1.5 A Game of Fate - Scarlett St. Clair
February 2, 2023 | Author: Anonymous | Category: N/A
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Sinopsis Este libro es “A Touch of a Darkness” contado desde el punto de vista de Hades. Hades, Dios Dios del Inf Infra ramun mundo, do, es co cono noci cido do por su in ineexib xible le go bier erno, no, sus lu josos josos clu bes noc noctur turnos nos y sus impo imposib sibles les ofer ofertas. tas. Acostumbra tumb rado do a cont contro rolar, lar, no es está tá pre prepa para rado do pa para ra descub descubrir rir que las Moiras han elegi elegido do a su fu futu tura ra es espo posa sa y reina, reina, Per Persé séfo fone, ne, Diosa Diosa de la Prima Pri mave vera. ra. A pesar pesar de su at atrac racci ción ón por el dios, dios, Per Persé séfo fone, ne, una am bici biciosa osa estudi tu dian ante te de pe peri riodis odismo, mo, está está de deci cidi dida da a ex expo poner ner a Hades Hades por sus crueles cru eles y despi despiada adados dos ac actos. tos. Hades se enfren enfrenta ta a lo impo imposib sible, le, demost demostrar rar que su futu futura ra espoesposa está está equivo equivoca cada. da. A pesar pesar de sus esfu esfuer erzos, zos, hay fuer fuerzas zas que de dese sean an sepa se parar rarlos los y Ha Hades des des descub cubre re que hará hará cual cualqu quiier cosa cosa por su amor prohi pro hi bido, bido, inc inclu luso so desa desa ar a las Moiras. Moiras.
Capítulo I Un juego de equilibrio Hades se mani manifes festó tó cerca cerca de la Cos Costa ta de los Dioses. Dioses. A la luz del sol, la costa costa se jac jacta ta ba de aguas aguas turqu turquesas esas y pla playas yas blancas blan cas e inma inmacu cula ladas, das, to todo do ello ello an ante te el te telón lón de fondo fondo de acan acanti tilalados, grutas, grutas, y un monas monaste terio rio const constru ruido ido en mármol mármol blan blanco co y ver verde de al que se podía podía acce acceder der despu después és de su bir tres tresci cien entos tos esca escalo lones. nes. Los morta mor tales les acu acudí dían an aquí pa para ra nadar, nadar, na nave vegar gar y hacer hacer snor snorkel. kel. Era un oasis, hasta hasta que el sol ha hacía cía su ardi ardien ente te descen descenso so en el ci cielo. elo. Después del crepús crepúscu culo, lo, el mal se movía movía en la noche noche oscu oscura, ra, ba jo un cielo cielo de estrel estrellas las y un océano océano ilumi ilumina nado do por la luz de lu luna. na. Llegó Llegó en barcos barcos y se mo movió vió a tra través vés de Nu Nueva eva Gre Grecia, cia, y Hades Hades es esta ta ba aquí para pa ra ne neut utra ralilizar zarlo. lo. Se volvió, volvió, la gra grava va cru jió jió ba jo sus pi pies es y cami caminó nó en di direc recci ción ón a La Compa Com pañía ñía Co Corin rinto, to, una pesqu pesquería ería que ocupa ocupa ba una gran can canti tidad dad de bienes bienes ra raíces íces en la cos costa. ta. La fac facha hada da de ye yeso so del alma almacén cén se mezcla ba a la per perfec fecci ción ón con la ar arqu quitec itectu tura ra anti antigua gua que ador adorna na ba la costa, luci lucien endo do gasta gastada, da, blanqu blanqueeada y encan encanta tado dora. ra. Una simple simple lám lámpapara negra negra re resal salta ta ba un letre letrero ro con el nomb nombre re de la emp empre resa, sa, esc escri rito to con una fuen fuente te que presu presumía mía presti prestigio gio y po poder, der, carac caracte terís rísti ticas cas ad admimirables rab les cuan cuando do per perte tene necí cían an a los me j jores ores de la so soci ciedad. edad. Peligrosas cuan cuando do per perte tene necí cían an a lo pe peor. or.
Un mortal mortal se mo movió vió en las somb sombras. ras. Ha bía es esta tado do al allílí desde desde que llegó lle gó y, sin duda, duda, pensa pensa ba que esta esta ba bien bien es escon condi dido, do, lo que tal vez era para para ot otros ros mor morta tales, les, pe pero ro Ha Hades des era un di dios os y po pose seía ía las sombras. Al pasar, pasar, el hombre hombre se mo movió vió y Ha Hades des se gi giró, ró, su mano mano alcan alcanzó zó la del mortal. mortal. Soste Sostenía nía una pis pisto tola. la. Miró Miró el arma arma y lu luego ego al homb hombre, re, una sonri sonrisa sa mali malici ciosa osa cru cruzó zó sus la bios. bios. Un segun segundo do des despu pués, és, pú púas as ala aladas das se exten extendi dieron eron des desde de la punta de los dedos dedos de Ha Hades, des, hundi hundién éndo dose se en la carne carne del homb hombre. re. Su arma ar ma ca cayó yó al suelo suelo y él ca cayó yó de ro rodil dillas las con un gri grito to gutu gutural. ral. —Por favor, favor, perdó perdóne neme, me, milord milord —sup —suplilicó có el hombre—. hombre—. No sa bía. Hades siemp siempre re en encont contra ra ba intri intrigan gantes tes los se segun gundos dos antes antes de la muer mu erte te de un mor mortal. tal. Espe Especi cial almen mente te cu cuan ando do se tra trata ta ba de uno como como este, es te, uno que hab habría ría mata matado do sin pen pensar sarlo lo y, sin em bar bargo, go, te temía mía su propia pro pia desa desapa pari rici ción. ón. Apretó su agarre agarre y, mi mient entras ras el homb hombre re temb tembla la ba, el di dios os se rio. —Tu muer muerte te no es in inmi minen nente te —di jo jo Ha Hades, des, y el mortal mortal miró miró hacia arri arri ba—. ba—. Pe Pero ro habla hablaré ré con tu emple empleador. ador. —¿Mi emple empleador? ador? Enton tonces ces el mor mortal tal se ha haría ría el tonto tonto. Hades casi casi gi gimió. mió. En —Sísifo de Ephyra. Ephyra. —É-él no está está aquí. Mentira. El cono conoci cimi mien ento to cubrió cubrió su lengua lengua como como ceni ceniza, za, se secán cándo dole le la garganta. gan ta. Levantó al hombre hombre por el brazo, brazo, con pú púas as aún incrus incrusta tadas das en su piel, pi el, has hasta ta que sus mi mira radas das es estu tuvi vieron eron al mismo mismo ni nivel. vel. Fue desde desde este ángu ángulo lo que notó notó un tatu tatuaa je en la muñe muñeca ca del hombre. hombre. Era un tri triánángulo, gu lo, ahora ahora empal empalma mado do por las pú púas as que se ex exten tendí dían an des desde de sus dedos. —No nece necesi sito to tu ayu ayuda da para para entrar entrar en ese al alma macén cén —di jo jo Ha Hades des
—. Lo que nece necesi sito to de ti es un ejemp ejemplo. lo. —¿U-un ejemp ejemplo? lo? Hades deci decidió dió usar ac acci ciones ones pa para ra exp explilicar, car, tallan tallando do dos pro profunfundas su suras ras en el rost rostro ro del hombre. hombre. Mi Mient entras ras la sang sangre re cub cubría ría su piel, piel, cuel cu ello lo y ropa, ropa, el dios dios lo ar arrast rastró ró hasta hasta la entra entrada da del al alma macén, cén, ab abrió rió las puer puertas tas de una pata patada da y ent entró. ró. Lo que ha bía pare pareci cido do un edi edicio desde desde la oril orilla, la, ahora ahora pa pare recía cía ser una pared, pared, porque porque en lu lugar gar de cami caminar nar ha hacia cia un es espa pacio cio cer cerra rado, do, Hades Ha des se en encont contró ró en un pa patio tio abier abierto to al ci cielo elo os oscu curo. ro. La tier tierra ra estaesta ba desnu desnuda da y ha bía grandes grandes es estan tanqu ques es sobre sobre el su suelo elo con peces. peces. El aire olía a océano, océano, podre podredumb dumbre re y sal. Odiaba Odiaba el hedor. hedor. Los tra ba j jado adores res vesti vestidos dos con ove overo roles les negros negros se gi gira raron ron pa para ra ver al dios dios em empu pu j jar ar al ensang ensangren renta tado do mortal mortal ha hacia cia de delan lante. te. El hombre trasta trasta bil billó, ló, pe pero ro se con contu tuvo vo antes antes de caer caer al su suelo. elo. Otro Otro hombre hombre se acercó acer có fren frente te a Hades, Hades, anqu anqueeado por dos grandes grandes gu guar arda daes espal paldas. das. Vestía Ves tía un tra je blan blanco co y te tenía nía los dedos dedos gor gordos dos y cu bi bier ertos tos con anillos de oro. Su ca bel bello lo era corto corto y neg negro, ro, su bar ba cuida cuidada da y en enheb hebrarada con plata. plata. —Sís, yo-yo-no fue mi culpa culpa —di jo jo el hombre hombre mi mient entras ras se tam baleaba leaba ha hacia cia delan delante—. te—. Yo… Sísifo sacó sacó un arma arma y le dispa disparó. ró. Ca Cayó, yó, gol golpe pean ando do el su suelo elo con un ruido ruido sordo. sordo. Ha Hades des miró miró el cu cuer erpo po in inmó móvil vil y luego luego a Sísi Sísifo. fo. —Él no esta esta ba equivo equivoca cado do —di jo jo Ha Hades. des. —No lo maté maté por porque que te de jó ent entrar rar en mi pro propi piedad. edad. Lo ma maté té porque por que le ha falta faltado do el res respe peto to a un di dios. os. Una exhi exhi bici bición ón co como mo esa ge gene neral ralmen mente te prove provenía nía de un su j su jeto eto leal. Hades Hades te tenía nía pocos, pocos, y sa bía que Sísi Sísifo fo no era uno de ellos. ellos. —¿Esta es tu versi versión ón de un sacri sacri cio? —Depende —respon —respondió dió el homb hombre, re, haci hacien endo do cru j jir ir su cu cuel ello lo y entre ent regan gando do su ar arma ma al guar guarda daes espal paldas das de la de derec recha—. ha—. ¿Lo acep aceptas? tas? —No. —Entonces fue el nego negocio. cio.
Sísifo se ende endere rezó zó las so sola lapas pas de su cha chaqu queta eta y se ajus ajustó tó los gemelos, me los, y Hades Hades no notó tó el mismo mismo ta tatu tuaa je de trián triángu gulo lo en su muñe muñeca. ca. —¿Entramos? —El mortal mortal le indi indicó có a Ha Hades des que ca cami mina nara ra al frente, fren te, ha hacia cia una o oci cina na en el lado lado opues opuesto to del pa patio—. tio—. Divi Divini nidad dad prime pri mero. ro. —Insisto —decli —declinó nó Ha Hades. des. A pesar pesar de su po poder, der, nunca nunca estu estuvo vo ansi ansioso oso por dar darle le la espal espalda. da. Los ojos ojos de Sísi Sísifo fo se ent entre recer cerra raron ron le leve vemen mente. te. El mortal mortal pro bablemen lemente te vio la ne nega gati tiva va de Hades Hades a lide liderar rar como como una for forma ma de falta falta de respe respeto, to, prin princi cipal palmen mente te por porque que most mostra ra ba que Hades Hades no con con aba en él. Iróni Irónico, co, con consi side deran rando do que Sísi Sísifo fo ha bía ro roto to una de las reglas reglas más anti antigu guas as de la hospi hospita talilidad, dad, la ley de Xe Xenia, nia, al matar matar a su competen pe tencia cia des despu pués és de in invi vitar tarlos los a su ter terri rito torio. rio. Era solo solo una de las transg transgre resi siones ones de Sísi Sísifo fo que Ha Hades des esta esta ba aquí para para abordar. abordar. —Muy bien, bien, milord. milord. —El mor mortal tal ofre ofreció ció una son sonri risa sa fría an antes tes de diri di rigir girse se hacia hacia su o oci cina, na, con los dos guar guarda daes espal paldas das a cu cues estas. tas. Su presen pre sencia cia era di diver verti tida, da, co como mo si los dos morta mortales les pu pudi dieran eran pro prote teger ger a Sísi Sísifo fo de él. Hades se encont encontró ró con consi side deran rando do cómo cómo los eli elimi mina naría. ría. Te Tenía nía va varirias opci opciones: ones: po podía día lla llamar mar a las somb sombras ras y de jar jar que los con consu sumi mieran, eran, o podía podía some someter terlos. los. Su Supu puso so que la úni única ca consi conside dera raci ción ón re real al era si quería sangre sangre en su tra j jeo eo no. Los dos guar guarda daes espal paldas das ocu ocupa paron ron sus lu luga gares res a am bos lados lados de la puer puerta ta cu cuan ando do Sí Sísi sifo fo ent entró ró en su o oci cina. na. Ha Hades des no los mi miró ró al pasar. La oci ocina na era pe pequ queña. eña. Su esc escri rito torio rio era de made madera ra só sólilida, da, te teñiñido de oscu oscuro ro y lleno lleno de pa pape peleo. leo. A un la lado do ha bía un telé teléfo fono no antiantiguo y al otro otro una lico licore rera ra de cris cristal tal y dos vasos. vasos. Det Detrás rás de él, un par de venta ventanas nas da ban al pa patio, tio, obst obstru ruidas idas por per persi sianas. anas. Fue detrás detrás del escri escrito torio rio don donde de Sí Sísi sifo fo eli eligió gió parar pararse, se, un mo movi vimimiento en to estra estraté tégi gico, co, ima imagi ginó. nó. Pu Puso so al algo go fí físi sico co ent entre re el ellos. los. Pro bable bablemen mente te tam bién bién era don donde de gu guar arda da ba un depó depósi sito to de ar armas. mas. No es que le sir-
vi vieran eran de mucho, mucho, pe pero ro Ha Hades des ha bía existi existido do du duran rante te siglos siglos y sa bía que los morta mortales les de deses sespe pera rados dos in inten tenta tarí rían an cu cual alqu quiier co cosa. sa. —¿Burbon? —pregun —preguntó tó Sísi Sísifo fo mi mient entras ras des descorc corcha ha ba la lilico core rera. ra. —No. mor mortal miró ró jun amente te ayHa Hades des por momen mento to antes antes de servirse vir seElun vaso. vatal so. mi To Tomó mó jamen sor bo pre pregun guntó: tó: un mo —¿A qué de bo el placer? placer? Hades miró miró ha hacia cia la pu puer erta. ta. Des Desde de aquí, po podía día ver los estan estanqu ques, es, y asintió asintió ha hacia cia ellos. ellos. —Sé que están están escon escondi dien endo do drogas drogas en tus pis pisci cinas nas —di jo—. jo—. Tam bién bién sé que usas es esta ta emp empre resa sa co como mo fac facha hada da pa para ra trasla trasladar darlas las por Nueva Nueva Grecia Grecia y que ma matas tas a cu cual alqu quiiera que se inter interpon ponga ga en tu cami ca mino. no. Sísifo mide rósu jamen jamente te tes a Ha Hades por un momen mento to y luego luego to tomó mó un sor bo len lento tomiró va vaso so antes an dedes pre pregun guntar: tar:mo —¿Has veni venido do a qu quitar itarme me la vi vida? da? —No. No era menti mentira. ra. Ha Hades des no co cosec secha ha ba almas, almas, Tá Tána natos tos sí, pe pero ro el Dios Di os del Infra Inframun mundo do pudo pudo ver que Sí Sísi sifo fo de bía reci reci bir bir la vi visi sita ta pronto. La visi visión ón ha bía lle llega gado, do, espon espontá táne neamen amente, te, co como mo un recu recuer erdo do de hace ha ce muc mucho ho tiem tiempo. po. Sísi Sísifo, fo, ves vesti tido do ele elegan gante temen mente, te, derrum derrum bándo bándose se al salir salir de un resta restauran urante te de lu jo. Nunca recu recupe pera raría ría la con conci cien encia. cia. Y, antes antes de que eso su suce cedi diera, era, Ha Hades des tend tendría ría equ equilib ilibrio. rio. —¿Entonces de be bería ría asu asumir mir que qui quieres una ta jada? jada? Hades incli inclinó nó la ca beza beza ha hacia cia un lado. lado. —De algún algún tipo. tipo. Sísifo se rio entre entre dien dientes. tes. —Quién lo hu bi biera era ima imagi gina nado, do, el Di Dios os de los Mu Muer ertos tos vino vino a negoci go ciar. ar. Hades apre apretó tó los di dien entes. tes. No le gustó gustó la imp implilica caci ción ón de las pa palablab-
ras de Sísi Sísifo, fo, co como mo si el mortal mortal pen pensa sara ra que tenía tenía la venta venta ja. —Como peni peniten tencia cia por tus de delilitos, tos, dona donarás rás la mi mitad tad de tus ingresos resos a las per perso sonas nas sin hogar. hogar. Des Despu pués és de to todo, do, eres respon responsab sable le de muchos muc hos de ellos. ellos. Las drogas drogas que tra tra ca ba Sí Sísi sifo fo ha bí bían an dest destru ruido ido vidas, vidas, devo devoranrando a los morta mortales les de dentro dentro ha hacia cia fu fuera era con adicci adicción ón y en encen cendi dien endo do la violen violencia cia en las co comu muni nida dades, des, y si bi bien en él no fue el úni único co res responponsable, sab le, fueron fueron sus barcos barcos los que la lle lleva varon ron al conti continen nente te y sus ca camimiones las que la transpor transporta taron ron a Nueva Nueva Gre Grecia. cia. —¿No se cumple cumple la pe peni niten tencia cia en la ot otra ra vi vida? da? —pre —pregun guntó tó Sí Sísi sifo. fo. —Considéralo un favor. favor. Te es estoy toy per permi miti tien endo do un comi comien enzo zo tempra temp rano. no. Sísifo usó su lengua lengua para para hurgar hurgarse se entre entre los dien dientes, tes, luego luego se rio en silen silencio. cio. —Sabes, nunca nunca te desc descri ri ben ben como como un dios dios justo. justo. —No lo soy. —Obligar a delin delincu cuen entes tes como como yo a donar donar a orga organi niza zaci ciones ones bené né cas es justo. justo. —Es equilib equilibrio. rio. Un pre precio cio que pa pagas gas por el mal que espar esparces. ces. Hades no creía creía en erra erradi dicar car el mun mundo do del mal, porque porque no creía creía que fuera fuera posib posible. le. Lo que era ma malo lo para para uno era la luc lucha ha por la li berbertad para para ot otro, ro, la Gran Guer Guerra ra fue un ej ejemp emplo. lo. Un lado lado luc luchó hó por sus dioses, di oses, su j jor re reli gión, ón,pu eldootro othacer rocer luc luchó hó por li berar beun rarse seque de su pre presun sunto to op resor. Lo me orligi que pudo ha fue ofre ofrecer cer toque to de reden re denci ción ónoprepa para ra que su senten sentencia cia en el Inf Infra ramun mundo do eventu eventual almen mente te condu condu j jera era a los campos cam pos de As Asfó fóde delos. los. —Pero tú no eres el Dios Dios del Equilib Equilibrio. rio. Tú eres el Di Dios os de los Muer Mu ertos. tos. No servi serviría ría de na nada da exp explilicar car el fun funci ciona onami mien ento to de las Moiras, Moiras, el equilib equ ilibrio rio que se es esfor forza za ban por crear crear en el mun mundo, do, por lo que permane ma neció ció en silen silencio. cio. Sísi Sísifo fo sa sacó có una ca ja de metal metal del bolsil bolsillo lo in inte teri rior or de su chaqu chaqueta eta y tomó tomó un ci cigar garril rillo. lo.
—Te diré diré qué. —Se lle llevó vó el cigar cigarril rillo lo a los la la bi bios os y lo en encen cendió. dió. El olor a nico nicoti tina na lle llenó nó la pe pequ queña eña sala: sala: ceni cenici cien ento, to, rancio rancio y qu quími ímico co —. Dona Donaré ré un mil millón lón y ya no viola violaré ré la ley de Xe Xenia. nia. Hades hizo hizo una pausa pausa por un momen momento to y usó el silen silencio cio pa para ra repri rep rimir mir la corri corrien ente te de ira que las palab palabras ras del mor mortal tal encen encendi dieron, eron, sus manos manos haci hacién éndo dose se puños. puños. No hace hace muc mucho, ho, él hu biera biera de jado jado que su furia furia se hici hiciera era car cargo, go, mandan mandando do al mor mortal tal al Tár Tárta taro ro sin pen pensar sarlo lo dos veces. veces. En lugar lugar de eso, de jo que la oscu oscuri ridad dad hi hici ciera era el tra ba jo por él. Fuera Fuera de la oci ocina na de Sí Sísi sifo, fo, Ha Hades des lla llamó mó a las somb sombras ras y el ellas las se desli desliza zaron ron a tra través vés del ex exte teri rior or de edi edicio, os oscu cure reci cien endo do las ventaventanas mient mientras ras pa pasa saron. ron. Hades obser observó vó mi mient entras ras Sí Sísi sifo fo se gi gira ra ba, sus oj ojos os sigu siguiien endo do las sombras somb ras has hasta ta que se acer acerca caron ron a los dos guar guarda daes espal paldas das al fren frente te de la oci ocina. na. En el sigu siguiiente ente segun segundo, do, se desli desliza zaron ron en ca cada da ori ori cio de sus cuer cu pos colap lapsa saron, ron, muer mu ertos. tos. Loserpos oj ojos os ydeco Sí Sísi sifo fo reg regre resa saron ron a los de Hades Hades y sonrió. sonrió. —Pensándolo bien, —Pensándolo bi en, ti tiene ene un acu acuer erdo, do, lord Ha Hades des —di jo jo Sí Sísi sifo—. fo—. Dosci Dos cien entos tos cincu cincuen enta ta millo millones nes se serán. rán. —Tres —contes —contestó tó Hades. Hades. Desafío destel destelló ló de la mi mira rada da del mor mortal. tal. —Eso es más de la mitad mitad de mi ing ingre reso. so. —Un casti castigo go por ha hacer cerme me per perder der el ti tiem empo po —di jo jo Hades. Hades. Comenzó men zó a gi girar rarse se pa para ra de j jar ar la o oci cina na an antes tes de ha hacer cer una pa pausa. usa. Miró Miró sobre sob re su homb hombro ro al mortal—. mortal—. Y no me pre preocu ocupa pa que se rom rompa pa la ley de Xenia, Xenia, mortal. mortal. No te qu queda eda mucho mucho tiem tiempo. po. Sísifo quedó quedó en si silen lencio cio des despu pués és de las pa palab labras ras de Ha Hades. des. ListoListones de humo humo dan danza zaron ron del ci cigar garril rillo lo sus suspen pendi dido do ent entre re sus dedos. dedos. Despu Des pués és de un mo momen mento, to, lo le levan vantó tó y lo apa apagó gó en su be bi be bida. da. —Dime algo algo —di jo jo él—. ¿Por qué hacer hacerlo? lo? ¿Ne ¿Nego goci ciaci ación ón y equilibrio? ilib rio? ¿Tienes ¿Tienes es espe peran ranza za por la hu huma mani nidad? dad? —¿No tienes tienes nin ningu guna? na? —contrar —contrarres restó tó Ha Hades. des. —Vivo ent entre re morta mor tales, les,zalord Ha Hades. des.lado Créame, cuan ando dorán selalesos dé la opci op ción ón de inc incli linar nar la ba balan lanza hacia hacia un laCré do uame, otro, otro,cu elegi ele girán oscu curiri-
dad. Es el cami camino no más corto corto con el be bene ne cio más rápi rápido. do. —Y con más que perder perder —di jo jo Ha Hades—. des—. No me des lec lecci ciones ones sobre sob re la na natu tura rale leza za de los mor morta tales, les, Sí Sísi sifo. fo. He juz juzga gado do a los de tu especie pe cie du duran rante te un mi mile lenio. nio. Hades se detu detuvo vo frente frente a la pu puer erta, ta, miran mirando do a los dos homb hombres res que yací yacían an a sus pi pies. es. No se dele deleita ita ba con la idea de de devol volver verlos los a la vi vida da para para que si sigu guiieran difun difundi dien endo do violen violencia cia y mu muer erte, te, pero pero sa bía que las Moiras Moiras exigi exigirí rían an un sac sacri ri cio, alma alma por al alma, ma, y era pro bab pro bable le que eligi eligieran eran almas almas que fueran fueran buenas, buenas, puras puras e inocen inocentes. tes. Equilibrio , pensó pensó Ha Hades des y, de repen repente, te, odió la pa palab labra. ra. —Despierten —ordenó. —ordenó. Y cuan cuando do in inha hala laron ron fuer fuertes tes alien alientos, tos, desa desapa pare reció. ció.
Capítulo II Un juego de fe Hades apare apareció ció en su oci ocina na en Ne Never vernight, night, uno de los clu bes más popu popula lares res de Nueva Nueva Ate Atenas. nas. Eran cerca cerca de las once once y, a medimedianoche, anoc he, esta estaría ría su bien biendo do a la sala sala de es estar, tar, eligi eligien endo do morta mortales les que anhe an hela la ban ne nego goci ciar ar por sus ma mayo yores res de dese seos os y ne nece cesi sida dades; des; salud, salud, amor, y riqu riqueza. eza. Esas eran so solo lo las cosas cosas que él po podía día conce conceder. der. No inclu inc luía ía peti petici ciones ones co como mo cre crear ar vi vida, da, reg regre resar sar la vida, vida, u otorgar otorgar bellebelleza, dese deseos os que él no con conce cede dería. ría. —Llegas tarde. tarde. La voz de Menta Menta era como como un lá láti tigo, go, destro destrozan zando do sus pen pensa samimientos. en tos. La ha bía sen senti tido do en el mo momen mento to en que ent entró ró en la ha bi ha bita taci ción, ón, todo todo fu fuego ego y hielo, hielo, y prefe prefería ría ig igno norar rarla la cu cuan ando do es esta ta ba así. Se concent concentró ró en aj ajus ustar tarse se la cor ba bata ta y los ge geme melos, los, silen silenci ciosaosamente men te ali alivi viado ado de ha ber ele elegi gido do la ma magia gia de las sombras sombras pa para ra der derriri bar a los guar guarda daes espal paldas das de Sí Sísi sifo, fo, por lo que no tu tuvo vo que es escuc cuchar har a la ninfa ninfa exi exigir gir res respu pues estas. tas. Con su apa apari rien encia cia resta restaura urada, da, se volvió volvió hacia ha cia la nin ninfa fa de ca bel bello lo llame llamean ante. te. Sus la bios, bios, un to tono no más oscu oscuro ro que su ca bello, bello, esta esta ban torci torcidos dos en un puc puche hero. ro. No le gusta gusta ba que la igno ignora raran. ran. —Menta, ¿cómo ¿cómo puedo puedo llegar llegar tar tarde de si no cump cumplo lo con el hora horario rio de nadie nadie más que el mío?
Menta ha bía si sido do su asis asisten tente te des desde de el prin princi cipio pio de los ti tiem empos, pos, y pasó pasó por fa fases ses en las que in inten tenta taría ría ej ejer ercer cer de derec rechos hos sob sobre re él, derechos rec hos sob sobre re su ti tiem empo, po, su reino reino y su cuer cuerpo. po. Su an ansia sia de control control no se le esca escapó. pó. Reco Recono noció ció el ras rasgo go en el ella la por porque que él mismo mismo lo pose poseía. ía. —La tardan tardanza za no es at atrac racti tiva, va, Ha Hades, des, ni siqu siquiiera en un dios dios — espetó. espe tó. Una sonri sonrisa sa ame amena nazó zó sus la bios, bios, pe pero ro se man mantu tuvo vo se sere reno. no. Su diversi ver sión ón so solo lo la eno j eno jaría aría más. enttrete reteni nien endo… do… —Hades —Mientras esta esta bas en —Hades entre entrecer cerró ró los oj ojos os ante an te el gol golpe—. pe—. He te teni nido do que ent entre rete tener ner a tus invi invita tados. dos. Las ce j jas as de Ha Hades des se frunci fruncieron eron y el pa pavor vor su bió por su gar garganganta. —¿Quién me espe espera? ra? por exp expre sión ón Men Menta, ta,no la le for forma mataría en entre entpues recer cerró ró los ojos, ojos,Sabía y la lilige gera ralacurva cur varesi de su de boca, boca, que gus gusta ríaque su respu res esta. ta. —Lady Afro Afrodi dita. ta. — Mierda —mur —murmu muró ró Hades. Hades. Menta ni siqu siquiiera trató trató de ocultar ocultar su diver diversi sión, ón, sus la bios bios se curvaron va ron en una amplia amplia sonri sonrisa. sa. —Es posib posible le que dese desees es dar darte te pri prisa sa —di jo—. jo—. Cu Cuan ando do in insis sistí tí en que te espe espera rara ra aquí, di jo jo que ha bía mucho mucho para para entre entrete tener nerla la aba jo. Fantástico. Lo único único que sa salió lió de Af Afro rodi dita ta ent entre rete teni nién éndo dose se fue la guerguerra. Suspiró. —Gracias, Menta. Menta. Claramente compla complaci cida da por la exp expre resi sión ón de gra grati titud tud de Ha Hades, des, Menta Men ta desc descru ruzó zó los bra brazos, zos, de j ján ándo dolos los caer caer a los la lados. dos. —¿Le traigo traigo una be bida, bida, mi milord? lord? —Sí. De hecho, hecho, no voy a tener tener un va vaso so va vacío cío esta esta noc noche. he. Hades se desva desvane neció ció y apare apareció ció en el su suelo elo de su club, por don donde de cami ca mina na ba silen silenci cioso oso e invi invisib sible. le. Como Como si siemp empre, re, esta esta ba lle lleno no de mor-
tales tales y hu huma mano noides: ides: nin ninfas, fas, sá sáti tiros, ros, qu quime imeras, ras, centa centauros, uros, og ogros ros y cíclopes. lopes. Algu Algunos nos usaron usaron glamo glamour, ur, ot otros ros no. Algu Algunos nos simple simplemen mente te deseaban se aban ex expe peri rimen mentar tar la emo emoci ción ón de asis asistir tir al club más fa famo moso so de Nueva Nu eva Ate Atenas, nas, ot otros ros mi mira ra ban con nos nostal talgia gia ha hacia cia el sa salón lón de ar arri ri ba, ba, con la espe esperan ranza za de que uno de los emp emple leados ados de Hades Hades les ofre ofreci ciera era la contra contrase seña ña de la noc noche. he. Una contra contrase seña ña no ga garan ranti tiza za ba un ju juego ego con el Dios Dios de los Muer ertos, tos, era so solo lo un pa paso so más en el proce proceso. so. Una vez que los morta mortales les atra atrave vesa sa ban las puer puertas tas del salón salón el miedo miedo se ins insta tala la ba, y ese mi miedo edo los ale j jaba aba o de deses sespe pera ra ba. Era en los de deses sespe pera rados dos en los que Ha Hades des esta es ta ba más inte intere resa sado, do, los que podrí podrían an cam bi biar ar si se les of ofre reci ciera era la oportu opor tuni nidad. dad. Fue un proce proceso so deli delica cado do e invo involuc lucró ró a muchos muchos jugado jugadores. res. Hades Hades ha bía perdi perdido do una bu buena ena canti cantidad dad de ne nego goci cios, os, y po podía día sen sentir tirlos los contra cont rarosusipi piel, el,día unasalvar pivar cazón zón invi termi nable ymino unnore recor corda dato torio del fracafra caso, pe pero po podía salpica unainter vida daminab en elleca cami hacia ha cia la rio dest destruc rucci ción, ón, sentía sen tía que va valía lía la pena. pena. Recogió el aroma aroma de la ma magia gia de Af Afro rodi dita, ta, sal ma mari rina na y ro rosas, sas, y la encont encontró ró sen senta tada da en el re rega gazo zo de un hombre hombre de me medi diana ana edad. Tenía el ca bel bello lo oscu oscuro ro y ralo. ralo. Su fren frente te esta esta ba grasi gra sien enta ta y su rostro rostro regorde gor dete, te, fun fundi dién éndo dose se en un cuel cuello lo sudo sudoro roso, so, alre alrede dedor dor del cu cual al los brazos bra zos de Af Afro rodi dita ta es esta ta ban ent entre rela laza zados, dos, sus pec pechos hos presi presiona onados dos contra cont ra el pec pecho ho de él. Ha Hades des notó notó una ban banda da de oro en el dedo dedo anular izqu izquiier erdo do del homb hombre. re. No tenía tenía que mi mirar rar el alma alma del mor mortal tal para para sa ber que era un bas bastar tardo do in in el. —¿Por qué no vamos vamos a mi casa, casa, ne nena? na? —pregun —preguntó tó el hombre hombre mientras ent ras sus ma manos nos explo explora ra ban el cuer cuerpo po de Af Afro rodi dita, ta, mo movi vién éndo dose se a través tra vés de sus cos costil tillas las y sus mus muslos. los. Ha Hades des se en enco cogió gió al ob obser servar var la inte interac racci ción. ón. —Oh, real realmen mente te me gus gusta taría ría quedar quedarme me un po poco co más. —Esta ba dici di cien endo do Afro Afrodi dita—. ta—. ¿No qu quiieres nego negoci ciar ar con Ha Hades? des? El hombre hombre la apre apretó, tó, hun hundi dien endo do los dedos dedos en su tra trase sero. ro. —Ya no. Eres todo todo lo que nece necesi sito. to. —¿De verdad? verdad? —di jo jo Af Afro rodi dita ta sin ali alien ento, to, y se incli inclinó nó más cer cerca, ca,
sus la bios bios ro rosa sados dos a centí centímet metros ros de los de él. Hades tuvo tuvo que admi admitir tir que la Diosa Diosa del Amor era una gran actriz. Ocultó Ocultó su odio por el hombre hombre y lo distra distra jo con las ma manos nos mi miententras su bí bían an por su pec pecho. ho. Ha Hades des sintió sintió que su magia magia aumenta aumenta ba y supo que esta esta ba obli obligan gando do al hombre hombre a de decir cirle le la ver verdad dad mi mient entras ras le hacía ha cía su si sigu guiien ente te pregun pregunta. ta. —¿Qué te hacía hacía falta falta an antes? tes? Hades sa bía la res respu pues esta ta por porque que pu pudo do ver verla. la. Ha bían bían cre creci cido do garras en las inse insegu guri rida dades des del mor mortal tal mi mient entras ras en enve ve jeció, jeció, y se entre entrelalazaron za ron con su nar narci cisis sismo mo y nece necesi sidad dad de sentir sentirse se im impor portan tante. te. Te Tenía nía resen resenti timi mien ento to con su hi jo, jo, cer cerca ca de su co cora razón, zón, y ha bía en enve vene nena nado do su sangre, sangre, alimen alimenta tado do sus menti mentiras ras y pro provo voca cado do su cade cadena na de engaengaños. Le queda queda ba un poco poco de huma humani nidad dad en la cul culpa pa que se sen senta ta ba sobre sob re sus homb hombros ros co como mo una gár gárgo gola la las lasci civa. va. Pa Para ra adorme adormecer cer el dolor, be bió, lo pe pero ro susigni to tole leran cia que a la ne be bi be bida da ha bía aumen aumenta dotirse en úl últitimos años, que sig ni rancia ca ba nece cesi sita ta ba más pa para ra tado sentir sen se los se sepa pararado de lo que se ha bía conver converti tido do en su vi vida. da. El hombre hombre tenía tenía el al alma ma rota rota y Ha Hades des tenía tenía la sensa sensaci ción ón de que Afro Af rodi dita ta es esta ta ba a pun punto to de destro destrozar zarlo. lo. —Soy inse insegu guro. ro. Nece Necesi sito to sa ber que ot otras ras mu jeres jeres to toda davía vía me desean. se an. —¿Y no es su suci cien ente te ser queri querido do por tu espo esposa? sa? Los boni bonitos tos la bios bios de Af Afro rodi dita ta se tor torci cieron eron en una mu mueca. eca. Los ojos del hombre hombre se agran agranda daron, ron, su men mente te en desa desacu cuer erdo do con lo que salía de su boca. boca. Hades Hades lo ha bía vis visto to an antes, tes, cu cuan ando do usó el hec hechi hizo. zo. —Amo a mi espo esposa sa —di jo—. jo—. So Solo lo es estoy toy bus buscan cando do se sexo. xo. —¿Eso es todo? todo? —Ella pes pesta tañeó ñeó y luego luego habló habló con una voz velavelada por la oscu oscuri ridad dad y fu fuer erte te por la pro prome mesa—. sa—. En ese caso, caso, cuan cuando do regre reg reses ses con tu es espo posa sa esta esta noche, noche, ella ella ya no te dese deseará. ará. Se en enco coge gerá rá ante an te tu to toque que y tendrá tendrá arca arcadas das cuan cuando do tus la bios bios to toqu quen en los suyos. suyos. Te recha rechaza zará, rá, te de j jará ará y nun nunca ca te recu recupe pera rarás. rás. Los ojos ojos del homb hombre re se ag agran randa daron ron y ya no sos soste tenía nía a Af Afro rodi dita, ta, sus manos manos se aparta apartaron ron de su pi piel el como como si le qu quema emara. ra.
