. MITRE lleva por título «Las quiebras quiebras dinásticas y sus derivaciones sociales; sociales; el mundo ibérico a fines del siglo XIV», pp. pp. 421-437 421-437.. 23 Edward III and Richard  RUSSELL Peter E.: The English intervention in Spain and Portugal in the time of Edward Oxford rd Univ Univ. Pres Press, s, 1955 1955;; SUAR SUAREZ EZ,, L.: L.: Intervención de Castilla en la Guerra de los Cien Años , II , Oxfo Valladolid, 1950 y «Castilla 1350-1406», 1350-1406», en T. XIV de Historia de España de Menéndez Menéndez Pidal, Espasa Calpe, Calpe, Madrid, 1966, 1966, pp. pp. 1-378; 1-378; MITRE, MITRE, E.: «Castilla «Castilla ante la guerra de los Cien Cien Años: Años: actividad actividad milimilitar y diplomática de los orígenes del conflicto al fin de las Grandes Treguas (c.1340-c. (c.1340-c. 1415)», Guerra Medievales. Estella 18 a y diplomacia en la Europa occidental. 1280-1480 1280-1480 (XXXI Semana de Estudios Medievales. 22 de julio julio de 2004), 2004), Pamplona Pamplona,, 2005, 2005, pp. pp. 199-235 199-235.. 22

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rra del pueblo en la que todos están implicados puesto que en ella hay demasiadas cosas en juego, juego, especialmente la libertad libertad confrontada a la barbarie barbar ie24. Sin embargo, embargo, esa percepción de que el padecimiento padecimiento de un conflicto afecta a todos o que todos están implicados implicados en él y, y, en consecuencia, consecuencia, están expuestos expuestos a toda clase de riesgos, es muy anterior anterior a las guerras guerras mundiales mundiales del pasado pasado siglo siglo.. (Éstas, sí, han acentuado acentuado esa sensación sensación y, y, además, además, la han publicitado publicitado mejor mejor). ). Baste Baste para ello recurrir a esa visión tan alejada de la épica militar militar que nos transmiten, transmiten, vía técnica técnica del grabado, grabado, los desastres desastres y miserias de la Guerra. Francisco Francisco de Goya Goya lo haría con la Guerra de la Independencia Española Española a principios del XIX. En fecha muy anterior  anterior  (en torno tor no a 1632) ya lo haría Jacques Callot con la Guerr G uerraa de los Treinta Años. Por  vía literaria este conflicto, conflicto, que arruinó arr uinó Alemania Alemania y retrasó su progreso durante casi un siglo, siglo, contaría con la ácida ácida visión de Hans Grimmelshausen en Las aventuras de  Simplex Simplizisimus. Resultaría una tarea que desbordaría con mucho los objetivos de esta conferencia inaugural inaugural hacer un balance balance de lo que ha sido, sido, en fechas más cercana cercanas, s, la remerememoración de las desgracias de la guerra –del pasado o del presente- desde las artes plásticas o desde la literatura. En nuestro tiempo, las vanguardias pictóricas pictór icas tuvieron el acierto de denunciar el macabro significado de la gran conflagración que estalló en 1914; y en forma similar  lo haría Pablo Ruiz Picasso unos años más tarde con nuestra guerra civil en su más celebrada celebrada obra. obra. Como bien es sabido sabido, la literatura literatura ha dado un extraordinario extraordinario juego con numerosas numerosas recreaciones recreaciones novelescas, novelescas, más o menos afortunadas: desde ese extraordinario fresco que es Guerra y paz de Leon Tolstoi, magnífica evocación de la epopeya del pueblo ruso ante la invasión napoleónica de 1812; hasta la reciente, reciente, aseada y mucho más comercial La gran marcha de E. Doctoro Doctorow w, recreac recreación ión de la demoledora razzia del general Sherman a través de Georgia y las Carolinas durante la guerra civil americana. americana. Ello sin olvidar olvidar otros otros meritorios ejemplos, ejemplos, como la muy alabada alabada obra de Basili Grossman, Vida y destino , que está gozando a día de hoy de una merecida merecida difusión. La guerra, en pocas palabras, palabras, lo ha sido siempre siempre para todos todos no sólo para el personal combatiente combatiente.. En mayor mayor o menor grado todos la sufren y a todos les altera sus normales ritmos de vida. La guerra que aquí nos ocupa facilita ya algunos elocuentes testimonios de sufrimientos colectivos, colectivos, aunque muchas veces se expresen con esquemas y prejuicios ideológicos herencia del pasado25. Un discurso de regusto churchilliano que todavía preside recientes trabajos en torno a la llamada «Batalla de Inglaterra». Los blancos acantilados acantilados de Dover Dover,, testigos testigos mudos de encarnizados combates combates aéreos, simbolizarían la fortaleza de la democracia, democracia, la decencia y la civilización «frente a la amenaza de  la barbarie». MO semanas.. El crucial veran veranoo de 1940, que cambió el curso curso de la historia, MOSS SS,, Norma Norman: n: 19 semanas Crític Crítica, a, Barce Barcelon lona, a, 2003, 2003, p. 249. 249. 25 Entre los distintos tratamientos vid. vid. MOLLAT MOLLAT du JOURDIN, Michel: La guerre de Cent Ans vue   par ceux que l´ont vécue , Seuil, Seuil, Paris 1992; 1992; las páginas que que dedicamos dedicamos a la cuestión cuestión en La Guerra de los Cien años («Los que sufren la guerra»), pp. 51-57; o las páginas bajo el título «La guerra y la literatura», en ALLMAND ALLMAND,, Christopher: Christopher: La Guerra de los Cien Años, Crític Crítica, a, Barcel Barcelona ona,, 1990, 1990, pp. pp. 205-2 205-221 21.. 24

