09-Sexta napolitana y sexta aumentada.pdf

Sexta Napolitana y Sexta Aumentada rebajado  de la Sexta napolitana. Se coloca sobre el Segundo grado rebajado  tonalidad. Es simplemente un acorde perfecto mayor en primera inversión.De ahí su nombre de ‘sexta’ refiriéndose al cifrado. •

Nótese que se habla de II grado rebajado, ya que el II grado de cualquier escala está un tono por encima de la tónica, y la sexta napolitana se coloca a medio tono de ésta.

La función, ya que es un segundo grado, es de subdominante. Quiere ésto decir, que en procesos cadenciales ocuparía el lugar que ocuparía cualquier otra subdominante (II, IV o VI grados).

El acorde de sexta napolitana no debe su nombre a ninguna característica especial en su estructura, sino únicamente a su relación tonal con la cadencia. Ya que se trata de un sencillo acorde perfecto mayor, adquieren gran interés sus posibilidades modulatorias. Por un lado, se puede convertir cualquier acorde mayor de una tonalidad dada en sexta napolitana de otra:

También se puede puede recorrer el camino inverso: convertir una sexta napolitana napolitana en un grado de otra escala que pueda albergar un acorde mayor:

Sexta aumentada. Se coloca sobre el sexto grado menor   de la tonalidad. Sea cual sea la distribución del resto de sus elementos, este acorde se caracteriza por la nota que se encuentra a una sexta aumentada a partir de su fundamental. Puede tener o no quinta, esta puede ser justa o disminuída, a lo que hay que añadir su tercera mayor. •

El acorde A no tiene 5ª. Parece un acorde en primera inversión al que se le ha alterado la fundamental. El acorde B tiene la misma configuración que un acorde de 7ª dominante:

El acorde C tiene varias posibilidades de simetría, de modo similar a lo que le ocurre a la 7ª disminuida, e igualmente, como en ésta, puede haber por un lado dificultades para encontrar la fundamental correcta, o por otro lado, aprovechar esta abigüedad para posibles modulaciones por enharmonía. Este caso se da cuando hay un tono entre las notas centrales, y las notas de los extremos superior e inferior se sitúan a una tercera mayor de distancia:

Otro eje de simetría se consigue poniendo las notas centrales a una tercera mayor, y las notas de los extremos superior e inferior a una segunda mayor de distancia:

La función de la 6ª aumentada es de preparación de dominante. Al tener una doble atracción sobre la nota dominante, (a las notas con atracción se les llama de modo genérico sensibles), la función más próxima es la de dominante secundaria.

Dado que hay dos notas que tienen obligación de resolver en la dominante, (fundamental y sexta aumentada), en la posición de este acorde con quinta  justa (B) no parece tener sentido evitar las quintas que resultarían en el enlace hacia el V grado. Estas quintas están permitidas.

Gracias a la conformación idéntica de los acordes de 7ª dominante y la posición (B) del acorde de 6ª aumentada, hay unas interesantes posibilidades modulatorias por enarmonía combinando estas dos posibilidades.

Por un lado, se puede realizar el camoni inverso y convertir la 7ª dominante en sexta aumentada.

Por otro, se puede convertir cualquier acorde de sexta aumentada en uno de 7ª dominante:

Se puede advertir en este último ejemplo, que en la misma tonalidad se da una curiosa relación entre la napolitana y la sexta aumentada. Si tomamos como referencia do (mayor o menor), la napolitana es reb, y la sexta aumentada se coloca sobre el lab. Si lab se convierte en dominante, resuelve sobre reb, lo que quiere decir que la relación entre estos dos acordes (napolitana y 6ª aumentada) entre ellos, es de dominante y tónica.