Esta era Afro Afrodi dita ta en su ver verda dade dera ra for forma. ma. El mundo mundo mortal mortal creía creía que no era más que un ser sexu sexual, al, que bus busca ca ba ent entre rete teni nimi mien ento to y placer pla cer tan tanto to de los di dioses oses co como mo de los morta mortales, les, pero pero la verdad verdad era que podía podía ser un dios dios venga vengati tivo, vo, espe especi cial almen mente te hacia hacia aqu aquel ellos los que traici tra iciona ona ban el amor. Probablemente era hora hora de que Hades Hades hi hici ciera era ac acto to de presen presencia. cia. —Afrodita —salu —saludó, dó, de j jan ando do ca caer er su glamo glamour. ur. La diosa diosa se vol volvió vió pa para ra en encont contrar rarse se con su mi mira rada da y son sonrió. rió. —Hades —ronro —ronroneó neó con voz sen sensu sual, al, y aunque aunque aca ba ba de maldecir de cir al mor mortal tal que to toda davía vía es esta ta ba usan usando do como como sillón, sillón, sus oj ojos os se nubla nub laron ron de deseo deseo por el so soni nido. do. —Creo que el mortal mortal ha te teni nido do su sucien ciente te emoci emoción ón por una noche. ¿Por qué no de j de jas as que se marche? marche? El ra rost rostro rorarlo de Af rodi ta saltar cam biófu an ante la su men menci ción ón in el, y se volvió para pa mi mirar lo Afro an antes tesdita de sal tar fuera eratede rega regazo. zo.del in —Corre, serpi serpien ente. te. El mortal mortal obede obedeció ció y se me metió tió ent entre re la multi multitud, tud, aturdi aturdido. do. —¿Qué? —espetó —espetó Af Afro rodi dita ta cu cuan ando do vol volvió vió a mi mirar rar a Hades. Hades. Arqueó las ce j jas, as, sorp sorpren rendi dido do por su ve vene neno. no. —Nada. Aunque Aunque di difí fícil cilmen mente te ayu ayuda darás rás al ego del hombre hombre quitándo itán dole le el único único amor que ha cono conoci cido. do. Ella se quitó quitó el pol polvo vo de las ma manos. nos. —Traicionó al amor, por lo que nunca nunca más lo tendrá. tendrá. —No creo que tu casti castigo go sea inj injus usto to —explicó —explicó Ha Hades—. des—. Pe Pero ro tiene el poten potenci cial al de cre crear ar un monst monstruo. ruo. Ella sonrió sonrió con su expre expresi sión ón tra travi viesa. esa. —Entonces es todo todo tu tuyo. yo. Los monstru monstruos os son tu ter terri rito torio, rio, Hades. Hades. Menta se acercó acercó en ese momen momento, to, sos soste teni nien endo do una bande bande ja de be bi bidas. das. Así era co como mo la ninfa ninfa pa pasa sa ba la mayor mayor par parte te de sus tar tardes des en Never Nevernight, night, re reci ci bien biendo do órde órdenes nes y ent entre regán gándo dolas, las, coqu coquete etean ando do con morta mortales les e in inmor morta tales les por igu igual al y re reuni unien endo do infor informa maci ción ón de los
clien cli entes tes más selec selectos tos de Hades. Hades. —Lady Afro Afrodi dita ta —di jo jo Menta Menta mi mient entras ras le pa pasa sa ba a la di diosa osa una copa co pa de vi vino no ro rosa sado—. do—. Lord Hades. Hades. Le entre entregó gó un va vaso so de whisky y, mi mient entras ras se ale j jaba, aba, él se volvió volvió hacia ha cia Af Afro rodi dita, ta, qu quiien alzó alzó una ce ja páli pálida. da. —¿Sí? —pregun —preguntó tó él ante ante su mi mira rada da in inter terro rogan gante. te. —Esa ninfa ninfa qu quiiere follar follarte te —di jo. jo. Un error error que nun nunca ca vol volve veré ré a co come meter ter , pensó. pensó. Hades no reco recono noció ció su co comen menta tario rio y en su lugar lugar di jo: jo: —No a menu menudo do hon honras ras mis pa pasil sillos los con tu pre presen sencia, cia, Af Afro rodi dita. ta. ¿Qué puedo puedo hacer hacer por ti? Ella tomó tomó un sor bo de vino, vino, sus oj ojos os como como la espu espuma ma de mar se cruza cru zaron ron con los de él. —Esperaba que estu estuvi vieras eras in inte tere resa sado do en una nego negoci ciaci ación ón pro propia. pia. —No juego juego con los di dioses. oses. —Solo un juego, juego, Ha Hades des —di jo jo ino inocen cente temen mente, te, y lu luego ego provo provocó có —: ¿Tienes ¿Tienes mi miedo? edo? —Un juego juego que se desar desarrol rolla la ba jo este este tec techo ho nun nunca ca es so solo lo un jusiquiiera pa para ra mí , pensó. ego. —Ni siqu pensó. Siemp Siempre re existía existía la posi posi bili bilidad dad de perder, per der, y él tendía tendía a perder perder tan tanto to como como los mor morta tales les que ne nego goci ciaban aban con él, pero pero po podía día con conce ceder der sus peti petici ciones. ones. No con con aba en lo que pediría di ría Af Afro rodi dita—. ta—. ¿Por qué so solilici citar tar un ju juego? ego? ¿Qué es lo que qu quiieres, diosa? di osa? —¿Por qué de bo qu querer erer algo? algo? —pre —pregun guntó tó el ella—. la—. Qu Quizás izás solo solo estoy aburri aburrida da y nece necesi sito to ent entre rete teni nimi mien ento. to. —No hay nada nada más pelig peligro roso so que una Af Afro rodi dita ta abur aburri rida da —re —reeexionó xionó Ha Hades. des. Ella hizo hizo un puc puche hero. ro. —¿Por favor, favor, Hades? Hades? Él la miró miró a los ojos ojos y be bió un sor bo de su vaso vaso antes antes de res responpon-
der.
—No, Afro Afrodi dita. ta. Ella esta esta ba det detrás rás de más que entre entrete teni nimi mien ento. to. Pudo Pudo ver la forma forma en que se movía, movía, rígi rígida da y ten tensa. sa. Al Algo go la ha bía tra traído ído aquí, y si él tuvi viera era que adivi adivinar, nar, tenía tenía que ver con su espo esposo. so. —Bien. —Ella levan levantó tó su bar billa billa con de desa safío—. fío—. Forzas Forzaste te mi mano. Él la fulmi fulminó nó con la mira mirada, da, sa bien biendo do lo que iba a decir decir a con contitinuaci nu ación. ón. —Tengo un favor favor sin recla reclamar mar de tu par parte, te, Ha Hades. des. De Deseo seo usarlo. usarlo. Un favor favor de bi bido do ent entre re di dioses oses era co como mo un pac pacto to de sangre. sangre. Una vez invo invoca cado, do, no podía podía ret retrac ractar tarse. se. —¿Vas a desper desperdi dici ciar ar un fa favor vor por un juego juego de cartas? cartas? —preguntó. gun tó. Sa bía la respu respues esta, ta, lo que sea que ha haya ya traído traído a Af Afro rodi dita ta aquí, valía va líaLos la pena pe nade gas gastar tarlo. ojos ojos el ella la lo. des destel tella laron. ron. —No es un des per perdi dicio cio. Bebió de su whisky. Lo detu detuvo vo de decir decir cu cual alqu quiier co cosa sa de lo que podría pod ría arre arrepen pentir tirse se an antes tes de res respon ponder der con di dien entes tes apre apreta tado. do. —Un ju juego, ego, Af Afro rodi dita, ta, no más. Ella se ilumi iluminó nó como como si le hu bi biera era da dado do las est estrel rellas las del cielo. cielo. —Gracias, Hades. Hades. Hades troEra tronó nó sus dedos, los has dosha se bi telet tetaci letrans ranspor taron ron a lausa Suite Su ba ite Ru bí, ar arri ri ba. ba. unade dedos, las ymuc muchas bita ciones onesporta que Ha Hades des para pa ra ha hacer cer sus ne nego goci ciaci aciones ones con los morta mortales. les. Todas Todas fu fueron eron nombradas ra das por pi pied edras ras pre preci ciosas. osas. Eli Eligió gió esta esta inten intenci cional onalmen mente, te, como como un pequ pe queño eño golpe golpe a Afro Afrodi dita. ta. Ru bí era pa pasi sión, ón, al algo go de lo que ella ella carecarecía estos estos dí días. as. Las pa pare redes des eran ro ro j jas, as, y te tela la neg negra ra ca caía ía del tec techo ho al suelo, su elo, en enmar marcan cando do sen sensu suales ales fotog fotogra rafí fías as mo monoc nocro romá máti ticas. cas. Una ba barara ja de car cartas tas sin abrir abrir se en encont contra ra ba en el cent centro ro de una me mesa, sa, que esta ba co colo loca cada da ba jo un marco marco de luz tenue. tenue. Cuando Hades Hades tomó tomó asi asien ento, to, se las ofre ofreció ció a Afro Afrodi dita. ta. —¿Te gusta gustaría ría nego negoci ciar? ar?
—No. —Una sonri sonrisa sa curvó curvó sus la bios—. bios—. Te de jaré jaré rete retener ner al algo go de poder, poder, Aidone Aidoneus. us. La miró. miró. No le gus gustó tó ese apo apodo. do. Los morta mortales les lo usa ban por miedo. Ella Ella lo usó pa para ra burlar burlarse se de él. —Blackjack, enton entonces. ces. —Cinco manos manos —di jo jo Af Afro rodi dita—. ta—. Qu Quiien ga gane ne más, eli je je el trato. trato. Hades estu estuvo vo de acu acuer erdo, do, re repar partió tió la pri prime mera ra mano mano y per perdió. dió. Sus dedos dedos se curva curvaron ron en un puño puño sobre sobre su mus muslo. lo. —¿Qué ves cuan cuando do mi miras ras mi al alma, ma, Ha Hades? des? —pre —pregun guntó tó Afro Afrodi dita ta de impro improvi viso, so, frun frunci cien endo do los la bi bios os mi mient entras ras él re repar partía tía las car cartas tas de nuevo. nu evo. La pregun pregunta ta no fue tan sorp sorpren renden dente. te. Era una que reci reci bía bía a menudo, nu do, pe pero ro nun nunca ca de Afro Afrodi dita. ta. —¿Por qué pregun preguntas? tas? Cuando se encont encontró ró con su mi mira rada, da, vio que hab habla la ba en se serio rio y que tam bién bién te temía mía la ver verdad. dad. Es Esta ta ba presen presente te en sus oj ojos, os, una sombra que parpa parpade deaba aba en su exp expre resi sión. ón. No lo mi miró ró mucho mucho antes antes de concentrar cent rarse se en sus car cartas. tas. —Dame —di jo, jo, y Ha Hades des le dio otra otra car carta ta an antes tes de re reve velar lar sus manos: Hades Hades tenía tenía dos ases y un doce doce de diaman diamantes, tes, Af Afro rodi dita, ta, se pa pasó. só. Ella El la frun frunció ció el ceño ceño por su pér pérdi dida, da, pe pero ro conti continuó nuó hab hablan lando do mient mientras ras Hades Ha des re repar partía tía una ter terce cera ra mano. mano. —Me pregun pregunto to si soy tan horrib horrible le co como mo pa pare rece ce pensar pensar He Hefes festo. to. Afrodita no era horrib horrible, le, pe pero ro su uni unión ón con Hefes Hefesto to ha bía en endudureci recido do su co cora razón zón y ro roto to su es espí píri ritu. tu. Lo que qu quedó edó fue un ca capa para razón zón renco ren coro roso so y cíni cínico. co. Hades tam bi bién én ha bía es esta tado do amarga amargado do una vez, pero pero a di dife ferenrencia de Afro Afrodi dita, ta, que lilidi diaba aba con su ira y so sole ledad dad entre entrete teni nién éndo dose se con morta mor tales les y di dioses, oses, él se ha bía ha bía ais aisla lado do más y más, has hasta ta que lo único único que la gente gente podía podía ha hacer cer era in inven ventar tar his histo tori rias as y cu cuen entos tos sobre sobre el Dios esqu esquivo ivo del Infra Inframun mundo. do. —Hefesto no cree que seas seas hor horrib rible, le, Af Afro rodi dita. ta. Simp Simple lemen mente te tiene tiene
miedo de amar miedo amarte. te. —Ella of ofre reció ció una risa risa burlo burlona, na, por lo que Hades Hades desa de saó—: ó—: ¿Algu ¿Alguna na vez le has dicho dicho que lo amas? —¿Qué rele relevan vancia cia ti tiene ene eso pa para ra mi pre pregun gunta? ta? Todo , quiso quiso de decir cir Hades. Hades. —Fuiste regalo rega lo Desde para paradeHe Hefes to en un momen moeras mento to enno elvia que hací hacías as alarde alarde de tusun amantes. aman tes. Des sufesto perspec pers pecti tiva, va, una novia re reacia. acia. No impor importa ta ba que Hades Hades supi supiera era la ver verdad. dad. Af Afro rodi dita ta si siemp empre re ha bía es esta tado do en encan canta tada da por el Dios Dios del Fuego. Fuego. En la an antigüedad, tigüedad, en las raras raras oca ocasi siones ones en que Ha Hades des ha bía ido al Mon Monte te Olimpo, Olimpo, la ha bía sorpren sorprendi dido do mi miran rando do a Hefes Hefesto, to, princi principal palmen mente te con el ceño ceño frunci cido do porque porque no le da ba la hora hora del día. Pero Hades Hades tam bi bién én co cono nocía cía bi bien en a He Hefes festo. to. El dios dios era de ot otro ro tipo. tipo. No es esta ta ba an ansi sioso oso por ser el cent centro ro de aten atenci ción, ón, me menos nos ansi ansioso oso por hablar. hablar. Disf Disfru ruta ta ba de la sole soledad dad y la in inno nova vaci ción, ón, y en su co corarazón, se sentía… sentía… indig indigno, no, princi principal palmen mente te de bido bido a su tra trato to en la antigüedad. Como Como di dios os con una so sola la pi pier erna, na, a me menu nudo, do, y sin ra razón, zón, se burla bur la ban de él. Con el tiem tiempo, po, Hefes Hefesto to se adaptó, adaptó, confec confecci cionó onó pró prótetesis, y ahora ahora lu lucía cía una hecha hecha de oro. —No me sorpren sorprende de que Hefes Hefesto to no esté esté inte intere resa sado do en ob obliligar garte te a la mono monoga gamia. mia. Afrodita se quedó quedó en si silen lencio cio por un momen momento, to, concent concentrán rándo dose se en su juego, juego, y mient mientras ras gi gira ra ban sus cartas, cartas, Hades Hades se mor mordió dió la lengua, se pasó. pasó. Se ha bía re repar parti tido do de dema masi siadas adas car cartas. tas. Afrodita esta esta ba a la ca be beza. za. Finalmente, admi admitió: tió: —Le pedí pedí el di divor vorcio cio a Ze Zeus. us. No lo conce concede derá. rá. Las ce j jas as de Ha Hades des se le levan vanta taron. ron. —¿Lo sa be He Hefes festo? to? —Me imagi imagino no que lo ha hace ce ahora. ahora. —Si qui quieres el amor de Hefes Hefesto, to, ¿por qué pedir pedir el divor divorcio? cio? —No suspi suspira raré ré por él. —Estás envi envian ando do men mensa sa j jes es contra contradic dicto tori rios, os, Af Afro rodi dita. ta. Qu Quiieres el
amor de Hefes Hefesto, to, pero pero pides pides el di divor vorcio. cio. ¿Has in inten tenta tado do si siqu quiiera hablar hab lar con él? —¿Y tú? —espetó —espetó el ella, la, mi miran rando do a Hades—. Hades—. ¡Tam bién bién pod podría ría estar mudo! mudo! Hades hizo hizo una mu mueca. eca. Tenía Tenía la sen sensa saci ción ón de que He Hefes festo to se mantu man tuvo vo calla callado do por porque que su tem tempe pera ramen mento to era una mec mecha ha cor corta. ta. —No has respon respondi dido do a mi pre pregun gunta, ta, Hades. Hades. El dios dios la mi miró ró por un mo momen mento. to. No le gus gusta ta ba es espe peci cial almen mente te respon res ponder der pre pregun guntas tas sobre sobre el alma. alma. A menu menudo, do, ni di dioses oses ni mor morta tales les esta es ta ban prepa prepara rados dos pa para ra es escuc cuchar har lo que tenía tenía que de decir. cir. Afro Afrodi dita ta no fue dife diferen rente. te. Partes Partes de su alma alma eran un jardín, jardín, lleno lleno de ro rosas, sas, liri lirios os y sol, soña soñado dora ra y tranqu tranquila. ila. Otras Otras eran una tor tormen menta, ta, furi furiosa osa y de devasvastado tadora ra sobre sobre un mar revu revuel elto. to. Es Esta ta ba rota, rota, parti partida da en dos co como mo un espe es pe jo, ba balan lance ceán ándo dose se sobre sobre una línea. línea. Un día, elegi elegiría ría un ban bando. do. —Tienes un alma alma her hermo mosa, sa, Af Afro rodi dita. ta. Apa Apasi siona onada. da. De Deter termi mina nada. da. Román Ro mánti tica. ca. Pero Pero es estás tás de deses sespe pera rada da por ser ama amada da y no te cre crees es dig digna na de serlo. serlo. Habló mient mientras ras juga ban su últi última ma mano, mano, y cuan cuando do Af Afro rodi dita ta volteó sus cartas, cartas, una amplia amplia son sonri risa sa apa apare reció ció en su rostro. rostro. Lo que sea que sinti sintiera era sobre sobre los co comen menta tari rios os de Ha Hades des se per perdió dió en su entu entusisiasmo. as mo. —Es hora hora de los tér térmi minos, nos, Ha Hades. des. Frunció el ceño ceño y se rec reclilinó nó en su sil silla, la, mirán mirándo dola. la. Afro Afrodi dita ta ec echó hó la ca be beza za ha hacia cia at atrás rás ri rien endo. do. —A algu alguiien no le gus gusta ta perder. perder. Sus palab palabras ras eran como como un atiza atizador. dor. A Ha Hades des no le im impor porta ta ba perder. per der. Lo hacía hacía muc muchas has veces veces cu cuan ando do ne nego goci ciaba aba con mor morta tales, les, pe pero ro no ha bía qu queri erido do per perder der cont contra ra Af Afro rodi dita. ta. La diosa diosa presi presionó onó un dedo dedo en su bar bil bar billa la y le of ofre reció ció un su suave ave murmul mur mullo, lo, como como si no su supi piera era que pe pedir dirle. le. Es Esta ta ba haci hacién éndo dolo lo perder perder su tiem tiempo. po. Sa bía lo que quería, quería, pe pero ro so solo lo cu cuan ando do es estu tuvo vo a punto punto de gritar gri tarle, le, hab habló. ló. —Enamórate, Hades. Hades. Aún me j jor, or, encu encuent entra ra una chi chica ca que se
enamore enamo re de ti. —Entonces —Entonces Afro Afrodi dita ta ap apla laudió udió y excla exclamó—: mó—: ¡Eso es! ¡Haz que algu alguiien se enamo enamore re de ti! La mandí mandí bula bula de Ha Hades des se ap apre retó tó y Af Afro rodi dita ta le de devol volvió vió la mi mirarada como como si qu quisi isiera era ver su al alma ma a su vez. Sus tér térmi minos nos fu fueron eron insulinsultantes. tan tes. Si fu fuera era tan fácil fácil enamo enamorar rarse, se, no es esta taría ría solo. solo. —¿Es esta esta tu idea de una bro broma? ma? —pregun —preguntó tó él, su voz tran tranqu quila ila y calma calmada, da, a pe pesar sar de la ira que re retor torcía cía sus entra entrañas. ñas. Iba a te tener ner que tortu tor turar rar a al algu guiien solo solo para para li berar berar la ten tensi sión ón en su cu cuer erpo. po. —No es una broma broma —respon —respondió, dió, le levan vantan tando do una del delga gada da ce ja ru bia—. Me has ofre ofreci cido do con conse se j jos os de amor. Sígu Síguelos. elos. Entonces no es una broma, broma, si sino no una retri retribu buci ción ón. Esta Esta ba frustra frustrada da con él por ofre ofrecer cer su opini opinión ón sob sobre re su matri matrimo monio. nio. —¿Y si no puedo puedo cump cumplir lir con esos térmi términos? nos? Su sonrisa sonri sa cruzó cru zórarás su rost rosilcon ma licia. cia. —Entonces li bera be rásrostro a Ba Basil delmali Inf Infra ramun mundo. do. —¿Tu amante? amante? —Hades —Hades no pu pudo do evi evitar tar el disgus disgusto to en su voz. Ha bí bían an pa pasa sado do los úl últi timos mos minu minutos tos dis discu cuti tien endo do su amor por HefesHefesto, y aquí esta esta ba ella, ella, pi pidi dien endo do un hombre, hombre, su héroe, héroe, para para ser exactos. Basil Basil ha bía lucha luchado do y mu muer erto to por el ella la en La Gran Gu Guer erra—. ra—. ¿Por qué? ¿No qui quieres que He Hefes festo to admi admita ta que te ama? Lo fulmi fulminó nó con la mira mirada. da. —Hefesto es una causa causa per perdi dida. da. —¡Ni siqu siquiiera lo has in inten tenta tado! do! —Basil , , Hades. Hades. Él es a qui quien qui quiero. —¿Porque te imagi imaginas nas ena enamo mora rada da de él? —¿Qué sa bes del amor? Nunca Nunca has amado amado en tu vi vida. da. Esas palab palabras ras no le do dolilieron, eron, sino sino que lo aver avergon gonza zaron. ron. Se inc inclilinó hacia hacia la di diosa. osa. —Basil te ama, eso es cier cierto, to, pero pero si no lo amas a cam cam bio, bio, no tiene senti sentido. do. —Es me j jor or ser ama amado do que na nada da —respon —respondió. dió.
Eres una tonta tonta , quiso quiso de decir. cir. En cam bio, pregun preguntó: tó: —¿Estás segu segura ra de que esto esto es lo que qui quieres? Ya has so solilici cita tado do el divor divorcio cio a Ze Zeus, us, aho ahora ra me ha pedi pedido do que re resu suci cite te a tu amante amante en caso ca so de que no pueda pueda cump cumplir lir con los térmi términos nos de tu contra contrato. to. Hefesto fes to lo sab sabrá. rá. Afrodita esta esta ba cal calla lada, da, y re reco cono noció ció su in incer certi tidumb dumbre re por la forma en que juga ba con su la bio. Finalmente, respon respondió: dió: —Sí. Es lo que qui quiero. —Entonces —Entonces respi respiró ró hon hondo do y log logró ró sonre sonreír ír —. Seis Seis me meses, ses, Ha Hades. des. Eso de be bería ría ser su su cien ciente te tiem tiempo. po. Graci Gracias as por el entre entrete teni nimi mien ento. to. Fue… esti estimu mulan lante te. Con eso, la Diosa Diosa del Amor de desa sapa pare reció. ció.
Capítulo III Un juego de restricción
Haz quelabras al gui gu se ena enamo more re delati.cruel Las palab pa rasieneran una bur burla cruel que hacía hacía eco en la mente mente de Hades Ha des mi mient entras ras me mero rode deaba aba en la os oscu curi ridad dad de su club pa para ra despe despe j jar ar su mente. mente. Tal vez ha bía ido de dema masi siado ado le j jos os en la críti crítica ca de la elecci elección ón de Afro Af rodi dita ta de pe pedir dirle le el di divor vorcio cio a Ze Zeus, us, pe pero ro Hades Hades sa bía que la diosa diosa ama ba a He Hefes festo, to, y le j jos os de admi admitir tirlo, lo, pen pensó só en forzar forzar al Dios Dios del Fuego a expre expresar sar sus sen senti timi mien entos tos enlo enloqu queci ecién éndo dolo. lo. Lo que Afro Afrodi dita ta no enten en tendió dió es que no to todos dos fun funci cionan onan como como el ella, la, y menos menos He Hefes festo. to. Si el ella la ga gana na ba su amor, se seria ria a tra través vés de la pa paci cien encia, cia, ama bili bilidad dad y atenci aten ción. ón. Signicaba que tenía tenía que ser vulne vulnerab rable, le, al algo go que Afro Afrodi dita, ta, la diosa y guer guerre rera, ra, desp despre recia. cia. Y si enten entendía día al algo, go, era eso. El desa desafío fío de Afro Afrodi dita ta lo ob obliligó gó a recono co nocer cer sus propi propias as vul vulne nera ra bili bilida dades, des, sus de debi bililida dades des. Frunció Frunció el ce ceño ño ante an te la idea de en encont contrar rar a al algu guiien que qui quiera cargar cargar su vergüenza, sus peca pecados, dos, su mali malicia, cia, pero pero si fal falla la ba, las Mo Moiras iras se in invo voluc lucra rarí rían, an, y sa bía lo que pe pedi dirí rían an si de devol volvía vía a Ba Basil sil a la ti tier erra ra de los vi vivos. vos. Un alma alma por un al alma. ma. Alguien tendría tendría que mo morir, rir, y no tendría tendría voz y voto voto con la vic victiti-
ma de las Moiras. Moiras. El pensa pensami mien ento to tensó tensó su cu cuer erpo, po, otro otro hilo hilo aña añadi dién éndo dose se a los demás sobre sobre su piel. piel. Lo odiaba, odiaba, pe pero ro ha bía un precio precio en mante mantener ner el equilib equ ilibrio rio del mun mundo. do. Un olor lo saco saco de sus pensa pensami mien entos tos y lo hizo hizo de dete tener nerse. se. Era famililiar, mi ar, ores ores sil silvest vestres res tanto tanto amar amargas gas como como dul dulces. ces. Deméter , pensó. pensó. El nombre nombre de la Di Diosa osa de la co cosec secha ha era amargo amargo en su len lengua. gua. Demé De méter ter tenía tenía al algu gunas nas pasi pasiones ones en su vi vida, da, y una de ellas ellas era su odio por el Dios Dios de los Mu Muer ertos. tos. Inhalo de nuevo, nuevo, toman tomando do profun profunda damen mente te la esencia. esencia. Al Algo go sob sobre re eso esta esta ba apaga apagado. do. Mezcla Mezclado do con el fa fami mililiar ar aro aroma ma es esta ta ba la dul dulzuzura de la vainil vainilla la y una su suave ave no nota ta her ba baria ria de la lavan vanda. da. Un mor mortal, tal, ¿tal vez? ¿Algui ¿Alguien que ti tiene ene el favor favor de la di diosa? osa? El aroma aroma lo sa sacó có de la os oscu curi ridad dad en la que se ha ha bía bía meti me tido do en el borde bor de del balcón, balcón, don donde de esca escaneó neó a la multi multitud tud y la encont encontró ró de inmedi me diato. ato. La mu j jer er que olía como como vainil vainilla, la, la lavan vanda, da, y su ene enemi migo, go, se sentasenta ba al a l bor borde de de uno de los sofás sofás con un ves vesti tido do ro rosa sa que de j jaba aba poco poco a la imagi imagina naci ción. ón. Le gus gusto to la forma forma en que lu lucía cía su ca bello, bello, rizos rizos cayendo yen do en olas lu lumi mino nosas sas por su es espal palda. da. Sus de dedos dos pica picaron ron por tocarlo, car lo, para para ti tirar rar de él hasta hasta que su ca beza beza se inc inclilina nara ra ha hacia cia at atrás rás y lo mira mi rara ra a los oj ojos. os. Mírame, or orde deno, no, de deses sespe pera rado do por ver su rost rostro. ro. Miró a todas todas par partes tes antes antes que su mira mirada da se de detu tuvi viera era en él. Su mano ma no se ap apre retó tó alre alrede dedor dor de su va vaso, so, y la otra otra se afer aferró ró a la baran barandildilla del balcón. balcón. Era hermo hermosa, sa, la bios bios lle llenos, nos, pómu pómulos los al altos tos y oj ojos os tan ver verdes des co como mo la nueva nueva prima primave vera. ra. Su exp expre resi sión ón fue de sorpre sorpresa sa al prin princi cipio, pio, oj ojos os abier abi ertos tos lilige gera ramen mente, te, trans transfor formán mándo dose se en algo algo fe feroz roz y apasi apasiona onado do mient mi entras ras su mi mira rada da bar barrió rió su rost rostro ro y forma. forma. Es tu ya , di jo jo una voz en su ca ca be beza, za, y al algo go dent dentro ro de él se rom rompió. pió. Reclá Rec láma mala. la.
La orden orden fue salva salva je. Tuvo que apre apretar tar los dien dientes tes para para evitar evitar obede obe decer, cer, y pen pensó só que pod podría ría romper romper el va vaso so en sus manos. manos. El impulso pul so de llevár llevárse sela la al Inf Infra ramun mundo do fue fuer fuerte, te, como como un hec hechi hizo. zo. Nunca se ha bía con consi side dera rado do tan dé bil, pe pero ro su rest restric ricci ción ón era un hi hilo lo delgado ga do y deshi deshilac lacha hado. do. ¿Cómo podía podía qu querer erer tanto tanto a es esta ta mu j jer? er? ¿Qué fue ese ti tirón rón an anti tina natutural? La miró miró más in inten tensa samen mente, te, bus buscan cando do una ra razón, zón, y se hizo hizo ob obvio vio que él no era el único único que esta esta ba sinti sintien endo do los efectos efectos de su cone conexixión. Ella Ella se in inqu quiietó ba jo su mira mirada, da, su pec pecho ho su bi bien endo do y ba jan jando do a medi me dida da que su res respi pira raci ción ón se agi agita ta ba, su piel piel se cubrió cubrió de un hermohermoso rosa, rosa, y te tenía nía la idea de que le gusta gus taría ría segu seguir ir ese ru bor con los la bios. bi os. Daría todo todo por sa ber qué es esta ta ba pensan pensando do el ella. la. Estaba tan preocu preocupa pado do por sus pro propi pios os pen pensa sami mien entos tos sala salaces, ces,
que se noenvol havolvi bíavieron sen senti tido do que al algu gui iensusecin acerca acer ca baReac élcionó has hasta que los brazos en eron al alre rede dedor dor de cintu tura. ra. Reaacci onótará rápi pida damen mente, te, aferrán afer rándo dose se a las manos manos que lo sos soste tení nían an y gi girán rándo dose se para para ver a Menta. Men ta. —¿Distraído, milord? milord? —ronro —ronroneo, neo, diver diverti tida. da. —Menta —respon —respondió, dió, sol soltan tando do sus bra brazos—. zos—. ¿Puedo ¿Puedo ayudar ayudarte? te? Estaba frustra frustrado do por su in inter terrup rupci ción, ón, pero pero tam bi bién én ag agra rade deci cido. do. Si segu seguía ía miran mirando do a esa mu j mu jer er por más ti tiem empo, po, podría podría ha ber de j jado ado su posi posici ción ón en el balcón balcón e ido ha hacia cia el ella. la. —¿Ya te estás estás concent concentran rando do en tu presa? presa? —pregun —preguntó. tó. Por un momen momento, to, Ha Hades des no enten entendió dió su co comen menta tario, rio, y lu luego ego hizo la cone conexi xión. ón. Menta Menta asumió asumió que es esta ta ba bus buscan cando do un po poten tenci cial al interés terés amo amoro roso, so, algu alguiien que podría podría ayudar ayudarle le a cump cumplir lir con el trato trato de Afro Af rodi dita. ta. —¿Escuchando de nuevo nuevo en las sombras, sombras, Menta? Menta? La ninfa ninfa se en enco cogió gió de homb hombros. ros. —Es lo que hago. hago. para ra mí —di je —Tu averi averigu guas as infor informa maci ción ón pa je —. No de mí.