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Estamos ante una guerra con pocas batallas campales desarrolladas de acuerdo a un plan -la bataille rangée -, -, aunque el recuerdo recuerdo literario literario de mayor mayor fuste sea el de su épica, épica, el de la prouesse . Predominan, Predominan, por el contrario los los golpes golpes de mano mano,, las escaraescaramuzas entre entre pequeñas pequeñas partidas, los asedios de ciudades, el bloqueo de los caminos que hace difícil el abastecimiento de las grandes aglomeraciones de población y, sobre todo -por lo que ahora nos interesa- esas operaciones de desgaste que son las Operaciones con mucho de razzia razzia demoledora que aspira, aspira, penetrando penetrando en cabalgadas. Operaciones profundidad profundidad en territorio enemigo, enemigo, destruir los recursos recursos económicos y sembrar el pánico. pánico. Causan, por ello, ello, sufrimientos sufrimientos incalculable incalculabless al conjunto de la sociedad sociedad26.Dos aseveraciones referidas a la primera y a la segunda fase del conflicto definen bien lo que era la imagen de una Francia Francia víctima víctima de los saqueos de las gentes de armas; los terribles routiers  y écorcheurs. A mediados del XIV Petrarca Petrarca decía que Francia era un conjunto de ruinas.A ruinas. A mediados del XV, XV, y recordando recordando esta referencia, referencia, Pío II dirá que 27 la pobreza del país era tal que hasta las ruinas ru inas escaseaban . Si a los desastres desastres de la guerra añadimos la conflictividad social coetánea 28, y las periódicas oleadas de peste29 fenómenos que se retroalimentan frecuentemente- el cuadro que nos facilita la Europa de finales del Medievo no es precisamente idílico. 2.3. Mas allá de la globalización: el sentido civil de un(os) conflicto(s)

 Junto a la globalización espacial y social habría que tener en cuenta otras relevantes consideraciones que darían a los conflictos bélicos una dosis de dramatismo añadido. Con ciertas dosis de retórica se ha dicho que cualquier conflicto entre países europeos es una guerra civil dada la amplia comunión de principios que comparten los combatientes al margen del campo en el que se encuentren30. Bajemo Bajemoss de la retórica a la realidad de los hechos. Aunque admitamos que la Guerra de los Cien Años es un conflicto entre estados o alianzas de estados, estados, es evidente evidente que la fragilidad que aún aún caracteriza a éstos, pone en evidencia los muchos enfrentamientos internos que se suman a los interSobre las modalidades de la guerra vid. CONTAMINE, CONTAMINE, Philippe: La guerre au Moyen Age …, …, espeespecialmente pp. pp. 351 y ss. 27 PIO II: Así A. Castro Zafra de los Comentarii de este este pontífice). pontífice).Ed. Ed. Merino,  Así fui papa (adaptación por A. Madrid, 1989, 1989, p. 42. Hace más más de un un siglo, siglo, el dominico dominico DENIFLE, DENIFLE, Heinrich Heinrich nos legó legó una una obra de referencia para el estudio de los padecimientos de la Francia de la época: La désolation des Eglises, monastères et hôpitaux de France pendant la Guerre de Cent Ans , Mâcon, Mâcon, 1897, 1897, 2 vols vols.. 28 Un clásico sobre este tema lo sigue facilitando facilita ndo la síntesis de MOLLA MOLL AT, Michel y WOLFF, OLFF, Philippe: Philippe : Ongles bleus, bleus, Jacques et Ciompi.Les Ciompi. Les revolutions populaires en Europe Europe aux XIV et XV siècles, Calmann-Lévy, Calmann-Lévy, Los con con Paris, 1970.A nivel de reinos ibéricos resulta de similar utilidad el libro de VALDEON,Julio: ALDEON, Julio: Los  flictos sociales en el reino de Castilla en los siglos si glos XIV y XV , Siglo Siglo XXI, XXI, Madrid, Madrid, 1975. 1975. 29 Una de las recientes síntesis sobre la Peste Negra en su momento álgido se debe a BENEDICDeath. 1346-1353.The Complete History,The Boydell Press,Woodbrige, TOW TOW, Ole J: The Black Death. Press,Woodbrige, 2004. 30 El sentido civil de una guerra entre países europeos, europeos, adquiere unas unas características muy peculiares en la obra del controvertido controvertido especialista en movimientos movimientos totalitarios NOLTE, Ernst: Die europäische  Hamburgo,, 1987 (existe (existe traducción traducción al Bürgerkrieg 1917-1945: Nazionasozialismus und Bolschewismus, Hamburgo castellano: La guerra civil europea 1917-1945 , F.C.E., .C.E., Mexico Mexico,, 1994). 1994). 26

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nacionales. nacionales. Enfrentamientos Enfrentamientos que se dan tanto en el núcleo central anglo-francés anglo-francés como en los territorios per iféricos. El más elemental solapamiento de lo internacional y lo civil se percibirá en el carácter multinacional que tienen las fuerzas movilizadas. movilizadas. Los ejércitos de los reyes reyes ingleses, ingleses, por ejemplo, ejemplo, se nutrieron de forma nada desdeñable desdeñable de contingentes contingentes gascones. Producto ello de una circunstancia circunstancia nada trivial sobre la que volver volveremos emos más adelante: Gascuña-Guyena constituyó constituyó feudo de la monarquía británica en territorio terr itorio francés hasta la conclusión misma de la guerra. La implicació implicaciónn en la guerra guerra de Bretaña, Bretaña, Escocia, Escocia, Castilla Castilla o Portugal Portugal se hace, hace, sí, al calor de querellas dinásticas locales, pero éstas a su vez vez se doblan en conflictos intestinos en los que las fidelidades son frecuentemente frecuentemente difusas. En el mundo ibérico son muy representativos los casos de petristas contra enriquistas en Castilla 31 o de los seguidores de Juan I de Trastámara contra los de João de Avís en Portugal: malos frente a buenos portugueses en la visión de la historiografía lusitana más nacionalista 32. Donde de manera más descarnada se verá esa dimensión civil de la Guerra de los Cien Años será en Francia, Francia, durante la segunda fase del conflicto. El país se verá verá agobiado por las humillaciones que le causan los enemigos ingleses: derrota de Azincourt Azincourt (1415) o el posterior tratado de Troyes royes (1420) que ponen parte part e del territor ter ritorio io francés (especialmente (especialmente Guyena Guyena y Normandía) Nor mandía) y su propia corona corona en manos británicas. El desastre se verá agravado por la rivalidad previa de armagnacs  y borgoñones, parcialid parcialidaades encabezadas encabezadas por príncipes de sangre real. real. Ese enfrentamiento enfrentamiento civil civil cobrará una nueva nueva y dramática dimensión cuando el segundo de los bandos actúe como aliado de los ingleses durante, aproximadamente, aproximadamente, tres lustros33. A la crisis política política y militar Francia Francia añadirá, añadirá, así, una crisis de concienc conciencia. ia. En efecefecto, to, son llamativ llamativas as las dificultades en las que se debatirá la sociedad sociedad para discernir a quien legítimamen legítimamente te correspondía el trono: trono: si al niño Enrique VI de Lancaster, Lancaster, hijo de rey inglés inglés y princesa francesa; francesa; o al delfín Carlos, Carlos, repudiado repudiado por su propia propia madre madre Isabel de Baviera y que será Carlos VII desde su unción real en Reims en 142934.Los acusarán a sus contrarios de bandidos, delfinistas delfinistas o peores que sarraangloborgoñones acusarán cenos. Los armagnacs usarán el insulto de renegados renegados o de ingleses para sus oponentes. Cf. Cf. la obra pionera (punto de partida para posteriores trabajos también en torno a esta cuestión) de Castilla. La guerra civil civil y la consolidación del régimen, Unive VALDEON, Julio: Enrique II de Castilla. Universidad rsidad de Valladolid, 1966. 32 Un clásico sobre sob re este tema DIAS ARNAUT, ARNAUT, Salvador: Salvador : A crise nacional do fins fins do seculo XIV ,Instituto A.Vasconcelos, A.Vasconcelos, Coimbra 1960. Una renovada renovada visión del conflicto luso castellano se encuentra en la Po rtugal.. La pugna dinástica Avís-T Avís-Tras rastámar támaraa, sólida sólida monografía monografía de OLIVERA, OLIVERA, César: César: Beatriz de Portugal Cuadernos de Estudios Gallegos, Gallegos, Santiago de Compostela-Madrid, Compostela-Madrid, 2005. 33 Sobre los orígenes de ese terrible conflicto vid. vid. GUENÉE, Bernard: Un meurtre, meurtre, une société. société. L´assass L´assassii Gallimard, rd, Paris, Paris, 1992. 1992. Sobre Sobre las conexiones conexiones entre entre la política política nat du duc d´Orleans. 23 novembre 1407 , Gallima inglesa, inglesa, francesa francesa y borgoñona borgoñona vid. ARMSTR ARMSTRONG ONG,, C.A.J C.A.J.:.: England, England, France France and Burgundy Burgundy in the 15 th Hambledon on Press, Press, London, London, 1983 y THIELMAN THIELMANS, S,M. M. R.: Bourgogne Century, Hambled Bourgogne,, Angleterre Angleterre.. Relations Relations politi politi Universitaires de ques et économiques entre les Pays Pays Bas Bourguignons et l´Angleterre, 1435-1447 , Presses Universitaires Bruxelles Bruxelles,, 1966. 1966. 34 Sobre Sobre el reinado reinado,, dilatado y plagado de peripecias, peripecias, de este este monarca,V monarca,VALE, ALE, M. G. A: Charles VII , Univ of California Press, Berkeley Berkeley, 1974. 31