—¿De que otra otra ma mane nera ra se supo supone ne que voy a mante mantener nerte te fuera fuera de proble prob lemas? mas? Resopló. —Soy un millón millón de años ma mayor. yor. Pu Puedo edo cuidar cuidarme me so solo. lo. —¿Es así como cosus moojos, termi entóuna apues esta ta con Af Afro rodi dita? ta? Entrecerró ojter os,minas luego lunaste egotesoltó sol su apu va vaso. so. —¿No te di je je que no de bo tener tener un va vaso so va vacío cío esta esta noc noche? he? folla lame me y contes Ella le dio su me j jor or sonri sonrisa sa fol contestó: tó: —De inme inmedi diato, ato, mi milord. lord. Se asegu aseguró ró de que Menta Menta no es esta ta ba a la vis vista ta an antes tes de reg regre resar sar su mira mi rada da al pi piso. so. La mu jer jer ha bía reg regre resa sado do con sus amigos. amigos. Hades los estu estudió dió en un inten intento to de dis discer cernir nir el ti tipo po de com compa pañía ñía que mante mantenía, nía, cuan cuando do no notó tó a al algu guiien de qui quien no era parti particu cular larmenmente aci aciona onado, do, un homb hombre re llama llamado do Ado Adonis. nis. Era uno de los morta mortales les favo favori ritos tos de Af Afro rodi dita. ta. Por Porqué, qué, no tenía tenía idea. El mortal mortal era un mentimentiroso ro so y tenía tenía un co cora razón zón tan neg negro ro como como el Es Esti tigia, gia, pe pero ro supo suponía nía que la diosa diosa del Amor te tenía nía di di cul culta tades des en ver más allá allá de su hermo hermoso so rostro. rost ro. Esperaba que la mu j mu jer er no compar comparti tiera era esa cu cuali alidad. dad. Frun Frunció ció el ceño, ce ño, pre pregun guntán tándo dose se si ella ella de j jaría aría el club con él es esta ta noc noche, he, y lu luego ego se rega regañó ñó por tener tener es estos tos pen pensa sami mien entos. tos. Su preocu preocupa paci ción ón no de bería bería llegar lle gar más allá allá que temer temer por su bienes bienestar, tar, ya que Afro Afrodi dita ta era a acicionada ona dates. a cas casti tigar gar a cu cual alqu quiiera que les di diera era dema demasi siada ada aten atenci ción ón a sus aman amantes. —Su be bida, bida, mi milord lord —di jo jo Ili Ilias. as. Hades miró miró al sá sáti tiro, ro, ali alivi viado ado de ha ber sen senti tido do su acer acerca cami mien ento. to. Ilias podría podría ser desc descri rito to co como mo ot otro ro asis asisten tente. te. Ha bía tra tra ba ba j jado ado para Hades Hades ca casi si tan tanto to co como mo Men Menta, ta, lle llenan nando do ro roles les en dón dónde de sea que Hades Ha des lo ne nece cesi sita tara; ra; sien siendo do barman barman en Ne Never vernight, night, admi administ nistran rando do sus resta restauran urantes, tes, y refor reforzan zando do las reg reglas las de Ha Hades des en el Inf Infra ramun mundo. do. Fue el me j jor or en esto esto úl últi timo. mo. Con una apari aparien encia cia modes modesta ta y agra agradabdable, los enemi enemigos gos de Hades Hades a me menu nudo do se sorp sorpren rendi dieron eron con su cru cruelel-
dad. Hades no emple empleaba aba a menu menudo do a los sá sáti tiros. ros. Eran salva salva j jes, es, propensos pen sos a las borrac borrache heras ras y a la seduc seducci ción, ón, pe pero ro Ili Ilias as era di dife feren rente te y no por elecci elección. ón. Ha bía cor corta tado do los la lazos zos con su tri bu bu despu después és que lo traici tra iciona onaran, ran, vi violan olando do a la mu j jer er que ama ba. El Ella la se su suici icidó dó e Ili Ilias as los mato mato a todos. todos. Tomó el vaso, vaso, y an antes tes de que pensa pensara ra mucho mucho en el tema, tema, di jo: jo: —Tengo un tra ba jo para para ti. —¿Sí, milord? milord? Hades asintió asintió ha hacia cia la mu j jer er que lo ha bía intri intriga gado do con su ca belca bello dora dorado do y ver verdes des oj ojos. os. —Esa mu j jer, er, qu quiiero sa ber si se va con algu alguiien. El silen silencio cio sigu siguió ió las orde ordenes nes de Ha Hades, des, y cuan cuando do el di dios os miró miró a Ilias, Ili as, lo es esta ta ba mi miran rando do de vuel vuelta, ta, con las ce jas jas le levan vanta tadas. das. —¿Está en pelig peligro, ro, mi milord? lord? Sí , pensó, pensó, esta estaba ba en pe pelig ligro ro de nunca nunca de j jar ar este este lu gar. Al Algo go dentro dentro de pose seer erla la. Algo él quería quería igno ignorar rar to toda da la ci civi vililidad dad y po Algo lo lla llama ma ba, un hilo hilo que tiró tiró de su cora corazón. zón. Se conge congeló ló cuan cuando do esas pa palab labras ras surgi surgieron eron en su men mente, te, estrecestrechando han do los ojos, ojos, y pensan pensando, do, no puede puede ser. Peló capa capa tras capa capa del glamo glamour ur que man mantu tuvo vo su visi visión ón prote protegigida de los etére etéreos os Hilos Hilos del Des Desti tino. no. Eran co como mo resp resplan lande deci cien entes tes telas telas de araña araña que co conec necta ta ban perso personas nas y cosas, cosas, algu algunos nos era briznas, briznas, ot otros ros eran sóli sólidos, dos, su fu fuer erza za se ence enceró ró y dismi disminu nuyó yó a lo lar largo go de la vi vida. da. El piso pi so en ente tero ro era como como una red, pe pero ro Hades Hades es esta ta ba enfo enfoca cado do solo solo en uno, una frágil frágil cuer cuerda da que corría corría de su pecho pecho a la mu jer jer de rosa rosa brillante. lan te. Malditas Moiras. Moiras. —¿Milord? —pregun —pregunto to Ilias, Ilias, sin sinti tien endo do el repen repenti tino no cam bio en él. Esto no puede puede ser , pensó. pensó. El hi hilo lo y la co colo loca caci ción ón cer cerca ca a su co cora razón zón tení tenían an un signi signi cado cado que no fue capaz capaz de enten entender. der. Las Mo Moiras iras ha bían te jido jido a esta esta mu jer jer en su vida. vida.
Estaba desti destina nada da a ser su aman amante. te. —¿Lord Hades? Hades? —Sí —respon —respondió dió nal nalmen mente te el di dios, os, mi miran rando do a Ilias Ilias mi mient entras ras se gira gira ba dando dando la es espal palda da al pi piso—. so—. Sí, ella ella es está tá en pe pelig ligro. ro.
Se fue atur aturdi dido, do,Suha haci cien endo pa entado, las somb rastiró. para paraY reco re coger sus pensa pen sami mien entos. tos. pecho pec hodoseuna sentía senpausa tíausa ap apre reta do,sombras el hilo hilo tiró. te tenía níager la idea de que, si conti continu nuaba aba re reti tirán rándo dose, se, podría podría romper romperse. se. Esto es al gún gún ti po po de juego. juego. No sería sería la prime primera ra vez que las Moiras Moiras ha bí bían an col colga gado do un deseo deseo delan de lante te de él, solo solo pa para ra qu quitár itárse selo. lo. Pro bable bablemen mente te esa era su ha bi ha bililidad más grande, grande, extra extraer er sus más pro profun fundos dos dese deseos, os, tra trayén yéndo dolos los a la vi vida, da, solo solo para para desent desentra rañar ñarlos los cuan cuando do lo de dese seaban. aban. Era tortu tortura. ra. era máseran joven, teosas, tenía nía más diret versi sión ón con las Mo Moiras iras pe porque Cuando sus reac reacci ciones ones vici viciosas, sus diver retri ri buci bu ciones ones vi violen olentas, tas, pero ro entre ent re más se en enfu fure recía, cía, más to toma ma ban. Era co como mo la her herma mana na que quería verlo verlo ha hacer cer el mundo mundo trizas. trizas. Por un tiem tiempo, po, se obse obsesi sionó onó con eso, in inten tentan tando do ne nego goci ciar ar por amor. Cuan Cuando do no fun funci cionó, onó, deci decidió dió de desa sa ar a las Mo Moiras. iras. Él en encontcontraría ra ría amor; lo for forza zaría. ría. Los re resul sulta tados dos fueron fueron pasar pasar una noche noche con Menta Men ta y una re rela laci ción ón tumul tumultu tuosa osa con otra otra nin ninfa fa lla llama mada da Leuce, Leuce, quiquien lo traici traicionó. onó. Sutado. ira ha si sido do rápi da, existen y sutencia de deseo seoso delita luchar luc contra contruyen rayendo lasdo Mo Moiras, iras, aplasta aplas do. Se bía re resig signó nórá apida, una exis cia soli taria, ria,harconst constru pa pareredes alre alrede dedor dor de su co cora razón zón y al alma. ma. Existió Existió sin ex expec pecta tati tivas vas de fe felilicicidad o amor, enfo enfocán cándo dose se en su lugar lugar en hacer hacer tra tratos tos y el equ equilib ilibrio. rio. Hasta ahora. ahora. Siempre recor recorda daría ría la vi vici ciosa osa re reac acci ción ón que su cuer cuerpo po tu tuvo vo cu cuanando colo colocó có los ojos ojos en la mu j jer er de rosa. rosa. Su in inte teri rior or toda todavía vía tembla tembla ba. ¿Cómo ¿Có mo po podí dían an las Mo Moiras iras of ofre recer cerle le una pro bada bada de lo que se po podía día sentir sen tir co como mo un alma alma geme gemela, la, solo solo para para quitár quitárse selo? lo? Tansus fácil fácil co como mo puedo edo conde condenar nar un al alma ma al Tár Tárta taro ro , respon respondió, dió, apreapretando tando di dien entes. tes. pu
Todavía esta esta ba frust frustra rado do cu cuan ando do hi hizo zo su ca cami mino no al salón. salón. Mi Miententras se acerca acerca ba, Eur Eurya yale, le, la gorgo gorgona na que es esta ta ba de guar guardia dia en la entrada, ra da, asin asintió tió hacia hacia él a pesar pesar de su in invi visi si bili bilidad. dad. —Milord —di jo jo El dios dios sonrió, sonrió, quitan quitando do su gla glamo mour. ur. La gorgo gorgona na es esta ta ba ciega. ciega. Sig Siglos los at atrás, rás, sus oj ojos os fueron fueron desgar desgarrarados de su rostro rostro y la vene veneno nosa sa ser serpi pien ente te que una vez adornó adornó su ca beza fuer fuer corta cortada da en pe peda dazos, zos, un cas casti tigo go por su belle belleza. za. Hades Hades la encontró cont ró en el bos bosque. que. Inc Inclilina nada da en el lu lugar gar don donde de fue ataca atacada, da, curvacurvada en posi posici ción ón fe fetal, tal, sol sollo lozan zando do y temb temblan lando. do. La ha bía re reco cogi gido do y la tra jo al Infra Inframun mundo, do, permi permiti tién éndo dole le sanar sanarse se antes antes de emp emple lear arla. la. A pesar pesar del hor horror ror que ha bía ex expe peri rimen menta tado, do, y la in inten tenci ción ón de sus atacan atacantes tes de qu quitar itarle le su po poder, der, no tuvi tuvieron eron éxi éxito, to, a pesar pesar de ser ci ciega, ega, la visi visión ón de Eur Eurya yale le toda todavía vía era po pode dero rosa. sa. Despu Después és de curar curarse, se, Hades Ha des li beró beró a uno de sus ata atacan cantes, tes, y la gorgo gorgona na lo con convir virtió tió en piedra. ed ra. —Tu —T u sen se ntido tido del ol olfa fato to me imp impre resi siona, ona, Eur Eurya yale. le. —Lo haces haces muy fá fácil cil —respon —respondió dió la gor gorgo gona—. na—. De ja la co colo lonia. nia. Hades sonrió, sonrió, co colo locan cando do una mano mano en el hombro hombro de la gor gorgo gona na antes an tes de ent entrar rar al sa salón. lón. El am bien biente te allí allí era muc mucho ho más mode modera rado, do, una mezc mezcla la de mor mortatales y criatu criaturas ras an ancest cestra rales les con conver versan sando, do, be bien biendo do y jugando. jugando. AlguAlgunos esta esta ban re rela la j jados, ados, otros otros al borde, borde, in inqu quiietos mient mientras ras es espe peran ran ser convo con voca cados dos a una de las suites suites en las sombras, sombras, lis listos tos pa para ra ne nego goci ciar ar por sus más profun profundos dos de dese seos os sin im impor portar tar las conse consecu cuen enci cias. as. Ha Hades des vaga va ga ba entre entre el ellos, los, eva evalu luan ando do y bus buscan cando, do, in inten tentan tando do ele elegir gir su primer contra contrato to de la noc noche, he, cu cuan ando do ro rodeo deo una de las me mesas sas de juego juego se detu de tuvo, vo, vislumb vislumbran rando do un fami famililiar ar ves vesti tido do ro rosa sa y ca bel bello lo de seda. seda. Ella era su sire sirena, na, tentán tentándo dolo lo con su esencia, esencia, su bel belle leza, za, su sola sola presen pre sencia. cia. Se tuvo tuvo que dar la vuel vuelta, ta, fundi fundién éndo dose se con la oscu oscuri ridad, dad, y ngió ngió que no la ha bía ha bía vis visto, to, pero pero ob obser servar var su per perl l hizo hizo do doler ler su pecho, pecho, y ha bía una par parte te de él que resen resentía tía la sen sensa saci ción. ón. Nun Nunca ca ha bía qu queri erido do
que las Moiras Moiras toma tomaran ran control control sob sobre re su vi vida da amoro amorosa, sa, y, aun así, era inevi inevitab table. le. Puedo tener tener el con conttrol , , se di jo. esto a mi fa favor vor pa para ra comple completar tar mi jo. Usar esto apues apu esta ta con Afro Afrodi dita. ta. Hades no se sentía sentía culpab culpable le a menu menudo, do, pe pero ro ese pensa pensami mien ento to hizo sentir sentir su pecho pecho pesa pesado do y enfer enfermo. mo. Haz que al gui guien se ena enamo more re de ti. La apues apuesta ta fue in insen sensib sible le e injus injusta, ta, pero pero Hades Hades qu quería ería ganar. ganar. Malditas Moiras. Moiras. Dejando de lado lado sus tumul tumultu tuosos osos pen pensa sami mien entos, tos, la alcan alcanzó. zó. —¿Juegas? —pregun —preguntó. tó. Se giro giro ha hacia cia él, y su ali alien ento to se atoró atoró en su gargan garganta ta mi mient entras ras esta ba, de nu nuevo, evo, im impac pacta tado do por su belle belleza. za. Sus ojos ojos eran salva salva j jes es y rodeados de ados por os oscu curas ras pesta pestañas. ñas. Unas cu cuan antas tas pe pecas cas ador adorna na ban la punta de su nariz nariz y sus me jil jillas las eran man manza zanas, nas, cu bi bier ertas tas con un ru bor que colo colore reaba aba su cremo cremosa sa pi piel. el. Hades tomó tomó un tra trago go de su vaso vaso para para hume humede decer cer su gar gargan ganta, ta, pero pe ro el mo movi vimi mien ento to atra atra jo la atenci atención ón a su bo boca, ca, y repri reprimió mió un gru gruñiñido mient mientras ras se pre pregun gunta ta ba si ella ella sa bía igual igual a co como mo olía, dulce, dulce, melosa, losa, peca pecami mino nosa. sa. Después de un momen momento, to, son sonrió, rió, un bril brillo lo jugu juguetón etón en sus oj ojos. os. —Si estás estás dis dispu pues esto to a en ense señar ñarme. me. No dirí dirías as eso si su pi pieras eras qui quien soy , pensó, pensó, to toman mando do otro otro trago. trago. Cualquiera que entra entrara ra a un ju juego ego con él esta esta ba vin vincu cula lado do a las reglas reg las de Ne Never vernight, night, una per perdi dida da sig signi ni ca ba un cont contra rato. to. Eres un bastar bastardo do , se di jo jo mient mientras ras al alcan canza za ba la mesa mesa y se senta senta ba. El movi movimi mien ento to agito agito el aire, y su esencia esen cia conti continúo núo in inva vadi dien endo do su mente. men te. Ha bía al algo go más en la atmos atmosfe fera, ra, una elect electri rici cidad dad que ace acele leró ró su cora corazón zón e hi hizo zo a los vel vellos los de sus bra brazos zos y cuel cuello lo erizar erizarse. se. —Es vali valien ente te sentar sentarse se en una me mesa sa sin cono conocer cer el ju juego ego —di jo. jo. Pensó hagunto: bía to: sen senti tido do la ad adver verten tencia cia en su to tono, no, porque porque ar arququeó una ce jaque y pregun pre
—¿De qué otra otra ma mane nera ra podría podría apren aprender? der? —Mmm. Tenía razón, razón, aun aunque que Hades Hades no aconse aconse jaría jaría correr correr an antes tes de ap aprenrender a cami caminar, nar, es espe peci cial almen mente te cu cuan ando do se tra trata ta ba de apostar apostar con él. Aun así, su respu respues esta ta le most mostró ró su as astu tucia cia y su dispo disposi sici ción ón a pro bar cosas co sas nu nuevas, evas, y encont encontró ró eso in insa sana namen mente te at atrac racti tivo. vo. —Ingenioso. Ahora que esta esta ba cer cerca ca de ella, ella, no po podía día de jar jar de mirar mirarla. la. Qu Quería ería ¿Cuál ál era su co cone nexi xión ón con Desa ber por qué olía co como mo o ores res sil silvest vestres. res. ¿Cu méter? mé ter? Se sentía sentía mal e int intru rusi sivo vo der derri ri bar bar las bar barre reras ras que blo bloqu queean su alma alma de sus ojos, ojos, pe pero ro esta estaría ría min minti tien endo do si no di jera jera que quería quería sa ber có cómo mo era ba jo ese perfec perfecto to exte exteri rior. or. ¿Tenía nía frío Ella se estre estreme meció, ció, sus pequ pequeños eños hombros hombros temb tembla laron. ron. ¿Te o esta estaba ba in inco como moda? da? —Nunca te ha bía vis visto to antes antes —di jo jo nal nalmen mente, te, espe esperan rando do que eso expli explica cara ra su mira mirada. da. —Bueno, nunca nunca he esta estado do aquí antes antes —respon —respondió, dió, y lu luego ego entreentrecerró cer ró sus oj ojos—. os—. De bes ve venir nir aquí a menu menudo. do. Él sonrió sonrió con el to tono no de su voz, cu cu bi bier erto to en sospec sospecha. ha. —Así es. —¿Por qué? —Sonó —Sonó más curi curiosa osa que dis disgus gusta tada, da, se sorp sorpren rendió dió de su propia propia pregun pregunta ta y trató trató de recu recupe perar rarse se aña añadi dien endo—: do—: Qui Quiero decir, de cir, no ti tienes enes que res respon ponder der eso. —Voy a respon responder. der. —Se en encont contró ró con su mi mira rada, da, de desa sa án ándo dola la —. Si me respon respondes des una pre pregun gunta. ta. Di que sí, rogó rogó de ma mane nera ra silen silenci ciosa, osa, aun aunque que nunca nunca la obli obliga garía. ría. Di que sí, así puedo puedo ap apren render der to todo do de ti. Un pequ pequeño eño ce ceño ño apa apare reció ció ent entre re sus ce jas jas mient mientras ras con consi side dera ra ba ponder der una pre gun gunta ta era un pe pequ queño eño pre precio cio para para pa gar su propu propues esta. ta. Res pon si ella ella per perdía día , quería quería de decir cir Hades. Hades. Ot Otros ros po ponen nen sus al almas mas en la línea. línea. Pe Pero ro se mantu mantuvo vo cal calma mado. do. —Bien —conce —concedió. dió.
Fue un desa desafío fío no sonre sonreír. ír. Respondió su pregun pregunta ta ante anteri rior. or. diver verti tido do. —Vengo —V engo porque por que es… di No era una comple completa ta men menti tira, ra, y pa pare recía cía al algo go que un mor mortal tal podría decir y, en ese mo decir momen mento, to, eso era lo que pre preten tendía día ser, frá frágil gil y humano. ma no. —Ahora tú, ¿por qué estás estás aquí esta esta noche? noche? —Mi amiga amiga Le Lexa xa es esta ta ba en la lista lista —expli —explicó, có, mi miran rando do sus manos manos mient mi entras ras juga ba con sus dedos dedos en su re rega gazo. zo. —No —di jo—. jo—. Esa es una respu respues esta ta pa para ra una pregun pregunta ta dife diferenrente. ¿Por qué estás estás tú aquí esta esta noche? noche? Encontró su mira mirada, da, un bril brillo lo travi travieso eso en sus oj ojos, os, y se encont encontró ró a si mismo mismo de deses sespe pera rado do por per perse segu guir irla, la, ese des destel tello lo de de desa safío, fío, esa pizca piz ca de pa pasi sión. ón. —Parecía re belde belde en ese momen momento to —res —respon pondió dió nal nalmen mente. te. —¿Y ahora ahora no es estas tas tan se segu gura? ra? —Oh, estoy estoy se segu gura ra de que es re bel re belde de —di jo jo mient mientras ras sus de dedos dos traza tra zaron ron la me mesa sa de elt eltro. ro. La mi mira rada da de Ha Hades des los si sigu guió ió y pensó pensó en cómo có mo le gus gusta taría ría que sus dedos dedos explo explora rarán rán su pi piel. el. Despu Después és de un momen mo mento, to, le levan vanto to su mi mira rada—. da—. Simp Simple lemen mente te no estoy estoy segu segura ra de cómo me senti sentiré ré al res respec pecto to ma maña ñana. na. Eso le hizo hizo sen sentir tir curi curiosi osidad. dad. —¿Contra qui quién te es estas tas re be belan lando? do? Su sonri sonrisa sa fue como como una echa echa en su pecho, pecho, de devas vasta tado dora, ra, secre secreta ta y emoci emocionan onante. te. —Dijiste una pregun pregunta. ta. —Eso di je. je. Bien jugado, jugado, qu queri erida da. Pensó Pensó el con una son sonri risa. sa. Ella se estre estreme meció ció de nuevo. nuevo. —¿Tienes frío? —¿Qué? —Se sorpren sorprendió dió con la pregun pregunta. ta.
—Has esta estado do temb temblan lando do muc mucho ho desde desde que te sentas sentaste. te. Se sonro sonro jó, in inqu quiieta ba jo su mira mirada da de nu nuevo, evo, y lu luego ego soltó. soltó. —¿Quién era esa mu jer jer que es esta ta ba conti contigo go an antes? tes? Frunció el ceño, ceño, pe pero ro en enton tonces ces recor recordó. dó. Menta. El Ella la si siemp empre re po pone ne sus ma manos nos en donde donde no per perte tenenecen.—Oh, Menta. Palideció, y él se dio cuen cuenta ta de que ha bía dicho dicho al algo go incor incorrec recto. to. —Yo… creo que de be bería ría ir irme. me. No. No ha bían bían hab habla lado do lo su su cien ciente. te. No sa bía su nombre, nombre, y qu quería ería ense en señar ñarle, le, quería quería ense enseñar ñarle le tan tantas tas cosas. cosas. Antes Antes de sa ber lo que estaesta ba ha haci cien endo, do, su mano mano esta esta ba sob sobre re la de ella ella y al algo go vo volá látil til es estal talló ló entre ent re el ellos, los, provo provocan cando do un jadeo en sus perfec perfectos tos la bi bios. os. Lo em empu pu jó rápi rá pida damen mente. te. —No —di jo, jo, pe pero ro sa salió lió co como mo una or orden, den, y ella ella lo mi miro. ro. —¿Disculpa? —Lo que qui quiero decir decir es que to toda davía vía no te he en ense seña ñado do a jugar. —Ba jó el tono tono de su voz, forzan forzando do la sa salilida da de la his histe teria ria que le causó alcan alcanzar zarla—. la—. Per Permí míte teme. me. Por favor. favor. Ella miró miró a ot otro ro lado, lado, y él pen pensó só que pod podría ría salir salir cor corri rien endo. do. Con fía en mí , quería qu rogar, rogar, aun aunque que una cosa ri ridí dícu cula la para para decir. de cir. Era la ería úl últi tima ma perso persona naque en lasa bía que de bíaera con con ar.cosa Finalmente, pare pareció ció resol resolver verlo lo y se re rela la jó, ba jó sus pesta pestañas ñas y habló hab ló con el to tono no más eró eróti tico co que él ha bía escuc escucha hado. do. —Entonces ensé enséña ñame. me. Lo haré. haré. To Todo do , pensó. pensó. Barajó las cartas cartas y le exp explilicó có el ju juego. ego. —Esto es póqu póquer. er. Juga Jugare remos mos a sacar sacar cin cinco co car cartas tas y co comen menza zareremos con una apues apuesta. ta. —Pero no tengo tengo nada nada con que apos apostar tar —di jo, jo, mirán mirándo dose se a sí
misma. mis ma. Tomaría feliz felizmen mente te el ves vesti tido. do. —Entonces, una pregun pregunta ta respon respondi dida. da. Si ga gano, no, res respon ponde derás rás a cual cu alqu quiier pregun pregunta ta que te haga, haga, y si ganas, ganas, respon responde deré ré la tu tuya. ya. hierpo, zopo,una mueca, pero pedo ro su exp expre ónlinó pare pa cíaciaestar esél. tarEl enaire con conic icto to con Ella su cuer cuhizo porque pormu queeca, cu cuan ando hab habló, ló,resi sesión inc incli nórecía ha hacia entre ent re el ellos los era es espe peso, so, y Ha Hades des encont encontró ró res respi pirar rar al algo go di difí fícil. cil. —Trato. Extasiado, conti continúo núo expli explican cando do el juego. juego. —Hay diez diez ni nive veles les en pó póker. ker. La más ba ja es la car carta ta más al alta ta y la más alta alta es la es esca cale lera ra re real. al. La me meta ta es log lograr rar un ni nivel vel más alto alto al del otro otro juga jugador… dor… —explicó—. —explicó—. Si te dan una ma mala la mano, mano, re retí tíra rate. te. Es me jor jor que la al alter terna nati tiva. va. Re Revi visar sar y ar arrast rastrar rar ap aplilica caría ría si estu estuvi viéra éramos mos jugan jugando mone mo nedas, das, pero peroque co como mo nuest ras más mo mone nedas das son respu resen pues estas, tas, el punto pundo to con es discu dis cutib tible. le. Aun Aunque la hanu bili biestras lidad dad im impor portan tante te pó póker ker es faro farole lear. ar. —¿Farolear? —Eso pare pareció ció llamar llamar su aten atenci ción. ón. —A veces, veces, el póqu póquer er es solo solo un juego juego de enga engaño… ño… Espe Especi cial almenmente cuan cuando do es estás tás per perdi dien endo. do. Hades repar repartió tió ca cada da una de las cin cinco co car cartas, tas, y se to toma maron ron su tiempo em po revi revisán sándo dolas. las. Final Finalmen mente, te, la mu j jer er co colo locó có aba jo sus cartas, cartas, boca arri arri ba, ba, y Ha Hades des hi hizo zo lo mis mismo. mo. —Tienes un par de reinas reinas —di jo—. jo—. Y yo ten tengo go un Full House. House. —Así que… tú ganas. ganas. —No se ve veía ía más mo moles lesta ta que con contemp templalativa. tiva. Tra Tratan tando do de re recor cordar dar las reg reglas las del ju juego. ego. Hades, Hades, por ot otro ro lado, lado, esta es ta ba impa impaci cien ente, te, y saltó saltó an ante te la posi posi bili bilidad dad de ha hacer cer su pregun pregunta. ta. —¿Contra qui quién te es estás tás re be belan lando? do? Sonrió ampli ampliamen amente. te. —Mi madre. madre. Levantó una ce ja. —¿Por qué?
—Tendrás que ganar ganar ot otra ra mano mano si voy a res respon ponder. der. Estaba dema demasi siado ado ansi ansioso. oso. Cuan Cuando do ga ganó nó por segun segunda da vez, no tuvo que hacer hacer la pregun pregunta, ta, solo solo la mi miró ró ex expec pectan tante. te. —Porque… —Se detu detuvo, vo, y sus oj ojos os se movi movieron eron le j jos os de él, enfoenfocándo cán dose se en la mesa mesa de delan lante te de ellos, ellos, frunci fruncien endo do las ce j jas. as. Es Esta ta ba busPara ra evadir evadir decir decirle le la verdad verdad , enten cando can do una res respu pues esta. ta. Pa entendió dió Ha Hades. des. Sonrió Son rió forza forzada damen mente te mi mient entras ras di jo—: jo—: Me hi hizo zo eno j jar. ar. Había una pizca pizca de os oscu curi ridad dad en sus palab palabras, ras, y él qu quería ería per perseseguir gu ir ese momen momento. to. Fue la pri prime mera ra vez que sintió sintió que se es esta ta ba contecontenien ni endo. do. Espe Esperó ró por una exp explilica caci ción, ón, pero pero solo solo sonrió. sonrió. —Nunca di jis jiste te que la res respu pues esta ta te tenía nía que ser detal detalla lada. da. Su sonri sonrisa sa igualó igualó la suya. suya. —Anotado para para el fu futu turo, ro, te lo asegu aseguro. ro. —¿El futu futuro? ro? —Bueno, espe espero ro que es esta ta no sea la últi última ma vez que jugu juguemos emos al póqu pó quer. er. Especialmente ahora. ahora. Que ella ella esta esta ba en ense señán ñándo dole le cómo cómo pen pensa sa ba y tra ba j jaba, aba, y él esta estaría ría más pre prepa para rado do en el pró próxi ximo mo juego. juego. No sería sería capaz ca paz de cortar cortar las es esqu quinas inas tan fácil fácilmen mente. te. Los térmi términos nos seri serian an detalla tal lados, dos, las apu apues estas tas más al altas. tas. Su expre expresi sión ón se volvió volvió ca caute utelo losa, sa, y tuvo tuvo la sensa sensaci ción ón de que no tenía tenía pla plane neado ado volver volver a ver verle le des despu pués és de esa noc noche. he. Algo saltó saltó dent dentro ro de él, una emo emoci ción ón pare pareci cida da al mi miedo. edo. Tengo que verla verla de nu nuevo. evo. Voy a en enlo loqu quecer. ecer. Termi mina na el juego juego , se di jo, Empujó le j jos os esos pensa pensami mien entos. tos. Ter jo, repar repartió tió otra otra ma mano no y ga ganó. nó. —¿Por qué estás estás eno j jada ada con tu mad madre? re? —pre —pregun guntó. tó. Ella lució lució pensa pensati tiva va por un mo momen mento, to, y lu luego ego di jo: jo: —Porque… qui quiere que sea algo algo que no puedo puedo ser. ¿Qué fue eso que sentí sentí sob sobre re la su per cie? cie? Su verda verdade dera ra natu natura rale leza, za, ¿deses ¿de ses pe pera rada da por ser lib libre? re?
Su mira mirada da ca cayó yó a las car cartas. tas. —No enti entien endo do por qué la gente gente ha hace ce eso. Inclinó la ca be beza. za. —¿No estás estás disf disfru rutan tando do de nu nuest estro ro juego? juego? Pero… Pero… enti tien endo por gente ju juega ega contra contra Ha Hades. des. ¿Por—Sí. qué qui qu ieren no vender venen derle le do su al alma? ma?qué la gente ¿Alguna vez has esta estado do de deses ses pe pera rada da por al go? go? Qu Quería ería pre pregun guntar, tar, pero sa bía la respu respues esta. ta. Po Podía día sentir sentirlo lo ar ardi dien endo do entre entre ellos. ellos. —No aceptan aceptan un ju juego ego porque porque qu quiieren vender vender su al alma ma —di jo—. jo—. Lo hacen hacen porque porque creen creen que pueden pueden ganar. ganar. —¿Ellos? ¿Ganan? ¿Ganan? —A veces. veces. —Eso le los eno ja, eno ja, ¿no cre crees? es? Frunció la bi bios os con la pre pregun gunta, ta, y el miedo miedo ap apre retó tó su pecho. pecho. Esta Es ta mu j jer er te tenía nía cone conexi xiones ones con De Demé méter, ter, lo que quería quería de decir cir que escuchó cuc hó las peores peores co cosas sas sob sobre re él. Si tenía tenía al algu guna na espe esperan ranza za por deconstru const ruir ir el mi mito to que ha bían bían le levan vanta tado do a su alre alrede dedor, dor, tendría tendría que pasar pa sar ti tiem empo po con ella, ella, y eso sig signi ni ca ba que nece necesi sita ta sa ber qui quién era, así que respon respondió dió su pre pregun gunta ta since sincera ramen mente. te. —Querida, yo gano gano de cu cual alqu quiier mane manera. ra. Sus ojos ojos se abri abrieron, eron, y se le levan vantó tó rá rápi pida damen mente, te, casi casi derri derri bando bando su ñía.silla. silSu la.nombre nomb Nunca Nunca re se ha bía des deslilizó vis visto zótodeasu na nadie bo boca diecatan como como an ansi sioso una osomaldi mal pordici de ción. j jar ón. ar su compacompa—Hades. Dilo lo de nuevo nuevo , qu Se estre estreme meció. ció. Di quería ería orde ordenar narle, le, pero pero mantu mantuvo vo la boca bo ca cerra cerrada. da. Sus oj ojos os se oscu oscure reci cieron eron y pre presi siono ono jun juntos tos los la bi bios. os. La mira mirada da en su rost rostro ro lo perse persegu guiría iría para para siemp siempre. re. Esta Esta ba sorp sorprenrendida, di da, asus asusta tada da y avergon avergonza zada. da. Se equivo equivocó có. Lo leyó leyó en su rost rostro. ro. —Tengo que irme. irme. Se giró, giró, huyen huyendo do de él co como mo si la mis misma ma muer muerte te hu bi biera era ve veni nido do
por su alma. alma. Pensó en perse persegu guir irla, la, pe pero ro sa bía que no impor importa ta ba si la se segu guía ía o no. Regre Regresa saría. ría. Ha bía perdi perdido do cont contra ra él, y la ha bía mar marca cado. do. Tragó el resto resto de su whisky y son sonrió. rió. apuesta ta con Af Afro rodi dita ta no era tan im impo posib sible le des despu pués és de todo. todo.Quizás la apues —Camino más corto, corto, bene bene cios cios más rá rápi pidos dos —mur —murmu muro. ro.
Capítulo IV Jodidas Jodid as Moiras
Menta lo sacó sacó de su en enso soña ñaci ción—. ón—. Su primera me ra—Milord. cita cita ha llega lle—La gado. do.voz de Menta Mierda. De Deniti nitiva vamen mente te es esta ta ba en el espa espacio cio mental mental equ equivo ivoca cado do para pa ra ha hacer cer otro otro tra trato. to. Frun Frunció ció el ceño ceño y fue a be ber de su vaso, vaso, pero pero se dio cuen cuenta ta de que esta esta ba va vacío. cío. Cu Cuan ando do mi miró ró a la nin ninfa, fa, su ce ja se arqu ar queó. eó. —¿Enamorado, milord? milord? —Su voz desti destila la ba juicio. juicio. —Sí —di jo. jo. No vio ningu ninguna na razón razón pa para ra mentir—. mentir—. Lo estoy. estoy. La conmo conmoci ción ón de Men Menta ta se re regist gistró ró en sus oj ojos os cuan cuando do se ab abririeron, luego luego sus la bios bios se frun frunci cieron. eron. —La deses desespe pera raci ción ón no es at atrac racti tiva, va, Ha Hades. des. —Tampoco los celos celos —respon —respondió, dió, em empu pu j jan ando do el va vaso so vacío vacío en sus manos. manos. Ella frunció frunció el ceño. ceño. —¿Dónde está está el mortal? mortal? Sus ojos ojos brilla brillaron ron cu cuan ando do res respon pondió: dió: —En la suite suite Diaman Diamante. te. Al nal nal de la noche, noche, Hades Hades ha bía gana ganado do tres cont contra ratos. tos. Dos
hombres en bus hombres busca ca de riqu riqueza, eza, uno joven y otro otro anci anciano, ano, y una mu j jer er en busca busca de amor. Todos Todos enfren enfrenta ta ban aho ahora ra el de desa safío fío de su supe perar rar lo que más ago bi ago biaba aba sus al almas. mas. El más joven de los dos busca busca ba re rees estab table lecer cer sus fon fondos dos univeruniversi sita tari rios, os, que ha bía agota agotado do para para apo apoyar yar su adic adicci ción ón a la coca cocaína. ína. Tendría Tend ría que de j jar ar su há bito bito an antes tes de que Ha Hades des le conce concedi diera era su deseo. El anci anciano ano bus busca ca ba pagar pagar la qu quimi imiote otera rapia pia de su es espo posa, sa, ¿y la mayor ma yor car carga ga pa para ra su al alma? ma? La ha bía esta estado do en enga gañan ñando do an antes tes de su diag di agnós nósti tico. co. Los térmi términos nos de Hades Hades eran que te tenía nía que ac acla larar rar el asunto. asun to. La mu jer jer pi pidió dió amor, o, me j jor or dic dicho, ho, pi pidió dió que un hombre hombre es espepecí cí co se enamo enamora rara ra de el ella. la. Un com compa pañe ñero ro de tra ba jo por el que ha bía esta estado do lan langu guide ideci cien endo do duran durante te años. Era una soli solici citud tud que Hades Hades escuc escucha ha ba a me menu nudo do y que nun nunca ca podría pod ría conce conceder. der. Estaba senta sentada da fren frente te a Ha Hades, des, lu luci cien endo do deses desespe pera rada da y can cansa sada, da, y cuan cuando do mi miró ró su al alma, ma, vio que esta esta ba tan ent entre rela laza zada da con el hombre que ama ba, que ya no se pare parecía cía a su verda verdade dero ro yo. Era una ma mararaña de enre enreda dade deras, ras, est estro rope peadas adas por es espi pinas, nas, que se ha bían bían vu vuel elto to ala a ladas das tras años de rec recha hazo. zo. —Cambie sus térmi términos nos —aconse —aconse jó. Entrecerró los ojos ojos y ap apre retó tó los di dien entes, tes, atre atrevi vién éndo dose se a alzar alzar la voz. —¡Pero es él a qui quien qui quiero! Era la segun segunda da vez que ha bía es escuc cucha hado do esa súp súplilica ca esta esta noc noche, he, y en am bas oca ocasi siones ones ha bía sido sido men menti tira. ra. —No puedo puedo hacer hacer que ot otro ro mortal mortal te ame —di jo jo Ha Hades—. des—. O pides amor o nada. nada. Ella lo miró miró j jamen amente te du duran rante te un ti tiem empo, po, tratan tratando do de con conte tener ner las lágri lágrimas, mas, an antes tes de ac acce ceder. der. Supu Supuso so que ha bía de deci cidi dido do que, al nal, era me j jor or ser ama amada da por al algu guiien. Excep Excepto to que no gana gana ba su juego, y tras su pérdi pérdida, da, Ha Hades des encont encontró ró su mi mira rada da ater aterro rori riza zada da y llorosa. ro sa.