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Aplicándoles una terminología demasiado actual –por un paralelismo paralelismo con la situación de Francia entre 1940 y 1945- podría motejárseles de colaboracionistas con el ocupante extranjer extranjero. o. Alain Chartier Chartier,, siguiendo a los los clásicos, clásicos, presentaría presentaría el conflicto como una guerra civil y más que civil, ya que enfrentaba no sólo a vecinos vecinos sino también a 35 familiares entre sí . Esa dramática y confusa situación hará posible la aparición de dos tipos de fenómenos. menos. Uno, Uno, el simboliza simbolizado do por Juana Juana de Arco Arco,, de efímera efímera duración duración (de 1429 1429 a 1431) pero expresivo expresivo de una vaga conciencia nacional francesa impregnada de difusos sentimientos religiosos 36. El fenómeno fenómeno contrario lo protagonizará protagonizará el conocido conocido como Burgués de Paris quien en un Diario, que cubre cubre de 1405-14 1405-1449, 49, se manifi manifiesta esta con una posición angloborgoñona angloborgoñona y antijuanista antijuanista,, aunque a la postre actúe de una manera abiertamente abiertamente acomodatici acomodaticia. a. Nada nuevo: nuevo: la experiencia nos demuestra demuestra que se trata de un comportamiento muy extendido en todo tipo de conflictos con una guerra de fondo. Los extremos de blanco y negro se difuminan frecuentemente en numerosos tonos grises37.

3. Lo viejo y lo nuevo de un conflicto europeo Al situarse en las fronteras entre dos épocas –el Medievo y la Modernidad- se complica la calificación a asignar a la Guerra de los Cien Años. Decir que se trata de la última guerra medieval y la primer moderna es el recurso más práctico y a él vamos a acogernos con las debidas reservas38.

CHARTIER Alain: Le Quadrilogue invectif , ed. ed. de E. Droz Droz,, Cham Champi pion on,, Paris, aris, 1950 1950,, passim. 36 El fascinante personaje se ha prestado a una amplísima producción. producción. En ella alternan los trabajos serios con otros en los que se insiste en enigmas más cercanos a la novelística de baja calidad que a la historia propiamente dicha. Una breve, breve, pero atinada, síntesis la tenemos en una de las grandes espeespecialistas en la heroína, heroína, PERNOUD, PERNOUD, Régine: Jeanne d´Arc , Paris, 1981. 1981. El libro libro, publicado publicado en en la conoconocida colección Que sais-je? de la P.U P.U.F .F.,., suponía una actualizació actu alizaciónn del editado años atrás atr ás por la misma  Jeanne d´Arc , Paris, 1946. empresa y redactado por el prolífico CALMETTE, CALMETTE, Joseph: Jeanne 1946. Dada la fecha fecha de cf. Chute etet relèvement  relèvement . Citado en edición, era fácil advertir advertir unos paralelismos (cf. en nota anterior) entre entre la Francia de Juana y la de otra reciente ocupación ocupación extranjera: la de la Alemania nazi. nazi. 37 Sobre la figura y obra de este anónimo personaje hablaremos en el Seminario organizado (marzo de 2009) por el Departamento de Historia Medieval de la Universidad Complutense en torno al tema La Edad Media en primera persona: individuo y estereotipos medievales. El título de nuestra nuestra ponencia ponencia será precisamente «La percepción percepción de un burgués: la capital de Francia vista por el autor del Diario del  Burgués de París». Una edición de este texto, llevada llevada a cabo en nuestros días sobre la base de otra de hace más de un siglo (la de A. A. Tuetey), uetey), se debe a la medievalis medievalista ta BEAUNE, BEAUNE, Colette: Colette: Journal d´un Lettres gothiqu gothiques, es, Paris, 1990. 1990. De esta esta misma misma autora, autora, y en torno torno a la creacreaBourgeois de 1405 a 1449 , Lettres ción de una señas de identidad francesas en el Medievo, vid. Naissance Gallimard, Naissance de la nation France  France , Gallimard, Paris, 1985. 1985. 38 Para los ingredientes políticos que nutren estos dos siglos finales del Medievo Medievo es clave el trabajo de GUENÉE, GUENÉE, Bernard: Bernard: L´Occident aux XIV et XV siècles. Les Etats, Paris, Paris, 1991 1991.. 35