—Cesa este este deseo deseo inú inútil til por tu compa compañe ñero ro de tra ba jo —di jo jo Hades. Ella lo fulmi fulminó nó con la mira mirada. da. ar de amarlo. —No puedo puedo simple simplemen mente… te… de j jar amarlo. enabri encont contrar rar auna ma mane nera raamor. —di jo—. jo—. Quizás Quizás cuan cuando do lo hagas,—Debes tus ojos ojos se ab rirán rán un nu nuevo evo Hades comen comenzó zó a po poner nerse se en pie. —¿Nunca has esta estado do ena enamo mora rado? do? —pre —pregun guntó, tó, y cuan cuando do hi hizo zo una pausa, pausa, sus ojos ojos se abri abrieron eron al dar darse se cu cuen enta—. ta—. No lo has esta estado. do. Hades apre apretó tó los la bi bios. os. —Cuidado, mortal. mortal. Esta Esta vi vida da es fu fugaz. gaz. Tu existen existencia cia en el Inf Infraramundo mun do dura dura una eterni eternidad. dad. Empezó a levan levantar tarse se de nu nuevo evo y la mu j jer er le agar agarró ró la mano. mano. —¡Por favor! favor! ¡No lo enti entien endes! des! ¡No puedo puedo ele elegir gir a qui quien amo! Hades apartó apartó la ma mano. no. —Desperdicias tus palab palabras ras y sen senti timi mien entos, tos, mortal. mortal. Podría ha ber dic dicho ho más. Podría Podría ha berle berle expli explica cado do que su amor por este este homb hombre re in indi dife feren rente te hacía hacía que se re resin sinti tiera, era, que en el momento men to en que de deci cidi diera era li berar berarlo lo de sus afec afectos, tos, su vi vida da sería sería me j jor, or, pero pe ro sa bía que no lo es escuc cucha haría, ría, por lo que no hab habló. ló. En cam bio, desapa sa pare reció, ció, reti retirán rándo dose se al Infra Inframun mundo. do. Pero no para para descan descansar. sar. Se telet teletrans ranspor portó tó a la Bib Bibliliote oteca ca de las Almas, Almas, ubi ubica cada da en el palapalacio de espe espe j jos os de las Mo Moiras. iras. Ha Hades des les ha bía re rega gala lado do a las tres diosas una parte parte de su re reino, ino, una isla isla que ota ota ba en el éter del InfraInframundo. mun do. Era inacce inaccesib sible le para para to todos dos menos menos pa para ra él, y las Mo Moiras iras no podí po dían an de jar jarlo. lo. Una jaula jaula do dora rada, da, la ha bía llama llamado do Lá Láqu quesis. esis. Una prisi prisión ón glori glori ca cada, da, excla exclamó mó Clo Cloto. to. Una celda celda con es espe pe j jos, os, di jo jo Át Átro ropos. pos. Las Moiras Moiras pod podrí rían an ha ber ele elegi gido do desc descri ri birlo birlo co como mo una jaula, jaula,
una celda celda o una prisi prisión, ón, pero pero sa bían bían tan bi bien en co como mo Ha Hades des que es esta ta ba constru const ruida ida se según gún sus es espe peci ci ca caci ciones ones y para para su protec protecci ción. ón. —¿Preferirían vivir vivir entre entre las al almas mas y de deida idades des del Inf Infra ramun mundo? do? —les pregun pregunta ta ba cada cada vez que se que que j jaban—. aban—. Las apedre apedrearí arían an y yo no los detend detendría. ría. A ningu ninguna na de ellas ellas le gusta gusta ba su respu respues esta, ta, y ha bí bían an res respon pondi dido do exigi exi gién éndo dole le que cam biara biara los jar jardi dines nes fu fuera era del pala palacio, cio, una peti petici ción ón que hací hacían an a menu menudo do y que él obe obede decía. cía. No ha bía ven venta tanas nas en la bibli bibliote oteca, ca, sal salvo vo por un tec techo ho above abovedadado de cristal cristal que de j jaba aba entrar entrar una luz grisá grisácea. cea. Las pa pare redes des eran librerí rerías as del suelo suelo al tec techo, ho, llenas llenas de to tomos mos encu encuader aderna nados dos en ter terci ciopeopelo negro. negro. Ca Cada da vo volu lumen men detal detalla la ba la vi vida da de ca cada da ser huma humano, no, criatura atu ra y dios. dios. Hades exten extendió dió la ma mano no y lla llamó mó a De Demé méter, ter, la Diosa Diosa de la Co Cosecsecha. El libro libro se le acer acercó có y ater aterri rizó zó en sus ma manos nos con un ru ruido ido sor sordo. do. Al abrir abrirlo, lo, una pro proyec yecci ción ón de hi hilos los ilust ilustra ra ba una línea línea de ti tiem empo po desde des de el na naci cimi mien ento to de la diosa diosa has hasta ta el presen presente, te, que podía podía leer leerse se o verse ver se co como mo una pe pelílícu cula. la. Hades eligió eligió mi mirar, rar, si sigu guiiendo endo su hilo hilo desde desde su na naci cimi mien ento to desgasta gas tado do por la ba batal talla la has hasta ta su existen existencia cia ven venga gati tiva va des despu pués és de los Tita Ti tanes, nes, has hasta ta la cre creaci ación ón de su culto culto nut nutri riti tivo, vo, has hasta ta que su hilo hilo se bifur bi furcó, có, lo que signi signi ca la creaci creación ón de otro otro hi hilo lo de vi vida. da. —Muéstrame a qui quién per perte tene nece ce este este hi hilo lo —di jo, jo, y el oro se rompió hasta hasta formar formar la ima imagen gen de la chi chica ca de Ne Never vernight. night. Mientras Hades Hades la mira mira ba, su pecho pecho se tensó. tensó. No era de extra extrañar ñar que oli oliera era a De Demé méter, ter, era su hi ja. ja. —¿Tienes curi curiosi osidad dad por tu futu futura ra re reina? ina? —Láqu —Láquesis esis apare apareció, ció, vesti ves tida da de blanco, blanco, con el rost rostro ro enmar enmarca cado do por largos largos ca bel bellos los oscuoscuros y la ca beza beza co coro rona nada da de oro. Era la her herma mana na me medi diana ana y, en su mano, ma no, sos soste tenía nía una va vara ra de oro con la que medía medía la vida vida mor mortal. tal. Futura reina reina. Las palab palabras ras lo estre estreme meci cieron eron y tuvo tuvo que ap apre retar tar los dien di entes tes para para no reac reacci cionar. onar. —¿Su nombre? nombre? —pregun —preguntó tó Hades. Hades.
No apartó apartó la mi mira rada da de su bril brillan lante te ima imagen. gen. —Se llama llama Per Persé séfo fone ne —respon —respondió dió Lá Láqu quesis. esis. Perséfone ,, pronun pronunció ció su nombre, nombre, pro bán bándo dolo lo en su lengua, lengua, sorprendi ren dido do de lo bi bien en que se sen sentía, tía, lo per perfec fecto to que sona sona ba. —La Diosa Diosa de la Pri Prima mave vera. ra. La mira mirada da de Ha Hades des se vol volvió vió ha hacia cia la par parca. ca. Sus ojos ojos oscu oscuros ros le devol de volvi vieron eron la mira mirada, da, sin fon fondo, do, sin emo emoci ciones. ones. —Tee burlas —T bur las de mí. Diosa de la Prima Primave vera, ra, Di Diosa osa del Re Rena naci cimi mien ento, to, Diosa Diosa de la Vi Vida. da. ¿Cómo ¿Có mo po podía día una hi ja ja de la prima primave vera ra con conver vertir tirse se en la es espo posa sa de la muer mu erte? te? —Siempre sospec sospecho hoso, so, Ha Hades des —di jo jo Clo Cloto, to, apa apare reci cien endo do de la nada. na da. La más joven de las tres Mo Moiras, iras, no se veía veía dife diferen rente te a LáquLáquesis, vesti vestida da y co coro rona nada da de oro—. Qu Quizás izás de dese seamos amos re recom compen pensar sar a nuest nu estro ro di dios os fa favo vori rito. to. —No les gustan gustan los di dioses oses —res —respon pondió dió Ha Hades. des. —No nos desag desagra radas, das, al me menos. nos. —Me sien siento to alaga alagado do —espetó. —espetó. —Si no estás estás sa satis tisfec fecho, ho, deste deste j jere eremos mos el hilo hilo —di jo jo Át Átro ropos, pos, apareci recien endo do ante ante Ha Hades des y ar arre re batán batándo dole le el libro libro de las ma manos. nos. Era la mayor ma yor y to toda davía vía no se ve veía ía di dife feren rente te a sus herma hermanas, nas, ves vesti tida da de ro ro jo jo sangre, sang re, un par de odiosas odiosas ti jeras jeras de oro colga colga ban de una ca cade dena na alrealrededor de dor de su cu cuel ello. lo. Hades las miró miró a las tres. —Las conoz conozco co bi bien, en, Mo Moiras iras —di jo, jo, di diri rigi gién éndo dose se a todas todas el ellas las a la vez—. ¿A qui quién están están cas casti tigan gando? do? Intercambiaron una mira mirada. da. Fi Final nalmen mente, te, Cloto Cloto res respon pondió: dió: —Deméter supli suplicó có por una hi ja. ja. —Un deseo deseo que fue conce concedi dido do —di jo jo Lá Láqu quesis. esis. —Tú eres el precio precio que de be pagar pagar —agre —agregó gó Átro Átropos. pos. —Soy un casti castigo go —dec —decla laró ró Ha Hades. des.
Las Moiras Moiras eran cons consci cien entes tes del odio de Demé Deméter ter por Hades. Hades. Ha bía teni tenido do ra razón zón cu cuan ando do sos sospec pechó hó de un tru truco. co. —Si es así como como qu quiieres verlo verlo —di jo jo Clo Cloto. to. —Pero nos gusta gusta pensar pensar en el ello lo de ma mane nera ra dife diferen rente te —di jo jo Láquesis. quesis. —Es el precio precio que cob cobra ramos mos por nu nuest estro ro fa favor vor —explicó —explicó Át Átroropos. Así funci funciona ona ban las Moiras, Moiras, y los di dioses oses no eran inmu inmunes. nes. —¿Deméter es consci conscien ente? te? —pregun —preguntó tó Hades. Hades. —Por supu supues esto. to. No te tene nemos mos la costumb costumbre re de guar guardar dar sec secre retos, tos, lord Hades. Hades. Hades se quedó quedó en si silen lencio. cio. Si Demé Deméter ter esta esta ba al tan tanto, to, no era de extra ext rañar ñar que nun nunca ca hu bi biera era oído hab hablar lar de la Di Diosa osa de la Pri Prima mave vera. ra. —Piensan en casti castigar gar a De Demé méter, ter, pero pero en reali realidad dad es están tán casticastigando gan do a Per Persé séfo fone ne —di jo jo Ha Hades. des. La ironía ironía no pa pasó só desa desaper perci ci bida bida pa para ra él, porque porque le ha bía hecho hecho lo mismo. mis mo. Es Esta ta ba ob obliliga gada da a través través de su trato, trato, el me j jor or tra trato to que ha bía hecho hec ho en su vi vida, da, porque porque al nal, nal, ella ella no tenía tenía que amar amarlo. lo. Mi Miles les de morta mor tales les y Di Divi vinos nos por igu igual al te tení nían an des desti tinos nos te j jidos idos por las Mo Moiras. iras. Pero Pe ro no garan garanti tiza za ba una unión unión amoro amorosa, sa, y una entre entre él y la hi ja ja de Demé De méter ter era aún menos menos pro bab bable. le. Láquesis entre entrecer cerró ró los oj ojos. os. —¿Tienes miedo, miedo, Hades? Hades? El dios dios las fulmi fulminó nó con la mira mirada da y las tres Mo Moiras iras se ri rieron. eron. —Podemos te j jer er los hilos hilos del des desti tino, no, mi milord, lord, pe pero ro tú conser conservas vas el control control sob sobre re có cómo mo se de desar sarrol rolla la tu fu futu turo. ro. —Clo —Cloto to de desa sapa pare reció. ció. —¿Dominarás tu rela relaci ción ón co como mo go bi bier ernas nas tu reino? reino? —Láqu —Láquesis esis desa de sapa pare reció. ció. —¿O te dele deleita itarás rás con el ca caos? os? —Átropos —Átropos se des desva vane neció. ció. Y cuan cuando do es estu tuvo vo solo, solo, su ri risa sa alegre alegre se hizo hizo eco a su al alre rede dedor. dor. ¿Nunca has esta estado do ena enamo mora rado? do?
Las palab palabras ras de la mortal mortal volvi volvieron eron a él, en enter terrán rándo dose se ba jo su piel como como un pa pará rási sito. to. No, nunca nunca ha bía es esta tado do enamo enamora rado, do, y aho ahora ra siemp siempre re se pregunpreguntaría… taría… ¿Lo hab habría ría ele elegi gido do Per Persé séfo fone ne si le hu bieran bieran da dado do la li bertad? bertad? q
Abandonó la mansi mansión ón de las Moiras Moiras y se en encont contró ró fu fuera era de la ca baña ba ña de Hé Héca cate. te. La Diosa Diosa de la Bru j jería ería re resi sidió dió du duran rante te mucho mucho tiemtiempo en el Infra Inframun mundo. do. Hades Hades le ha bía permi permiti tido do es estab table lecer cerse se don donde de quisi qu isiera, era, y ha bía elegi elegido do un val valle le os oscu curo ro para para const constru ruir ir su ca baña baña cu bier bi erta ta de parras. parras. Des Despu pués, és, pa pasó só meses meses cul culti tivan vando do una gran can canti tidad dad de sola solaná náce ceas as ve vene neno nosas. sas. Hades simple simplemen mente te le levan vantó tó una ce ja cu cuan ando do des descub cubrió rió lo que ha bía hec hecho. ho. —No nj njas as que mis ve vene nenos nos no podrí podrían an ser úti útiles, les, Hades. Hades. —No he teni tenido do esos pensa pensami mien entos tos —ha bía res respon pondi dido. do. Hades sonrió sonrió al re recor cordar darlo. lo. Des Desde de en enton tonces, ces, Hé Héca cate te se ha bía converti ver tido do en su con con dente, dente, pro bable bablemen mente te en su me j jor or amiga. amiga. Estaba fuera, fuera, de pie ba jo un parc parche he de luz de luna luna que se ltra ltra ba a través través de una abertu abertura ra en el dosel dosel de los ár bo boles. les. Al princi principio, pio, la diosa di osa ha bía elo elogi giado ado su ca capa paci cidad dad pa para ra crear crear lo que ella ella llama llama ba una noche noc he encan encanta tada, da, pero pero no era de ext extra rañar. ñar. Ha Hades des era un di dios os naci nacido do de la oscu oscuri ridad. dad. Era lo que me j me jor or co cono nocía. cía. —¿Qué te preocu preocupa, pa, mi rey? —pre —pregun guntó tó mi mient entras ras se acer acerca ca ba—. ¿Es Menta? Menta? ¿Pu ¿Puedo edo su suge gerir rir le j jía ía pa para ra re reme medi diar ar la si situ tuaci ación? ón? Es bastante tan te do dolo loro roso so cuan cuando do se in ingi giere. ere. Hades arqu arqueó eó una ce ja. —¿Ya tienes tienes pen pensa sami mien entos tos asesi asesinos, nos, Hé Héca cate? te? Aún no es medimediodía. Sonrió. —Soy más creati creativa va por la noc noche. he.
Hades se rio entre entre dien dientes tes y am bos caye cayeron ron en un có cómo modo do silensilencio. Hades, Hades, per perdi dido do en sus pro propi pios os pen pensa sami mien entos. tos. Héca Hécate, te, miran mirando do a la luna. luna. Despu Después és de un mo momen mento, to, el ella la le pre pregun guntó tó de nu nuevo: evo: —¿Qué te preocu preocupa? pa? —Las Moiras Mo —di jo. jo. gas. ¿Qué han hec —Oh, las iras me jores jores ami amigas. hecho? ho? —Me han dado dado una espo esposa sa —di jo, jo, le levan vantan tando do am bas ce j ce jas—. as—. La hi ja ja de Demé Deméter. ter. Hécate se rio y rápi rápida damen mente te se ta tapó pó la boca boca con la mano mano ante ante la mira mi rada da ar arqu queeada de Ha Hades. des. —L… lo sien siento to —di jo, jo, y se ac acla laró ró la gar gargan ganta, ta, re recom compo poni nién éndo dose se —. ¿Es horrib horrible? le? —No —di jo jo Ha Hades—. des—. Esa es pro bable bablemen mente te la peor peor parte. parte. Ella Ella es hermo her mosa. sa. —Entonces, ¿por qué estás estás tan tris triste? te? Hades expli explicó có la tra trayec yecto toria ria de su noc noche he en la me menor nor canti cantidad dad de palab pa labras ras po posib sible: le: el trato trato de Af Afro rodi dita, ta, ver a Per Persé séfo fone ne por prime primera ra vez, darse darse cu cuen enta ta de que su reac reacci ción ón prima primaria ria pa para ra recla reclamar marla la era inusu inu sual al y descub descubrir rir el hilo hilo que los co conec necta ta ba. —Deberías ha ber vis visto to có cómo mo me mi miró ró cu cuan ando do se dio cu cuen enta ta de quiién era. Esta qu Esta ba horro horrori riza zada. da. —Dudo que estu estuvi viera era hor horro rori riza zada da —di jo jo Hé Héca cate—. te—. Sorpren Sorprendi dida, da, tal vez, tal vez inclu incluso so mor morti ti ca cada da si sus pensa pensami mien entos tos fueron fueron como como los tuyos. tuyos. Hécate lo miró miró con compli complici cidad, dad, pe pero ro Ha Hades des no es esta ta ba tan se seguguro. Héca Hécate te no ha bía esta estado do allí. allí. —Nunca te he visto visto retrac retractar tarte te de un de desa safío, fío, Ha Hades. des. —No lo he hecho hecho —di jo. jo. Ha Ha bía bía hec hecho ho lo cont contra rario: rio: esen esenci cial almenmente, la ha bía atado atado a él duran durante te los sigu siguiientes entes seis seis meses. meses. Hécate espe esperó ró a que se exp explilica cara. ra. —Jugó conmi conmigo. go.
—¿Qué? —Me invi invitó tó a su me mesa sa para para un juego juego y perdió perdió —explicó —explicó Hades. Hades. Mañana por la maña mañana, na, su mar marca ca apare aparece cería ría en la piel piel de Per Perséséfone, fone, y cu cuan ando do reg regre resa sara, ra, le ofre ofrece cería ría los térmi términos nos de su contra contrato. to. Si falla fal la ba, sería sería una rehicis siden dente te del Infra Inframun mundo do para para siemp siempre. re. —Hades, no loresi hi ciste. te. Solo miró miró a la di diosa osa bru ja. —Es la Ley Divi Divina na —di jo. jo. Hécate lo fulmi fulminó nó con la mira mirada, da, sa bi bien endo do que eso no era cier cierto. to. Hades Ha des pod podría ría ha ber ele elegi gido do de j jar arla la ir sin exi exigir gir su ti tiem empo, po, y ha bía elegi ele gido do no ha hacer cerlo. lo. Si las Mo Moiras iras iban a co conec nectar tarlos, los, ¿por qué no tomar el control? control? —¿No qui quieres su amor? ¿Por qué la obli obliga garí rías as a r rmar mar un contrato? ra to? Después de un momen momento, to, ad admi mitió tió en voz alta: alta: —Porque no pensé pensé que vol volve vería. ría. No miró miró a Hé Héca cate, te, pero pero su si silen lencio cio le di jo jo que sentía sentía lás lásti tima ma por él, y odiaba odiaba eso. —¿Qué le vas a pedir? pedir? —pre —pregun guntó. tó. —Lo que les pido pido a todos todos —di jo. jo. Desaaría las inse insegu guri rida dades des de su al alma. ma. Al nal, nal, crearía crearía una reina o un monstruo. monstruo. No sa bía cuál. cuál. —¿Cómo te sien sientes tes cuan cuando do la mi miras? ras? —pre —pregun guntó tó Héca Hécate. te. A Hades Hades no le gus gusta ta ba esa pregun pregunta, ta, o tal vez no le gusta gusta ba su respu res pues esta, ta, pe pero ro hab habló ló con sin since ceri ridad, dad, no obs obstan tante. te. —Como si hu biera biera de desa sata tado do el caos. caos. Hécate sonrió. sonrió. —Ya puedo puedo de decir cir que me va a gus gustar. tar. —Enton —Entonces ces sus oj ojos os brillabrillaron diver diverti tidos—. dos—. De bes de decir cirle le a Men Menta ta que te casa casarás rás cu cuan ando do yo esté presen presente. te. ¡Se pondrá pondrá fu furi riosa! osa!
Capítulo V Contrato Contrat o sellado sell ado
Hades seenzo en encont Tár Tárta ro.nía aquí con más frecu Al comien comi zocontró derósuenreina reel inado, do,taro. ve venía frecuen encia cia que cual cu alqu quiier otro otro lugar lugar de su re reino. ino. La era poste posteri rior or a la derro derrota ta de los Tita Ti tanes nes ha bía sido sido una épo época ca oscu oscura. ra. Naci Nacido do de la gu guer erra, ra, Ha Hades des no cono co nocía cía nada nada más que sangre sangre y do dolor, lor, pe pero ro no ha bía pa pasa sado do su ti tiemempo en el Tárta Tártaro ro por un deseo deseo de exis existir tir con lo fa fami mililiar. ar. Lo hi hizo zo con el deseo deseo de cas casti tigar gar a los res respon ponsab sables les de su oscu oscuro ro comi comien enzo: zo: los Titanes. tanes. Con el tiem tiempo, po, lo ha bía ne nece cesi sita tado do cada cada vez me menos. nos. En ranoche rashe oca ocasi siones, ones, to toda davía vía llega ga ba a ca cana nalilizar zar la ra bia re resi sidu dual. al. Estararas noc no era di dife feren rente. te.lle Estaba de pie en su oci ocina, na, una ha bita bitaci ción ón ca caver verno nosa sa pe pero ro moderna der na en la ci cima ma de una de las mon monta tañas ñas del Tárta Tártaro. ro. Se veía veía como como una cáma cámara ra de tor tortu tura, ra, sus pa pare redes des cu bier biertas tas con armas armas que Ha Hades des ha bía usa usado do en muchos muchos hu huma manos nos y hu huma mano noides ides de desa safor fortu tuna nados dos que se encont encontra ra ban restrin restringi gidos dos an ante te él, muc muchos hos de ellos ellos guar guardan dando do secretos, retos, inc inclu luso so en la otra otra vida. vida. Par Parte te del suelo suelo era de vidrio, vidrio, y desde desde este es te es espa pacio cio ele eleva vado, do, Hades Hades mi mira ra ba ha hacia cia aba jo, nivel nivel tras ni nivel vel de tortu tor tura. ra. los años, la prisi Con prisión ón ha bía evolu evoluci ciona onado. do. Ha bía co comen menza zado do
ba jo tier tierra, ra, con nive niveles les que abar abarca ca ban ki kiló lómet metros ros y ki kiló lómet metros, ros, todos todos dedi de dica cados dos a casti castigar gar los crí críme menes nes más perver perversos sos y tortu torturar rar almas almas de formas for mas ab absur surdas: das: con vien viento, to, lluvia lluvia hela helada da y fu fuego, ego, y las senten sentenci cias as más eci ecien entes tes de as asxia con al alqu quit itrán, rán, águilas águilas y bu buit itres res co comi mién éndo dose se híga hí gados dos y la carne carne ar arran ranca cada da de los cuer cuerpos pos con dien dientes tes ala alados dos como nava nava j jas. as. Si bien bien esas for formas mas de tor tortu tura ra aún existí existían, an, Ha Hades des evo evolu luci cionó onó con el mundo mundo de arri arri ba, ba, tal tallan lando do monta montañas ñas y cre crean ando do cel celdas das aisla aisladas das para pa ra di diver versas sas for formas mas de tor tortu tura ra psico psicoló lógi gica. ca. Cu Cual alqu quiiera que fu fuera era la vari va riedad, edad, a Ha Hades des so solo lo le im impor porta ta ba que pro produ du j jera era el mismo mismo re resul sultatado: sufri sufrimi mien ento. to. Hades tomó tomó una bo botel tella la de whisky de su esc escri rito torio rio y be bió un trago tra go an antes tes de chas chasqu queear los de dedos, dos, con convo vocan cando do un al alma. ma. El hombre hombre era el que Sísi Sísifo fo ha bía mata matado do a ti tiros ros en el patio patio de su pes pesqu quería. ería. Isidore An ge gelos. los. Tenía las manos manos uni unidas das en su espal espalda da y las pi pier ernas nas ata atadas. das. Su bar bil billa la des descan cansa sa ba cont contra ra su pec pecho. ho. Esta Esta ba dor dormi mido. do. Las almas almas ten tendí dían an a con conti tinu nuar ar en el Inf Infra ramun mundo do como como lo hicihicieron en el Mundo Mundo Supe Superi rior, or, lo que sig signi ni ca ba que se apega apega ban a la ruti ru tina, na, aun aunque que no la nece necesi sita ta ban. El sueño sueño era un ejemp ejemplo lo de es esto. to. —Bueno, ¿no es guapo? guapo? —di jo jo Her Hermes, mes, apare apareci cien endo do en la oci ocina na de Hades. Hades. El Dios Dios del Enga Engaño ño a menu menudo do iba y ve venía nía de su reino, reino, ha bi bien endo do asumi asu mido do el papel papel de psico psicopom pompo, po, un gu guía ía para para las almas, almas, ha hace ce siglos. Hades Hades lo miró. miró. El di dios os es esta ta ba en su forma forma divi divina, na, dora dorado do y llamati ma tivo. vo. Te Tenía nía gran grandes des alas blancas blancas y un par de cu cuer ernos nos cortos cortos que asoma aso ma ban por un lado lado de su ca beza, beza, ca casi si invi invisib sibles les ent entre re sus ri rizos. zos. Sus ojos ojos dora dorados dos eva evalu luaron aron al mor mortal. tal. —No te comas comas con los oj ojos os a los prisi prisione oneros, ros, Her Hermes mes —di jo jo Hades. —¿Qué? Puedo Puedo apre apreci ciar ar la bel belle leza. za. —¿Con tu histo histori rial? al? No. Tien Tiendes des a olvi olvidar dar lo que hay de de ba ba jo de
la piel. piel. —También tien tiendo do a tener tener se sexo xo aluci alucinan nante te —di jo jo Her Hermes, mes, sus suspipirando—. ran do—. Es un sacri sacri cio que es estoy toy dispu dispues esto to a ha hacer. cer. Ante eso, Hades Hades se ale jó del dios, di os, pu puso so los ojos ojos en blan blanco co y agi agitó tó el líqu líquido ido en su bo la taras an antes tes con de to tomar otro otro trago. go. frecu —Quizás si botel te tella acos acosta ras algu almar guiien contra más frecuen encia, cia, no sentirí tirías as la ne nece cesi sidad dad de tor tortu turar rar a tus su j jetos etos —di jo jo Her Hermes. mes. Hades rechi rechinó nó los di dien entes, tes, algo algo que ha bía hecho hecho to todo do el día. Mañana ña na le do dole lería ría la man mandí dí bula. bula. Las palab palabras ras de Her Hermes mes lo frust frustra raron ron por dos razo razones: nes: que el dios dios sinti sintiera era la ne nece cesi sidad dad de co comen mentar tar su vida sexu sexual al y porque porque sus pen pensa sami mien entos tos se diri dirigi gieron eron a la her hermo mosa sa Perséfo sé fone. ne. Sintió una tensi tensión ón en la ing ingle le que ca casi si lo hizo hizo ge gemir. mir. —¿Alguien ha dicho dicPor hoque al algu guna natoy vezbastan que podrí pod rías asro nece nede cesi sitar tar te tera pia? —pre —pregun guntó tó Hermes—. Herte mes—. Porque estoy es bas tante te se segu guro que tortu torrapia? turar rar a la gente gente es un sig signo no de psico psicopa patía. tía. Hades miró miró a Her Hermes, mes, que aho ahora ra soste sostenía nía una pi pica cana na para para ganaganado. De repen repente, te, se encen encendió, dió, ha haci cien endo do un terrib terrible le clic. El di dios os gri gritó tó y lo de jó ca caer er in inme medi diata atamen mente. te. Hades arqu arqueó eó una ce ja. A ve veces, ces, era di difí fícil cil recor recordar dar que Her Hermes mes era en reali realidad dad un há bil guer guerre rero. ro. —¿Qué? —desa —desaó—. ó—. ¡Eso me asustó! asustó! Hades arran arrancó có la pica picana na del suelo suelo y se volvió volvió ha hacia cia el homb hombre re llamado llama do Isi Isido dore re que esta esta ba senta sentado do en el cent centro ro de su o oci cina, na, lu luego ego di jo: jo: —Despierta. La ca be beza za del homb hombre re colga colga ba y sus oj ojos os se abri abrieron eron y cer cerra raron, ron, pesa pe sados dos por la fa fati tiga. ga. Hades espe esperó ró mi mient entras ras el mor mortal tal se fa fami mililiari ariza za ba con su entor entorno, no, solo so lo habló habló cu cuan ando do vio re reco cono noci cimi mien ento to en su rostro. rostro. —Bienvenido a mi reino reino —di jo jo Ha Hades. des. Los ojos ojos de Isi Isido dore re se agran agranda daron. ron.
—¿Estoy… estoy estoy en el Tár Tárta taro? ro? Hades no respon respondió. dió. En cam bio, di jo: jo: —Eres un impío. impío. Los impí impíos os eran mor morta tales les e in inmor morta tales les por igu igual, al, que rec recha haza zaron ron a losvari di oses cuan cunes: ando doalgu llega garon ron latían Tier Ti ra du duran rante te el al Gran Descen Des censo so por vadioses rias as ra razo zones: allle gunos nos se asentí sen anerra aban abando dona nados, dos, algu gunos nos sentí sen tían an que los dioses dioses eran hipóc hipócri ritas, tas, ot otros ros ya no dese deseaban aban ser go go ber berna nados. dos. Al nal, nal, los dos bandos bandos fueron fueron a la gu guer erra, ra, los im impí píos os y los eles. eles. Hades Ha des no es esta ta ba ansi ansioso oso por unir unirse se a la lucha; lucha; despu después és de todo, todo, no impor im porta ta ba a qué lado lado se uniera, uniera, su reino reino crece crecería ría de cual cualqu quiier manemanera. —Y un miemb miembro ro le leal al de Trí Tríada ada —agre —agregó gó Ha Hades. des. Tríada era un grupo grupo de morta mortales les impí impíos os que se opo oponí nían an a los dioses,mos exiac exigi gien endo dotas, justi juslos ticia, cia, libre libpicos recosal bedrío bedlla ríoma y ban li bertad. berterro tad. Setas. llama llama ban a sí mis mismos acti tivis vistas, olím olímpi los llama ter roris ristas. —¿Tr… Tríada? Tríada? ¿Qué te ha hace ce pensar pensar que soy mi miemb embro ro de Tríada? Miró al hombre hombre por un mo momen mento. to. No le gus gusta ta ba res respon ponder der preguntas, gun tas, en re reali alidad dad no le gus gusta ta ba hablar hablar en ab abso solu luto, to, pero pero respon respondedería a esto, esto, ya que pod podría ría evi evitar tar que el homb hombre re in inten tenta tara ra se segu guir ir mintimintiendo. en do. —Tres razo razones nes —di jo jo Ha Hades—. des—. Uno, tarta tartamu mude deas as cu cuan ando do mi mienentes. En sen segundo segun lugar, gar,tiras. inc inclu luso so situ no tarta tamu mude dearas arasycuan cusaando do aloceni haces, ces, puedo pu edo sentir tir do las lu men menti ras. Las tuyas yastar son amargas amar gas ben ceha niza, za, una marca marca de tu alma. alma. En tercer tercer lu lugar, gar, si no dese deseas as pub publilici citar tar tu le lealaltad, no de bes ta tatu tuár árte telo lo en la pi piel. el. Hades notó notó có cómo mo los ojos ojos del homb hombre re se des desvi viaron aron ha hacia cia su brazo derec derecho ho don donde de es esta ta ba entin entinta tado do el tri trián ángu gulo, lo, el sím bo bolo lo del Tríada. —Entonces, ¿me tortu tortura rarás rás por mi le leal altad? tad? —Te tortu tortura raré ré por tus crí críme menes nes —di jo jo Hades—. Hades—. El hec hecho ho de que seas se asIsidore mi miemb embro ro Tríada es simp simple lemen mente te do unaHa ven venta ta ja. lande lanzó zó Trí unada gri grito to gutu gutural ral cuan cuando Hades des empu empu jó la pi pica cana na
en su costa costado. do. El olor a carne carne qu quema emada da le llenó llenó la na nariz. riz. Des Despu pués és de unos segun segundos, dos, se apar apartó. tó. La es espal palda da del mor mortal tal esta esta ba ar arqu queeada, su respi res pira raci ción ón ent entre recor corta tada. da. —¡Dioses, Hades! Hades! ¿Re ¿Real almen mente te ti tienes enes que ha hacer cer esto? esto? —pre —pregun guntó tó Hermes, Her mes, pe pero ro no hi hizo zo nin ningún gún movi movimi mien ento to para para cubrir cubrirse se los oj ojos os o inclu inc luso so pare parecer cer disgus disgusta tado. do. —No nj njas as que no has tor tortu tura rado do a un mor mortal, tal, Hermes. Hermes. To Todos dos lo hace ha cemos mos de ma mane nera ra dife diferen rente te —escupió —escupió Ha Hades. des. Cuan Cuando do la pi pica cana na volvió vol vió a en encen cender derse, se, el homb hombre re mi miró ró a Ha Hades des y de desa saó. ó. —Me han tortu tortura rado do an antes. tes. Hades sonrió sonrió con ma malilicia. cia. —No yo. La pica picana na fue solo solo el comi comien enzo zo de la tortu tortura ra de Isi Isido dore. re. Hades Hades pasó pa sóhombre, de lare,elect electro rocu cuci ción óndolo allofu fuego, ego,vida in dian ando do el suelo elo ba jo losanpi pies es del homb man mante teni nién éndo con viincen dacendi mi mient entras ras lassu lla llamas mas la lamí mían su piel. pi el. Gri Gritó, tó, in inha halan lando do humo, humo, lo que le hizo hizo toser toser has hasta ta que le sa salió lió sangre sang re por la boca. boca. En algún algún mo momen mento, to, Ha Hades des apagó apagó las lla llamas mas con su ma magia, gia, y en el silen silencio cio poste posteri rior, or, Her Hermes mes hab habló. ló. —Estás muy jodido, jodido, Ha Hades. des. —Ustedes. —La voz de Isido Isidore re ronca, ronca, su pec pecho ho su bía y ba j jaba aba lenta len tamen mente—. te—. Cre Creen en que son in into tocab cables les por porque que son dioses. dioses. —Esa es exacta exactamen mente te la ra razón zón por la que so somos mos into intocab cables les —di jo jo Hermes. Her mes. Hades levan levantó tó la ma mano, no, si silen lenci cian ando do al Di Dios os de la Trave Travesu sura. ra. —No sa bes lo que viene viene —agregó —agregó Isi Isido dore, re, con la voz hueca. hueca. Su ca be beza za col colga ga ba hacia hacia un la lado do ya no miran mirando do a Hades, Hades, si no a la pared. El dios dios agar agarró ró el rost rostro ro car boni boniza zado do del mor mortal tal para para que lo miramirara. —Um, Hades… Hades… —co —comen menzó zó a de decir cir Her Hermes. mes. —¿Qué viene? viene? —exigió —exigió Ha Hades. des. —Guerra —respon —respondió dió el homb hombre. re.
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Era casi casi me medi diodía odía y Ha Hades des aún no ha bía dormi dormido. do. Sentía Sentía los ojos ojos como co mo pa papel pel de li ja ja y la voz de Her Hermes mes le raspa raspa ba los oídos. El dios dios lo ha bía segu seguido de reg reso so amito sutorio. pa pala lacio ciodes y aho ahora ra un ca cami mina na badea lasubotellateldo mient mi entras ras seido di diri rigía gíaregre a su dor dormi rio. Ha Hades to tomó mó tra trago go bolado la que ha bía traído traído de su o oci cina na en el Tárta Tártaro. ro. —Podrías ha ber berme me dicho dicho que lo es esta ta bas tor tortu turan rando do para para obte obtener ner infor informa maci ción ón —se qu quee jó Her Hermes. mes. —¿Estás dici dicien endo do que, si te lo hu biera biera dic dicho, ho, te hab habrí rías as abs abste tenini jodido do que estoy? do de decir decirme me lo jodi estoy? —pregun —preguntó tó Ha Hades. des. Hermes abrió abrió la bo boca ca pa para ra respon responder, der, pe pero ro Hades Hades hab habló ló en su lugar, una rara rara ocasi ocasión. ón. —Tríada se está está reor reorga gani nizan zando. do. Ne Nece cesi sito to tus oj ojos os y tus oídos. Hermes se rio. tienes mi miedo edo , ¿verdad? —En reali realidad dad no… les tienes ¿verdad? —Fuimos a la guer guerra ra con Tríada, Tríada, Her Hermes. mes. Pod Podría ría volver volver a su suceceder. No su bes besti times mes a los mor morta tales les deses desespe pera rados dos por la li bertad. bertad. Hermes entre entrecer cerró ró los oj ojos. os. —Parece que simpa simpati tizas zas con el ellos. los. Hades se encont encontró ró con la mi mira rada da del di dios os y respon respondió dió co como mo siemp—Lo empre re hacía: haque cía: es malo malo para para uno es la lucha lucha por la li bertad bertad para para otro. otro. Lo ha bía dicho dicho an antes tes y lo vol volve vería ría a de decir. cir. El proble problema ma que te tenía nía con Tríada Tríada eran las vi vidas das ino inocen centes tes que se lle lleva va ban con ellos ellos du duran rante te su pelea. pelea. —No de j jes es que tu ar arro rogan gancia cia te ciegue, ciegue, Her Hermes. mes. Esta vez, cuan cuando do Ha Hades des se di diri rigió gió ha hacia cia sus apo aposen sentos, tos, el di dios os no lo sigu siguió. ió. Tan pronto pronto co como mo estu estuvo vo dentro dentro de su ha ha bi bita taci ción, ón, sus suspi piró, ró, pre presisionando onan do los de dedos dos cont contra ra su si sien. en. Hacía Hacía muc mucho ho que no le dolía dolía la ca-
beza, pe beza, pero ro ese día era in inter termi minab nable. le. Ha Hades des cru cruzó zó la ha bita bitaci ción ón has hasta ta la chime chimenea nea y se termi terminó nó el whisky. Miró Miró la bo botel tella la va vacía, cía, contempcontemplando lan do los acon aconte teci cimi mien entos tos del día, de ayer. Ha bía nego negoci ciado, ado, ase asesi sinanado y tortu tortura rado. do. Estaba segu seguro ro de que su futu futura ra espo esposa sa desap desapro ro ba baría ría to todas das las cosas. Futura es po posa. sa. Malditas Moiras. Moiras. Hades arro arro jó la bo botel tella la y se hi hizo zo añicos añicos cont contra ra la pa pared red de mármol negro. negro. Voy a tener tener que de j jar ar de rom per co cosas sas cu cuan ando do el ella la lle gue , pensó, pensó, y luego se rega regañó ñó por sonar sonar tan… es espe peran ranza zado. do. Suspiró eno j jado ado y se diri dirigió gió hacia hacia su cama, cama, ao ao j ján ándo dose se la cor bata. ojras, ojos os hatenía bínía anque co comen menza zado doa alevan arder. der. Ne Nece sita ta baotra dormir. mir. Enportan cu cues estitión Sus de horas, ho te bían vol volver ver lear vantar tarse. se.cesi Te Tenía nía otdor ra ci cita ta im impor tante te que concer concertar. tar. Es Esta ta en su propio propio ter terri rito torio, rio, Ini Iniqu quity, ity, un exclu exclusi sivo vo club donde donde lo peor peor de la soci sociedad edad se re reunía unía ba jo su protec protecci ción ón y go bier bi erno. no. Justo cuan cuando do re reti tira ra ba las mantas, mantas, so sonó nó un golpe golpe en la puer puerta. ta. —Vete —di jo, jo, pen pensan sando do que se sería ría Menta. Menta. En cam bio, res respon pondió dió la voz de Ili Ilias. as. —Oh, creo que quer querrás rás escuc escuchar har esto, esto, mi milord. lord. Hades suspi suspiró. ró. —¿Sí? Ilias entró, entró, ar arqu queeando ando una os oscu cura ra ce ja y son sonri rien endo do con ironía. ironía. —No hay descan descanso so para para los mal malva vados. dos. La mu j jer er de anoche anoche está está fuera fu era de Never Nevernight night pe pele lean ando do con Dun Duncan. can. Ha pu pues esto to sus ma manos nos sobre sob re el ella. la. Se Será rá me j jor or que te des pri prisa. sa. Hades no pudo pudo descri descri bir bir la sen sensa saci ción ón que lo in inva vadió, dió, pero pero era como co mo si to todo do dent dentro ro de él se hu bi biera era con conge gela lado do por un se segun gundo: do: su sangre sang rean. no se apre apresu sura ra ba, su cora co razón zón no la latía, tía, sus pul pulmo mones nes no se expan pandí dían.
Tan rápi rápido do co como mo el hi hielo elo ent entró ró en sus ve venas, nas, de desa sapa pare reció, ció, reempreemplaza lazado do por una fu furia ria al ro ro jo jo vi vivo. vo. —¿Por qué no lo di jis jiste te antes? antes? —espetó —espetó an antes tes de te telet letrans ranspor portartarse a la entra entrada da de Ne Never vernight. night. Al otroPersé otro la lado do dene,laDiosa puer puosa erta, ta,deuna voz fa fami mili liar ary si ame amena zó: man —Soy Per séfo fone, Di la Pri Prima mave vera, ra, qui qunazó: ieres mante tener ner tu mise mi serab rable le vida, vida, me obede obedece cerás. rás. Hades abrió abrió la pu puer erta. ta. Se sin sintió tió fre frené néti tico co has hasta ta que sus oj ojos os se posa po saron ron en la di diosa, osa, y lu luego ego quedó quedó ató atóni nito. to. Estaba de pie en la medi medioc ocre re ace acera, ra, ba jo el sol de dema masi siado ado bril brillanlante, despo despo j jada ada de su gla glamo mour ur hu huma mano. no. Los cu cuer ernos nos de cu cudú dú blancos blancos brota bro ta ban de su ca ca bel bello lo sal salva va je y, a pe pesar sar de su al altu tura, ra, no po podía día evi evitar tar pensar pen sar en lo pequ pequeña eña que pa pare recía. cía. Le gusta gusta ba verla verla de esa mane manera. ra. Se sentía sen tíaera ínti íntimo moséfo de al algu guna mane manera, ra,se porque por saina, bía yque esta esera ta batodo vi vienendo. Esta Esta Persé Per fone, ne, lana diosa diosa que sería ríaque su reina, re ella ellalalo todo . No lo miró miró a los ojos, ojos, pe pero ro de deniti nitiva vamen mente te sus ojos ojos esta esta ban j jos os en él, sigu siguiien endo do su gu gura ra con una inten intensi sidad dad en su exp expre resi sión ón que no podía po día ubicar, ubicar, pero pero qu quería ería en enten tender. der. A pesar pesar de sen sentir tir que no te tenía nía control control sob sobre re su cu cuer erpo, po, sus emoci ciones, ones, o su magia, magia, se re recom compu puso so lo me j jor or que pudo pudo y hab habló. ló. —Lady Persé Perséfo fone. ne. —Su títu título lo se sin sintió tió pe pesa sado do en su lengua, lengua, y ante an te sus pa palab labras ras lo mi miró ró a los oj ojos os y, nu nueva evamen mente, te, se sorpren sorprendió dió por sus ojos ojos bril lantes, salva saldelos. valos. j jes es como co mo los bió ríos ríos en delsuTár Tárta taro ropostu y tan ver des como co mo el brillan Cam Campo potes, detan As Asfó fóde Al Algo go cam compos com tura raverdes cu cuanando lo miró. miró. En Ende dere rezó zó los homb hombros ros y le levan vantó tó la bar bil billa. la. —Lord Hades. Hades. Se diri dirigió gió a él for formal malmen mente te y asin asintió. tió. No esta esta ba segu seguro ro de qué era lo que no le gusta gusta ba: el hec hecho ho de que hu bi biera era usa usado do su títu título, lo, o su lengu lenguaa je cor corpo poral ral cere ceremo moni nial. al. Frun Frunció ció el ceño, ceño, pe pero ro no pudo pudo pensar mucho mucho en el tema, tema, por porque que Dun Duncan can llamó llamó su aten atenci ción. ón. —Milord. —El ogro ogro ca cayó yó de rodil rodillas las y ba jó la ca ca be beza—. za—. No sa bía que —¿Castigo? era una diosa. diosa. Acepto Acep to eleco cas casti tigo goséfo por acci aczó ciones. ones. —se hizo hizo Persé Per fone. ne.mis Cruzó Cru los bra brazos zos sob sobre re el
pecho co pecho como mo si se sin sinti tiera era incó incómo moda da con la idea. Ha Hades des ap apre retó tó los dientes, en tes, la misma misma fu furia ria que lo ha bía ha bía venci vencido do en el Inf Infra ramun mundo do volvió volvió a arder. ar der. —Puse mis manos manos sobre sobre una di diosa osa —di jo jo Dun Duncan. can. —Y una mu er, ivoca además adecamás —agregó gónente Ha Hades con tris za.nía na Duncan se j jer, equ equivo ba. —agre Su inmi inminen tedes cas casti tigo gotriste noteza. te tenía nada da que ver con el hecho hecho de que ha bía to toca cado do a algu alguiien de sang sangre re Di Divi vina, na, era porque por que ha bía heri herido do a una mu j jer. er. Ha Hades des no to tole lera ra ba la vi violen olencia cia contra cont ra mu jeres jeres o ni niños. ños. De hec hecho, ho, lo odi odiaba aba tan tanto, to, que ha bía un nivel nivel espe es peci cial al en el Tár Tárta taro ro para para los res respon ponsab sables les de seme seme j jan antes tes crí críme menes, nes, y sus casti castigos gos eran repar reparti tidos dos por las pro propi pias as Fu Furi rias, as, las tres te temi midas das Diosas Di osas de la Vengan Venganza, za, Néme Némesis, sis, la Diosa Diosa de la Ret Retri ri buci bución ón y Héca Hécate, te, quiien se encar qu encarga ga ba de casti castigar gar per perso sonal nalmen mente te a los abusa abusado dores. res. Ningún huma humano no o huma humano noide ide era ex excu cusa sado, do, ya fu fuera era tra ba j jador ador de Hades Hades o no. —Me ocupa ocuparé ré de ti más tar tarde de —prome —prometió tió Hades—. Hades—. Aho Ahora, ra, lady Persé Per séfo fone. ne. Se hizo hizo a un la lado, do, de j jan ando do es espa pacio cio pa para ra que el ella la entra entrara ra a Ne Neververnight. No vaci vaciló ló como como pen pensó só que ha haría, ría, entran entrando do en la oscu oscuri ridad dad de su club como como si fuera fuera su dueña. dueña. Cerró Cerró la puer puerta ta detrás detrás de el ella la y, por un momen momento, to, qu queda edaron ron at atra rapa pados dos jun juntos, tos, el aroma aroma de su magia magia se entre ent rela lazó zó y ab abru rumó. mó. Ha Hades des reco recono noció ció la ri rigi gidez dez en la pos postu tura ra de Perséfo sé fone, ne, porque porque se ha bía queda quedado do igu igual al de qu quiieto. Su re reac acci ción ón lo re relala jó, pro bab pro bable lemen mente te por porque que en encont contra ra ba es espe peran ranza za en la idea de que la afecta afec ta ba de la mis misma ma ma mane nera. ra. Consideró desa desa ar lo que se esta esta ba const constru ruyen yendo do ent entre re el ellos, los, acercán acer cándo dose se y apartan apartando do su re relu luci cien ente te ca bel bello lo de su cu cuel ello. lo. Prácti Prácticacamente men te po podía día escuc escuchar har su respi respira raci ción ón temb temblo loro rosa sa mient mientras ras pre presi sionaona¿Entonces ces se derre derreti tiría ría en sus brazos? brazos? ba como como un be beso so su suave suave piel. piel. ¿Enton ¿O pele pelearía? aría? Se acercó. acercó. No creía creía que fu fuera era posib posible, le, pero pero se puso puso aún más rígirígida, con la espal espalda da er ergu guida. ida. Esta Esta ba ten tensa, sa, una ví bora bora lista lista pa para ra atacar. atacar. Era mor mordis quedeso sopor porta taría ría bulaena gana, na, y sesuincli incore linó, nó, dí bula buun la ro rozó zódisco uncolado lado su rostro, rost ro,de susbuena bios biosga to toca caron ron ja. su man-
—Estás llena llena de sorp sorpre resas, sas, qu queri erida. da. Se dio cuen cuenta ta de que era dema demasi siado ado arro arrogan gante, te, no es esta ta ba pre prepaparado ra do pa para ra la re reac acci ción ón de su cuer cuerpo po ha hacia cia ella. ella. Su olor se hundió hundió en su piel, pi el, en encen cendi dien endo do su sangre. sangre. Se puso puso pe pesa sado do y du duro ro al pensar pensar en envolver vol ver su bra brazo zo alre alrede dedor dor de su cin cintu tura, ra, acercán acercándo dola la a él, consu consumimiéndo én dola. la. Mierda. Una respi respira raci ción ón audib audible le lo devol devolvió vió a la re reali alidad, dad, y an antes tes que ella pudi pudiera era enf enfren rentar tarlo, lo, es esta ta ba abri abrien endo do la puer puerta ta inte interi rior or a Ne Neververnight y rompi rompien endo do el extra extraño ño hec hechi hizo zo ent entre re el ellos. los. —Después de ti, diosa. diosa. Ella parpa parpadeó, deó, y él no notó tó la confu confusi sión ón en su exp expre resi sión. ón. Qu Quizás izás creía cre ía que lo que aca aca ba ba ba de expe experi rimen mentar tar era una ilu ilusi sión. ón. Casi Casi es espepera baojos. huye huyera, ra, pe nu nueva evamen mente, te, chis chispa de desa fío to ent entró ró deen sus ojque os. Mantu Man tuvo vo pero suromi mira rada da mi mient entras rasesa pa pasa sa bapa jun junto to ade él,safío tanto tan un safío sa fío co como mo una bur burla. la. La sigu siguió ió y la vio acercar acercarse se al balcón, balcón, es esca cane nean ando do con los oj ojos os el piso pi so de aba jo. Se pregun preguntó tó qué esta esta ba buscan buscando, do, pe pero ro no pregun preguntó, tó, solo so lo espe esperó ró has hasta ta que lo mi miró ró y conti continuó nuó ba j jan ando do las es esca cale leras. ras. Sus taco tacones nes re reso sona naron ron mi mient entras ras la se segu guía, ía, y así fue como como su supo po que ha bía de j jado ado de mo mover verse, se, por porque que el club se qu quedó edó en silen silencio. cio. —¿A dónde dónde va vamos? mos? —pre —pregun guntó. tó. Ha bía sospec sospecha ha en su voz, y se recor re por porque quesinti hutiera biera bi eracon ent entra do Never vernight night volun volunta tari riamen amente, te, nocordó qudó quería eríaque, decir decir que sin era con rado an anza. za.a Ne Hades hizo hizo una pa pausa, usa, volvi volvién éndo dose se para para mirar mirarla. la. No de bería bería ha ber mira mirado do at atrás. rás. Ca Casi si lo hi hizo zo cu cues esti tionar onar lo que esta ba haci hacien endo, do, atra atrayen yendo do a es esta ta her hermo mosa sa di diosa osa más profun profundo do en su reino. reino. —Mi oci ocina na —di jo—. jo—. Me ima imagi gino no que cual cualqu quiier cosa cosa que ten tengas gas que decir decirme me exi exige ge pri priva vaci cidad. dad. Ella arqu arqueó eó una ce ja, miran mirando do el espa espacio cio vacío. vacío. —Esto pare parece ce bas bastan tante te pri priva vado. do.
—No lo es. —Se giró giró y su bió las es esca cale leras, ras, comp compla laci cido do cuan cuando do escuc es cuchó hó el clic de sus taco tacones nes si sigu guiiéndo éndolo. lo. En lo alto alto de las es esca cale leras, ras, se vol volvió vió ha hacia cia su o oci cina na y ab abrió rió una de las dos grandes grandes pu puer ertas tas que lleva lleva ban uno de sus sím bo sím bolos los en oro, un biden bidente, te, entre entrela laza zado do con en enre reda dade deras ras y o ores. res. Cu Cuan ando do se vol volvió vió hacia ha cia Per Persé séfo fone, ne, toda todavía vía es esta ta ba a unos metros metros de distan distancia. cia. Su distancia tan cia lo frust frustra ra ba. —¿Va a dudar dudar a cada cada pa paso, so, lady Persé Perséfo fone? ne? Ella frunció frunció el ceño. ceño. —Solo esta esta ba ad admi miran rando do su deco decora raci ción, ón, lord Ha Hades. des. No me di cuen cu enta ta de esto esto anoc anoche. he. —Las puer puertas tas de mis ha bi bita taci ciones ones a menu menudo do es están tán vela veladas das durante ran te el hora horario rio co comer merci cial al —res —respon pondió, dió, y lu luego ego seña señaló ló la pu puer erta ta abier erta—. ta—. ¿Pa ¿Pasa samos? mos? Levantó la bar billa billa y pa pasó só junto junto a él. La sigu siguió ió mient mientras ras se mo movía vía por el suelo suelo de mármol mármol neg negro ro y se fa fami mililiari ariza za ba con su oci ocina, na, con los ojos ojos j jos os pri prime mero ro en la pared pared de ven venta tanas nas que da ban al su suelo elo del club. Era una carac caracte terís rísti tica ca co común mún en la ma mayo yoría ría de sus o oci cinas, nas, una forma for ma de ob obser servar var des desde de ar arri ri ba. ba. A pe pesar sar del ca calor lor ex exte teri rior, or, Hades Hades mante man tenía nía el fu fuego ego encen encendi dido do en su chi chime menea. nea. Le gusta gusta ba el fu fuego, ego, le gusta gus ta ba la for forma ma en que baila baila ban las lla llamas, mas, le gus gusta ta ba mi mirar rarlo lo desde su escri escrito torio rio de obsi obsidi diana, ana, pe pero ro rara rara vez usa ba la sala sala de es estar tar dispues pu esta ta fren frente te a él. Qu Quizás izás lo ha haría ría hoy, e in invi vita taría ría a la Di Diosa osa de la Primave ma vera ra a sen sentar tarse. se. Pero eso pare parecía cía dema demasi siado ado cor cortés, tés, y Hades Hades te tenía nía la sensa sensaci ción ón de que fuera fuera lo que fu fuera era lo que la diosa diosa ha bía ve veni nido do a de decir, cir, era cualcualquiier cosa qu cosa me menos nos cor cortés. tés. Cuando cerró cerró la puer puerta, ta, el ella la volvió volvió a po poner nerse se rígi rígida. da. Fue en entontonces cuan cuando do se dio cu cuen enta ta de que de bería bería ha ber hec hecho ho más pa para ra asegurar gu rarle le que es esta ta ba a salvo salvo con él des despu pués és de su horrib horrible le in inte terac racci ción ón con Duncan. Duncan. Se movió movió ru ruido idosa samen mente te por el su suelo, elo, sin querer querer asustarasustarla, y se detu detuvo vo frente frente a el ella, la, los oj ojos os bus buscan cando do su rost rostro, ro, rozan rozando do sus la bi bios, os, an antes tes de caer ca er cuel ello. lo. Su piel piel perfec perfecta ta esta esta ba en enro ro j jeci ecida da por el agarre agar re del og ogro. ro.a su cu
Hizo falta falta to todo do lo que es esta ta ba en su poder poder para para quedar quedarse se don donde de esta es ta ba y no telet teletrans ranspor portar tarse se al Inf Infra ramun mundo do para para tortu torturar rar a Duncan. Duncan. La anti antici ci paci pación ón es parte parte del tor tormen mento to , se recor recordó. dó. Alargó la mano mano ha hacia cia ella, ella, queri querien endo do curar curar esas marcas marcas en su piel, pero pe ro el ella la agarró agar ró brazo. brazo. Sus miradas das se en encont contra raron. ron. —¿Estás herida? heri da?su—pre —pregun guntó. tó.mira —No —susur —susurró ró ella. ella. Había algo algo ín ínti timo mo en es este te in inter tercam cam bio. Tal vez era su proxi proximimidad, a centí centímet metros ros el uno del otro, otro, piel piel to tocan cando do pi piel. el. Despu Después és de un momen mo mento, to, asin asintió tió y li beró beró el bra brazo zo de su agar agarre. re. Cru Cruzó zó la ha bi bita taci ción, ón, nece ne cesi sitan tando do la dis distan tancia cia pa para ra no hacer hacer algo algo es estú túpi pido. do. Co Como mo be besar sarla. la. El olor de la magia magia de De Demé méter ter le alertó alertó de que es esta ta ba a punto punto de aumentar aumen tar su glamo glamour. ur. —Oh, es un poco poco tar tarde de para para ser modes modesta, ta, ¿no crees? crees? —pre —pregun guntó, tó, apoyán apo yándo dose se en su escri escrito torio, rio, sacán sacándo dose se la cor ba bata ta del cu cuel ello. lo. No le gusta gus ta ba la for forma ma en que se sentía sentía cont contra ra su pi piel, el, como como una rest restric riccición, pero pero el mo movi vimi mien ento to atra atra jo su mira mirada da y re reco cono noció ció el hamb hambre re en sus ojos ojos porque porque él tam bién bién lo sen sentía. tía. En lo pro profun fundo do de sus ent entra rañas. ñas. —¿Interrumpí algo? algo? Su tono tono era casi casi acusa acusato torio rio y él con consi side deró ró cues cuesti tionar onar sus ce celos, los, pero pe ro pen pensó só en cont contra. ra. En cam bio, sus la bios bios se cur curva varon ron mient mientras ras explilica exp ca ba: —Estaba a punto punto de ir irme me a la ca cama ma cuan cuando do te es escuc cuché hé exigi exigien endo do la entra entrada da a mi club. Ima Imagi gina na mi sorp sorpre resa sa cu cuan ando do en encu cuent entro ro a la diosa de anoche anoche en mi pu puer erta. ta. Ella frunció frunció el ceño. ceño. —¿Te lo di jo jo la gor gorgo gona? na? Luchó contra contra el impul impulso so de sonre sonreír ír an ante te su frust frustra raci ción. ón. —No. Eurya Euryale le no lo hizo. hizo. Re Reco cono nocí cí tu ma magia gia como como la de De Deméméter, pero pero no eres De Demé méter. ter. —Inclinó —Inclinó la ca be beza, za, es estu tudi dián ándo dola la como como si hu biera biera es estu tudi diado ado su ima imagen gen en la Bibli Bibliote oteca ca de las Almas—. Almas—. CuanCuando te fuis fuiste, te, consul consulté té algu algunos nos textos. textos. Ha bía olvi olvida dado do que Demé Deméter ter te-
nía una hi ja. ja. Supu Supuse se que eras Per Persé séfo fone. ne. La pregun pregunta ta es, ¿por qué no estás es tás usan usando do tu propia propia magia? magia? —¿Es por eso que hicis hiciste te esto? esto? —pregun —preguntó, tó, qu quitán itándo dose se un espanespantoso toso ju juego ego de braza brazale letes tes de su muñe muñeca ca y levan levantan tando do su bra brazo, zo, donde donde una banda banda de puntos puntos negros negros mar marca ca ba su pi piel. el. Notó que ha bía evita evitado do res respon ponder der a su pre pregun gunta. ta. No impor importa ta ba, volve vol vería ría a eso. En cam cam bio, bio, se cent centró ró en la mar marca ca de su pi piel, el, su mar marca, ca, y sonrió. sonrió. —No. Ese es el resul resulta tado do de perder perder cont contra ra mí. ense señan ñando do a jugar. —Me esta esta bas en —Semántica. —Se enco encogió gió de homb hombros—. ros—. Las reg reglas las de NeverNevernight son muy claras, claras, di diosa. osa. —Son todo todo me menos nos cla claras. ras. —Levan —Levantó tó las ma manos nos y lo seña señaló—. ló—. ¡Y tú eres un idiota! idiota! Se apartó apartó de su escri escrito torio, rio, acechan acechando do hacia hacia el ella. la. Ha bía una parte parte de él que quería quería exigir exigir res respe peto, to, una par parte te que quería quería recor recordar darle le que era el rey del Infra Inframun mundo, do, Di Dios os de los Mu Muer ertos, tos, pe pero ro cuan cuando do se acercó, recor recordó dó qu quiién era ella: ella: Per Persé séfo fone, ne, Diosa Diosa de la Pri Prima mave vera, ra, su futufutura reina. reina. El pen pensa sami mien ento to lo calmó calmó y, sin em bar bargo, go, el ella la de bió ha ber visto vis to al algo go más des destel tellan lando do en sus ojos, ojos, porque porque dio un pa paso so at atrás. rás. —No me insul insultes, tes, Persé Perséfo fone ne —di jo, jo, agar agarran rando do su muñe muñeca ca suavesuavemente. men te. Sin Sintió tió una extra extraña ña ener energía gía ent entre re el ellos los mient mientras ras res restab table lecía cía su cone co nexi xión. ón.manos. Trazó Tra zó la somb sombra ra que est estro rope peaba aba su pi piel el y ella ella se estre estreme meció ció ba jo sus ma nos. —Cuando me invi invitas taste te a tu mesa, mesa, llegas llegaste te a un acuer acuerdo. do. Si hu bieras gana ganado, do, pod podrí rías as ha berte berte ido de Never Nevernight night sin exigen exigenci cias as de tiempo. em po. Pero Pero no lo hi hicis ciste, te, y ahora ahora te tene nemos mos un contra contrato. to. Podría darle darle liliber bertad tad. Las palab palabras ras entra entraron ron en su ca ca be beza, za, es espon pontátáneamen ne amente, te, na naci cidas das de sus pen pensa sami mien entos tos ante anteri riores, ores, y de re repen pente te se sintió sin tió ab abru ruma mado do por la culpa. culpa. Era cier cierto to que no exis existía tía la Ley Divi Divina, na, por lo que podía podía de j jar arla la ir. Pero mi entras ras mira ra ba, de ba de ba su hermo her moso soaexte ex teri rior oreny duobservó ser vó su mient al alma ma porlalomi que era:vio una diosa di jo osadepo pode dero rosa, sa, enja enj ulada ula da
das y miedo. miedo. Es Esta ta era la razón razón por la que usa ba la ma magia gia de su madre, porque porque la su suya ya esta esta ba encer encerra rada, da, inac inacti tiva. va. Cuanto más mira mira ba, más pro profun fundo do caía. caía. Era emb embri riaga agado dora ra y su magia ma gia olía a ro rosas sas dul dulces, ces, glici glicinas nas y algo algo comple completa tamen mente te peca pecami minonoso. Su propia propia magia magia se ele elevó, vó, de dese sean ando do en enre redar darse se con la de el ella. la. Quería sacar sacarlo lo de ella, ella, con conven vencer cerla la de que se li bera berara. ra. Mierda, mier mierda, da, mi mier erda. da. No esta esta ba se segu guro ro de lo que ella ella vio en su exp expre resi sión, ón, pe pero ro no notó tó la forma for ma en que su gar gargan ganta ta se contra contra jo cu cuan ando do tra tragó, gó, y pen pensó só que le gusta gus taría ría besar besarla la al allí, lí, sen sentir tirla la est estre reme mecer cerse se ba jo su toque. toque. Ella habló, habló, sus pa palab labras ras gote gotearon aron con ira con conte teni nida. da. —¿Y qué signi signi ca eso? —Signica que de bo elegir elegir los tér térmi minos nos —di jo jo él, se segu guro. ro. De repen repente, te, este este tra trato to ha bía adqu adquiri irido do un sig signi ni ca cado do comple completatamente nu mente nuevo evo para para él. Ar Arran ranca caría ría los barro barrotes tes alre alrede dedor dor de su cuer cuerpo, po, la li bera beraría ría de es esta ta ja jaula ula de odio constru construida ida por él mismo, mismo, y, al nal, nal, si no lo ama ba, al me menos nos sería sería libre. libre. —No qui quiero tener tener un contra contrato to con conti tigo go —di jo jo ent entre re di dien entes, tes, sus hermo her mosos sos ojos ojos bril brillan lando—. do—. ¡Quíta ¡Quítalo! lo! —No puedo. puedo. No lo haré haré , pensó. pensó. —Si lo pones pones al allí, lí, lo pu puedes edes quitar. quitar. Sus la bios bios se cris crispa paron. ron. No de be bería ría en encont contrar rar hu humor mor en su di difí fícil cil si situ tuaci ación. ón. Sa bía que es esto to era angus angusti tioso, oso, sa bía que no enten entende dería ría por qué tenía tenía que pasar. pasar. Aun así, sonrió sonrió por porque que se mostra mostra ba de desa sa an ante, te, porque por que le gusta gusta ba su fuego fuego y frustra frustraci ción. ón. —¿Crees que es graci gracioso? oso? —exigió —exigió el ella. la. —Oh, queri querida, da, no tienes tienes ni idea. —Soy una diosa. diosa. So Somos mos igu iguales. ales. Dijo las palab palabras, ras, pe pero ro sa bía que no las creía. creía. —¿Crees que nuest nuestra ra sangre sangre cam bia el hecho hecho de que vo volun lunta tariri-
amente ce amente celeb lebras raste te un cont contra rato to con conmi migo? go? Estas Estas co cosas sas son la ley, Per Perséséfone. fone. —Ella lo ful fulmi minó nó con la mira mirada—. da—. La mar marca ca se di disol solve verá rá cuancuando se haya haya cump cumplilido do el cont contra rato. to. —¿Y cuáles cuáles son tus condi condici ciones? ones? lo que con ha bía vis to deEra su el al alma. ma. Era de unasumu j mu erguri que equ-y iparaConsideró ipara ba la Di Divi vini nidad dad el visto po poder. der. núcleo núcleo inse in jer segu ridad dad era lo que él desa desa aría. Por n habló. habló. —Crea vida vida en el Inf Infra ramun mundo. do. Sus ojos ojos se agran agranda daron ron y pa palilide deció, ció, la im impo posi si bili bilidad dad de las palabras lab ras que él ha bía dicho dicho se regist registró ró rá rápi pida damen mente. te. Sus dedos dedos se apreapretaron taron al alre rede dedor dor de su mu muñe ñeca. ca. —¿Qué? —Crea vida vida en el Inf Infra ramun mundo do —di jo jo de nu nuevo—. evo—. Tienes Tienes seis seis meses. Infra Si ramun falmundo. fallas las odo.te ni niegas, egas, te con conver verti tirás rás en un re resi siden dente te perma permanen nente te del Inf —¿Quieres que culti cultive ve un jar jardín dín en tu re reino? ino? Hizo una mueca. mueca. El Ella la ya ha bía de deci cidi dido do que so solo lo ha bía una forma de cumplir cumplir el tra trato, to, y era a tra través vés del poder poder que no tenía… tenía… to todadavía. Se enco encogió gió de homb hombros. ros. —Supongo que es una forma forma de crear crear vida. vida. Era una pista pista que no captó. captó. En cam bio, ella ella lo miró. miró. —Si me llevas llevas al Inf Infra ramun mundo, do, te enfren enfrenta tarás rás a la ira de mi mad madre. re. —Oh, estoy estoy segu seguro ro —ree —reexionó, xionó, ima imagi ginán nándo dolo lo ahora, ahora, y, sin em bargo, bar go, era el pre precio cio que De Demé méter ter paga pagaría, ría, prime primero ro por nego negoci ciar ar con las Moiras Moiras y segun segundo do por ocultar ocultarle le a Per Persé séfo fone. ne. Se pregun pregunta ta ba cu cuánándo vendría vendría a bus buscar carlo lo la Diosa Diosa de la Co Cosec secha—. ha—. Al igual igual que sen senti tirás rás su ira cuan cuando do des descub cubra ra lo que has hecho hecho tan impru impruden dente temen mente. te. Odiaba ha ber dic dicho ho esas pa palab labras, ras, y consi conside deró ró tran tranqu quili ilizar zarla la dici cién éndo dole le que la prote protege gería ría de su madre, madre, pe pero ro luego luego Persé Perséfo fone ne se endere de rezó, zó, lo miró miró a los ojos ojos y acep aceptó tó su de desa safío. fío. —Bien. ¿Cuán ¿Cuándo do em empi piezo? ezo?
Casi sonrió. sonrió. —Ven —V en maña ma ñana. na. Te most mostra raré ré el ca cami mino no al Infra Inframun mundo. do. —Tendrá que ser despu después és de cla clases ses —di jo. jo. Sus ce jas jas se junta juntaron. ron. —¿Clases? —Soy estu estudi dian ante te en la Uni Univer versi sidad dad de Nu Nueva eva Atenas. Atenas. Era un ejemp ejemplo lo de lo muc mucho ho que no sa bía sobre sobre es esta ta mu jer jer y sinestaba ba es estu tudi dian ando? do? ¿Cu ¿Cuán ánto to ti tiem em po había había esta estado do en tió curi curiosi osidad. dad. ¿Qué esta la univer universi sidad? dad? ¿Dón ¿Dónde de ha había bía es esta tado do vi vivi vien endo do antes antes de Nu Nueva eva Atenas? Atenas? ¿Qué le había había en ense seña ñado do De Demé méter ter sobre sobre lo Di Divi vino? no? Todas las cosas cosas las ap apren rende deré ré con el ti tiem em po , se recor recordó. dó. clases ses , enton —Después de… cla entonces. ces. Sese, mitoda mira raron ronvíael in uno alendo ot otro ro duran du rante tecioundel largo larot goro, momen moymento, to, toda to vía estocándose, cándo to davía inva vadi dien do el espa es pacio otro, des descub cubrió riódavía que ta ba con conten tento to con es esto, to, el si silen lencio, cio, la sensa sensaci ción ón de su ener energía, gía, porque porque hacía ha cía que su pec pecho ho se sinti sintiera era más lilige gero. ro. —¿Qué hay de tu porte portero? ro? —pregun —preguntó tó de re repen pente. te. Hades frunció frunció el ceño ceño y ba jó las ce j jas. as. —¿Qué pasa pasa con él? —Preferiría que no me recu recuer erde de de es esta ta for forma. ma. —Se llevó llevó la mano a los cuer cuernos nos y los ojos ojos de Ha Hades des la sigu siguiieron. Eran her hermo mosos, sos, elegan gante temen mente tor torci cidos dos encu pun puntas tas apor ladas, das, pe pero ro ur cuan cuando doPersé losséfo mi miró, ró, desade bía sapare pa reci cieron erontede su vis vista, ta, bier biertos tosala el glamo gla mour que Per fone ne ha invo invoca cado. do. Sus ojos, ojos, de nuevo, nuevo, se posa posaron ron en los de ella. ella. pués és de que sea casti —Borraré su recu recuer erdo… do… des pu castiga gado do por el trato trato que te ha dado dado —prome —prometió. tió. —No sa bía que era una diosa diosa —di jo. jo. No ven gas en su ayu ayuda da , quiso quiso de decir. cir. No mere merece ce tu amabi amabililidad. dad. —Pero sa bía que eras una mu j jer, er, y de jó que su ira se apo apode dera rara ra de él. Así que será será cas casti tiga gado. do. Y disfru disfruta taré ré el pro proce ceso so a fon fondo do.