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3.1 Los elementos tradicionales

a) El componente territorial-feudal: territorial-feudal: el caso de Guyena Un componente medieval sobre el que algo ya hemos apuntado, se ha considerado más relevante relevante aún que el de raíz dinástica: la pugna a propósito de ese particular status de Guyena,territorio francés bajo suzeranía de los Plantagenet desde mediados del siglo XII con motivo del matrimonio de Leonor de Aquitania con Enrique II de Inglaterra39. Esa peculiar condición jurídica, pese a las reservas planteadas por los gobernantes franceses, franceses, sería reiteradame reiteradamente nte ratificada. ratificada. Lo sería en el tratado anglofrancés anglofrancés de París de 1259, 1259, en el que Luis Luis IX, mitad por generosidad generosidad mitad mitad por cálculo cálculo político político,, permitió retenerla retenerla a la monarquía inglesa. Lo sería un siglo después -y durante la Guerra de los Cien Años- en el tratado de Bretigny (1360).Y se reiteraría esta situación sesenta años más tarde en el tratado de Troyes royes (1420). La salida final al contencioso vendría por el camino de la fuerza pura y simple: con la expulsión de los ingleses de ese territorio tras la batalla de Castillon de 1453 y la toma definitiva de Burdeos por  las fuerzas reales francesas. Se ponía fin así a la presencia presencia británica de varios siglos en 40 la ciudad . b) Las estrategias y los contingentes militares Como tiempo atrás (v. g. Bouvines según el perspicaz estudio de G. G. Duby) la batalla campal es la antítesis de la guerra. En teoría se plantea como una especie de juicio de Dios Dios en donde se decide, decide, a una carta, qué contendiente contendiente tiene la la razón, ahorrándose así ulteriores operaciones operaciones de enorme enor me costo humano, humano, económico económico y moral41. La utilización del arrière bann, que implicaba una movilizaci movilización ón general de acuerdo a la práctica feudal tradicion tradicional, al, será lo que marque las operaciones, operaciones, especialmenespecialmente desde el lado francés, hasta fecha ava avanzada. nzada. Los resultados resultados son suficientemente suficientemente bien conocidos: el desastre de la valiente valiente pero alocada caballería caballería de Felipe VI en Crecy o de Carlos VI en Azincourt frente a unas estrategias más innovadoras de Eduardo III y Enrique Enr ique V de Inglaterra: arqueros equipados del long bow , arma de de gran simplicidad pero no menos menos eficaz que la más sofisticada ballesta, infantería montada, masas de acuchilladores que se infiltran entre las filas del enemigo…42.

Vid. a este respecto la síntesis de GILLINGHAM,John: GILLINGHAM, John: The Angevin Empire ,Arnold, ,Arnold, London, London, 1984, 1984, pp. pp. 16-17. 16-17. 40 Sobre la dilatada presencia inglesa en terr territorio itorio francés (politica, militar, cultural, religiosa, etc) vid., entre entre otros otros aportes, los del coloquio coloquio La “Franc Colloque des des historiens historiens “Francee Anglaise” Anglaise” au Moyen Age  Age , Colloque médiévistes francáis et britaniques brit aniques (Actes du 11 Congrès National des Societés Savantes, Savantes, Poitiers, 1986 1986), ), Paris, Paris, 1988 1988.. 41 DUBY, DUBY, Georges: Le dimanche de Bouvines (27 juillet 1214) , Gallim Gallimard ard,, Paris, Paris, 1972. 1972. 42 CONTAMINE, Philippe: La guerre au Moyen Age. .., pp. pp. 309 y ss. Entre Entre los recientes recientes trabajos trabajos Cf. Cf. CONTAMINE, sobre el papel de la guerra en el mundo medieval medieval REID, REID, P: Medieval Warfare: triumph and domination in the War War of the Middle Ages, Carroll Carroll and Graf Publishe Publisher, r, NewYork, NewYork, 2007. 2007. 39

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c) Guerra y caballería La narrativa histórica será pródiga en figuras exaltadoras de los valores caballerescos. El cronista más popular del Bajo Medievo Medievo -Froissart- lo expondría claramente claramente al decir que pretendía narrar «los hermosos hechos de armas» que se habían desarrollado en los distintos países europeos a lo largo de la segunda mitad del siglo XIV tratando de mostrar la mayor neutralidad posible43. La batalla batalla de Crecy Crecy pasa por ser el 44 brillante ejemplo de una bataille rangée  ; y el combate de los Treinta será uno de los lances caballerescos más famosos45. Las hazañas y las cualidades en general de algunos jefes militares (el Príncipe Negr Negroo, Beltrá Beltránn Du Guescli Guesclin, n, John Chand Chandos, os, el mariscal mariscal Boucic Boucicout out,, Pero ero Alons Alonsoo Niño, el condestable Nun Alvares Pereira…) Pereira…) cubren una buena parte de la literatura de la época46  y se han prestado generosamente a distintas d istintas biografías históricas histór icas y 47 evocaciones novelescas . Le Jouvencel , de fecha fecha ava avanzad nzada, a, será toda toda una una apologí apologíaacompendio de las virtudes militares militares.. Johan Huizinga en una obra que hemos de seguir considerando considerando como memorable memorable,, habló de sustitución de lo heroico heroico por el 48 artificio de lo heroico y de nostalgia de una vida más bella .Trabajos más cercanos a nuestros nuestros días, días, como el de M. Keen, Keen, han presentado presentado esa nostalgia nostalgia como una «fuer za positiva que impulsaba a los hombres a esforzarse en mantener y revitalizar los antiguos valores» frente a la convicción de que el mundo envejecía49. 3.2. Lo posiblemente innovador en la guerra guer ra

¿Está en la Guerra de los Cien Años el germen de lo que serán los estados europeos tal y como hoy en día los conocemos? ¿Anticipa la Guerra de los Cien Años lo que serán los conflictos de los inicios de la Modernidad?

FROISSAR FROISSART T, Jean: «Prólogo» a sus Crónicas, Antolog Antología ía de de E. E. Bagué, Bagué, Labor Labor, Barcelo Barcelona, na, 1949, 1949, pp. pp. 36-42. 36-42. 44 pp. 55-61 55-61.. Ibid., pp. 45 pp. 94-98. 94-98. Sobre Sobre el ethos caballeresc caballerescoo en este autor vid. DILLER, George T.: T.: Attitudes cheva Ibid., pp. leresques et realités politiques chez Froissart. Froissart. Microlectures Microlectures du premier livre des Chroniques, Droz Droz,, Genè Genèvve, 1984. 46 Para el mundo ibérico, cf. el artículo ya clásico de ROMER ROMERO O, José Luis: «Sobre la biografía española del siglo XV y los ideales de vida» Cuadernos de Historia de España (1944). Recogido en ¿Quién es el  Bibliotecas cas Universita Universitarias, rias, Buenos Buenos Aires, Aires, 1984, 1984, pp. pp. 172-188. 172-188. burgués? Y otros estudios de Historia medieval , Bibliote 47 Eduardo, A titulo de ejemplo cabe remitirse remitirse a dos personajes: DUPUY, DUPUY, Micheline: El príncipe Negro, Eduardo, Col. Austral Austral,, Espasa Espasa Calpe Calpe,, Madrid, Madrid, 1973; 1973; MINOIS MINOIS,, Georg Georges: es: Du Guesclin, Fayard, Fayard, señor de Aquitania, Col. Paris, 1993. 1993. Aunque, Aunque, por su peculiar peculiar trayecto trayectoria, ria, sea Juana Juana de Arco Arco,, tal y como hemos hemos adelantado adelantado,, el personaje que más atractivo atractivo tenga. Una sugestiva sugestiva visión de los l os medios en los que la heroína se movió movió nos la facilita f acilita VAUCHEZ,A.: UCHEZ, A.: «Jeanne d´Arc et le prophétisme féminin des XIV et XV siècles», Les Cerf, Paris, Paris, 1987, 1987, pp. pp. 278-2 278-286 86.. laïcs au Moyen Age. Pratiques et expériences religieuses, Cerf, 48 HUIZINGA,Johan: El Otoño de la Edad Media, Revista Revista de Occiden Occidente te,, Madrid, 1961, 1961, passim (la obra se publicó originalmente en Harlem, 1919 ). 49 KEEN, KEEN, Maurice: Maurice: La caballería, Ariel, Ariel, Barcel Barcelona ona,, 1986, 1986, p. 285. 285. Una obra obra singu singular lar que que acrece acrecentó ntó la la fama de este autor reconocido a nivel internacional por: The Laws of war in late Middle Ages, Routledge University of Toronto Toronto Press, 1965. 43

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ISSN: ISSN: 1698-4374 1698-4374 D.L.: BI-1741-04

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a) El reforzamiento de los sentimientos de identidad Hablamos con ello de sentimientos de pertenencia a una tierra / reino / nación por encima de las relaciones de dependencia personal-feudal50. Se ha destacado cómo ingleses y franceses se sentirán cada vez más apegados a su tierra y reforzarán su idiosincrasia idiosincrasia,, aunque sea a costa de un acrecentamiento acrecentamiento de la xenofobia. De Eduardo III se dice que no fue elegido rey de Francia en 1328 porque «no era de la tierra», ya que que era inglés, inglés, aunque su madre madre -la reina de Inglaterra Inglaterra Isabel- fuera una princesa francesa. Esa circunstancia le daba tantos tantos o más títulos que a su rival Felipe de Valois (francés de nacimiento) reconocido a la postre por la baronía francesa51. El que hacia 1400 los franceses sean vistos como el enemigo natural hace que «los ingleses hablen inglés» cuando hasta esa fecha el francés era la lengua culta de comunicación entre las élites sociales insulares 52. En el caso caso francés, francés, los sentimien sentimientos tos antiantibritánicos desencadenarían fenómenos como la guerrilla en Normandía tras el tratado de Troy Troyes es53 o el fenómeno Juana de Arco54. Un elemental elemental patriotismo patriotismo se resuresumirá en la consigna «bouter les anglais hors de France».Y por inglés, se entiende el rival al margen de que sea esa o no su nacionalidad. En escenarios subalternos se darán situaciones situaciones parecidas. parecidas. En Portugal entre entre 1383  y 1385 la guerra guerr a de sucesión-guerra sucesión-gue rra civil acentúa acentú a la l a divisoria d ivisoria entre buenos portugueses (junto a João de Avís) y malos portugueses al lado de Juan I de Trastámara. Poco Poco más tarde y en Castilla, los Cortes de Segovia de 1386 arremeten arremeten contra los ingleses del invasor duque de Lancaster tachados de malos cristianos desde fecha inmemorial55. La satanización satanización del enemigo, enemigo, viejo recurso recurso,, se reforzará reforzará con la división

Significativo es el subtítulo («Nacimiento de dos naciones») de la síntesis de Georges MINOIS citada en nota anterior. anterior. Interesante Interesantess también entre entre otros otros aportes, BEAN, BEAN, R.: «War «War and the birth of the nation state», Journal of Economic History (1973), ), pp. pp. 203-2 203-221 21.. Para Para el caso franc francés és cf. Histor y, 33 (1973 cf. WISMAN,  J.A.: «L´éveil «L´éveil du sentiment national au Moyen Moyen Age: la pensée politique de Christine Christine de Pisan», Revue  (1977), pp. pp. 289-299 289-299.. Historique , 257 (1977), 51 La génesis de la Guerra de los Cien Años se ha abordado desde las diferentes ópticas (políticas, dinásticas, ticas, económicas, económicas, culturales…) culturales…).. Vid. LE PA PATOUREL, TOUREL, John: John: «The origins of the war», The Hundred  Fowler,, London, London, 1971, pp. pp. 28-50. 28-50. Una buena síntesis síntesis la facilita facilita el artículo de MADYears War , ed. K. Fowler DICOTT, DICOTT, J.J.N.: J.J.N.: «The origins or igins of the Hundred Years War», History Today, 36 (Mayo (Mayo 1986) 1986),, pp. pp. 31-37. 31-37. Algunos autores han puesto más énfasis en el asunto de Guyena como principal causa del conflicto que en las discrepancias dinásticas. Era evidente que el acuerdo de Luis IX de Francia y Enrique III de Inglaterra no había resuelto de forma suficientemente satisfactoria el status de esta región,VALE, M : The origine of the Oxford Univ. Univ. Press Press ,1996. th e Hundred Hun dred Years War.The ar.The Angevin Legacy, Legacy, 1250-1340 , Oxford 52 CONTAMINE, CONTAMINE, Philippe: La vie quotidienne pendant la Guerre de Cent Ans. Paris, Ans.France France et Angleterre , Paris, 1976, 1976, pp. pp. 20-22. 20-22. 53  JONET,  JONET, E.: «La ressistence à l´occupation anglaise en Basse Normandie, Nor mandie, 1418-1450», 1418-1450», Cahiers des  Annales de Normandie  (1969). 54 El proceso condenatorio de Juana de Arco y su posterior revisión dio pie a un interesante dossier  comentado por DUBY, DUBY, Georges y Andrée: Les procés de Jeanne d´Arc , Gallim Gallimard ard,, Paris, Paris, 1973. 1973. 55 SUAREZ, SUAREZ, Luis: Juan I,rey Revista de Occident Occidente,Madrid, e,Madrid, 1955, 1955, pp. pp. 100-101. 100-101. I, rey de Castilla Castilla (1379-1390) (1379-1390), Revista 50