—¿Cuánto me costa costará? rá? Volvió a concent concentrar rarse se en el ella, la, en sus es espe pesas sas pesta pestañas, ñas, sus oj ojos os hipnó hip nóti ticos cos y su boca boca sensu sensual. al. —Inteligente, queri querida. da. Sa bes cómo cómo fun funci ciona ona esto. esto. ¿El cas casti tigo? go? Nada. Nada. ¿Sume re recu cuer do?qu Un favor. fa queri erida davor. —No llaerdo? llames mes —espetó, —espe tó, y él ar arqu queó eó una ce ja ante ante su repenti pen tina na frustra frustraci ción. ón. Qu Quizás izás creía creía que se es esta ta ba sin sinti tien endo do dema demasi siado ado cómo có moda da de dema masi siado ado rá rápi pido—. do—. ¿Qué ti tipo po de fa favor? vor? —Lo que qui quiera —di jo—. jo—. PPaara ser utili utiliza zado do en el fu futu turo. ro. Ella entre entrecer cerró ró los oj ojos, os, es escép cépti tica ca an ante te su so solilici citud, tud, y de bería bería estarlo. tar lo. Los fa favo vores res más pe pelig ligro rosos sos eran los que no se es espe peci ci ca ban, y si esta esta ba de acu acuer erdo, do, le daría daría una idea de cu cuán ánto to sa bía re real almen mente te sobre sob re lo que sig signi ni ca ba ser Di Divi vino. no. —Trato. Nada , pensó. pensó. El Ella la no sa sabe be na nada da en ab abso solu luto to. Le dio más que curi curiosiosidad. ¿Cómo ¿Cómo po podía día De Demé méter ter de j jar ar que su hi ja ja entra entrara ra en un mun mundo do go berna bernado do por lo Di Divi vino no y que no su supi piera era na nada da de ellos? ellos? Tenía Tenía que sa ber que, tarde tarde o temp tempra rano, no, Per Persé séfo fone ne encont encontra raría ría su ca cami mino no hacia hacia este es te mun mundo. do. A pesar pesar de sus pen pensa sami mien entos tos preocu preocupan pantes, tes, Hades Hades le son sonrió. rió. —Haré que mi chofer chofer te lleve lleve a ca casa. sa. —Eso no es nece necesa sario. rio. —Lo es —insistió. —insistió. Hades no tenía tenía la costumb costumbre re de con conar en el mun mundo. do. Sa bía demasi ma siado ado sob sobre re lo que qu queda eda ba de ba jo de su super super cie. —Bien —espetó. —espetó. Frunció el ceño. ceño. Pro bable bablemen mente te es esta ta ba más que lista lista pa para ra ir irse, se, excep ex cepto to que él no es esta ta ba lis listo to pa para ra verla verla par partir. tir. No tras su úl últi timo mo pensa pen sami mien ento. to. Mantenla a sal salvo vo , pensó pensó mient mientras ras la agar agarra ra ba por los homb hombros, ros, cerran cer rando do espar pacio ciode ent entre retera el ellos. dese sequ quilib ilibra rado doparon yron sussude dedos dos ap apre reta taron ronellaespa parte te delan lante ralos. de La su ha cami ca bía misa, sa,de las uñas raspa ras pec-
ho. Presi Presionó onó sus la bios bios cont contra ra su fren frente, te, y el calor calor de su pi piel el se preciprecipitó pi tó al fon fondo do de su es estó tóma mago, go, haci hacien endo do que su polla polla pal palpi pita tara ra y sus pensa pen sami mien entos tos se volvi volvieran eran ca caóti óticos. cos. Quería Quería incli inclinar nar su ca beza beza ha hacia cia la suya, suya, besar besar su bo boca ca y sa bore borear ar su len lengua. gua. Concéntrate en la tarea tarea , se di jo jo eno j eno jado, ado, y le otor otorgó gó su fa favor. vor. En la antigüedad, an tigüedad, los di dioses oses fa favo vore recí cían an a los hé héro roes es griegos, griegos, les pro propor porciciona ban ar armas mas es espe peci ciales ales y ayu ayuda da du duran rante te la batal batalla la y, en ra raras ras oca ocasisiones, inclu incluso so una se segun gunda da oportu oportuni nidad dad en la vi vida. da. En la moder moderninidad, el favor favor pod podría ría sig signi ni car cu cual alqu quiier cosa: cosa: ac acce ceso so a clu bes exc exclu lusisivos, riqu riqueza eza insu insupe perab rable le o protec protecci ción ón contra contra da daños. ños. Hades le ofre ofreció ció a Per Persé séfo fone ne lo últi último, mo, junto junto con el acce acceso so a su reino. reino. La li beró beró del be beso. so. A cen centí tímet metros ros de dis distan tancia, cia, el ella la lo miró. miró. —¿Por qué fue eso? —susur —susurró ró ella. ella. Hades sonrió, sonrió, pa pasan sando do un de dedo do por su acalo acalora rada da me j jililla. la. —Para tu bene bene cio. La próxi próxima ma vez, la puer puerta ta se abri abrirá rá pa para ra ti. Pre Pre ero que no eno j eno jes es a Dun Duncan. can. Si te vuel vuelve ve a las lasti timar, mar, tend tendré ré que matar ma tarlo, lo, y es di difí fícil cil en encont contrar rar un bu buen en og ogro. ro. —Lord Hades Hades —inter —interrum rumpió pió la voz de Menta—. Menta—. Tá Tána natos tos te es está tá buscan bus cando, do, ¡oh! La presen presencia cia de la nin ninfa fa lo frust frustra ra ba, porque porque signi signi ca ba que Perséfo sé fone ne ya no lo mira mira ba. Trató Trató de apar apartar tarse, se, pe pero ro Hades Hades la ab abra razó zó con más fuer fuerza, za, negán negándo dose se a soltar soltarla. la. sa bía tení tenías compa comra pañía ñíacu —di jo jo Men Menta, ta, conque la hab vozlara lle llena de juicio. ju—No icio. Quizás Qu izásque Hé Héca cate teas tenía tenía razón zón cuan ando do le su sugi girió rió habla ranaa Menta Men ta sob sobre re su fu futu tura ra espo esposa. sa. —Un minu minuto, to, Men Menta ta —di jo jo Ha Hades des sin mi mirar rarla. la. Cuando se fue, la mira mirada da de Per Persé séfo fone ne volvió volvió a la de él y la es estutudió con los la bi la bios os ap apre reta tados. dos. —No has respon respondi dido do a mi pre pregun gunta. ta. ¿Por qué es estás tás usando usando la magia ma gia de tu mad madre? re? Quería ver si admi admitía tía lo que ya sa bía, sa bía, que no te t enía magia magia pro propia. pia. En cam bio, lo sorp sorpren rendió dió sonri sonrien endo. do.
—Lord Hades Hades —di jo, jo, su voz entre entrecor corta tada da y sen sensu sual. al. Pasó Pasó un dedo por su pecho pecho y el movi movimi mien ento to desper despertó tó su deseo deseo por ella ella una vez más. Iba a tener tener que en encont contrar rar la li bera beraci ción ón por su pro propia pia mano mano después pu és de es esto. to. No podía podía so sopor portar tarlo. lo. ¿Ella co cono nocía cía su po poder?—. der?—. La única forma forma en que re reci ci birás birás res respu pues estas tas es si de deci cido do hacer hacer otra otra apu apues esta ta conti con tigo go y, en este este momen momento, to, no es pro pro bab bable. le. Luego tomó tomó las sola solapas pas de su cha chaqu queta eta y las ende endere rezó zó antes antes de inclilinar inc narse, se, como como ha bía hec hecho ho an antes tes en el ves vestí tí bulo, bulo, y susur susurró: ró: —Creo que te arre arrepen penti tirás rás de esto, esto, Hades. Hades. Sus ojos ojos se posa posaron ron en la or de poli polian anto to ro jo en el bolsil bol sillo lo de la chaqu cha queta eta de su tra je, y mient mientras ras la aca acari rici ciaba aba con los dedos, dedos, los pé pétatalos se marchi marchita taron. ron.
Capítulo VI Un alma por un alma
esacolto to Per Persé séfo aba jo. Qu Quería ería asegu ase rarse seni,desuque aceptara taraHades el vi viaa jeescol ca casa saaque le fone ofre ofne reció ció y presen pre sentar tarle le agurar An Anto toni, con conducductor. El ciclo ciclope pe espe esperó ró pa paci cien ente temen mente, te, ves vesti tido do con tra je neg negro ro y cor bata. Cuan Cuando do vio a Per Persé séfo fone, ne, sonrió, sonrió, sus ojos ojos se ilumi ilumina naron. ron. —Lady Persé Perséfo fone ne —di jo—. jo—. Es Este te es Anto Antoni. ni. Él se ase asegu gura rará rá de que llegu llegues es a casa casa a sal salvo. vo. Sabía que el ciclo ciclope pe cuida cuidaría ría de el ella, la, pe pero ro sintió sintió la ne nece cesi sidad dad de hacer ha cer su pun punto to soste sosteni nien endo do la mira mirada da de An Anto toni ni mient mientras ras hab habla la ba. Ella es im por portan tante. te. —¿Estoy en pelig peligro, ro, mi milord? lord? La pregun pregunta ta at atra ra jo su atenci atención, ón, y la en encont contró ró mi mirán rándo dolo. lo. De j janando de lado lado el to tono no sarcás sarcásti tico co en su voz, sintió sintió su males malestar. tar. Nadie te hará hará da daño ño , quiso quiso decir, decir, pe pero ro esas pa palab labras ras so solo lo aumen aumentatarían rían su mi miedo. edo. En reali realidad, dad, Ha Hades des solo solo era sobrep sobrepro rotec tector. tor. Quizá Quizá tenía algo algo que ver con el mor mortal tal que tortu torturó ró anoc anoche, he, el homb hombre re que ha bía amena amenaza zado do con la gu guer erra ra des desde de Trí Tríada. ada. —Solo una preca precauci ución ón —le asegu aseguro—. ro—. No quisi quisiera era que tu mad madre re golpe gol peara ara mi pu puer erta ta antes antes de tener tener una razón razón para para hacer hacerlo. lo.
Se mira miraron ron el uno al ot otro ro du duran rante te un rato rato antes antes que An Anto toni ni se aclara larara ra la gar gargan ganta ta y abri abriera era la pu puer erta ta del auto. Am bos le mi mira raron, ron, e hizo hi zo un ges gesto to hacia hacia el auto. —Miladi —ofreció. —ofreció. —Milord —di jo josar Per Persé séfo fone, ne, susas, títu título tranqu tran quila ila aliento. alien to. Lo hizo hizo pen pensar en ot otras ras co cosas, algo allogoencomo, coesa mo,voz có cómo mo so sona naría ría ysi sin di jera jera su nomb nombre re mi mient entras ras en encont contra ra ba su li bera beraci ción ón ba jo él. Ella giró giró y se des deslilizó zó en el in inte teri rior or del auto. Mi Mient entras ras An Anto toni ni cerra ba la puer pu erta, ta, miró miró a Ha Hades. des. Co Cono nocía cía esa mi mira rada. da. Era la de me lo vas a agra agrade decer cer des pu pués, és, pero pero Ha Hades des no es esta ta ba tan se segu guro. ro. Si Anto Antoni ni no hu biera biera abi abier erto to su bo boca, ca, podría podría ha ber be besa sado do a la di diosa osa de nuevo nuevo de la mane manera ra que quería quería en su oci ocina. na. Pero tal vez eso era lo que el ciclo ciclope pe esta esta ba dici dicien endo, do, porque porque Hades no esta esta ba se segu guro ro de querer querer de j jar ar ir a Per Persé séfo fone ne por segun segunda da vez. Observó su Lexus Lexus negro negro ale jar jarse se por la cal calle. le. —Espero que sepas sepas lo que es estás tás ha haci cien endo do —di jo jo Menta, Menta, re recoscostándo tán dose se en el marco marco de la pu puer erta ta det detrás rás de él. Ha Ha bía bía esta estado do es escuccuchando han do a escon escondi didas das en el ves vestí tí bulo bulo mi mient entras ras él ve veía ía có cómo mo marc marcha ha ba Persé Per séfo fone. ne. Hades mantu mantuvo vo sus oj ojos os en al auto; esta esta ba en un carril carril de gi giro, ro, casi ca si fuera fuera de la vista. vista. —¿Qué crees crees que estoy estoy haci hacien endo? do? —Alentándola —di jo jo Men Menta—. ta—. Si no eres cuida cuidado doso, so, se va a enamorar morar de ti. Se alegró alegró de no estar estar mi miran rando do a la nin ninfa, fa, por porque que una sonri sonrisa sa curvó sus la bios. bios. El Lexus Lexus nal nalmen mente te sa salió lió de la vis vista, ta, y Ha Hades des se gi giró ró pa para ra mirar mirar a Menta. Menta. Sus ras rasgos gos esta esta ban arru arruga gados dos y frunci fruncidos, dos, en par parte te por el brillo bril lo del sol, y en parte par te por su ju juicio icio hirvi hirvien ente. te. —¿Tánatos me esta esta ba buscan buscando, do, o esta esta bas es espi pian ando? do? —pre —pregunguntó, re rerién riéndo dose se a su intru intrusi sión ón en la o oci cina. na. —¿Por qué cada cada vez que te atra atrapo po ha haci cien endo do algo algo que no de berí berí-
as, me convi convier erto to re repen penti tina namen mente te en una es espía? pía? A Hades Hades no le gus gusta taron ron sus pa palab labras. ras. La ninfa ninfa pre preten tendía día que su rol como como asis asisten tente te de al algu guna na mane manera ra signi signi ca ba que era su cuida cuidadodora. —¿Y nozó de bería de be es estar tarsob ha haci cien Menta? Men La ninqué ninfa fa cru cruzó losría bra brazos zos sobre reendo, sudo, pec pecho. ho.ta? —Dime, Hades. Hades. ¿La hab habrí rías as be besa sado do si no hu bi hu biera era apa apare reci cido? do? —No la besé besé —respon —respondió. dió. Los oj ojos os de la nin ninfa fa se ab abri rieron eron y se entre ent recer cerra raron ron mi mient entras ras con conti tinuó—: nuó—: Si vis viste te algo algo que te dis disgus gustó, tó, Menta, Men ta, te su sugi giero ero que en el futu futuro ro lla llames mes a la pu puer erta. ta. —Tánatos te está está espe esperan rando do en el salón salón del tro trono no —di jo jo an antes tes de girar girar en sus taco tacones nes y azo azotar tar la puer puerta ta tras de el ella. la. Suspiró y se telet teletrans ranspor portó tó al Inf Infra ramun mundo, do, donde donde se encont encontró ró con Tána Tánatos. tos. El Di Dios os de la Mu Muer erte te era alto alto y del delga gado, do, con ca bel bello lo ru bio blanqu blanqueci ecino no con un par de cu cuer ernos nos neg negros. ros. A Hades Hades le gus gusta ta ba Tána Tá natos tos y con con aba en él tanto tanto co como mo en Héca Hécate. te. Era un dios dios rey, y se ocupa ocu pa ba de las al almas. mas. Ha bía si sido do uno de sus ma mayo yores res de defen fenso sores, res, más rey para para el ellos los de lo que Ha Hades des sería sería jamás. Se incli inclinó nó cu cuan ando do Ha Hades des apa apare reció, ció, sus grandes grandes alas negras negras se doblan dob lan en su es espal palda da co como mo una capa capa de seda. seda. —Milord —di jo jo cuan cuando do se en ende dere rezó, zó, ojos ojos azu azules les se encont encontra raron ron con los suyos—. suyos—. Tene nemos mos un proble problema. ma. —¿Qué pasa? pasa? —Las Moiras Moiras es están tán mon montan tando do un al boro boroto to —explicó—. —explicó—. Las ti j-jeras de Átro Átropos pos se han roto. roto. Hades levan levantó tó una ce ja. —¿Roto? Tánatos asintió. asintió. —Es me j jor or que ven vengas. gas. Pavor se agru agrupó pó en el es estó tóma mago go de Ha Hades, des, pe pero ro estu estuvo vo de acueracuerdo nas y sigu siguió Tána Tálanatos aido. la is isla la de las Moiras. Moiras. Encont Encontró ró a las tres hermanas ma eniósuasa sala detoste j jido.
En el centro centro de la ha bi bita taci ción ón ha bía un bril brillan lante te glo bo blan blanco co donde millo millones nes de hilos hilos ha bí bían an si sido do te j jidos idos sob sobre re la su super per cie como como un tapiz. tapiz. Ca Cada da hi hilo lo rep repre resen senta ta ba a una perso persona, na, un n, un des desti tino no que habría hab ría cob cobra rado do exis existen tencia. cia. Clo Cloto to em empe peza za ba el hilo hilo de la vi vida, da, te j jiiendo sobre sobre la super super cie del mapa, mapa, y cu cuan ando do era lo su su cien ciente temen mente te largo, Láqu Láquesis esis comen comenza za ba su tra ba jo, te j jiien endo do en él un desti destino, no, cu cuan ando do Átro Át ropos pos arran arranca ca ba y en enre reda da ba hilos, hilos, de deter termi mina na ba la mu muer erte te de las almas, cortan cortando do su lílínea nea de vida vida con sus ti jeras. jeras. Excepto que cuan cuando do Ha Hades des apare apareció, ció, Cloto Cloto y Lá Láqu quesis esis esta esta ban conso con solan lando do a Átro Átropos, pos, qu quiien llora llora ba y sollo solloza za ba sobre sobre sus ma manos. nos. —¡Tienes que arreg arreglar lar es esto, to, Ha Hades! des! —gritó —gritó Clo Cloto. to. —¡Mis ti jeras! jeras! ¡Mis her hermo mosas sas ti jeras! jeras! —sol —sollo lozó zó Át Átro ropos. pos. —No puedo puedo ayudar ayudar si no sé qué fue lo que pasó pa só —di jo jo Ha Hades, des, frust—¿No frustra rado do con lashaste? tres. escuchas escuc te? —se qu quee jó Lá Láqu quesis. esis. —¡Las ti jeras jeras de Átro Átropos pos es están tán ro rotas! tas! —se —seña ñaló ló Clo Cloto. to. —¿Cómo? —pregun —preguntó tó Hades Hades a tra través vés de sus dien dientes, tes, sus dedos dedos apre ap reta tados dos en pu puños. ños. Es Esta ta ba perdi perdien endo do su paci pacien encia, cia, una cuali cualidad dad pelig pe ligro rosa sa cuan cuando do te acer acercas cas a las Mo Moiras. iras. Hades Hades sa bía que tenía tenía que mane ma ne j jar ar es esto to cu cuida idado dosa samen mente, te, o se en encont contra raría ría a su mer merced. ced. —¿Átropos? —pregun —preguntó tó Hades. Hades. A la Moira Moira le to tomó mó un mo momen mento to cal calmar marse. se. Enton Entonces, ces, hab habló, ló, sus oscu os curos ros ojos ojos ro j jos os por el llan llanto. to. —Elegí un hilo hilo del glo bo, glo bo, ele elegir gir y te j jer er una muer muerte, te, y cu cuan ando do fui a cortar cortar el hilo, hilo, no sir sirvió. vió. Tra Traté té de nu nuevo, evo, y de nuevo, nuevo, y de nuevo, nuevo, y de nuevo, nuevo, has hasta ta que mis ti jeras jeras se rompi rompieron. eron. Su voz tembló tembló y empe empezó zó a sol sollo lozar zar de nu nuevo, evo, un llori lloriqu queo eo horrible rib le que perfo perforó ró los oídos de Hades Hades y le mo moles lestó. tó. To Tomó mó aire y lo sostuvo tu vo hasta hasta que se sin sintió tió menos menos ho homi mici cida. da. —¿El hilo hilo de qu quiién? —pregun —preguntó tó a conti continu nuaci ación. ón. Llorando y sollo sollozan zando, do, Át Átro ropos pos mi miró ró de nu nuevo evo a Hades, Hades, su mirada ra da fe feroz roz y sal salva va je. Re Reco cono noció ció la fe feroz roz mi mira rada, da, era la mi mira rada da de una
diosa, di osa, lis lista ta pa para ra vengar vengarse. se. —¡Es un mortal mortal que bus busca ca enga engañar ñar a la muer muerte! te! —se mofó—. mofó—. Sísi sifo fo de Ephy Ephyra. ra. Hades frunció frunció el ceño ceño con el nomb nombre, re, y un sen senti timi mien ento to oscu oscuro ro El mortal mor la nera pesqu pesraquería eríadesa crepi cre pitó tóreen pec pecho. ho.contra . No sorp dióiras. queTeel homb hombre husu biera biera en encont rado dotalladema mane de de sa learsorpren a lasrendió Mo Moiras. nía cone conexi xiones ones en el ba jo mun mundo do de Nueva Nueva Gre Grecia, cia, al igual igual que en la Tríada. Trí ada. Pro bable bablemen mente te pro bó di dife feren rentes tes opci opciones: ones: po poci ciones ones má mági gicas, cas, hechi hec hizos zos lanza lanzados dos por ma magos, gos, mor morta tales les que prac practi tica ca ban la ma magia gia oscura, cu ra, inclu incluso so reli reliqu quiias, hasta hasta que en encont contró ró al algo go que funci funciono. ono. —¡Arregla esto, esto, Hades! Hades! —excla —exclamó mó Clo Cloto. to. —¡Encuéntralo! —chilló —chilló Láqu Láquesis. esis. —¡Arregla esto, esto, en encu cuént éntra ralo, lo, Ha Hades! des! —di jo jo Átro Átropos—. pos—. ¡O elimielimi-
naremos nare mos a la Diosa Diosa de la Pri Prima mave vera ra de tu vi vida! da! —Sí —sise —sisearon aron to todas das al uni uniso sonó—. nó—. ¡O elimi elimina nare remos mos a la Diosa Diosa de la Prima Primave vera ra de tu vi vida! da! Entonces están están lla llaman mando do a una guer guerra. ra. Los ojos ojos de Ha Hades des brilla brillaron, ron, y ca casi si ver ba baliliza za el pen pensa sami mien ento, to, la prome pro mesa sa que esta esta ba ha haci cien endo, do, cuan cuando do las her herma manas nas co comen menza zaron ron a gritar. gri tar. Le tomó tomó un mo momen mento to des descub cubrir rir porqué, porqué, pe pero ro nal nalmen mente te descubdescubrió la fuen fuente te de su agonía. agonía. Un hilo hilo se ha bía levan levanta tado do de la su super per cie del glo bo entre entre el ellos los y se de desin sinteg tegró, ró, y no ha bía du duda da de que era la volun vo luntad tad de las Moiras. Moiras. Un alma alma por un al alma, ma, pen pensó só Ha Hades. des. El univer universo so tenía tenía ba balan lance, ce, incluso lu so en contra contra de la volun voluntad tad de los dioses. dioses. —Tánatos —di jo jo Ha Hades, des, diri dirigi gién éndo dose se al Dios Dios de la Mu Muer erte. te. Era una orden—. orden—. Lléva Llévanos nos con esa alma alma mori mori bunda. bunda. El dios dios obe obede deció ció y los dos apa apare reci cieron eron en el mundo mundo supe superi rior, or, fuera de un vie vie jo edi edi cio de apar aparta tamen mentos tos en el Dist Distri rito to de Mace Macedo donia. nia. Hades reco recono noció ció el olor de la mu muer erte te de in inme medi diato, ato, a ala lado, do, su sucio cio y tangib tangible. le. Era una fra fragan gancia cia que nunca nunca olvi olvida daría, ría, una que divi dividía día su
mente y lo en mente envi viaba aba de vu vuel elta ta a sus años temp tempra ranos nos en el sang sangri rien ento to campo cam po de ba batal talla, la, don donde de tu tuvo vo que cono conocer cer las vari variadas adas esen esenci cias as de la deca de caden dencia. cia. Intercambió una mira mirada da con Tá Tána natos. tos. De bían bían ha ber lle llega gado do tarde. Hades tocó tocó la pu puer erta ta y ab abrió. rió. Dent Dentro ro des descan cansa sa ba un hombre. hombre. Esta ba desp desplo loma mado do en el suelo, suelo, bo boca ca ba jo con sus brazos brazos ex exten tendi didos. dos. Era casi casi como como si hu bi biera era ent entra rado do a su ca casa sa y colap colapsó, só, sin vi vida. da. —No iba a morir morir has hasta ta dent dentro ro de un año —di jo jo Tána Tánatos. tos. Qu Quiién no esta esta ba inco incomo modo do con mor morta tales les mu muri rien endo do de mane manera ra inespe inespera rada, da, esas muer muertes tes eran orqu orques esta tadas das por Átro Átropos. pos. Y al gui guien le ha había bía ne ga gado do ese de derec recho. ho. Hades miró miró el cu cuer erpo po sin vi vida da por un lar largo go tiem tiempo. po. El hombre hombre era joven, pereto pero rotones su rostro esbra ta bazos. lleno lleno de cicat cicatri rices ces y cost costras, ras, y ha bía marcas mar cas y more mo nesrost enrosusesta brazos. Evangeline , , pensó pensó el di dios os somb sombrí ríamen amente. te. —¿Nombre? —pregun —preguntó tó Hades. Hades. —Alexander Sotir Sotir —di jo jo Tá Tána natos—. tos—. Tre Trein inta ta y tres años. Hades frunció frunció el ceño. ceño. Una pun punza zada da en su pec pecho ho lo cogió cogió fuera fuera de guar guardia, dia, pe pero ro lo reco recono noció ció por lo que era, tris triste teza. za. Le hu biera biera gustado tado ayu ayudar dar a este este hombre hombre a supe superar rar su adic adicci ción. ón. —Hades —di jo jo Tána Tánatos—. tos—. Mi Mira. ra. Cambió su mira mirada da del cu cuer erpo po a Tána Tánatos tos y a las mar marcas cas negras negras en el suelo. suelo. Esta Esta ban hú húme medas das y pare parecí cían an marcas marcas de arrast arrastre. re. Ha Hades des las si sigu guió, ió, y lo que encont encontró ró en el rin rincón cón de la ha bita bitaci ción ón lo en enfu fure reció. ció. Era el alma alma de Ale Alexan xander, der, y des descan cansa sa ba a los pi pies es de Ha Hades des en posi po sici ción ón fe fetal, tal, der derro rota tada da y rota. rota. Lucía Lucía más como como un esqu esquele eleto to que como co mo un hu huma mano. no. La pi piel el era co como mo una memb membra rana, na, en enneg negre reci cida da como alqu alquit itrán. rán. El esta estado do del al alma ma le di jo jo dos co cosas sas sob sobre re có cómo mo ha bía muer mu erto; to; ha bía si sido do traumá traumáti tico co y anti antina natu tural. ral. Hades ha bía vis visto to al algu gunas nas almas almas en es este te es esta tado, do, y sa bía que no tení tenían an espe esperan ranza. za. Es Esta ta alma alma no te tenía nía oportu oportuni nidad dad de cu curar, rar, ningu ninguna na
oportuni oportu nidad dad de re reen encar carnar narse. se. Este era su n. —Contacta con Ilias Ilias —instruyó —instruyó a Tána Tánatos—. tos—. Qu Quiiero cono conocer cer la cone co nexi xión ón de Sísi Sísifo fo con es este te homb hombre. re. —Sí, milord milord —di jo jo Tá Tána natos—. tos—. Qu Quiiere que… —Yo me hago hago car cargo go de él —di jo jo rá rápi pida damen mente. te. —Muy bien. bien. —Asintió —Asintió y de desa sapa pare reció, ció, de j jan ando do so solo lo a Hades Hades con el alma. alma. El dios dios es estu tuvo vo de pie al allílí por un mo momen mento, to, inca incapaz paz de mover moverse. se. No tenía tenía du duda da de que esto esto se segu guiría iría suce sucedi dien endo. do. ¿Podría ¿Podría cada cada mu muer erte te romper rom per un al alma? ma? ¿Podría ¿Podría cada cada muer muerte te te j jer er ot otro ro hi hilo lo que lo descodesconecta nec tase se de su fu futu tura ra reina? reina? Solo tenía tenía cer certe teza za de una cosa, cosa, iba a encont encontrar rar a Sí Sísi sifo fo y des desgargarrar su alma alma él mismo. mismo. Se agachó agachó y reco recogió gió el al alma ma en sus bra brazos, zos, trans transpor portán tándo dolo lo a los campos cam pos Elí Elíse seos. os. A pe pesar sar de la pe pesa sadez dez del día, aquí ha bía paz en el si silen lencio, cio, en la mane manera ra en que el vien viento to movía movía la hier hier ba do dora rada. da. Ha bía un espa espacio cio re reser serva vado do para para sa sanar, nar, y aun aunque que Hades Hades sa bía que el alma alma de Alexan Alexander der nun nunca ca se recu recupe pera raría ría de su hor horrib rible le n, in inten tenta taría ría darle el me jor jor nal. nal. Debajo del brillan brillante te cielo cielo azul, Hades Hades de jó el al alma ma ba jo las ho j jas as de un ár bol de grana granada da con fru frutas tas ma madu duras. ras. —Descansa en paz —di jo, jo, y un segun segundo do des despu pués, és, la sombra sombra se transfor trans formó mó en una fra franja nja de amapo amapolas las ro j jas. as. q
Hades cam bió la paz de los Elí Elíse seos os por el horror horror del Tár Tárta taro, ro, transpor trans portán tándo dose se a esa parte, parte, llama llamada da afec afectu tuosa osamen mente te La Caver Caverna na. Era la parte parte más an anti tigua gua de su re reino, ino, rode rodeado ado de for forma maci ciones ones ro roco cosas, sas, relu reluci cien entes, tes, corti cortinas nas y char charcos cos de agua he hela lada. da. La bel belle leza za natu natural ral esta bateest estro ada poreran las los de deses sespe pera radas las las tos de que al almas mas tortu tornatura radas das aquí; par parte derope lapeada mi mise seria ria ecos dedas los llan llantos re reso sona ban a tra través vés
de los grandes grandes tec techos. hos. Se acercó acercó a una de las losas losas de pi pied edra, ra, don donde de Dun Duncan can esta esta ba es estitirado, ra do, ma manos nos y pies pies enca encade dena nados. dos. Ha bía sido sido des desnu nuda dado, do, y un trapo trapo cubría cub ría su ingle. ingle. Su pecho pecho su bía y ba ba j jaba aba rápi rápida damen mente, te, una marca marca de su miencont Su tex darada pi piel el de esta estaHa bades, cu cu bi bier erta ta eños de sudor. suoj dor. Giró Gisespe ró pera surados. cados. beza beza y semiedo. enedo. contró ró textu contura larada mi mira da Hades, pe pequ queños ojos os de deses —Milord, lo sien siento to mucho. mucho. Por favor… favor… —Colocaste tus manos manos sob sobre re una mu j jer er —di jo jo Hades, Hades, cor cortán tándodolo—. Una que no te causó causó daño, daño, salvo salvo por al algu gunas nas palab palabras ras amar amargas. gas. —¡No volve volverá rá a pa pasar! sar! —rogó —rogó el og ogro, ro, luc luchan hando do cont contra ra sus restricci ric ciones ones mient mientras ras la his histe teria ria se insta instala la ba. Los la bios bios de Ha Hades des se curva curvaron ron en una sonri sonrisa sa diabó diabólilica. ca. —Oh, de eso estoy estoy se segu guro ro —respon —respondió dió mi mient entras ras una cuc cuchil hilla la negra neg ra se ma mani nifes festa ta ba en su ma mano. no. El Dios Dios del Inf Infra ramun mundo do se incli inclinó nó sobre sob re el og ogro, ro, pre presi sionan onando do la ho ho ja ja en su bul boso boso estó estóma mago—. go—. Ve Verás, rás, la diosa diosa a la que to tocas caste, te, la que inten intentas taste te ahogar, ahogar, a la que le de de j jas aste te una marca, marca, va a ser mi espo esposa. sa. Justo cuan cuando do Dun Duncan can gritó gritó su úl últi timo mo desa desaire, ire, Ha Hades des hun hundió dió el cuchil cuc hillo lo en el estó estóma mago go del og ogro. ro. —¡No lo sa bía! —llo —lloró ró Dun Duncan. can. Hades hundió hundió más el cuchil cuchillo, lo, cor cortan tando do pro profun fundo do con la inten intencición de expo exponer ner el híga hígado do de la criatu criatura ra convo convocan cando do a los bu buit itres res a sabía, no darse dar se un fes festín, tín, pero pero mient mientras ras más re repe petía tía Dun Duncan can que no lo sabía, lo sabía sabía , más fu furi rioso oso se ponía ponía Hades. Hades. Ent Entre re más pensa pensa ba en Per Persé séfofone, ágil e impo impoten tente, te, sus suspen pendi dida da por la gar gargan ganta ta en la ma mano no del ogro, su ira ore orecía. cía. Hun Hundió dió la cuchil cuchilla la en el estó estóma mago go del ogro, ogro, una, dos, y luego luego una y ot otra ra vez, hasta hasta que ya no hab habló, ló, hasta hasta que la sangre salió salió de su bo boca. ca. Hasta Hasta que estu estuvo vo muer muerto. to. Por últi último, mo, Hades Hades cor cortó tó sus ma manos. nos. Y cuan cuando do ter termi minó, nó, dio un paso pa so at atrás, rás, res respi piran rando do fuer fuerte, te, con su rost rostro ro salpi salpica cado do de sangre. sangre. Esto no ha bía si sido do una tor tortu tura. ra. Estaba matan matando. do.
Soltó la cuchil cuchilla la como como si lo hu bi biera era qu quema emado do y levan levantó tó sus manos hasta hasta su nuca. nuca. Cerró Cerró los ojos ojos y to tomó mó res respi pira raci ciones ones pro profun fundas das hasta has ta que se cal calmó mó otra otra vez. Es Esta ta ba lo loco, co, en enfer fermo mo y violen violento. to. ¿Có ¿Cómo mo pudo pu do cre creer er que un día me mere rece cería ría el amor? El pen pensa mien ento eracacómi có mico, co,de y su espe estener peran ranza ego egoís ísta. ta. Y sa bíasami que latoúni única forma for ma mante man ner azaPer Persé séfo fone ne era que nunca descub descubri riera era este este lado lado de él. El que an ansi siaba aba bru bruta talilidad dad y sed de sangre. sang re. q
Más tarde tarde en la noc noche, he, Tá Tána natos tos en encont contró ró a Ha Hades des en su o oci cina na y le ofre ofreció ció un bulto bulto envu envuel elto to en te tela la blan blanca. ca. —Las tise jeras jeras Át Átro ropos pos jo. jo. el Dios Hades las de llevaría lleva ría a Hefes He—di festo, to, Dios del Fu Fuego, ego, para para que pudipudiera resta restaurar urarlas. las. Ambos esta esta ban en silen silencio, cio, per perdi didos dos en sus pen pensa sami mien entos. tos. Después de un momen momento, to, el Di Dios os de la Mu Muer erte te hablo: hablo: —¿Qué tipo tipo de poder poder pu puede ede destru destruir ir la ma magia gia de las Mo Moiras? iras? —La suya suya propia propia —res —respon pondió dió Ha Hades. des. Lo que signi signi ca ba que Sí Sísi sifo fo de Ephyra Ephyra en encont contró ró una re reliliqu quia. ia. dela,la pi Gran Gu ra, car carro roñe ñeros roses reco repadas, colec lecta taron ronzas, co cosas sas del camDespués campo po de ba batal talla, piezas ezas Guer de erra, es escu cudos dos ro rotos, tos, espa das, lanzas, lan te telas… las… Eran piezas piezas que con conte tení nían an resi residu duos os má mági gicos, cos, pi piezas ezas que to toda davía vía poseíían un hi se hilo lo si caí caían en las manos manos equivo equivoca cadas. das. Hades Hades tra ba jo por años extra extrayen yendo do re reliliqu quiias que cir circu cula la ban en el mer merca cado do negro, negro, pero pero ha bía mi miles, les, y a veces veces se nece necesi sita ta ba un desast desastre re pa para ra re resol solver ver qui quién esta es ta ba en pose posesi sión ón de una. Un desast desastre re como como Sí Sísi sifo fo de Ephy Ephyra. ra. No podía podía permi permitir tir que el mortal mortal le en enga gaña ñara ra y pu pusi siera era en pe pelig ligro ro su amor. Más tempra temprano, no, Ili Ilias as ha bía de j de jado ado un docu documen mento to que con conr rma ma ba
lo que Hades Hades esta esta ba sos sospec pechan hando, do, Alexan Alexander der So Sotir tir era un adicto adicto a Evan ge geliline ne y tenía tenía una de deuda uda con su distri distri buidor, buidor, Sí Sísi sifo, fo, pe pero ro encontencontrar la cone conexi xión ón no servi serviría ría de na nada da has hasta ta que Ha Hades des loca localiliza zara ra al mortal. mor tal. —¿Qué vas a hacer? hacer? —pregun —prepondió guntó tó Tána Tá natos. tos.con un est —Visitar el Olimpo Olim po —res —respon dió Ha Hades des estre reme meci cimi mien ento. to.