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nº 6 (2009) (2009),, pp. pp. 28/35 28/35

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de obediencias entre países romanistas y países aviñonistas impulsada por el Cisma de Occidente. Fronteras políticas y religiosas acaban coincidiendo56. b) Hacia una nueva narrativa histórica 57 Aunque los valores caballerescos legados por la historiografía siguen siendo dominantes, dominantes, a su lado y con el discurrir del tiempo cobran impulso testimonios menos enfáticos y más realistas realistas al estilo de los transmitidos por algunos diarios. El citado del Burgués de París nos habla de la guerra en función, sobre todo, todo, de los desastres anejos y de las limitaciones creadas creadas a la vida cotidiana de los vecinos de una gran g ran ciudad. Los diarios y memorias de estos años son anticipo de los extraordinarios extraordinarios testimonios que nos legará años después Felipe de Commynes58. La narrativa narrativa histórica se pondrá, asimismo asimismo, al servicio de las distintas distintas causas polí59 ticas , propici propiciando ando nuev nuevas as legitimaci legitimaciones ones dinásti dinásticas cas ahí ahí donde, donde, por ejemplo ejemplo,, nos topamos con la bastardía bastardía de candidatos accedidos accedidos al trono de su país: la Castilla Castilla Trastámara o el Portugal Avís 60. La historia, que tradicionalment tradicionalmentee había sido, sido, al igual que la filosofia, filosofia, anci ancillllaa theo theo 61 logiae empieza a convertirse en ancilla scientiae politicae  . c) Unas nuevas formas militares y una consolidación de la realeza Las indentures (como las condottas en Italia) dan un impulso, impulso, por su sentido contractual, tractual, a la profesionalización profesionalización del oficio oficio de las armas. Una firme instituciona institucionalizalización vendrá de una legislación militar al estilo de la de Carlos VII en 1445 (creación ( creación de las Grandes Compañías de Ordenanza) y en 1448 (creación del cuerpo cuer po de los Francs

Sobre la instrumentalización de la bicefalia eclesiástica y la acusación de hereje lanzada contra el Iglesia, herejía y vida política en la Europa medieval  medieval , Madri contrari contrarioo vid. vid. MITRE, MITRE, Emilio Emilio:: Iglesia, Madrid, d, 2007 2007,, pp. pp. 145 y ss. Para el caso de la legitimación de los Avís Avís vid. MATOS MATOS E LEMOS LEMOS,, Mario: «Portugal «Portugal e o grande Cisma do occidente e a luta contra Castela», Historia, 68 (junio (junio 1984), 1984), pp.90-96. pp. 90-96. Para el caso castellano vid. SUAREZ, SUAREZ, Luis: Castilla, C.S.I.C. .I.C.,, Madrid, Madrid, 1960 1960.. Castilla, el cisma y la crisis conciliar  conciliar , C.S 57 Para la historiografía en el Medievo Medievo en general, con las consiguientes y extensas referencias referencias a los siglos finales, vid. GUENÉE, GUENÉE, Bernard: Bernard: Histoire et Culture historique dans l´Occident médiévale , Aubier, Aubier, Paris, 1980; 1980; HAY HAY, Dennis: Dennis: Annalists and Historians Histor ians.. Western Historiograph Histori ographyy from the VIII th to the XVIII  Methue uen, n, Lond London on,, 1977 1977 y MITRE, MITRE, Emil Emilio io:: Historiografía y mentalidades históricas en el  th Century, Meth Editorial de la Universidad Universidad Complute Complutense nse Madrid, 1982. 1982. Occidente Medieval , Editorial 58 DUFOURNET, Jean: La vie de Ph.de Commynes, Societé d´Edition d´Enseignement d´Enseignement Superieur, Cf. Cf. DUFOURNET, Paris, 1969 y Etudes sur Philippe de Commynes, Champi Champion, on, ParIs ParIs,, 1975 1975.. 59 En el apéndice bibliográfico a su edición del  Journal pp. 512512-51 513, 3, Cole Colett ttee  Journa l d´un d´ un bourgeois de Paris, pp. Beaune establece diferencias entre una cronística proborgoñona y otra proarmagnac. 60 Sobre la creación de una historiografía legitimadora de ramas espurias que acceden al trono vid. MITRE, MITRE, Emilio: Emilio: «Crisis y legitimaciones legitimaciones dinásticas dinásticas en la Península Península Ibérica a fines del siglo XIV», Bandos y querellas dinásticas en España a fines de la Edad Media (Actas del coloquio celebrado en la Biblioteca Española de París el 15-16 de mayo de 1987), Cuadernos de la biblioteca Española, nº 1, (1991), (1991), pp. pp. 37-58. 37-58. 61 GUENÉE, GUENÉE, Bernard: Bernard: Histoire et culture historique dans l'Occident médiéval , Aubier Aubier Montaigne Montaigne,, Paris, Paris, 1980 1980,, p. 36. 36. 56

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central for Archers). La creación de una potente artillería controlada desde el poder central zará a una reconversión de los viejos sistemas defensivos 62. La guerra más que una función, función, como en la tradicional tradicional sociedad sociedad tripartita, tripartita, es una profesión profesión al servicio de un poder monárquico cada vez vez más controlador, controlador, que trata por todos los medios de neutralizar unas anárquicas bandas de mercenarios63 que no sólo siembran siembran el terror en momentos de guerra abierta, sino también en los de tregua.Todo gua.Todo un paradigma de esos sembradores sembradores de miserias miser ias entre la población no combatiente lo constituiría la la figura de Merigot de Marchais, temible routier de la segunda mitad del siglo XIV que acabó su vida en en el cadalso. En su boca el cronista Froissart pone una cínica descripción de lo que es el oficio de las armas que contrasta vivamente con esos ideales caballerescos exaltados por los cronistas64. Es el monarca quien –dado el desgaste de las distintas categorías sociales oficialmente reconocidasreconocidas- sale considerablemente considerablemente reforzado reforzado de la crisis. Ante él acaban capitulando las fuerzas tradicionales que ostentaban representación en las asambleas políticas: políticas: el clero, clero, la nobleza y las ciudades.Y ciudades.Y también ante la realeza realeza acaba claudiclaudicando ese «cuarto poder» que es el studium , un producto producto eminente eminentemente mente urbano urbano.. Las universidades (v. g. la de París), ya no serán tanto los centros centros de reflexión intelectual como los viveros de eficaces servidores del poder público65. ¿Nos encontramos ante los orígenes del estado moderno?66. Quizás sea sea prematuprematuro aplicar ya tal expresión para estos momentos 67. Muchos autores autores creen creen oportuno

CONTAMINE, CONTAMINE, Philippe ha hecho de cara a Francia algunos de los mejores aportes sobre el tema. A su tesis (Guerre, Etat el société à la fin du Moyen Moyen Age.Etudes Age. Etudes sur les armées des rois de France, France,1337-1494 1337-1494, Mouton, La Haye-París Haye-París 1972) cabe añadir la recopilación recopilación de trabajos La France au XIV et XV siècles. Hommes, Hommes, mentalités, mentalités, guerre et paix,Variorum ,Variorum Reprints, Repr ints, London, 1981 y la reciente reciente panorámica «Guerre, «Guerre, Etat et societé: une revision à la lumière de la crise politique et militaire dans la France du deuxième quart du XV siècle», Guerra y diplomacia en la Europa Occidental …, …, pp. pp. 117-140 117-140.. Una panorámica panorámica con especial referencia referencia al mundo mundo hispánico en GARCIA FITZ, Francisco: «La composición de los ejércitos medievales», medievales», La guerra en la Edad Media (XVIII Semana de Estudios Medievales, Medievales, Nájera, Nájera, 2006), 2006), Instituto Instituto de Estudios Estudios Riojanos Riojanos,, Logroño Logroño,, 2008, 2008, pp. pp. 85-146. 85-146. 63 Sobre el mercenariado en la primera fase del conflicto vid. FOWLER, FOWLER, K.: Medieval Mercenaries (I). The Great Companies , Blackw Blackwell Publisher Publisher,, Oxford, Oxford, 2001. 2001. 64 Op. cit., pp. 110-125. FROISSART: Op. 110-125. Sobre el el proceso y ejecución en 1391 de este híbrido de soldado y delincuente vid. GLENISSON, GLENISSON, Jean y DA DAY, John: Textes et documents d´Histoire du Moyen Age. SEDES,, Paris, Paris, 1970, 1970, pp. pp. 132 a 143 143.. XIV-XV XIV-XV siècles. siècles. 1. Perspectives Perspectives d´ensemb d´ensemble. le. Les «Crises» et leur cadre , SEDES 65 VERGER, VERGER, Jacques: Jacques: Les Universités au Moyen Age , P.U.F .U.F.,., París, París, 1973, 1973, pp. pp. 167-171 167-171.. También ambién de este autor Gentes del saber en la Europa de finales de la Edad Media, Editorial de la Universidad Universidad Complutense de Madrid, Madrid, 1999 1999,, pp. pp. 139 139 y ss. 66 En numerosas ocasiones ocasiones se ha elucubrado sobre esta cuestión. Uno de sus pivotes lo constituirá el ciclo de conferencias conferencias de STRAYER, STRAYER, J.R., pronunciadas pronunciadas en 1961 y publicadas bajo el título: Sobre los Ariel, Barce Barcelon lona, a, 1981 1981 (ed. original original de Princeton Princeton,, 1970). 1970). Desde Desde orígenes medievales del estado moderno, Ariel, el lado español tenemos, tenemos, entre entre otros aportes panorámico panorámicos, s, LADERO LADERO, Miguel Miguel Angel: Angel: «La genèse de l´Etat dans les royaumes hispaniques médiévaux», Le premier Age de l´État en Espagne (1450-1700) , Paris, 1989, pp. 9-65 y SARASA, SARASA, Esteban: «Fundamentos medievales medievales del Estado moderno», moderno», Ius Fugit , vol. vol. 3-4 (1996), (1996), pp. pp. 487-498 487-498.. 67 DIOS, Salustiano de: «El Estado moderno ¿un cadáver cadáver historiográfico?», Realidad e imágenes del  V. g. DIOS,Salustiano  poder.  poder. España a fines de la Edad Media, coord. coord.A. A. RUCQUOI,V UCQUOI,Vallado alladolid, lid, 1988, 1988, pp. pp. 389-408 389-408.. 62

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retrasarla a las llamadas revoluciones burguesas. Pero Pero lo que queda fuera de duda es que en 1453 –batalla de Castillon- no estamos ya ante un escenario como el de 1214  –batalla de Bouvines-, por citar otra fecha militarmente significativa. O, por movernos en el ámbito hispánico: el escenario escenar io y las circunstancias de 1476 -batalla de Toro que hace bascular la suerte de las armas en Castilla hacia el bando isabelista frente al beltranejista- o de 1492 –toma de Granada por los Reyes Católicos68- no son los de 1212 –batalla de las Navas de Tolosa-, por remitirnos a otro o tro encuentro militar que 69 ha gozado de una bien ganada fama .