Capítulo VII Monte Olimpo
El te, Olim Olimpo era ci ciudad udad depa már mármol molan sob sobre re mon monta taña. ña. brillante, brillan hermo herpo moso so yuna vas vasto. to. Vari Varios os pasil sillos los angos gostos tosuna par partí tían an de un Era patio borde bordeado ado de es esta tatu tuas as de los Olímpi Olímpicos, cos, que con condu ducí cían an a casas casas y tien tiendas das donde donde vi viví vían an se semi midi dioses oses y sus sir sirvi vien entes. tes. Como los dioses dioses y el mun mundo do de aba jo, el Olim Olimpo po tam bi bién én ha bía evolu evo luci ciona onado. do. Ze Zeus us ha bía orde ordena nado do la ins insta tala laci ción ón de un esta estadio dio y un teat teatro ro ade además más del gim gimna nasio sio exis existen tente, te, don donde de los dioses dioses se ent entre renana ban y los morta mortales les lucha lucha ban o actu actuaban aban para para ellos. ellos. Era uno de los pasati sa tiem empos pos favo favori ritos tos de Ze Zeus, us, y una prác prácti tica ca que no ha bía cam bi biado ado a pesar pe sar de que el Di Dios os del Trueno Trueno aho ahora ra vi vivía vía en la ti tier erra. ra. Hades no se aventu aventura ra ba a menu menudo do al Olim Olimpo. po. Inc Inclu luso so antes antes del Gran Descen Descenso, so, era un lu lugar gar que prefe prefería ría evitar, evitar, al igual igual que pre prefe fería ría evitar evi tar Olim Olimpia, pia, el nu nuevo evo Olim Olimpo, po, pe pero ro ha bía al algu gunos nos dioses dioses que aún resi residí dían an en las nu bes, entre entre ellos ellos Ate Atenea, nea, Hes Hestia, tia, Ar Arte temi misa, sa, y Heli Helios. os. Era a Heli Helios os al que qu quería ería ver: Heli Helios, os, el Di Dios os del Sol, uno de los pocos po cos tita titanes nes que no ha bi ha bita ta ba en el Tárta Tártaro. ro. Hades encont encontró ró a He Helilios os des descan cansan sando do en la Tor Torre re del Sol, un santu san tuario ario hecho hecho de mármol mármol blan blanco co y oro que se ele eleva va ba sob sobre re los otros edi edicios cios del Olim Olimpo, po, un pi pilar lar que at atra rave vesa sa ba las nu bes. La su superpercie bril brilla la ba con su pro propia pia luz in inter terna, na, co como mo el sol que brilla brilla sobre sobre el
agua. Era la torre torre desde desde la que salía salía en su carro carro dora dorado do de cu cuat atro ro ca ballos bal los por el ci cielo elo y don donde de reg regre resa sa ba por la noc noche. he. El Titán Titán descan descansa sa ba en un trono trono de oro, con la ca ca be beza za apo apoya yada da en el puño puño co como mo si estu estuvi viera era abur aburri rido, do, no agota agotado do por su tra ba jo. Esta ba ves vesti tido do una tú túni nica ca púrpu púr pura, ra,ca y beza suzaca bello bel lonada ruda biocon blanqu blan ecino no ca caía ía en ondas on dascon sob sobre re sus homb hombros, ros, su be co coro rona la queci aure aureola ola del sol. Helios parpa parpadeó deó len lenta tamen mente te ha hacia cia Ha Hades, des, sus oj ojos os del color color del ám bar ent entre recer cerra rados. dos. —Hades —di jo, jo, reco recono noci cién éndo dolo lo con un asenti asentimi mien ento to pere perezo zoso, so, su voz profun profunda da y reso resonan nante. te. —Helios. —Hades —Hades inc inclilinó nó la ca beza. beza. —Quieres sa ber dónde dónde se es escon conde de el mortal mortal Sísi Sísifo. fo. Hades no di jo jo nada. nada. No le sorp sorpren rendió dió que Heli Helios os su supi piera era por qué ha bía ve veni nido, do, era la ra razón zón por la que es esta ta ba aquí. He Helilios os lo veía veía todo, todo, lo que sig signi ni ca ba que era tes testi tigo go de to todo do lo que ocurría ocurría en la tier tierra. ra. La pre pregun gunta ta era, ¿ha bía elegi elegido do prestar prestar aten atenci ción ón y ele elegi giría ría compar com partir tir con Ha Hades des ahora? ahora? Helios era un idiota idiota no noto torio. rio. —No se escon esconde. de. Lo veo ahora ahora —di jo jo el dios. dios. —¿Dónde , Heli Helios? os? —pre —pregun guntó tó Hades Hades ent entre re di dien entes. tes. —En la tier tierra ra —res —respon pondió dió el Ti Titán. tán. Dado que Heli Helios os ha bía lucha luchado do del la lado do de los Olím Olímpi picos cos du duranrante la Gran Guer Guerra, ra, el Di Dios os del Sol sen sentía tía que cu cual alqu quiier ayu ayuda da que ofreci reciera era des despu pués és de su vic victo toria ria era un fa favor, vor, uno que no tenía tenía que otorgar otor gar si no qu quería. ería. —No estoy estoy de hu humor mor para para tus ju juegos egos —di jo jo Ha Hades des somb sombrí ríamenamente. —Y no estoy estoy de humor humor para para vi visi sitas, tas, pe pero ro todos todos de bemos bemos ha hacer cer sacri sac ri cios. cios. Una punras punza zada da ira lo at atra rave vesó, mani festán tándo se He enlios un co unto to de púas pú as neg negras quedesa sali lieron eron de susó, mano. mama no.nifes Los ojos ojosdose de Heli os conj se njun des desvivi-
aron allí allí y son sonrió. rió. —Veo que sigu sigues es luchan luchando do contra contra la ira. ¿Có ¿Cómo mo oculta ocultarás rás tu verdade da dera ra na natu tura rale leza za a la hi ja ja de De Demé méter? ter? ¿Encontra ¿Encontrarás rás más al almas mas para tortu torturar? rar? —Quizás empi empiece ece por tu hi jo. jo. La boca boca de Heli Helios os se ap apre retó. tó. Su hi jo, jo, Faetón, Faetón, ha bía es esta tado do en el Infra Inf ramun mundo do duran durante te muc mucho ho tiem tiempo. po. El niño niño in inge genuo nuo ha bía in inten tenta tado do condu con ducir cir el car carro ro de su pad padre re y perdió perdió el cont control rol de los ca bal ballos. los. Zeus lo derri derri bó bó despu después és de ca causar usar una gran dest destruc rucci ción ón en la tier tierra. ra. —Era un chico chico es estú túpi pido do que hi hizo zo algo algo estú estúpi pido do —di jo jo Heli Helios, os, deses de sesti timan mando do la amena amenaza za de Ha Hades. des. —Este mortal mortal es un ase asesi sino, no, Heli Helios os —di jo jo Hades, Hades, in inten tentán tándo dolo lo de nuevo. nuevo. —¿No lo somos somos todos? todos? Hades lo fulmi fulminó nó con la mira mirada. da. De be bería ría ha ber ima imagi gina nado do que la apela ape laci ción ón no fun funci ciona onaría. ría. He Helilios os no te tenía nía un sen senti tido do re real al de la injusinjusticia, ticia, des despu pués és de ha ber ayu ayuda dado do a su ni nieta, eta, Medea, Medea, a es esca capar par a Corinto rin to tras ma matar tar a sus pro propi pios os hi jos. jos. —¿Es un trato trato lo que qui quieres? —pre —pregun guntó tó Hades. Hades. —Lo que qui quiero es que me de j de jen en en paz —espe —espetó tó He Helilios os con más vi vigor gor en sus palab palabras ras que cual cualqu quiier cosa cosa que hu biera biera dic dicho ho des desde de que llegó llegó Hades—. Hades—. Si hu bi biera era qu queri erido do invo involuc lucrar rarme me en asun asuntos tos mortales, tales, hab habría ría des descen cendi dido do con el res resto to de uste ustedes. des. —Y, sin em bar bargo, go, usas su ti tier erra ra para para tu ga gana nado do —se —seña ñaló ló Ha Hades, des, notan no tando do la somb sombra ra que pa pasó só sobre sobre los oj ojos os am bari barinos nos de He Helilios. os. Había encont encontra rado do la de bi bililidad dad del Ti Titán. tán. —Quizás me equivo equivoqué qué al po poner ner mi mira mirada da en tu hi jo jo cuan cuando do te preocu pre ocupas pas más por tus ani anima males. les. Las manos manos de He Helilios os se ap apre reta taron ron sob sobre re los bra brazos zos de su tro trono. no. Por prime primera ra vez desde desde que Hades Hades llegó, llegó, el di dios os se en ende dere rezó. zó. co codi dici ciaba ga gana nado, do,entam bién éndella llama mado do cus Bu Bueyes eyes del Sol. EranHelios inmorta inmor tales, les, yaba lossu man mante tenía nía la bi is isla la Si Sici cilia, lia, custo todi diados ados por
dos de sus hi jas. jas. Cual Cualqu quiiera que les hi hici ciera era da daño ño in incur curri riría ría a su ira. Ulises Uli ses y sus hombres hombres lo ha bí bían an ap apren rendi dido do por las ma malas. las. Pero Hades Hades no te temía mía la ira de He Helilios, os, no cuan cuando do se tra trata ta ba de un mortal mor tal que se at atre revía vía a burlar burlar a la muer muerte, te, y no cuan cuando do se tra trata ta ba de enfren enf rentar tarse se al des desmo moro rona nami mien ento to de su desti destino no con Per Persé séfo fone. ne. —Pides sang sangre, re, Hades. Ha des. —Si me estás estás pre pregun guntan tando do si sac sacri ri ca caré ré algu algunas nas ca be bezas zas de ganado na do pa para ra con conse segu guir ir lo que qui quiero, enton entonces ces sí, pi pido do sang sangre re —respondió pon dió Ha Hades—. des—. Me de dele leita itaré ré con la idea de tu ago agonía nía mi mient entras ras me si sien ento to en mi trono trono con cin cincu cuen enta ta de tus vacas vacas en el Inf Infra ramun mundo. do. Un tenso tenso si silen lencio cio sigu siguió ió a la amena amenaza za de Ha Hades, des, y pudo pudo ver y sentir sen tir la ira de He Helilios. os. Le lle llegó gó a los oj ojos os y aumen aumentó tó la ra bia ent entre re ellos, tan cali calien ente te como como los ra rayos yos del sol. —El hombre hombre que buscas buscas está está si sien endo do prote protegi gido do por tu her herma mano. no. Hades ya sa bía que no era Zeus; Zeus; el Dios Dios del Trueno Trueno nunca nunca proteprotegería ge ría a un mortal mortal que hu biera biera vi viola olado do una de sus le leyes yes más codi codiciciadas. —Poseidón —siseó —siseó Hades. Hades. No se lleva lleva ba bien bien con nin ningu guno no de sus herma hermanos, nos, pe pero ro si te tenía nía que elegir elegir uno para para sacri sacri car, se sería ría Pose Poseidón. idón. El Di Dios os del Mar era celoso, loso, hambri hambrien ento to de poder poder y vi violen olento. to. No le gus gusta ta ba compar compartir tir el poder sobre sobre el Mundo Mundo Supe Superi rior or con Ha Hades des o Ze Zeus, us, y ha bía inten intenta tado do más de fra unacasa vez derrocar derro car al Rey de los Di Dioses, oses, pe pero ro todos todos los inten intentos tos ha bí bían an fraca sado. do. —No moles molesta tarás rás a mi gana ganado do —di jo jo He Helilios—. os—. ¿So ¿Somos mos cla claros, ros, Hades? Ha des? Hades entre entrecer cerró ró los oj ojos, os, pe pero ro no di jo jo na nada. da. Cu Cuan ando do se gi giró ró y de jó la Torre Torre del Sol, es escuc cuchó hó la llama llamada da de He Helilios. os. —¡Hades! q
Regresó a su oci ocina na en Ne Never vernight. night. Con Consi side deró ró ir direc directa tamen mente te a
Atlantis, lantis, la is isla la y el hogar hogar de su her herma mano, no, y exi exigir gir sa ber dón dónde de es esta ta ba escon es condi dien endo do a Sísi Sísifo, fo, pero pero co cono nocía cía a su her herma mano, no, sa bía que la vi violenolencia que se arre arremo molilina na ba dentro dentro de él era mayor mayor que la ira que Ha Hades des inten intenta ta ba mante mantener ner a ra raya. ya. Cual Cualqu quiier acusa acusaci ción ón di diri rigi gida da a su her hermamano, inclu incluso so si era verdad, verdad, en enfu fure rece cería ría al dios. dios. Al nal nal del en encu cuent entro, ro, miles mi les es esta tarí rían an mu muer ertos. tos. Hades no podía podía evitar evitar pen pensar sar en el alma alma de Alexan Alexander, der, ro rota ta sin reme remedio. dio. Un alma alma to toma mada da an antes tes de ti tiem empo po era dema demasi siado, ado, y el di dios os sa bía que habría habría más co como mo él si no ac actu tuaba aba rápi rápido. do. Te Tenía nía que idear idear un plan alter alterna nati tivo, vo, al algo go que le di diera era la verdad verdad que nece necesi sita ta ba pa para ra evitar evi tar la dest destruc rucci ción. ón. Sus ojos ojos se posa posaron ron en el bulto bulto blanco blanco que ha bía sobre sobre su esc escri rito torio: rio: los visil visillos los de Át Átro ropos. pos. Quizás Hefes Hefesto to tendría tendría una solu soluci ción. ón. Re Reco cogió gió el pa paqu quete ete en sus manos ma nos y co comen menzó zó a te telet letrans ranspor portar tarse se cu cuan ando do Men Menta ta llamó llamó a su pu puererta y la abrió, abrió, ent entran rando do en su o oci cina. na. —Entrar antes antes de ser invi invita tado do frustra frustra el propó propósi sito to de lla llamar mar — di jo jo Ha Hades des con fu fuer erza, za, mo moles lesto to por la in inter terrup rupci ción—. ón—. Estoy Estoy ocu ocupapado. —Dígaselo a su nueva nueva amiga amiga —res —respon pondió dió Men Menta—. ta—. Está Está aba jo. Hades frunció frunció el ceño. ceño. —¿Perséfone está está aquí? No de bía lle llegar gar has hasta ta es esta ta noche noche pa para ra su re recor corri rido do por el Inf Infraramun mundo. Una extra extraña sen sensa saci ción ónuna se es desple desp legó góza,dent dentro rocuan deando su pecho. ho. Se sentía sen tíado. emo emoci cionan onante, te,ñaca casi si como co mo espe peran ranza, pero pero cu dopec se acer acercó có a las venta ventanas nas que da ban al piso piso de Never Nevernight, night, esos senti sentimi mien entos tos se oscu os cure reci cieron. eron. Persé Perséfo fone ne ha bía tra traído ído un com compa pañe ñero, ro, un hombre hombre al que reco recono noció ció de inme inmedi diato ato co como mo Adonis, Adonis, el mortal mortal fa favo vori rito to de Afrodi ro dita. ta. Sus ojos ojos se oscu oscure reci cieron. eron. —Te di je je que esto esto pa pasa saría ría —di jo jo Men Menta—. ta—. La ani animas maste te y aho ahora ra cree que puede puede exigir exigir una audi audien encia cia conti contigo. go. Le di diré ré que estás… estás… indispu dis pues esto. to. —No harás harás tal cosa. cosa. —La detu detuvo—. vo—. Tráeme Tráemela. la.
Menta arqu arqueó eó una ce ja. —¿El hombre hombre tam bién? bién? Estaba tratan tratando do de in inci citar tarlo, lo, y fun funci cionó, onó, porque porque Hades Hades no pudo pudo evitar evi tar res respon ponder der con un sil bido bido amar amargo. go. —Sí. Menta hizo hizo un so soni nido do extra extraño ño en el fon fondo do de su gar gargan ganta, ta, al algo go pare pa reci cido do a una ri risa, sa, y luego luego se fue. La mira mirada da de Ha Hades des volvió volvió al piso de aba jo. Perséfone esta esta ba aparta apartada da de Ado Adonis, nis, con los bra brazos zos cru cruza zados dos sobre sob re el pec pecho. ho. A pe pesar sar de su audacia, audacia, quería quería verla, verla, espe especi cial almen mente te despu des pués és de la ame amena naza za de las Mo Moiras. iras. Se es esta taría ría cas casti tigan gando do si la envi viaba aba le j jos. os. Ade Además, más, qu quería ería sa ber por qué ha ha bía bía ve veni nido do y tra traído ído a un mortal mor tal con el ella. la. Cuando Menta Menta apare apareció ció a la vis vista, ta, se apar apartó tó de la venta ventana, na, se sentó a un la sentó lado do del bulto bulto de Láqu Láquesis esis y se sir sirvió vió una co copa. pa. Si no tuvituviera algo algo pa para ra dist distra raer erse, se, se pase pasearía, aría, y pre prefe feri riría ría no ilust ilustrar rar el ca caos os de su mente mente en este este mo momen mento. to. Para cuan cuando do Men Menta ta reg regre resó só con Per Persé séfo fone ne y Adonis Adonis a cues cuestas, tas, Hades Ha des se ha bía co colo loca cado do nueva nuevamen mente te cer cerca ca de las ven venta tanas. nas. Ape Apenas nas regist registró ró el acer acerca cami mien ento to de Menta, Menta, por porque que sus ojos ojos se ha bían bían jado jado en su diosa diosa en el momen momento to en que ent entró ró en la ha bi bita taci ción. ón. —Perséfone, —Perséfon e, mi milord lord —di jo jo Men Menta. ta. Estaba deci decidi dida. da. Po Podía día verlo verlo en su exp expre resi sión, ón, la for forma ma en que su ca be beza za es esta ta ba inc inclilina nada, da, sus la bios bios ap apre reta tados dos en una lílínea nea dura. dura. Ha bía veni venido do aquí por al algo, go, y Ha Hades des se encont encontró ró an ansi sioso oso por un momento men to en el que se le acer acerca cara ra con una sonri sonrisa, sa, sin reser reservas vas ni va vaci cilalaci ciones ones porque porque lo de dese seaba aba a él y na nada da más. —Y… su ami go go , Adonis Adonis —conti —continuó nuó Men Menta. ta. Con la menci mención ón del nomb nombre re del mortal, mortal, el hu humor mor de Ha Hades des se ensomb en sombre reció ció y miró miró a Adonis, Adonis, cu cuyos yos ojos ojos se ab abri rieron eron co como mo pla platos tos ba jo su escru escruti tinio. nio. Le pa pare reció ció extra extraño ño que Af Afro rodi dita ta to toma mara ra a es este te homb hombre re como mo aman amante, te, dada dadatalsuaj at atrac racci ónsuf porrimi Hefes Heentos festo. to.del Eran complecomp tamen tamente te co opu opues estos: tos: es este te mortal mor ajeno eno ación los sufri mien tos mundo, mun do, lesu
piel era su piel suave, ave, su ca bello bello brillan brillante te y no cha chamus musca cado do por la fragua, fragua, su rostro rost ro lib libre re de bar ba inci incipi pien ente, te, como como si de j jar arse se bar ba fuera fuera una di dicultad cul tad para para él. Y luego luego esta esta ba su al alma. ma. Manipuladora, enga engaño ñosa sa y abu abusi siva. va. Hades miró miró a Men Menta ta y asin asintió. tió. —Puedes irte, irte, Menta. Menta. Graci Gracias. as. Con su sali salida, da, Hades Hades se be bió el resto resto de su be bida bida y cru cruzó zó la ha bita bi taci ción ón pa para ra vol volver ver a llenar llenarla. la. No ofre ofreció ció un va vaso so a ningu ninguno no de sus dos visi visitan tantes tes ni los in invi vitó tó a sentar sentarse. se. No era cor cortés, tés, pe pero ro no le inteinteresa resa ba pa pare recer cer ag agra radab dable. le. Habló una vez que su vaso vaso estu estuvo vo lleno, lleno, apo apoya yado do cont contra ra su escriescritorio. torio. intrusi rusión ón? —¿A qué le de bo esta… esta… int Los ojos ojos de Per Persé séfo fone ne se entre entrecer cerra raron ron an ante te sus pa palab labras ras y su tono, y levan levantó tó la ca be beza. za. No era el úni único co que luc lucha ha ba por ser ami amigabgable. —Lord Hades Hades —di jo, jo, sa sacan cando do un cu cuader aderno no de su bolso—. bolso—. AdoNoti tici cias as Nu Nueva eva Ate Atenas. nas. He nis y yo somos somos de No Hemos mos es esta tado do in inves vesti tigan gando do vari va rias as qu quee jas jas sobre sobre us usted, ted, y nos pregun pregunta tamos mos si quer querría ría hacer hacer al algún gún comen co menta tario. rio. Otra cosa cosa que no sa bía sobre sobre su fu futu tura ra espo esposa: sa: su ocupa ocupaci ción. ón. Periodista. Hades odiaba odiaba a los me medi dios. os. Ha bía gas gasta tado do muc mucho ho dine dinero ro para para asegu ase gurar rarse se de que nun nunca ca lo fotog fotogra ra aran y se de dene nega ga ban todas todas las solilici so citu tudes des de entre entrevis vista. ta. No porque porque tu tuvi viera era cosas cosas que ocultar, ocultar, aunque ha bía muchas muchas que prefe prefería ría gu guar ardar dar pa para ra sí mismo, mismo, simp simple lemen mente te sentía sen tía que se en enfo foca ca ban en las co cosas sas equ equivo ivoca cadas, das, como como el esta estado do de su nego negocio, cio, cu cuan ando do Ha Hades des pre prefe fería ría dar pro prota tago gonis nismo mo a las or orga gani nizazaci ciones ones que ayuda ayuda ban a los perros, perros, los ni niños ños y las per perso sonas nas sin hogar. hogar. Se llevó llevó el va vaso so a los la bi bios os y be bió un sor bo; era be ber be ber o most mostrar rar su enfa enfado do de una mane manera ra peor. peor. —Perséfone está está inves investi tigan gando do —di jo jo Adonis Adonis con una risa risa nervinervi-
osa—. Solo Solo es estoy toy aquí… por apoyo apoyo mo moral. ral. Cobarde , pensó pensó Hades Hades an antes tes de con concent centrar rarse se en el cu cuader aderno no que Persé Per séfo fone ne ha bía sa saca cado do de su bolso. bolso. Asintió Asintió con la ca be beza. za. —¿Es esa una lista lista de mis deli delitos? tos? Estaría minti mintien endo do si di jera jera que no es espe pera ra ba esto. esto. Era la hi ja ja de Demé De méter; ter; solo solo le ha bían bían con conta tado do lo pe peor or de él. Lo sa bía porque porque lo ha bía mira mirado do con desp despre recio cio cu cuan ando do des descub cubrió rió qui quién era la noche noche del juego ju ego de car cartas. tas. Cice cero ro Sava, Sava, Da Damen men Elias, Elias, Leyó algu algunos nos de los nombres nombres de la lista: lista: Ci Tyrone Tyro ne Li Liakos, akos, Chloe Bel Bella. la. No podía podía sa ber qué signi signi ca ba pa para ra él escuchar cuc har esos nombres nombres o có cómo mo lo ha hacía cía sen sentir. tir. Le re recor corda da ba sus fracafracasos. Cada Cada uno era un mor mortal tal que ha bía hecho hec ho un trato trato con él, a ca cada da uno se le ha bía dado dado tér térmi minos nos con la espe esperan ranza za de supe superar rar el vicio vicio que ago biaba su al alma, ma, y cada cada uno ha bía fraca fra casa sado, do, resul resultan tando do en su muer mu erte. te. biaba Se sintió sintió alivi aliviado ado cu cuan ando do de jó de le leer er de la lis lista, ta, pe pero ro luego luego mi miró ró hacia ha cia ar arri ri ba ba y pre pregun guntó: tó: —¿Se acuer acuerda da de esta esta gente? gente? Cada detal detalle le de su rostro rostro y ca cada da preocu preocu paci pación ón de su alma. alma. Nuevamente, dio un sor bo a su be bida. bida. —Recuerdo cada cada al alma. ma. —¿Y todas todas las apu apues estas? tas? Esta no era una conver conversa saci ción ón que quisi quisiera era te tener, ner, y no podía podía evitar la frustra frustraci ción ón en su voz mi mient entras ras hab habla la ba, eno eno j jado ado por porque que esta esta ba sacan sa cando do el te tema. ma. —El punto, punto, Persé Perséfo fone. ne. Ve al punto. punto. No has te teni nido do nin ningún gún problema lema con eso en el pa pasa sado, do, ¿por qué ahora? ahora? Sus me j jilillas las se sonro sonro jaron, jaron, la ten tensi sión ón entre entre el ellos los creció, creció, al algo go só sólilido que él destru destruiría iría si pu pudi diera. era. Hi Hizo zo que le do dolilieran eran los pulmo pulmones nes y que se le opri oprimi miera era el pecho. pecho. ofrecer ofre cer a los mor morta tales les lo que dese deseen en si ju juegan egan conti contigo go y ganan. ga—Aceptas nan.
Ella hizo hizo que so sona nara ra co como mo si fuera fuera el ag agre resor, sor, como como si los mortamortales no le supli suplica caran ran la oportu oportuni nidad dad de jugar. —No todos todos los morta mortales les y no to todos dos los de dese seos os —di jo. jo. —Oh, perdó perdóna name, me, eres se selec lecti tivo vo en las vi vidas das que dest destru ruyes. yes. —Yo no destru destruyo yo vi vidas das —di jo jo con fuer fuerza. za. Of Ofre recía cía a los morta mortales les una forma forma de me j jorar orar sus vi vidas, das, una vez que de j jaban aban su oci ocina, na, no tenía tenía cont control rol sob sobre re sus elecci elecciones. ones. —¡Solo das a cono conocer cer los tér térmi minos nos de tu cont contra rato to des despu pués és de ha ber gana ganado! do! Eso es un en enga gaño. ño. —Los térmi términos nos son claros, claros, los de detal talles les son mí míos os pa para ra deter determi minar. nar. No es un enga engaño, ño, como como lo lla llamas. mas. Es una apu apues esta. ta. —Desafías su vicio. vicio. De j jas as al des descu cu bi bier erto to sus secre secretos tos más oscuoscuros… —Desafío lo que está está destru destruyen yendo do su vi vida da —la corri corrigió—. gió—. Es su elecci elec ción ón con conqu quis istar tar o su sucum cum bir. —¿Y cómo cómo co cono noce ce su vi vicio? cio? —pregun —preguntó. tó. Una sonri sonrisa sa ma malilici ciosa osa cru cruzó zó el rostro rostro de Ha Hades, des, y, de repen repente, te, pensó pen só que enten entendía día por qué es esta ta ba allí, allí, por qué le es esta ta ba haci hacien endo do esas acusa acusaci ciones, ones, porque porque aho ahora ra era una de sus jugado jugadores. res. —Veo el alma alma —di jo—. jo—. Lo que la ago bia, lo que la cor corrom rompe, pe, lo que la destru destruye, ye, y lo desa desafío. fío. —¡Eres pereme peor ormeció. ti tipo po dios! os! Hades seelestre est ció.de di —Perséfone… —Adonis —Adonis pro pronun nunció ció su nombre, nombre, pero pero su adveradvertencia ten cia se per perdió dió por la reac reacci ción ón de Hades. Hades. —Estoy ayudan ayudando do a es estos tos mor morta tales les —argu —argumen mentó, tó, dando dando un pa paso so delili bera de berado do ha hacia cia el ella. la. No era cul culpa pa suya suya que no le gusta gustara ra su respurespuesta. es ta. Se incli inclinó nó ha hacia cia él, exi exigi gien endo. do. —¿Cómo? ¿Ofreci ¿Ofrecien endo do un trato trato impo imposib sible? le? ¿Abste ¿Abstener nerse se de la adicci adic ción ón o perder perder la vi vida? da? ¡Eso es ab abso solu luta tamen mente te ridí ridícu culo, lo, Hades! Hades!
Sus ojos ojos se ha bí bían an ilu ilumi mina nado, do, y no notó tó que su domi dominio nio sobre sobre el glamo gla mour ur de su mad madre re aqu aqueeaba cuan cuanto to más eno eno j jada ada esta esta ba. —He teni tenido do éxi éxito. to. Lo sabría sabría si no es estu tuvi viera era tan ansi ansiosa osa por ver so solo lo lo ma malo lo en él. ¿No esa la la mar marca ca de un bu buen en pe peri riodis odista? ta? ¿Compren ¿Comprender der y entreentrevistar vis tarera a am bos lados? dos? —¿Oh? ¿Y cuál cuál es tu éxito? éxito? Supon Supongo go que no te im impor porta, ta, ya que ganas ga nas de cual cualqu quiier mane manera, ra, ¿verdad? ¿verdad? To Todas das las al almas mas vi vienen enen a ti en algún algún mo momen mento. to. Se movió movió pa para ra acortar acortar la dis distan tancia cia ent entre re ellos, ellos, su frust frustra raci ción ón se des bordó. bordó. Mient Mientras ras lo ha hacía, cía, Ado Adonis nis se in inter terpu puso so entre entre él y Per Persé séfofone, y Hades Hades hizo hizo lo que ha bía queri querido do hacer hacer desde desde que el mortal mortal entró en su oci ocina: na: lo para paralilizó, zó, en envi vián ándo dolo lo al suelo, suelo, in incons consci cien ente. te. —¿Qué haces? haces? —exigió gióñecas Per Persé y jo comen comenzó alcan alcanzar zarlo, lo,raspe pero ro Hades Hades la to tomó mó de —exi las mu muñe casséfo yfone, lane,atra atra ha hacia ciazóél.a Sus pa palab labras fueron duras duras y ap apre resu sura radas. das. —Asumo que no qui quieres que es escuc cuche he lo que tengo tengo que de decir cirte. te. No te preocu preocupes, pes, no pe pedi diré ré un fa favor vor cuan cuando do bor borre re su memo memoria. ria. Le frunció frunció el ceño. ceño. —Oh, qué amable amable de tu parte parte —se burló, burló, su pecho pecho su bía y ba j jaba aba con cada cada res respi pira raci ción ón eno j jada. ada. Le hizo hizo cons consci cien ente te de su proxi proximi midad, dad, le recor recordó dó el be beso so que ha bía pre presi siona onado do en su pi piel el el día ante anteri rior. or. El
ca calor lor se en roscó có en parte in infe feri rior or de su es estó tóma mago, go, y sus oj ojos os se posaron sa ron enenros sus la la bi bios. os. la parte —Qué li berta bertades des se to toma ma con mi fa favor, vor, lady Persé Perséfo fone. ne. —Su voz esta es ta ba contro controla lada, da, pe pero ro se sentía sentía cu cual alqu quiier cosa cosa me menos nos tranqu tranquilo. ilo. Por dentro, dent ro, se sen sentía tía cru crudo do y primi primiti tivo. vo. —Nunca espe especi ci cas caste te cómo cómo te tenía nía que usar tu favor. favor. —No lo hice, hice, aunque aunque espe espera ra ba que supi supieras eras que no de bes arrastarrastrar a este este mortal mortal a mi re reino. ino. —Ha —Hades des mi miró ró a Ado Adonis. nis. Sus ojos ojos se abri abrieron eron un po poco. co. —¿Lo cono conoces? ces?
Hades igno ignoró ró esa pre pregun gunta, ta, volve volvería ría a él más tar tarde. de. Por ahora, ahora, él desa de sa aría su ra razón zón para para venir venir a Never Nevernight night pa para ra em empe pezar. zar. —¿Planeas escri escri bir bir una histo historia ria sobre sobre mí? —Se inc inclilinó, nó, echán echándodola hacia hacia at atrás rás y acer acercán cándo dola la con más fuer fuerza, za, sel sellan lando do sus cu cuer erpos pos jun juntos. Es ba se segu guro ro ro dede queel la única úni forma for ma entoque pohacía acer el ella latos. eraEsta si ta es esta ta ba dent dentro ella, la, un ca pen pensa sami mien ento quepodía hadía cíaacercar quecarse susees-a tóma tómago go se sin sinti tiera era va vacío cío y su pol polla la du dura—. ra—. Di Dime, me, lady Per Persé séfo fone, ne, ¿detal ¿de talla lará rá tu ex expe peri rien encia cia conmi conmigo? go? ¿Cómo ¿Cómo me in invi vitas taste te imp impru ruden dentetemente men te a tu me mesa, sa, me rogas rogaste te que te ense enseña ñara ra a jugar a las car cartas…? tas…? —¡No rogué! rogué! —Podrías hablar hablar de cómo cómo te ru bo bori rizas zas des desde de la ca beza beza a los pi pies es en mi presen presencia, cia, có cómo mo te ha hago go per perder der el ali alien ento… to… —¡Cállate! dinica divir virtió tió que noseo quisi quisiera eraél,es escuc cuchar harlas esto, esto, todas dasen lasque for formas mas enerpo que le comu coLe muni ca ba su deseo de por to todas das formas forto mas su cuer cu po traici tra iciona ona ba las palab palabras ras que salí salían an de su boca. boca. Su cuer cuerpo po era e exib xible le ba jo sus manos, manos, y sa bía que, si pasa pasa ba llaa ma mano no entre entre sus mus muslos, los, estaría taría ca calilien ente te y húme húmeda. da. —¿Hablarás del favor favor que te he dado, dado, o estás estás dema demasi siado ado avergonza gon zada? da? —¡Detente! Se apartó apartó y la sol soltó. tó. El Ella la se tam ba baleó leó ha hacia cia atrás, atrás, res respi piran rando do con di di cul cultad, tad, su boni bonita ta piel piel enro enro j jeci ecida. da. Aun Aunque que no lo demost demostró, ró, sentía sentía lo mismo. mis mo. —Puedes culpar culparme me por las de deci cisi siones ones que tomas tomaste, te, pe pero ro eso no cam bia na nada da —di jo jo Hades, Hades, y sintió sintió que esta esta ba de desa sa an ando do la ver verdadadera de ra ra razón zón por la que vino vino aquí: de decir cirle le que su tra trato to con ella ella era injusto, us to, por vengan venganza—. za—. Eres mía du duran rante te seis seis me meses, ses, y eso signi signi ca que, si escri escri bes bes sobre sobre mí, me asegu asegura raré ré de que ha haya ya conse consecu cuen enci cias. as. —Es cier cierto to lo que dicen dicen de ti —di jo—. jo—. No escuc escuchas has ningu ninguna na oraci ción. ón. No ofre ofreces ces piedad. piedad. Sí, queri querida da , pensó todo el mun mundo do dice dice de mí. pensó con eno jo. Cree lo que todo —Nadie reza reza al Di Dios os de los Mu Muer ertos, tos, mi milady, lady, y cuan cuando do lo ha hacen, cen,
ya es dema demasi siado ado tar tarde. de. Terminó con esta esta con conver versa saci ción. ón. Tenía Tenía cosas cosas que ha hacer cer y ella ella ha bía perdi perdido do el ti tiem empo po con sus acusa acusaci ciones. ones. Agitó la mano mano y Ado Adonis nis se des desper pertó tó con una fuer fuerte te inha inhala laci ción. ón. Se sen sentó tó mo rá rápi pida damen te,ando lu luci cien endo estu estal tupe pefac facto. to.róHades Ha en encont contra todo todo sobre sob re él moles lesto, to,mente, y cu cuan do eldo mor mortal en encont contró sudes mi mira rada, da, sera ba pu puso so de pie, discul disculpán pándo dose se mient mientras ras lo ha hacía cía y agac agachan hando do la ca beza. beza. —No respon responde deré ré más a tus pre pregun guntas tas —di jo jo Ha Hades, des, mi miran rando do a Persé Per séfo fone—. ne—. Menta Menta les most mostra rará rá la sa salilida. da. Sabía que la ninfa ninfa es espe pera ra ba en las sombras. sombras. Nun Nunca ca los ha bía de jde jado real realmen mente te so solos, los, y odió la exp expre resi sión ón de su su cien ciencia cia en su rostro rostro cuan cu ando do ent entró ró a su oci ocina na desde desde la ent entra rada da del Inf Infra ramun mundo. do. Qu Quizás izás eso era lo que le hizo hizo lla llamar mar a su di diosa osa antes antes que se fuera. fuera. —Perséfone. e. tados —Esperó —Espe ró hasta hasta miró—. ró—. Agre Agrega garé ré tu nombre nombre a mi—Perséfon lista de in lista invi vita dos es esta ta noc noche. he.que lo mi Sus ce jas jas se junta juntaron ron en confu confusi sión. ón. Pro bable bablemen mente te pensó pensó que su invi invita taci ción ón a recor recorrer rer su re reino ino sería sería re revo voca cada da despu después és de su comporcomportami tamien ento, to, pero pero era im impor portan tante, te, aho ahora ra más que nunca. nunca. Era la única única forma for ma en que el ella la lo ve vería ría por qu quiién era. Un dios dios de deses sespe pera rado do por la paz.