4. Conclusión A nivel de las relaciones internacionales y de la configuración del mapa político europeo,¿qué europeo, ¿qué cambió la guerra que nos ha servido de referencia referencia en esta exposición? Se ha insistido en la inutilidad inutilidad de las guerras en las que todos pierden, pierden, aunque unos más que otros.Miguel otros. Miguel de Unamuno («español, vasco y europeo», como lo ha defidefinido Günther Grass), al hilo de los trágicos hechos del verano-otoño verano-otoño de 1936, cuyos efectos últimos últimos no llegaría llegaría a contemplar, contemplar, nos legó unas desgarradas desgarradas notas: posibleposiblemente eran el esqueleto de un libro que no tuvo tiempo de componer. componer. Refiriéndose a la Primera Guerra Mundial (según nuestros abuelos la Gran Guerra) y a sus consecuencias sentenciaría: «Ese sí es el Hundim Hundimiento iento de Occident Occidente. e. La gran guerra guerra no la gana gana ron ni unos ni otros; la perdieron perdieron todos tray trayendo endo dos barbaries: barbaries: la comunista comunista y la fascista» fascista»70. Sobre los efectos de ambas en nuestro suelo tendría ocasión de explayarse explayarse otro autor  también vasco vasco,, Pío Baroja, Baroja, en una novela novela cuya difusión fue tardía pero pero sumamente acertada. acertada. En su título, título, se jugaba de nuevo nuevo con las palabras malditas ya ya consagradas71. No nos pongamos trascendentes trascendentes o moralistas. moralistas. Limitémonos a recordar recordar que el proceso proceso conocido como como Guerra de los Cien Años, pese a su duración, duración, cambió muy muy poco la geografía política política europea. europea. La guerra no trunca sino que acelera tendencias tendencias en curso avanzado ya en los años previos a su estallido. En el caso de Francia sus aspiraciones fronterizas de 1337 prefiguran ya los límites de 1453. Es significativo significativo que la Guyena Guyena inglesa, verdadera verdadera manzana de la discordia, que fue confiscada por Felipe VI en 1337 y durante todo el siglo siguiente siguiente fue objeto de dura disputa, acabará al final en su totalidad en la órbita política política de París París72. Algo similar cabría decir en el caso español de esas franjas fronterizas de status no muy bien definido que a mediados del siglo XIV tendían a bascular hacia Castilla. Para este conflicto vid. el libro de uno de los mejores especialistas especialistas en la materia, LADERO LADERO, Miguel Angel: Las guerras de Granada en el siglo XV , Ariel, Ariel, Barce Barcelon lona, a, 2002. 2002. 69 Sobre esta batalla se han acometido en los últimos tiempos tiempos diferentes trabajos. Uno de los más solventes es es el de GARCIA FITZ, FITZ, Francisco: Las Navas de Tolosa , Ariel, Ariel, Barce Barcelon lona, a, 2007. 2007. 70 UNAMUNO Miguel de: El resentimiento trágico de la vida. Notas sobre la revolución y guerra civil espa Carlos Feal Feal,, Alianz Alianzaa Editoria Editorial,l, Madrid, Madrid, 1991, 1991, p. 49. ñolas, ed. de Carlos 71 BAROJA, BAROJA, Pío: Miserias de la guerra, Caro Caro Raggio, Raggio, Madrid, Madrid, 2006. 2006. 72 Sobre el último período del territorio bordelés en manos británicas vid. VALE, M.G.A.: M.G.A.: English Oxford Univ Univ.. Press, Press, 1970. 1970. Gascony, Gascony, 1399-1453, Oxford 68

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Pese a los manejos diplomáticos y militares de los estados vecinos por hacerse con su control a lo largo del siglo siguiente, siguiente, dichas zonas quedarán dentro dentro del espacio 73 político castellano . Asimismo, la guerra de los Cien Años y otras situaciones conflictivas conflictivas a veces veces derivadas de ella, contribuyeron a poner a prueba y a dar consistencia a algunas de esas p lurales por po r otra parte- que, de acuerdo a la praxis conciliar  con ciliar  cinco naciones  –bastante plurales bajome bajomedie dieva val,l, constituí constituían an Europa: Europa: Italia Italia,, GaliaGalia-Fra Franci ncia, a, Germania, Germania, Hispani Hispania-E a-Españ spañaa  y Britania Br itania74. Unas Naciones cuyos orígenes se hacían remontar a la mítica noche de los tiempos, pero a las que Roma había dado ya ya una especial especial forma. Francia alcanzará en 1453 unas fronteras que le convertían en algo parecido a lo que fue la Galia según Gilles le Bouvier (muerto en 1455) recoge en su Description des Pays75.Y unos años más tarde el cronista y obispo catalán Joan Margarit podría también invocar en su castellano-aragonesa impulsada por el matrimonio Paralipomenon la unión personal castellano-aragonesa de los Reyes Católicos como un reensamblaje de las clásicas Citerior y Ulterior  romanas76. Al final, final, como he dicho ya en alguna alguna otra ocasión, ocasión, ¡siempre ¡siempre nos quedará Roma! Roma!

5. Bibliografía fundamental citada en el texto:

5.1. La guerra y los estados

BOUTHOUL, BOUTHOUL, Gaston: La guerra. Oikos-t Oikos-tau, au, Barcel Barcelona, ona, 1971. 1971. CONTAMINE, CONTAMINE, Philippe: Philippe: La guerre au Moyen Age . P.U.F .U.F.,., col. col. Nouvelle Nouvelle Clio, Clio, Paris, Paris, 1980. 1980. IBÍBEM: Guerre, Guerre, Etat et societé à la fin du Moyen Age. Age. Etudes sur les armées des rois Haye-Mouto outon, n, 1972. 1972. de France, France, 1337-1494. La Haye-M GARCÍA FITZ, FITZ, Francisco: Francisco: La Edad Edad Media. Media. Guerra e ideología. ideología. Justifica Justificacione cioness religio religio Sílex, x, Madrid, Madrid, 2003 2003.. sas y jurídicas. Síle GUEN GUENÉE ÉE,, Bernar Bernard: d: L´Occident aux XIV et XV siècles siècles.. Les Etats Etats.. P.U.F  .U.F ., col Nouvelle Nouvelle Clio Clio,, Paris, 1991 ( 4º 4º ed.).

MITRE, MITRE, Emilio: Emilio: «Política «Política exterior castellana y reestructu reestructuración ración nobiliaria bajo los primeros primeros Trastámara (1369-1406)», La Península Ibérica en la Era de los Descubrimientos (1391-1492), (III Jornadas Jornadas Hispano-P Hispano-Portugu ortuguesas esas de Historia Historia Mediev Medieval al Sevilla Sevilla 1991), Sevilla, Sevilla, 1997, 1997, t.1, pp. pp. 531-532 531-532.. 74 Cf. Cf. el reciente ensayo ensayo de SUAREZ, Luis: La Europa de las cinco naciones , Ariel, Ariel, Madrid, Madrid, 2008 2008.. 75 France moderna. XIV-XV XIV-XV siècle , Le Seuil Recogido por MOLLAT, MOLLAT, Michel en Genèse médiévale de la France Seuil,, Paris, Paris, 1977, 1977, p. 115. 115. 76 Ensayos sobre sobre la historio historio Recogido por TATE, TATE, Robert B.: «El “Paralipomenon” “Paralipomenon” de Joan Margarit», Ensayos Gredos os,, Madrid Madrid,, 1970 1970,, p. 149. 149.  grafía peninsular del siglo XV , Gred 73

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Emilio Mitre Fernández

5.3. Participación ibérica

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ISSN: ISSN: 1698-4374 1698-4374 D.L.: BI-1741-04

La Guerra de los Cien Años:  primer conflicto global en e l espacio europeo

Emilio Mitre Fernández

5.5. Percepciones Percepciones y miserias sociales anejas a la Guerra

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lio & C rimen rimen C lio

nº 6 (2009) (2009),, pp. pp. 35/35 35/35

ISSN: ISSN: 1698-4374 1698-4374 D.L.: BI-1741-04