Capítulo VIII En la isla de Lemnos
Hades encont encontró ró a Af Afro rodi dita ta es espe peran rando do en la entra entrada da de su man mansisión en la isla isla de Lem Lemnos. nos. Era un her hermo moso so hogar, hogar, constru construido ido por el propio pro pio Hefes Hefesto, to, una mezc mezcla la de líne líneas as moder modernas, nas, intrin intrinca cadas das lig ligraranas, y pare paredes des de ven venta tanas nas que of ofre recí cían an la vis vista ta al glo glori rioso oso ama amane necer cer y un encan encanta tador dor atar atarde decer. cer. La isla isla era un lugar lugar sagra sagrado do pa para ra He Hefes festo. to. Fue donde donde aterri aterrizo zo cuando an do He Hera ra lo echó echó del Olimpo. Olimpo. Co Como mo re resul sulta tado do de la caída, caída, se rompió la pier pierna, na, y la gen gente te de Lem Lemnos nos cu cuido ido de él. Inc Inclu luso so cu cuan ando do fue invi invita tado do a reg regre resar, sar, el di dios os pre pre rió quedar quedarse, se, ha bía const constru ruido ido una fra fragua, gua, yempre en ense señó a laside gen gente el trael bahec jo ho conde hier hierro, ro,elga ganan nando segu guido idores. res. Hades Ha des si siemp reñóconsi con deró róteque hecho que Dios Di osdo delse Fuego Fu ego estuvi tu viera era dispu dispues esto to a com compar partir tir es esta ta is isla la con Af Afro rodi dita ta era un sím bo bolo lo de su amor por ella, ella, pe pero ro nunca nunca le di jo jo sus pensa pensami mien entos, tos, de todos todos modos, mo dos, ella ella pro bab bable lemen mente te no lo es escuc cucha haría. ría. —¿Vienes a rendir rendirte? te? —pre —pregun guntó tó Afro Afrodi dita. ta. Usa ba un vesti vestido do que lucía lucía co como mo el in inte teri rior or de una conc concha ha ma mari rina na y una ba bata ta que parecía recía hec hecha ha de espu espuma ma de mar con plu plumas mas otan otantes. tes. Su do dora rado do ca bello bel lo brilla brilla ba, ba j jan ando do co como mo olas por su es espal palda. da. —Vine aquí para para hab hablar lar con tu espo esposo so —respon —respondió dió Hades. Hades. —No lo llames llames así —re —refu futó tó ella, ella, sus oj ojos os destel destella laron ron fu furia. ria.
—¿Por qué? ¿Te conce concedió dió Zeus Zeus el di divor vorcio? cio? —Se rehu rehusó só —di jo, jo, y miro miro ha hacia cia el océ océano, ano, donde donde el sol col colga ga ba ba jo en el cielo. cielo. Se de detu tuvo vo un momen momento, to, y Ha Hades des re reco cono noció ció el si silenlencio por lo que era, tiem tiempo po para para que se compu compusi siera. era. Lo que sea que fuera fu erade a compar com partir di difí fícil cillopa para ra jor. el ella—. Inclu luso so des despu pués, és, Hefes Hefesto to estu tuvo vo acuer acuerdo dotirenera que era me me j or.la—. Inc Jodido He fes festo to , pensó. pensó. El Dios Dios del Fu Fuego ego era pe peor or que él dici dicien endo do las cosas cosas equ equivo ivoca cadas. das. pizca ca de eno jo —No expre expresó só ni una piz eno jo cu cuan ando do le di je je lo que ha bía hecho hec ho —con —conti tinuó nuó Af Afro rodi dita, ta, mi miran rando do de nuevo nuevo a Ha Hades—. des—. Tra ba jó en la forja forja to todo do el día y no ti tiene ene una on onza za de fuego fuego dentro. dentro. —¿Has consi conside dera rado do que no es esta ta ba eno j jado ado porque porque lo espe espera ra ba? Afrodita lo miró, miró, y Ha Hades des se exp explilicó. có. —Admitiste que nunca nunca tuvis tuviste te un mat matri rimo monio, nio, Afro Afrodi dita. ta. ¿Por qué espe esperas ras que He Hefes festo to extra extrañe ñe lo que nun nunca ca ha teni tenido? do? —¿Tú qué sa bes, Hades? Hades? De cual cualqu quiier mane manera, ra, nunca nunca te has casado. sa do. Hades supri suprimió mió el deseo deseo de ro rodar dar los oj ojos. os. To Todas das sus conver conversa saciciones con Afro Afrodi dita ta ter termi mina na ban con ella ella rec recha hazan zando do su opi opini nión ón o conse jo y tirán tirándo dole le su propia propia sole soledad dad al rost rostro. ro. ¿Por qué lo inten intenta taba? ba? —Hefesto está está en su la bora borato torio rio —di jo jo Af Afro rodi dita. ta. Se gi giró, ró, y sus pies pi es des descal calzos zos se movi movieron eron sob sobre re los pel pelda daños ños de mármol. mármol. Hades la sigu siguió. ió. Pero Pero no ent entró ró a su ho hogar, gar, en su lugar, lugar, gi giró ró ha hacia cia un cami camino no que cor corta ta ba a través tra vés de un jardín jardín lle lleno no de bril brillan lantes tes o ores res tropi tro pica cales les y franj franjas as de pas pasto to or orna namen menta tales. les. El ca cami mino no con condu ducía cía a un puen pu ente te de vidrio vidrio que co conec necta ta ba la man mansi sión ón con una is isla la volcá volcáni nica ca donde don de He Hefes festo to man mante tenía nía su ti tien enda, da, talla tallada da en la más gran grande de montamontaña. El taller taller conte contenía nía una fo forja rja en el nivel nivel in infe feri rior or y un la bora borato torio rio en el nivel nivel supe superi rior, or, don donde de ex expe peri rimen menta ta ba con tec tecno nolo logía gía y encan encanta tamimientos. en tos. A través través de los años, el Di Dios os del Fuego Fuego ha bía cre creado ado ar armas mas y arma ar madu duras, ras, pa pala laci cios os y tro tronos, nos, ca cade denas nas y car carros, ros, y per perso sonas, nas, entre entre los
seres más fa seres famo mosos sos es está tá Pando Pandora, ra, a qui quien él moldeó moldeó y es escul culpió pió en arcilla. cil la. Más tar tarde de se sería ría utili utiliza zada da co como mo chi chivo vo ex expi piato atorio, rio, una forma forma para que Zeus Zeus casti castiga gara ra a la huma humani nidad. dad. Ha Hades des nunca nunca pregun preguntó tó a Hefesto fes to sob sobre re su desti destino, no, pero pero te tenía nía la sen sensa saci ción ón de que ator atormen menta ta ba al dios di os has hasta ta el día de hoy. —Ha esta estado do tra ba j jan ando do en un pro proyec yecto. to. Abe jas jas —di jo jo Af Afro rodi dita ta mient mi entras ras ca cami mina na ba, ha bía una nota nota de ad admi mira raci ción ón en su voz—. Son mecá me cáni nicas, cas, re resis sisten tentes tes a las en enfer ferme meda dades. des. Las abe j jas as mo morí rían an a un rit ritmo mo alarman alarmante, te, por vari varias as ra razo zones, nes, parási rá sitos tos y pes pesti tici cidas, das, nut nutri rici ción ón pobre, pobre, y am bien biente. te. Este Este últi último mo te tenía nía que ver con Demé Deméter ter más que nada, nada, ya que la tier tierra ra ten tendía día a suf sufrir rir cuan cu ando do su hu humor mor era oscu oscuro. ro. Hades Hades sintió sintió que era un mo movi vimi mien ento to estra est raté tégi gico co por par parte te de la di diosa, osa, ya que una pér pérdi dida da de abe j jas as signisignica ba menos menos produc producci ción ón de alimen alimentos, tos, lo que de desem sem bo boca ca ba en una depen de penden dencia cia de la Diosa Diosa de la Co Cosec secha ha para para obte obtener ner cul culti tivos vos sa saluludables. dab les. Las creaci creaciones ones de He Hefes festo to asegu asegura rarí rían an que los mor morta tales les y las abe jas jas no es estu tuvi vieran eran a merced merced de la di diosa. osa. Por ot otra ra parte, parte, sus creaci creaciones ones podrí pod rían an ser vis vistas tas co como mo un acto acto de guer guerra ra contra contra la di diosa. osa. —¿Hefesto te di jo jo es esto? to? —pregun —preguntó tó Hades, Hades, cu curi rioso, oso, por porque que si era así, eso signi signi ca ba que se es esta ta ban co comu muni nican cando. do. —No —di jo jo Af Afro rodi dita, ta, va vaci cilan lando do por un momen momento, to, como como si quisiquisiera decir decir al algo, go, pero pero se quedó quedó cal calla lada. da. —Entonces, ¿lo esta esta bas espi espian ando? do? —cu —cues esti tionó onó Ha Hades, des, le levan vantantando una ce ja cono conoce cedo dora. ra. Afrodita apre apretó tó sus la bios. bios. —¿De qué otra otra mane manera ra se supo supone ne que voy a sa ber lo que mi marido rido es está tá ha haci cien endo? do? —Puedes… preguntar —su —sugi girió rió Hades. Hades. —¿Y reci reci bir bir una respu respues esta ta de una so sola la palab palabra? ra? No, gra graci cias. as. —¿Qué espe espera ra bas ap apren render der mient mientras ras es espi piabas? abas? —pre —pregun gunto to Hades. Un pesa pesado do si silen lencio cio sigu siguió ió su pregun pregunta. ta. Final Finalmen mente, te, respon respondió: dió:
—Supongo que pensé pensé que pod podría ría estar estar en enga gañán ñándo dome. me. Hades no pudo pudo evi evitar tarlo, lo, hi hizo zo una pa pausa usa para para reír reírse. se. Af Afro rodi dita ta se giró giró para para enfren enfrentar tarlo. lo. —No es graci gracioso oso —respon —respondió—. dió—. Si no me fol folla, la, es está tá fol follan lando do a algu alguiien más. Hades levan levanto to las ce jas. jas. —¿Es eso lo que descub descubris riste te mi mient entras ras es espi piabas? abas? —Los homb hombros ros de Afro Afrodi dita ta ca caye yeron, ron, y mi miró ró a ot otro ro la lado. do. —No. Parecía decep decepci ciona onada. da. Co Como mo si se hu bi biera era sen senti tido do me j jor or si Hefesto fes to es estu tuvi viera era distra distraído ído con mu j jeres eres y no con co cosas. sas. —Mmm —murmu —murmuró ró Ha Hades, des, y Af Afro rodi dita ta le dio una mi mira rada da de dolor antes antes de se segu guir ir al la bo bora rato torio rio de Hefes Hefesto. to. —Los cí borgs borgs te lle lleva varán rán a él —di jo. jo. Hades entre entrecer cerró ró los oj ojos, os, sos sospec pechan hando do por su rápi rápida da sa salilida. da. —No vas a de j jar arnos nos so solo lo para para espi espiar, ar, ¿ci ¿cier erto? to? Afrodita cerró cerró los oj ojos os y cru cruzo zo los bra brazos zos sob sobre re su pec pecho. ho. —Tengo —T engo me j me jores ores cosas cosas que ha hacer, cer, Hades. Hades. Consideró desa desa ar su respu respues esta, ta, pe pero ro de deci cidió dió de j jar arlo, lo, ca cami minannando alre alrede dedor dor de el ella la y ent entran rando do solo solo al la bo bora rato torio rio de He Hefes festo. to. Dentro, encont encontró ró una ha bita bitaci ción ón caver caverno nosa sa lle llena na de los in inven ventos tos de Hefes Hefesto; to; es escu cudos, dos, lanzas, lanzas, arma armadu duras, ras, cas cascos, cos, pi piezas ezas de de detal talla lados dos tra ba j jos os en hier hierro, ro, tro tronos nos sin ter termi minar, nar, huma humanos nos ro bó bóti ticos cos y ca bal ballos. los. En el centro centro de todo todo eso, tra ba jan jando do con la es espal palda da dob dobla lada da sobre sobre una mesa mesa de made madera, ra, es esta ta ba el Dios Di os del Fu Fuego. ego. A pesar pesar de los inveninventos moder modernos nos de He Hefes festo, to, su área de tra ba tra ba jo y la es esté téti tica ca en ge gene neral ral rendía ren día home homena na je a sus raíces raíces an anti tigu guas. as. Su ru bia bar ba era larga, larga, su ca bel bello lo a juego juego es esta ta ba atado atado atrás atrás con una tira tira de cuero. cuero. Tra ba j jaba aba sin cami camisa, sa, expo exponi nien endo do las cicat cicatri rices ces en su pi piel, el, y lleva lleva ba un pantapantalón que le llega llega ba a la mi mitad tad de la pantor pantorril rilla. la. —Lord Ha des j jan —di josol He Hefes festo to mient mi entras ras se de acer acerca cacuito. ba,ito.aun aunque que el era dios conti con tinúo núoHades tra ba ando, do, jo soldan dando do una ta tarj rjeta eta cir circu He Hefes festo to
pro bab bable lemen mente te el úni único co dios dios que uti utililiza za ba títu títulos los con otros otros di dioses oses por respe respeto to en lu lugar gar de desdén. desdén. Después de unos cuan cuantos tos mi minu nutos tos más de tra ba jo, He Hefes festo to soltó soltó sus herra herrami mien entas tas y empu empu jó unas gafas gafas transpa transparen rentes tes hacia hacia at atrás rás en su ca beza. be za.He Sefesto in incor corpo poró róenorme, y miró mi ró su a Ha Hades des un parco de profun fundos dos ojos grises. gri ses. Hefes to era enor me, fí físi sico co con cince cincela lado do como mopro una esta es tatua tua de mármol. mármol. Des Despu pués és de ater aterri rizar zar en Lem Lemnos nos y romper romperse se la pier pierna, na, tuvo tu vo que ser ampu amputa tada. da. En su lugar lugar ha bía una próte prótesis sis de su propio propio dise di seño. ño. Era de oro, pe pero ro mini minima malis lista, ta, hec hecha ha de gu guras ras geomét geométri ricas. cas. Inclu Inc luso so sin es estar tar ca capa paci cita tado, do, pro bab bable lemen mente te era el más fuer fuerte te físi físicacamente, men te, y de de niti nitiva vamen mente te el más in inte teliligen gente, te, de to todos dos los di dioses. oses. —Hefesto —asintió —asintió Hades, Hades, mi miran rando do el me metal tal y los cables cables es espar parcicidos por su mesa. mesa. A pesar pesar de que ya sa bía pa para ra que eran las pi piezas, ezas, pregun pre guntó—: tó—: ¿En qué es estás tás tra ba j jan ando? do? —Nada —di jo jo el di dios os rá rápi pida damen mente. te. A Hades Hades no le sorp sorpren rendió dió que Hefes Hefesto to se mantu mantuvi viera era en si silen lencio cio sobre sob re su tra ba jo. Nunca Nunca ha bía sido sido hab habla lador, dor, y des despu pués és del exilio exilio y el escru esc ruti tinio nio que suf sufrió rió por parte parte de ot otros ros di dioses oses de bido bido a su rost rostro ro con ci cicat catri rices ces y disca discapa paci cidad, dad, se ha bía vuel vuelto to aún más calla callado. do. —No puede puede ser na nada da —di jo jo Ha Hades—. des—. No pa pare rece ce na nada da. Hefesto parpa parpadeó deó al di dios os y lu luego ego res respon pondió: dió: —Un proyec proyecto. to. —Aclaró —Aclaró su gar gargan ganta—. ta—. ¿Qué pu puedo edo ha hacer cer por ti? Hades evitó evitó sus oj ojos, os, miran mirando do alre alrede dedor dor de la ha bita bitaci ción ón mi miententras habla habla ba: —Necesito de tu expe experi rien encia. cia. Nece Necesi sito to un ar arma. ma. Una que somesometerá terá la vi violen olencia cia y alen alenta tará rá la ver verdad. dad. Hefesto mostró mostró el destel destello lo de una ri risa. sa. —Suena como como un tra balen balengu guas as —di jo. jo. —No escuc escuchas haste te la úl últi tima ma parte parte —di jo jo Hades—. Hades—. Es pa para ra un Olímpi Olím pico. co. Hefesto levan levantó tó una ce ja, pe pero ro co como mo Ha Hades des sospec sospecha ha ba, el Di Dios os
del Fuego Fuego no hi hizo zo nin ningu guna na pregun pregunta. ta. —Puedo crear crear algo algo —di jo—. jo—. Reg Regre resa sa en un día. Hubo silen silencio cio por un minu minuto, to, y lu luego ego Hades Hades di jo: jo: —Sabes que Afro Afrodi dita ta te es espía. pía. Hades se sintió sintió co como mo un chis chismo moso. so. No es esta ta ba segu seguro ro de por qué le esta esta ba di dici cien endo do a Hefes Hefesto to el secre secreto to de Af Afro rodi dita. ta. Tal vez se sen sentía tía como co mo una ven vengan ganza za por su apues apuesta. ta. Tal vez te tenía nía la es espe peran ranza za de provo pro vocar car una con conver versa saci ción ón entre entre el ellos, los, ex excep cepto to que Hefes Hefesto to no reacreacci cionó onó a la noti noticia, cia, su expre expresi sión ón pa pasi siva, va, desin desinte tere resa sada. da. —Está sospec sospechan hando do —di jo. jo. —O es curi curiosa osa —cont —contrar rarres restó tó Ha Hades, des, por porque que era verdad. verdad. —Se supo supone ne que no puede puede ser am bos —respon —respondió, dió, dán dándo dole le la espal es palda da a Ha Hades des y regre regresan sando do a su tra ba jo. Hades Hades espe esperó ró a pe pesar sar del si silen lencio, cio, y, nal nalmen mente, te, He Hefes festo to habló habló con voz tran tranqu quila ila y gruesa. gruesa. —Pidió nuest nuestro ro divor divorcio cio a Ze Zeus. us. Él no lo con conce cedió. dió. —¿Eso es lo que qui quieres? —pregun —preguntó tó Hades—. Hades—. ¿El di divor vorcio? cio? Observó el perl perl del di dios, os, la for forma ma en que su man mandí dí bula bula se ap apreretó y sus dedos dedos se enros enrosca caron ron con el soni sonido do de la pa palab labra. ra. El Di Dios os del Fuego Fu ego miró miró a Ha Hades, des, sus ce jas jas juntas, juntas, y ha bía una since sinceri ridad dad en sus ojos ojos que Ha Hades des no ha bía per perci ci bido bido an antes. tes. —Quiero que sea feliz. feliz. q
Hades apare apareció ció en el cent centro ro de un prado prado per perfec fecta tamen mente te verde verde en la isla isla de Sici Sicilia, lia, don donde de pas pasta ta ban cincu cincuen enta ta vacas vacas de co color lor blanco blanco puro. A unos metros metros de distan distancia, cia, las hi jas jas de He Helilios, os, Phaet Phaethu husa sa y Lampetie, pe tie, dor dormí mían an ba jo un ár bol de higu higuera, era, sus respi respira raci ciones ones si bilan bilantes tes inter interrum rumpi pien endo do el silen silencio cio de la noche. noche. Tenía que admi admitir tirlo, lo, se sen sentía tía un poco poco culpab culpable le porque porque las dos sufri suf rirí rían an la ira de Heli Helios os en la ma maña ñana, na, pe pero ro no lo su sucien ciente te como como para pa ra de j jar ar a su padre padre impu impune ne por su hos hosti tililidad. dad.
Justo cuan cuando do em empe pezó zó a se selec lecci cionar onar lo me j jor or del ga gana nado do de He Helilios para para lle llevár várse selo lo al Inf Infra ramun mundo, do, su telé teléfo fono no sonó. sonó. Nunca sona sona ba. Algo está está mal. —¿Sí? —respon —respondió dió rá rápi pida damen mente, te, a pe pesar sar de la posi posi bili bilidad dad de desper des pertar tar a las dos herma hermanas. nas. Era Ilias. Ilias. —Milord —di jo—. jo—. Lady Per Persé séfo fone ne está está per perdi dida. da. Nunca ha bía sen senti tido do una sen sensa saci ción ón tan aterra aterrado dora. ra. Miles Miles de emoci emo ciones ones con conver vergi gieron eron dent dentro ro de él al mis mismo mo ti tiem empo, po, ira, miedo miedo y alarma. alar ma. Quería Quería exi exigir gir sa ber por qué Ilias Ilias no la ha bía vigi vigila lado do me j jor, or, quería qu ería sa ber dón dónde de ha bía bus busca cado, do, quería quería amena amenazar zarlo lo con ter termi minar nar con su vida vida si la encont encontra ra ba en una condi condici ción ón di dife feren rente te a prísti prístina. na. Pero cono conocía cía a Ili Ilias, as, y, a es estas tas altu alturas, ras, cono conocía cía a Per Persé séfo fone. ne. Hermosa, desa desa ante ante Per Persé séfo fone. ne. Ella no era una perso persona na de obede obedecer, cer, es espe peci cial almen mente te cuan cuando do se le decía. de cía. —Estaré allí allí en se segun gundos dos —respon —respondió dió y col colgó. gó. Hubo un lati latido do de si silen lencio, cio, donde donde Ha Hades des luchó luchó contra contra ca cada da demonio mo nio dentro dentro de él. Es Este te miedo miedo era ir irra raci cional, onal, pe pero ro le di jo jo al algo go importan por tante. te. Si el desti destino no se la quita quita ba, el mundo mundo no sobre sobrevi vivi viría. ría. Después de un momen momento, to, mi miró ró ha hacia cia arri arri ba, ba, ob obser servan vando do a las vacas blancas blancas y hab habló: ló: —Esperaba tomar tomarme me mi tiem tiempo po selec selecci cionan onando do so solo lo a las me j jores ores de uste ustedes des para para acom acompa pañar ñarme me en mi reino, reino, pero pero pare parece ce que estoy estoy corto cor to de pla plazo. zo. Cuando desa desapa pare reció, ció, tam bi bién én lo hi hici cieron eron to todas das las vacas vacas en el prado. pra do.
Capítulo IX Un juego de temor y furia
Tan pronto pronto co como mo los pies pies de Ha Hades des to toca caron ron el suelo suelo del InfraInframundo, pudo mundo, pudo sentir sentir a Per Persé séfo fone. ne. Su presen presencia cia en su re reino ino era como como una exten extensi sión ón de sí mis mismo. mo. Pesa Pesa ba en su pecho pecho tanto tanto co como mo el hi hilo lo que los conec conecta ta ba. Se telet teletrans ranspor portó tó de nu nuevo evo y apa apare reció ció en los Campos Campos del Luto, Luto, donde don de cre crecí cían an bro brotes tes de gla gladi diolos olos blan blancos cos y or orqu quíde ídeas. as. Los cam campos pos estu es tuvi vieron eron reser reserva vados dos una vez para para aquel aquellos los que ha bían bían des desper perdi diciciado sus vidas vidas en un amor no corres correspon pondi dido. do. Ha bía sido sido una de las deci de cisi siones ones que Ha Hades des ha bía toma tomado do al prin princi cipio pio de su re reina inado do y nació de sugaría ira ha cia que las Mo Moiras. iras. Si no esta ta baeso. des desti tina nado do en a tonces, amar, entonces castiga casti ríahacia a los ha bí bían an mu muer erto toes por Desde Des de enton ces,en haton bía envi en viado ado a las al almas mas que una vez re resi sidi dieron eron aquí a ot otras ras partes partes del Infra Inf ramun mundo, do, de j jan ando do que el cam campo po perma permane neci ciera era bel bella lamen mente te ajar ajardidinado, na do, ya que era la vis vista ta que las al almas mas tení tenían an en su ca cami mino no hacia hacia el Campo Cam po del Ju Juicio. icio. A pocos pocos met metros ros de don donde de ha bía apare apareci cido, do, tendi tendida da en la oril orilla la del Esti Estigia, gia, es esta ta ba Persé Perséfo fone. ne. Trató Trató de absor absor ber la es esce cena na a través través de su ra bia: Persé Perséfo fone ne es esta ta ba de espal espaldas, das, su ca bello bello esta esta ba mo j jado ado y esta ba cu bi bier erta ta con la capa capa dora dorada da de Her Hermes, mes, el mate materi rial al delga delgado do y metá me tálilico co ad adhe heri rido do a su cu cuer erpo po húme húmedo. do. Hermes Hermes se arro arrodil dilló ló sob sobre re el ella; la; sus la bios bios cur curva vados dos en una sonri sonrisa. sa. Clara Claramen mente te esta esta ba inte intere resasa-
do en Persé Perséfo fone, ne, y vio có cómo mo el di dios os se to toca ca ba los la bi bios, os, hab habla la ba y hacía ha cía re reír ír a Per Persé séfo fone. ne. Fue enton entonces ces cuan cuando do de deci cidió dió se sepa parar rarlos. los. Envió una ráfa ráfaga ga de poder poder hacia hacia el di dios, os, que salió salió volan volando do por el Inf Infra ramun mundo. así, frunció frun elroce ceño cu cuan ando dode Her Hermes nopoater aterri zópear tan le j jos os co como modo.haAun bía es espe pera rado, do,ciópe pero elñoim impac pacto to sumes cuer cuerpo al rizó gol golpe ar el suelo suelo fue lo su sucien ciente temen mente te sa satis tisfac facto torio. rio. Se acercó acercó a Persé Perséfo fone, ne, qui quien se levan levantó tó y se gi giró, ró, es esti tiran rando do el cuel ello lo pa para ra en encont contrar rarse se con su mi mira rada. da. Mo Movió vió la capa capa de Her Hermes mes para para que caye cayera ra sob sobre re sus hombros, hombros, reve revelan lando do el ves vesti tido do que ha bía usado usado en su club: un ejemp ejemplar lar del delga gado do y plate plateado ado con un es esco cote te que jugueteaba ete aba con la cur curva va de sus se senos. nos. Ahora Ahora que es esta ta ba húme húmedo, do, se le pega ba, acen acentu tuan ando do los pi picos cos de sus du duros ros pe pezo zones. nes. Malditas Mopec Moiras irasho , pensó pen sótoHades Haades mient mile. entras ras un fu fuego ego qu quema ema ba en un cami ca mino no por su pecho direc directo su ing ingle. —¿Por qué hicis hiciste te eso? —pregun —preguntó tó Persé Perséfo fone. ne. El dios dios frunció frunció el ceño ceño y ap apre retó tó la man mandí dí bula. bula. No sa bía si era para repri reprimir mir la re reac acci ción ón hacia hacia su cu cuer erpo po o porque porque esta esta ba eno j jada ada por lo de Hermes. Hermes. —Pones a prueba prueba mi pa paci cien encia, cia, diosa, diosa, y mi fa favor vor —respon —respondió. dió. —¡Así que eres una diosa! diosa! —gritó —gritó Her Hermes mes con en entu tusi sias asmo, mo, a pesar de salir salir ar arrast rastrán rándo dose se del foso foso que su cu cuer erpo po ha bía hec hecho ho al im-
pactar. pac tar. Perséfone entre entrecer cerró ró los oj ojos, os, y Ha Hades des se dio cu cuen enta ta de que solo solo ha bía log logra rado do frust frustrar rarla la más. —Guardará tu secre secreto, to, o se encont encontra rará rá en el Tár Tárta taro ro —prome —prometió tió Hades, Ha des, en enfa fati tizan zando do su pun punto to de vista vista al mirar mirar al Di Dios os de la Tra Trave vesusura, que se acerca acerca ba ahora, ahora, sa sacu cudi dien endo do la suci suciedad edad y la mug mugre re de su perso per sona. na. Hades Hades en encont contró ró di diver verti tido do ver al di dios os en de desor sorden, den, ya que, como co mo muc muchos hos otros, otros, se enorgul enorgulle lecía cía de su apari aparien encia. cia. —Sabes, Hades, Hades, no to todo do ti tiene ene que ser una amena amenaza. za. Pod Podrí rías as inten tentar pregun cuan ando, do, co como meapu pudis ber pe pedi dido do ar romo j jar arme me través tradiste véstedelhaIn f fra ramun mundo. do. quetar mepre aleguntar j jara aratar dede tu vez diosa diosaenencu vez de arro
—¡No soy su diosa! diosa! ¡Y tú! —El to tono no de Persé Perséfo fone ne esta esta ba lle lleno no de desdén des dén mi mient entras ras se po ponía nía de pie. Hades Hades ent entre recer cerró ró los oj ojos, os, in inca capaz paz de expre expresar sar con palab palabras ras cuán cuánto to odi odiaba aba que le hab habla laran ran de esa manera ne ra ante ante ot otro ro Olímpi Olímpico, co, es espe peci cial almen mente te Her Hermes—. mes—. Podrí Podrías as ser más amable amab le con él. ¡Me sal salvó vó de tu río! salva vada da de mi río si me hu bi —¡No habrí habrías as te teni nido do que ser sal hu bieras eras espera pe rado! do! pado do con ot otra ra co cosa. sa. Me pregun —Claro, porque porque es esta ta bas ocu pa pregunto to qué signi sig ni ca eso. ¿Estaba… ba… celo celosa? sa? Se pregun Ella puso puso los ojos ojos en blan blanco. co. ¿Esta preguntó tó Hades. —¿Te traigo traigo un dic dicci ciona onario? rio? Cuando Hades Hades escuc escuchó hó la risa risa aleg alegre re de Her Hermes, mes, se vol volvió vió hacia hacia el dios. dios. —¿Por qué sigu sigues es aquí? Justo cuan cu ando do las pa palab labras ras sali salieron eron de su bo boca, ca, Persé Perséfo fone ne se tam baleó. ba leó. Sin pen pensar sarlo, lo, la al alcan canzó, zó, agarrán agarrándo dola la por la cintu cintura ra y sorprensorprendién di éndo dose se cuan cuando do un agu agudo do gemi gemido do esca escapó pó de algún algún lugar lugar pro profun fundo do de su gargan garganta. ta. Siente dolor. dolor. El Ella la sien siente te dolor. dolor. —¿Qué pasa? pasa? —No esta esta ba acostumb acostumbra rado do a la his histe teria ria que se alza ba dentro dentro de él; se sen sentía tía co como mo una cosa cosa extra extraña ña ab abri rién éndo dole le la piel. piel. —Me caí en las esca escale leras. ras. Creo que… —La vio to tomar mar aire deli deli be berada ra damen mente, te, ha haci cien endo do una mueca mueca de dolor—. dolor—. Creo que me lasti lastimé mé las costil cos tillas. las. Hades podía podía de decir cir que se sen sentía tía como como eno j jado, ado, pe pero ro era más que Odiaba aba que hu biera eso. Odi biera si sido do heri herida da en su re reino. ino. Lo enfer enferma ma ba, lo frustra frust ra ba, lo hacía hacía sentir sentir como como si hu bi biera era per perdi dido do el cont control. rol. Se sorprendió ren dió al notar notar que la mi mira rada da de Per Persé séfo fone ne se suavi suaviza za ba, y des despu pués és de un momen momento, to, su susur surró: ró: —Está bien. bien. Es Estoy toy bien. bien. Excepto que no lo esta esta ba. Se ha bía desma desmaya yado do en sus bra brazos. zos.
—También tiene tiene un corte corte bastan bastante te feo en el homb hombro ro —agre —agregó gó Hermes. Her mes. Ese mismo mismo sen senti timi mien ento to de perder perder el cont control rol lo con consu sumió, mió, y era pesa pe sado, do, co como mo si lo hu bi bieran eran ar arro ro j jado ado a un po pozo zo de brea. Sintió Sintió que su man mandí bula buego la se ten sa ba hasta hassus ta elbra pun punto en su que sus dien diteentes tesmo podrí pod rían an partir par tirse, se,dílu luego la tensa levan levantó tó en brazos zostotan suave avemen mente como co pu pudo, do, a pesar pesar del ca caos os dent dentro ro de él. —¿Dónde vamos? vamos? —A mi pala palacio cio —di jo. jo. Si podía podía cu curar rarla, la, al me menos nos recu recupe pera raría ría al algo go de cont control rol sobre sobre la situaci tu ación ón y el ella la es esta taría ría a salvo. salvo. Los transpor transportó tó a su dor dormi mito torio, rio, y cu cuan ando do la mi miró, ró, el ella la ab abrió rió los ojos. ojos. Por un mo momen mento, to, pa pare reció ció de desen senfo foca cada. da. —¿Puedes sentar sentarte? te? —pre —pregun guntó, tó, y ella ella lo mi miró ró a los ojos. ojos. Cuando asintió, asintió, se acercó acercó a su ca cama ma y la colo colocó có en el bor borde, de, ar arrorodillán dil lándo dose se en el suelo suelo frente frente a el ella. la. —¿Qué estás estás haci hacien endo? do? —pregun —preguntó. tó. Él no respon respondió, dió, si sino no que alar alargó gó la mano mano para para quitar quitarle le la ca capa pa de Hermes Her mes de los homb hombros. ros. Ella Ella se qu quedó edó inmó inmóvil vil ante ante su to toque que y pensó pensó en decir decirle le que res respi pira rara, ra, pe pero ro de deci cidió dió que tal vez es esta ta ba re reac acci cionanonando al dolor dolor y no a su presen presencia. cia. No es esta ta ba pre prepa para rado do pa para ra lo que oculta ocul ta ba la capa: capa: su homb hombro ro esta esta ba desgar desgarra rado do has hasta ta los hu huesos. esos. ¿Corte bastan bastante te feo? Her Hermes mes ha bía ma malin linterp terpre reta tado do grose grosera ramen mente te esta es ta he heri rida. da. Hades se sentó sentó sob sobre re sus ta talo lones, nes, estu estudi dian ando do el da daño. ño. Tendría Tendría que limpi limpiar arla la an antes tes de sanar sanarla, la, o existía existía la po posi si bili bilidad dad de que se produ j jera era una infec infecci ción. ón. Aun Aunque que era ra raro ro que un dios dios en enfer ferma mara, ra, no era impo im posib sible, le, y no se arri arries esga garía. ría. No con ella. ella. Dejó que su mira mirada da va vaga gara ra a lo largo largo de su cu cuer erpo, po, bus buscan cando do otras heri heridas. das. Los mu muer ertos tos que ha bita bita ban el Esti Estigia gia eran fe fero roces, ces, sus garras gar ras y dien dientes tes ala alados, dos, y dest destro roza za ban a sus víc vícti timas. mas. Per Persé séfo fone ne tenía suer suerte te de ha ber sa salilido do del río so solo lo con una heri herida da en el hombro. hombro.
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